Capítulo 20
Sin remedio alguno sólo había una salida para salir con vida de ahí......escapar
- Retirada- Apartó su vista de la mujer para pasarla al frente, en ese momento le agradeció mentalmente a Zeldris
- Pero Capitán....- Intentó contradecir King
- Ya tenemos lo que vinimos a buscar- Sin más que decir Oslo los hizo llegar a todos a la taberna
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Demostrar el amor🌸
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No se estaban mirando, simplemente evitaban sus rostros. Desde que Meliodas la depositó en la cama con toda la delicadeza del mundo no habían cruzado ni una palabra. Hacía días que no se veían pero eso sólo había incrementado su deseo de estar juntos, la distancia sólo había sido una prueba....una Que ambos pasaron
- ______- Al fin la llamó, ella se había colocado un tierno vestido rosa pálido de dormir que había por ahí
- Si?- Como dolía hacerse la indiferente, en realidad moría de ganas por besarlo
- No es nada- Soltó después de respirar profundo. No sabía que decirle, había planeado contarle tantas cosas, transmitirle tantos sentimientos, pero ahora que la tenía delante.....no habían palabras para decir- Voy a buscarte algo de comer, debes estar hambrienta
Se levantó pero al mano de la chica lo detuvo, ella se aferró con fuerza a la camisa de Meliodas mientras lloraba unas cuantas lágrimas en su espalda
- Quería verte- Se tranquilizó un poco- Tenía tantas ganas de verte que hasta dolía
- Hime- Meliodas permanecía serio, tanto que cualquiera hubiera pensado que era otra persona
- Es muy extraño y poderoso- Llevo una mano a su pecho- Incluso antes de morir, no recordé a mamá o a papá, ni a mi amado Edward, lo único que había en mi cabeza, dentro de mis recuerdos.....eras tú
Esas palabras, Meliodas había descubierto un lado muy egoísta en el al conocerla, de cierta forma, lo hacia felíz
- Lo siento- Se separó- Se que no sientes lo mismo y no quiero que te sientas culpable
Dos opciones: Encararla ahora y decirle que no era cierto o esperar a aclarar sus dudas, esas eran las posibilidades que habían Peri después de girarse y verla así todos los rastros de la segunda opción desaparecieron. Tan sólo tomo su rostro y después de tanto tiempo sus labios estaban juntos otra vez, como si hubieran nacido para eso, como si esa fuera la mejor sensación de todas. Ella le dio la vida que su padre le había quitado, ella era su vida
- No es cierto- Dijo al separarse- Tu la amas a ella- Tomó el cuello de su camisa- Yo no fui un reeemplazo
Ni siquiera Meliodas entendía lo que decía, un momento hablaba una cosa y otro mencionaba otra. Ella era un torbellino de emociones juntas, es como si hubieran dos _________
- Claro que no fuiste un reemplazo- Peino sus cabellos
- Entonces cuando me besas no piensas en ella?- Alzó una ceja, que le había pasado?
- Claro que no- No era mentira, cuando estaba con ella no había espacio para nadie más por extraño que sonara
- Mientes- Lo soltó- No soy suficientemente buena, a ella la amas desde hace milenios, yo aparecí hace poco- Escondió su cabeza en sus rodillas. El corto vestido hacía que se viera gran parte de su cuerpo y Meliodas no pudo controlarse
- No eres suficiente _________- La besó- Eres todo lo que necesito- Susurró al separarse, un pequeño rostro de saliva quedó entre sus bocas, Hime escucho esas palabras y fue más que suficiente para volver a besarlo
El tomo sus mejillas y comenzo a acariciarlas, ella por su parte llevo ambas manos al cuello de rubio, sintiendo algunas de sus hebras doradas en la parte de atrás. Un beso pasional se convirtió en dos, dos en tres y tres en cuentro
Meliodas bajo por su cuello depositando pequeños besos en él, llegó a su hombro de esa forma y bajo el fino tirante para marcar ese lado
- Ah- Un pequeño gemido se le escapó de entre los labios
- Creo que es mejor que paremos..- Intentó moverse pero ella no se lo permitió, tomo ambas manos evitando que se parara, el rubio luchaba con todas sus fuerzas por controlarse pero ver como aquella mujer se sentaba a orcajadas sobre el sólo empeoraba las cosas
- Hoy no- Susurró para pensarlo nuevamente. Durante tanto tiempo juntos habían estado varias veces en ese tipo de posiciones, pero ella no quería entregarse a él mientras estuviera inseguro. Hoy eso no le importó, al fin había entendido algo....la vida era una sólo, demasiado corta como para desperdiciarla
Las manos de Meliodas marcaron su espalda por debajo del vestido, deseoso de arrancarlo, ese tacto hizo que se extremeciera, jamás se había sentido tan complacida como en ese momento y tras unos minutos las telas que afirmaban su bonito cuerpo fueron retiradas con maestría. Por su lado el dejo que ella lo ayudará a despojarse de la camisa que traía puesta
- Tuviste tu oportunidad de detenerte- La arrecosto a la cama para poner ambas manos a su lado, sosteniendo de ellas, examianndola, era sin duda hermosa, como una flor, tan frágil y fuerte a la vez- No voy a detenerme ahora
Ella asintió y sus labios volvieron a unirse, las finas manos de la mujer estaban en el rostro de Meliodas, quien se despojó de lo otro que le quedaba de ropa
Con su mano derecha agarró la cadera de la chica con la izquierda tomo un seno, lo oprimido y ella no pudo evitar dejar salir un gemido de placer. Dos de sus dedos jugueteaban con su pezón mientras sus lenguas danzaban juntas
Meliodas en tanto tiempo había estado tan encendido, el era un pervertido innato, eso lo admitía pero ese mujer despertaba en el demasiado fuego
El dirigió su vista hacia su frondoso pecho, adornado por los rosados pezones, aquellos que lo llamaban con anhelo, atrayendolo hacía ellos, pidiendo en silencio ser atendidos entre besos y mordidas. Se acercó hasta ellos, admirandolos, mientras acariciaba el cuerpo de Hime, que estaba temblando, suspirando entrecortadamente, mordiendo sus dedos para evitar gemir. Ella tiró su cabeza hacia atrás, ofreciéndole su cuepo, pidiéndole que la toque sin miedo, que la haga una mujer
Los labios sedientos de Meliodas atraparon el pezón erguido provocando un profundo suspiro, siendo seguido de un agudo chillido que luchaba por ser contenido. Con sus dedos aplicó suaves roces en el pezón contrario, lo tomó entre los dedos y tiró suavemente de él, mientras que con sus dientes mordidas sutilmente el que en su boca mantenía
Observo en cada instante los gestos placenteros de Hime, disfrutó de cada uno de ellos, los grabó en su mente
Era la primera vez, no quería ser tan rudo, dejaría todos aquellos juegos y cosas sucias para cuando ella estuviera preparada, por el momento solo quería ser romántico
Metió un dedo en su feminidad y cuando ella fue a quejarse de el dolor el la besó, comenzaron los movimientos y luego metió el segundo, repitiendo la misma acción, sólo quería que se acostumbrara a tener algo dentro
Cuando creyó que ya estaba preparada, abrió sus piernas y se acomodó en ellas, puede que pareciera insensible pero no pregunto por aprobación, simplemente penetró en su interior. La espalda de ella se arqueo y un gemido de dolor se escapó de entre sus labios, se propuso aguantar, ella no era tonta, obvio había leído de eso, sabía que la primera vez si dolía pero que luego sólo había placer
Los suaves movimientos de Meliodas permitieron adaptarse, de todas formas era demasiado, agarró la almohada como pudo cuando el rubio comenzó a aumentar el ritmo. Era demasiado placer
Pronto la chica sentiría que llegaba al climax, ya no aguantaba más, y ella misma sabía que era muy pronto, el se quedaría con deseo, pero su cuerpo tenía más de 18 años y es la primera vez que hacia ese tipo de cosas. Aún así después de que le dolor desapareciera, se dedicó a disfrutar de esas embestidas y jamás pensó que ella misma fuera tan pervertida
Y así fue, como la pasión se adueñó de sus cuerpos y no les permitió parar hasta el final. Meliodas se acostó sobre su cuerpo y ella a su vez se sentía muy cansada, no sabía que era. No había podido pegar mucho ojo últimamente y hoy al fin estaba consolidando el sueño
- Te amo- Sintió un susurro mientras cerraba los ojos, pensó que había sido su imaginación, él jamás le diría algo así, pero sólo para por si las dudas:
- Te amo- Y no recordó nada más
No había dudas ya, sólo eran dos amantes haciendo eso, amarse
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No se arrepentía de nada, en el fondo había deseado eso mucho tiempo
Miro su rostro dormir tranquilamente, sus cabellos estaban despeinados e intentó arreglarlos pero le fue imposible
De pronto ya comenzaba a cobrar conciencia, sus ojos se fueron abriendo lentamente y se estiró un poco
- Buen día- Saludo Meliodas al verla medio adormilada, ella se coloro al verlo
- Ayer tuve un sueño muy hermoso- Tapó su cara con la almohada
- No fue un sueño- En ese momento se percató de que estaba sin ropa, abrió sus ojos de par y casi se desmaya
- Dios- Susurró aturdida y su rubio comenzó a reír, ella lo miro a través de su hombro y en sus labios se manifestó una hermosa sonrisa
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- Ban- Rogó mientras lo miraba con cara de cachorro
- Llegas y ya quieres ponerme a trabajar, vaya mujer- Pasó por su lado
- Bien!- Gritó mientras daba un pequeño saltito, todos se lo agradecieron
- Yo quiero un par de manzana- Gritó King pero como respuesta obtuvo una masa arrojada en su cara
- Pues hastelo tú- Gritó desde la cocina y todos comenzaron a reír
- Diane- El rey hada veía a su amada gigante burlarse de él
Después de eso las risas regresaron a los Pecados, después de tanto tiempo podían sonreír todos juntos, sinceramente lo necesitaban puesto que no sabían lo que se aproximaba
Hime evitó mirar mucho a Meliodas todo el día, se sentía avergonzada y aunque estaba felíz no sabía cómo estaría él, dejó que todas las veces que hablaron haya sido el quien se acerque. Ni siquiera sabía cómo reaccionar o que tenía que hacer, dormir la de nuevo con el?, volvería a pasar?, estaba muy nerviosa y no sabía que decir, decidió actuar con normalidad, aunque eso le haya sido imposible
- Hola King- Saludo al verlo sólo trepando en ese árbol- Todos están adentro- A el pareció no importarle, estaba acomodado en su almohada gigante y sus ojos estaban cerrados, aunque si la estaba escuchando
- Quiero un descanso- Respondió después de tanto tiempo de silencio
- Que casualidad- Miro al cielo- Yo también
- Pues ven aquí- Ella asintió y el la elevó con su magia para ponerla a su lado
- Guau eso fue increíble- Dijo mientras se lanzaba a la almohada- No sabía que podías hacer eso
- Si que puedo- Hacia tiempo que no pasaban un rato juntos, la verdad es que el rey hada era alguien importante para ella, y parecía ser muy sabio a pesar de su apariencia
- Crees.......- Comenzó a interrogar- Crees que haya una posibilidad de que me escoja?
King no pareció sorprendido por su pregunta, en cambio el estaba esperando a que la hiciera, sabía que sólo era cuestión de tiempo. Permanecieron en silencio unos minutos, si bien King no dudaba de lo que Meliodas sentía por ella, el fantasma de su pasado con Elizabeth lo perseguía haciendo que estuviera confuso y no sólo eso, ni siquiera el sabia a quién escogería
- No lo sé- Soltó al fin y los hombros de la chica cayeron con decepción, por lo menos había descubierto que no era la única que no lo comprendía del todo- Pero se que te quiere mucho
- Quererme no es suficiente- Cerró sus ojos y evitó llorar- Yo le amo
Eso selló la conversación para siempre. King recordó cuento dolía cuando Diane había estado enamorada de Meliodas, que tenía el que a todas se ganaban?, el caso es que sabía lo frustrante que era
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Merlín al fin lo había encontrado, y no estaba para nada satisfecha con sus resultados. Hasta ahora siempre se había sentido orgullosa consigo misma por todo lo que había conseguido, siempre que se proponía algo lo conseguía, pero está vez fue diferente
Si bien logró su objetivo, la respuesta a su pregunta no era la mejor, se sintió frustrada, no habían logrado detenerlo, en cambio posiblemente Mirak ya estuviera de vuelta
- Sólo necesitaban la sangre- Sentenció y Meliodas cerró los ojos serio
Había creado una relación, un montón de recuerdos, un nuevo amor, y ahora llegaba una nueva amenaza, aún mayor que todas las anteriores
- Merlín reúnelos a todos, nos dirigimos a Liones por refuerzos, avisa a Arturo de que necesitamos refuerzos- Ella asintió- Traeme a King, Eleine y Diane aquí, necesitamos toda la ayuda que podamos encontrar- Se acercó a la ventana y miró el cielo estrellado, como deseaba ver las estrellas con ella sin ninguna preocupación, pero no podía- Se acerca la guerra......Una Que no sabemos cómo acabará
Sólo había una opción, y esa, era luchar
Ahora si se acerca el final de esto. Dios estoy muy avergonzada, juro que borre el lemon unas tres veces para hacerlo mejor pero al final este fue el resultado, perdonme. NUNCA más vuelvo a hacer lemon
Ronda de preguntas
¿Quién vencerá a Mirak?
¿Qué pasará con Zeldris?
¿Meliodas escogerá a Hime?
Descubrirlo pronto
Quien sube un capítulo a la una de la mañana-Se sopla las uñas- Yo señoritas
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