Me encontraba en una gran calle en el centro de la ciudad. Aun me quedaban dos o tres manzanas por recorrer antes de llegar a mi destino. Arrastre mi pesada maleta por el suelo nevado con gran fuerza. La maleta era enorme ya que me iba a quedar durante bastante tiempo, aparte de que en este país no es que haga precisamente mucho calor.

Tras recorrer un par de avenidas mas encontré un enorme edificio que coincidía con la foto que tenía de él. Allí tendría lugar dentro de un cuarto de hora la fiesta de bienvenida a todos los participantes del intercambio además de conocer a nuestros compañeros de intercambio. Estaba muy emocionada pensando en como sería la persona con la que me quedaría cuando de repente alguien me empujó de malas maneras, tirándome al suelo. Miré hacia arriba y me encontré con un chico rubio que me miraba de malas maneras.

- ¡Ey! Ten más cuidado- dije de malas maneras, molesta.
- ¡Pche! Dejame en paz niñata yo hago lo que quiero- espetó bordemente.
Vale ahora si me estaba cabreando. Primero me empuja y en vez de pedirme perdón me llama niñata y me contesta de esta forma. Con (T/N) nadie se mete.
- ¿¡Quien te crees que eres mocoso!?- grité de malas maneras- Pierdete un rato y así le haces un favor a la humanidad.
- ¿Te crees mejor que yo? Que conste que yo no era quien iba embobada pensando en tonterías- soltó el rubio.
Me daba rabia pero tenía que admitir que iba distraída. Decidí irme y no perder más tiempo con ese idiota.

¡Agh! Me había distraído y ahora llegaba tarde, genial. Empecé a correr hasta entrar en el edificio. Gracias a dios aun no habían empezado a decir las parejas. El sitio era grande y espacioso con unas lámparas enormes y una mesas llenas de aperitivos. Estaba llenó de gente, moviéndose de un lado a otro, hablando animadamente en ruso (aunque yo no entendía mas que unas pocas palabras) o simplemente comiendo aperitivos. Había un escenario al final donde se preparaban un grupo de adultos para anunciar las personas de los intercambios. Me senté sola en un banco esperando con ansia el resultado. Por desgracia no conocía a nadie allí todos mis amigos estaban en  otras lugares del mundo o en mi ciudad natal. Suspire y me dedique a enredar con mi maleta sumida en mis pensamientos. De repente una voz me llamó la atención:

" (T/N) , (T/A) última llamada para reunirse con su corresponsal"

De repente me fije en una mujer hablando por el micrófono y me di cuenta de lo que pasaba. Corrí hacia el escenario y me subí.
-*Agh* *Puff* ¡Yo! Soy yo (T/N)- dije resoplando de la carrerita que me había pegado.
- Aquí estas. Muy bien- dijo sonriente- y este es tu corresponsal: "Yuri Plisetsky ya ha llegado su corresponsal por favor presentese en el escenarioo"

Todo el mundo se calló de repente y solo se oían murmullos como: "¿Es él?" "No puede ser el tigre de Rusia" "Imposible". No se porque pero esos rumores no ayudaban nada a mantener la calma.

Un chico con gafas de sol y una chaqueta de leopardo subió al escenario. Espera...esto me resulta familiar....

¡¡¡Era el chico desagradable de la callleeee!!!!!!

-Espera....¿Qué?????????????- grité en medio del escenario-........?????