Capítulo dedicado a: rayis_kawaii , AtsushisWaifu y a ladyxstar por estar desde el principio apoyando la historia. Gracias por vuestros votos y comentarios❤❤
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Abrí los ojos lentamente, desorientada. No sabía donde estaba hasta que recordé lo de ayer. En la habitación de Yurio. Nunca había estado tanto tiempo en la habitación de un chico y menos durmiendo con el. Me sonrojé al recordar que lo de Yulia era una farsa y que la persona que estaba rodeandome con los brazos era un......¿¡¡Espera, que me están abrazando!?!! Del susto me aparté de golpe. No estaba acostumbrada a despertar junto a alguien. Me quedé en una esquina de la cama intentando dormir de nuevo. Serían las 9 o las 10, la hora a la que la gente normal se levanta, pero yo soy mas dormilona y mínimo me despierto a las 11 en vacaciones. Cierro los ojos pero un movimiento en la cama me impide dormir. Me giró y observo como Yurio también se ha despertado.

-B..buenos días (T/N)- dijo bostezando-.

-Bueno días Yurio- susuraste intentando que no se notara lo nerviosa que estabas por la situación.

Os levantasteis y al salir de la habitación os encontrasteis con una sorpresa: una mesa llena de comida para el desayuno. Sentados, estaban tus padres tan felices.

-¿Papa? ¿Mama?- dijiste sorprendida- ¿Habeis hecho el desayuno? Pero si sois mis invitados y estabais de vacaciones....

-No importa (T/N) es lo mínimo que podíamos hacer después del favor que nos hizo Yulia ayer. Espero que te gusten los huevos fritos- añadió tu madre mirando a Yulia-.

-Ay- suspiraste con la mano en la cabeza.

Os sentasteis en la cocina, y desayunaisteis. Era algo incomodo para ti ver a tus padres tratar tan bien a una persona, mejor que a ti. Se ve que le habían cogido cariño a "Yulia". Mejor dicho a la actuación. Yuri actuaba muy bien fingiendo ser amable y compasivo, casi incluso simpático. Te preguntaste si en realidad podría llegar a ser así aunque no lo veías muy claro. Después de mucho insitir, les enseñaste la casa a tus padres, esta vez sin ninguna Maya que pueda fastidiarla. No lo habías pasado tan mal como esperabas y ahora te daba mas pena despedirte de ellos.

-Bueno (T/N)- dijo tu padre dándote dos besos en la mejilla- Nos vamos ya, nuestro avión sale a las 10.

-Os echare de menos- dijiste.

-Cuidate mucho (T/N), nos vemos dentro de un mes- añadió tu madre cogiendo su maleta y llevándola hasta la salida.

-¡Adios!- dijiste al unisono con "Yulia".

Cierras la puerta y suspiras. Al final el plan no había salido tan mal. Incluso te habías divertido. Vuelves tu mirada hacia la de Yurio, pensando en lo que te deparará este próximo mes con el.

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Mientras tanto en otro lugar de la ciudad (Narra Viktor)

Suspiró por séptima vez. Le había escrito mensajes, llamado....incluso habia ido al hotel donde se hospedaba pero no lograba contactar con él. Con su querido Yuri Katsuki. Si hubiese sabido todo lo que acarreaba no le habria hecho eso a Yurio. Era para salvar su vida y solo lo había hecho con buena intención. Sabia que ver tantas películas no era bueno pero no esperabas esto. Necesitaba verlo de nuevo. No podía creer que toda su relación se fuera abajo solo por un accidente. Lo mejor sería pasarse por la recepción del hotel por si acaso había vuelto.

Cruza un par de calles, el hotel no estaba muy lejos de allí. Miró alrededor con la esperanza de ver al japonés por alguna parte. Pero sus esperanzas rápidamente se deshicieron al observar que estaba vacío a excepción de un par de mujeres que pasaban por allí. Ya no había nada mas que pudiera hacer. ¿O si? Una idea loca apareció de repente en su cabeza. El problema empezó por una locura y acabaría con otra. Decidido, se colaría en su habitación y le esperaría allí. Tendría que venir tarde o temprano y así podría finalmente hablar con él. Solo tendría que convencer a la recepcionista de que le abriese la puerta con la llave maestra. Por suerte, convencer a la gente era su especialidad y tenía muchos metodos diferente para hacerlo.
Se acercó a la joven y comenzó con su idea.

-Disculpe señorita- dijo apoyando el brazo en la mesa y con el otro quitándose las gafas de sola- Querría entrar en la habitación 102.

-¿Es usted el cliente?- pregunto sin dejar de mirar la pantalla del ordenador-.

-No, soy su hermano. Pero me deje una cosa muy importante en su habitación y necesito entrar. Es una emergencia.

-Lo sentimos, pero sin la autorización del cliente no podemos dejarle entrar-dijo un poco molesta-.

-¿Esto le haría cambiar de opinión?- dijo Viktor mientras le mostraba un billete de cien euros.

-¿Me esta sobornando?- dijo aun mas irritada-.

-Mm....veo que usted hace muy bien su trabajo...-murmurró el ruso algo nervioso-.

-Por supuesto- respondió la empleada orgullosa de su puesto.

-Ya veo- dijo acercándose mas a la joven y murmurró con voz sexy- Es muy importante para mi entrar. Podriamos llegar a un acuerdo si me deja pasar, no necesariamente con dinero.

-¿¡Esta usted seriamente ligando conmigo para que le deje pasar?!- dijo cada vez mas furiosa-.

-Emmmm....-respondió y se pusó de rodillas, sollozando- ¡Por favor déjeme entrar! Necesito hacer las paces con mi novio, no puedo esperar más. Lleva cabreado conmigo 2 semanas y no me puedo poner en contacto con él. ¡¡Se lo suplico!!!

-Espera...¿Ha dicho novio?-dijo la recepcionista prestando de repente mucha atención.

-Si....

-¡O dios mio! ¡¡Estaré encantada de ayudarle!!. Si me lo hubiese dicho antes...-dijo con los ojos brillantes-.

Genial, otra fujoshi. ¿Acaso todas las empleadas de Moscú tenian una obsesión con el yaoi?? Bueno que remedio, la cuestión es que lo había conseguido. La empleada le acompañó hasta la habitación de Yuri. Se despidió pidiendo que no lo desordenase mucho, dejándole a solas. Observó la habitación. Nada mal, desde que empezó su carrera como patinador podía permitirse buenos hoteles y él lo sabia mejor que nadie. Se sentó en la cama, esperando al japones. Giro su mirada a la mesilla, donde había  una imagen en un pequeño cuadro, al lado de una lampara. Observó la foto . El sitio parecía un parque. En medio se observaban dos personas que parecían muy felices. Al fijarse bien vio algo que le dejó helado. Era Yuri sonriente, SU Yuri con una chica besándole la mejilla y con los brazos entrelazados con los de él fundidos en un abrazo.

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¡Hola! Ya estoy de vuelta :3
Esta vez he actualizado un poco más temprano ya que había mucha gente que deseaba que continuase la historia. ¡Muchas gracias por su apoyo!

¡Espero que les guste!

Continuará.....