Off no quiere hacerlo, presiona con fuerza sus dientes contra su labio inferior mientras toma respiraciones profundas y se esfuerza en concentrarse para dejar de divagar.

Ha pasado un par de semanas y sus hematomas ya se han recuperado en su mayor parte. Más no es igual con el dolor en su pecho al no ver a Gun en todo ese tiempo ni haberle hablado. Se siente tan triste al pensar en que apenas ha soportado no verlo en unos días, qué pasará ahora que... ya no se verán.

La primavera tras las ventanas del auto contrasta con los sentimientos en su interior. ¿Por qué tiene que hacerlo? ¿Por qué tiene que separarse de la persona que ama? Él no quiso hacerle daño. Jamás ha sido su intención.

—Offy, ¿Quieres cambiar la radio? —Pregunta Dara sonriéndole a su copiloto al ver como este no cambia su cara aún apoyado en la puerta—. Si quieres podemos poner a IU.

Off sólo niega cerrando sus ojos.

Se siente tan tan tan mal. Cada segundo parece una eternidad y no quiere llegar a la casa de Gun. Prefiere tener un accidente antes de llegar allí. Asumir que no será un alfa fue difícil para él, pero lo es aún más asumir que no será su alfa como lo prometió. Y que ahora tendrá que decírselo antes de que sus corazones se terminen de romper. Ya casi no le quedan lágrimas.

—Off, es lo mejor para ambos —la voz suave de Dara sale casi como una caricia. Como si fuese capaz de leer los pensamientos de Off pero no le hace caso y ella suspira.

Sus ojos se concentran en una rotonda en la carretera y una idea cruza por su mente. Off al sentir el brusco cambio —pues casi por instinto sabe que no van en dirección a casa de Gunnie— abre los ojos.

—¿A-a dónde vamos?

Las flores en el lugar son bastante coloridas a pesar de ser un sitio algo deprimente. Las lápidas y los mausoleos se elevan de manera digna a través del cementerio. El silencio es acompañado por el dulce sonido de los pájaros dando un aspecto más amigable.

En otros momentos quizá pensaría que su madre lo asesinará por deshonrar a la familia y por eso vienen a cotizar, pero no tiene ganas de pensarlo mucho por el momento.

Off ha ido contadas veces al cementerio con su madre, quizás una o dos veces al año pero eso basta para reconocer el camino hasta determinado sitio. Dara ha comprado un sólo tulipán color amarillo que lleva en su mano derecha pues la izquierda tiene la mano de su hijo. Cuando llegan a la lápida buscada, Dara se agacha en cuclillas soltando la mano de Off antes de sacar un pañuelo y limpiar el nombre de "Leo T." frente a ellos.

Retira las flores viejas y deja la nueva en el lugar. Off mira fijamente las expresiones de su madre y a sus ojos negros repletos de amor. Guardan silencio hasta que la mujer decide hablar al sentir a su loba omega decirle que era el momento. Se siente algo torpe, como si en verdad estuviera frente a su primer amor y no frente a una tumba.

—¿No vas a preguntar por qué estamos aquí? Te recuerdo más odioso —bromea levemente.

—Pensé que íbamos donde Gun...

—¿Te conté alguna vez como conocí al padre de Tay? —pregunta con calma y Off piensa un poco antes de negar—. Él me atropelló con su bicicleta. —Off suelta una corta risa ahogada y Dara le mira con ojos entrecerrados, pero también ríe—. Yo me había presentado como omega hace poco y estaba a punto de bajar la cabeza cuando me detuve a mirarlo... Y me dieron tantas ganas de ahorcarle al ver que ni siquiera se preocupó por mí, sino de su fea cosa oxidada. Comenzamos a discutir y de la nada me dijo que le parecía hermosa, yo estaba como un tomate. Después me invitó a salir y en sólo meses me tenía como una boba detrás de él.

Off la observa atento distrayéndose de los dramas de su vida. Su madre pocas veces habla del papá de Tay, sobre todo por respeto a Sompob aunque a este no le moleste. Sólo sabe que fue muy importante para su madre, que se amaban y que estuvieron cinco años juntos antes de que el falleciera por una enfermedad. Luego su madre había conocido a su padre, él la apoyó y le dio la confianza suficiente como para poder ser un soporte para su hijo. El resto es historia, nació Off, se casaron y formaron la familia que son ahora.

—A veces vengo aquí a hablarle —continúa—. Le cuento sobre tu hermano y también sobre ti y Sompob.

—¿Él jamás te marcó? —pregunta por impulso antes de morder su labio. Dara sonríe levemente.

—Él era un beta, pero eso jamás importó porque nos amábamos... —suspiró mirando hacia el cielo, preguntándose si él la estará observando también—. Cualquier persona puede amar a otra, sin importar nada porque el amor no tiene condiciones. Es un "o me aceptas o te vas". Y Gun te acepta tal como eres, sin importar que aún no te hayas presentado.

El estómago de Off se revuelve. No sabía que el papá de Tay era un beta, ni menos que su madre siendo omega había salido con uno. Sólo sabe que una pizca de esperanza se clava en su corazón y se aferra a ella con todo y garras.

—¿Entonces por qué debemos terminar?

—Cariñito —acaricia su mejilla y este cierra los ojos aferrándose a su mano—. El amor requiere muchas cosas, entre ellas la confianza. No puedes confiar en Gun ni en los demás sin antes confiar en ti —la palma de su mano se siente algo húmeda y se dedica a limpiar las recientes lágrimas con sus pulgares—. Sé que tienes miedo porque eres menor, porque hay muchos alfas, tiene varios pretendientes y tú ni siquiera te has presentado. Sé que tienes miedo porque no lo quieres perder y que te cuesta controlarte. —Dara también comienza a lagrimear a este punto—. Pero puedes superarlo, bebé. Y entonces... entonces volverán a ser los de antes y podrán estar juntos con algo más fuerte que la marca. El amor.

El reencuentro es algo incómodo. Cuando Gun supo por su madre que Off estaba en su casa no reaccionó. No lo había visto en dos semanas, cero mensajes y cero llamadas. Tampoco pudo preguntarle a Tay ya que este se mantiene algo distante desde "el incidente" pero Joss mencionó algo de que estaban castigados. No sabía el por qué puesto que el maquillaje cubrió bien durante su etapa más viva en el rostro del mayor en la escuela.

Pero aquí está, con su mirada gacha y una mueca triste que hace a su lobo querer consolarle. «¿Me he pasado con mi regaño que ya no me quiere ver?» tan pronto como viene ese pensamiento se va. Off lo adora, no se atrevería a abandonarlo o irse voluntariamente de su lado. Sin embargo tiene un mal augurio en su corazón y su lobo camina en círculos impaciente y nervioso.

—Te extrañé, Off —al separar sus labios esas palabras son las primeras en escapar. No pasan desapercibidas las manos de Off cerrándose en puños—. ¿Qué te pasó?

—Estaba castigado... —responde tomando la valentía para mirarlo. Su cabello está levemente más claro, seguramente se ha echado algo, sus ojos miel bajo sus pestañas se ven algo inquietos y sus bonitos labios rosaditos en forma de corazón se separan como si quisiera decir algo pero no lo deja. Lo abraza, lo abraza fuerte por su cintura quedando su cabeza en su pecho sintiendo su corazón e inhalando su aroma a rosas, desea quedarse impregnado de este—. T-te he echado de menos Gunnie. Siempre te echo de menos.

Gun sonríe sintiendo una calma falsa y devolviéndole el abrazo con la misma intensidad. Disfruta de tenerlo entre sus brazos, es como si aquel fuese el lugar donde el otro pertenece. Junto a él. Complementándose. Al menos hasta que aquel momento que quiere atesorar comienza a desmoronarse cuando siente su camiseta mojarse.

—¿Bebé? —pregunta queriendo separarse pero el otro no lo deja—. ¿Está todo bien?

Off niega

—Lo arruiné t-todo Gunnie. Y ahora... ahora lo tengo que dejar y yo, yo no quiero. —solloza.

Gun se separa del menor. Es como cuando escuchas un pitido y luego absoluto silencio. La escena se vuelve en cámara lenta y confusa. No siente tristeza o felicidad. No siente nada porque no lo puede comprender. ¿Offy y él? ¿Dejar? ¿Off lo va a terminar? No... Off lo está terminando. Su lobo aúlla y el vuelve a su cuerpo.

—Off~, que cosas dices. Entiendo si estas molesto pero no juegues así, no me gusta —responde con esperanzas aún cuando el otro ha caído en llanto y desesperación—. Dime que es mentira Offy. Dime que sólo es uno más de tus berrinches ¡Off! —En menos de un segundo ya se encuentra hecho un mar de lágrimas.

—¡Pe-perdón! N-no soy bueno... para ti. Sólo lastimo a la gente que quiero —su llanto cada vez se hace más fuerte y toma la mano cálida del otro—. No quiero ha-hacerte daño.

—¡Entonces no hagas esto! —alza la voz apretando la mano contraria. ¿Esto en serio está pasando? Su lobo gime con desesperación y su aroma dulce es todo lo contrario—. ¿E-es por lo de Oab? Eso no importa...

—¡No Gunnie! Es por mí —interrumpe soltando su mano—. S-soy yo quien se equivocó. Y... y cuando lo resuelva volveré. P-por favor, no me olvides. Voy a volver. Espera por mí. No m-me olvides Gunnie, te amo.

—Offy —trata de intervenir y tomarle del brazo pero el más pequeño se retira corriendo de su casa y Lawan lo detiene con una mueca triste—. ¡M-mamá suéltame! ¡Off! ¡Off hablemos! O-Offy...

Al salir de la casa de Gun todo tembloroso y con una tempestad dentro de su corazón corre hacia el auto, desmoronándose como nunca en los brazos de su madre. Vio los ojitos contrarios romperse con dolor, escuchó sus sollozos. Le rompió el corazón a su omega. A su esposo... a su ahora ex-novio. Ex... ¡Ha terminado con Gun! Y ha dolido más que todas sus caídas de escalera, más que cuando Gun rompió las entradas del cine y que los golpes que se dio con Tay.

—Está bien Off, todo estará bien —consuela Dara acariciando su espalda mientras sus sollozos se hacen más fuertes—. Es sólo un tiempo bebé. Ya verás que pasará rápido, sólo tienes que esperar.

Lo hará. Se esforzará por ser bueno para él y para los demás. Pero sobre todo para Gun. Entonces volverá a él y recuperará a su omega. Este no es un adiós, es un hasta pronto.

«Prometo ser mejor para ti, Gunnie»

𝕰𝖛𝖎𝖎 𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ