"Maldito Deku... eres jodidamente valiente al provocarme y quedarte dormido"

El omega ni quiera reacciono al gruñido del lobo que lo estaba protegiendo.

Bakugo rodeaba el cuerpo desnudo de Midoroya en su forma de lobo, cuando este cayo rendido después de su provocación.

Definitivamente cuando despertara había dos opciones... se acordaba de su atrevimiento, se avergonzaba y lo evitaba... o no recordaba nada y definitivamente el alpha iba recordarle todo.

"Ey Bro... estas bien? Corriste como bestia"- escucho la voz de Kirishima y supuso que ya habían vuelto.

"Si... necesito ropa"- trato de evitar el tema.

"Si, la traigo conmigo... iré y..."

"Espera... necesito ropa también para Deku"

"Midoriya? Pero porque tu.... o no..."

"No imagines cosas absurdas, solo apresurate"

"Tienes mucho que contarme"

"No molestes..."

"No tardaré en llegar... espero estén presentables cuando llegue"

Bakugo gruño al aire y después perdió la conexión. Trato de ignorar el molesto comentario del pelirrojo y se quedo en alerta esperándolo, pero no llego...

El omega no parecía querer despertar tampoco, el pecoso estaba pegado a su cuerpo y hundía su rostro en su pelaje.

Estaba pensando en irse cuando escucho pisadas, volvió a ponerse en forma defensiva, pero percibió el aroma de Kirishima.

-Aaah... este lugar parece un laberinto, si no fue por tu aroma nunca hubiera llegado- se quejaba el pelirrojo cuando llego a donde estaban.

No obtuvo respuesta y fue cuando por primera vez los vio. Se sonrojo al ver algo que sintió no debía... a el le pareció algo muy intimo.

Se dio la vuelta de manera rápida y dejo caer la topa cerca de ellos, escucho movimiento, pero no quiso voltear.

-De que te avergüenzas? Me has visto desnudo desde que nos conocemos...- le resto importancia el rubio, mientras se ponía la ropa.

-Ese no es el problema, yo no debería ver a tu pareja cuando esta en ese estado... es algo muy íntimo.

-De que idioteces hablas?- le pego en la cabeza cuando termino de cambiarse.

-Bueno... la forma en la que lo protegias, pensé...

-No ha pasado nada, me provoco y se quedo dormido... supongo que por eso tiene mi aroma.

-Diria que es más que eso... sus aromas están algo mezclados.

-No es nada, cuando vuelva a sus cinco sentidos me va a evitar y recuperara su aroma.

Bakugo ya le había puesto una camisa que le había traído Kirishima para Deku, pero aunque le quedaba grande aun lo dejaba algo expuesto. Mordió su labio algo disgustado por la escena de que en el pueblo lo vieran de esa manera... y sin pensarlo lo envolvió en su capa.

-Entonces sigues pensando que lo que ustedes tienen solo es un trato?

-Eso es lo que es- contesto sin emoción Bakugo, ya cargando al omega en brazos.

Kirishima no se atrevía a contradecirlo, si no se daba cuenta por si solo, no tenía caso... su relación no cambiaría y en medio de ese silencio regresaron a la aldea.

-Que te dijo ese alpha?- pregunto cuando se sintió más seguro.

-Odia a Deku... tu mismo lo viste.

-Pero corriste hasta aca, no harías eso solo porque si...

-Fue un presentimiento- su miraba bajo por un segundo al chico que traía en brazos y no paso desapercibido para el pelirrojo.

-Si tus presentimientos siguen así... quedaras prendado a él- se burlo.

-Espero que estes preparado para una paliza porque...

-Que rayos sucedió!- grito en pánico Uraraka.

El grito llamo la atención de muchos ahí presentes, algunos solo estaban de paso y otros reconocieron a los involucrados y se acercaron.

-Porque el alboroto?- llego Aizawa y en cuanto vio a Midoriya corrió hacia él.- que le hiciste?- pregunto con recelo y fulminando al alpha con la mirada.

-Nada... el colapso en el...- no le dejaron terminar de hablar cuando Mirio se paro en medio de Aizawa y él.

-Creo que estaba claro que no te podías acercar a él de esa manera.

Ambos alphas se reteban, ninguno se dejaba intimidar por el otro, pero le estaba tocando los cojones que dudarán de él, cuando ni siquiera inicio nada... suspiro y dejo de intentarlo.

-Revisenlo por ustedes mismos... yo me largo- le paso a Deku a los brazos de Mirio ya algo fastidiado, pero lo detuvieron.

Midoriya sujeto del brazo del alpha antes de que lo soltara por completo. Como niño pequeño regreso a los brazos de Bakugo y se aferro a él. Enredo sus piernas en la cintura del alpha y pego totalmente su cuerpo al del otro.

-No me dejes- suplico aun adormilado.

Bakugo quedo sorprendido por el ruego del menor. Se sentía adormilado por el aroma que desprendió y estando en su pequeño mundo, también abrazo al omega tratando de buscar esa esencia que lo relajaba.

-No hagas esto más complicado- pidio Mirio a Midoriya, mientras trataba de separarlos.

El pecoso gimio al ser sacado de su comodidad y entonces fue cuando Bakugo reacciono, se aferro al cuerpo del menor y saco los colmillos para lograr la amenaza, no quería que se lo llevaran... el mismo omega quería estar con él, no dejaría que se lo quitaran.

-No me estas dejando otra alternativa más que darte otra paliza- Mirio estaba algo harto, no dejaría que ese idiota le hiciera algo de nuevo.

-Ey...- Tamaki llamo su atención y de manera silenciosa trato de arrastrarlo.

-No podemos hacer nada si él es el que te quiere a su lado, pero si le haces daño... no cuentes con que esto vuelva a suceder- a mala gana Aizawa le dejo libre.

Bakugo no entendía porque lo había aceptado, pero tampoco quiso ponerlo en duda, se volvió a aferrar al omega y camino a la casa que le habían dado como hospedaje.

Midoriya ya se había vuelto a quedar dormido, quizá su decisión fue tomada por instinto y solo siguió sus deseos, porque no parecía estar muy consciente de lo que estaba pasando.

El rubio lo recostó en la cama y él se sentó en una orilla. Que mierda acaba de pasar?

Tenía que aceptarlo... algo con ese omega no era normal. Si... al principio pensó que era una reacción natural por su conexión natural como alpha y omega, pero eso iba más allá, había algo que le hacia siempre seguir a ese pecoso y empezaba a fastidiarle no entender el porque.

-Destinado...

Escucho casi un susurro, pero la voz tan familiar de su madre fue lo que lo asusto.

Un destinado? Es una broma... eso es una leyenda... y si fuera verdad porque ellos? Esa relación es claramente una fantasía, conocer a alguien 100% compatible contigo... era imposi....

-Aaah- suspiro y se dejo caer en la cama.

Mierda... no podía negar que fuera posible. En serio, esa mujer no le dejaba de dar lecciones aun después de tanto tiempo...

Se quedo viendo a la nada mientras procesaba la información, pero un pequeño suspiro de Midoriya lo trajo a la realidad.

Volteo la mirada hacia el, quedando de frente ambos. Estando así de cerca podía ver a la perfección las pecas, sus mejillas sonrojadas, las largas pestañas y los carnosos labios... definitivamente era un omega, era la ejemplificación entera de ellos.

Su pequeño cuerpo, su estrecha cadera, su perfecto aroma... que fastidio... nunca pensó que eso seria real y mucho menos encontrarlo.

-Aun así tu no me necesitas a tu lado...- susurro.

El aroma a té verde... al bosque... el lugar donde siempre se siento cómodo, provenía de él. Acerco un poco su rostro al pecho del omega y trato de absorber lo más que pudo su aroma, pudo notar que traía puesto el collar que le había regalado... aunque le había dicho que no le gustaba y edo le hizo sacar una pequeña sonrisa prepotente.

Poco a poco se dejo adormilar por el aroma y cayo dormido, ambos quedaron cerca del otro sin realmente invadir el espacio ajeno, pero aun así suficientemente cerca para sentir el aroma del otro.

Midoriya empezó a despertar, se sentía desubicado, después de los 3 días en celo... hace mucho no habia tenido uno y de verdad que lo había cansado.

Cuando enfoco mejor su vista dio un salto del susto, provocando que cayera de la cama. Se volvió a asustar pensando que había despertado al otro... pero afortunadamente para él no fue así.

Trato de recordar pero nada venia a su mente, el celo era fastidioso y a veces tardaba en recordar y...

Oh no...

Asustado reviso si traía ropa puesta, suspiro aliviado al ver que si, pero de nuevo algo estaba mal... la camisa que traía puesta no era suya y la capa que le envolvía... era del rubio.

Trato de no llorar y se puso de pie, avergonzado reviso si su entrada estaba bien... y por fin pudo respirar tranquilo al ver que no había pasado nada.

Volvió a sentarse y trato de pensar, que había pasado? Recordaba entrar en celo, recordaba la vez que le rogó a Katsuki que le tomara en su casa y fueron separados... que vergüenza.

Recordó el día solitario que tuvo después... se sentía horrible y herido, su cuerpo ya sabia que tenía un alpha y estaba destrozandolo el no tenerlo...

Después, su colapso lo llevo a convertirse en lobo en su ultimo dia de celo, en medio del pánico huyo sin ser visto y se refugio en el bosque, los espíritus le cuidaron y fue cuando se volvió a quedar dormido.

De ahí recuerda lapsos, el aroma a cítricos, el calor de otro lobo... y después nada, es como si todo se hubiera calmado, había logrado tranquilizarse y descansar.

Hasta que... rayos, yo no lo solté. Recordó como se aferro a él, no quería volverse a sentir mal y el era la única forma de lograrlo, que forma tan horrible de la naturaleza de aceptar la verdad... mi destinado.

Pero sus pensamientos pararon de golpe cuando percibió un aroma que nunca olvidaría.

Amapolas~

Se acerco al buro donde provenía el aroma y esta vez no se pudo contener, soltó unas lagrimas sin hacer mucho ruido. Sostuvo con sus manos temblorosas el collar que alguna vez Todoroki le regaló con la promesa de algún día llevar su marca en vez de ese hermoso collar.

La capa que usaba siempre para viajar con el también estaba ahí, pero no se atrevió a tocarla, el aroma era tan intenso y tan triste que no lo soportaria, pero todos sus planes se vieron abajo cuando vio esa foto.

Nunca logro recuperar ninguna foto con él, no había forma de verle de nuevo y tener esa foto logro romperlo, sollozo e hiperventilo. Se aferro a la capa que traía puesta que sin darse cuenta le reconfortaba y ayudaba a calmarse.

Lo que no espero es que los fuertes brazos del alpha que creía dormido lo iban a cubrir. Lo rodearon sin hacer mocha presión y sintió como dejo caer su cabeza en su hombro.

-Esa chica albina... me pidió darte esas cosas- dijo apenas en un susurro.

-Gracias...- se le rompió la voz de nuevo.

Bakugo se sorprendió, nunca espero que el omega le agradecería algo, tampoco que le perdonara y mucho menos que le buscara a el en momentos donde se veía jodido, tal vez... el tambien lo sabe?

-Supongo que te sentirás mejor si te dejo solo... y si te pones las cosas de ese tipo...- lo ultimo lo dijo con algo de recelo, pero no tenía derecho a reclamar.

Iba a tomar su capa e irse, pero Deku se aferro a ella y no la soltó, pero tampoco le volteo a ver.

-Justo ahora... podrías quedarte conmigo?- pregunto algo tímido.

-Esas cosas son importantes para ti... yo no soy parte de...

-Lo se, pero no quiero estar solo...

Ese chico seguía sorprendiendole, tenía carácter y era un buen líder, pero también era tímido e introvertido... nunca pensó ser tan compatible con alguien así.

-Esta bien...- se sentio en el suelo, dejando caer su cabeza sobre la cama, aun estaba algo somnoliento después de esos días tan atareados, pero no quería dejar al omega en el estado que estaba.

Sintió el pequeño bajón del colchón al sentarse Deku y después sintió como su suave mano jugaba con su cabello.

-Gracias...- repitió dedicándome una sonrisa que lo dejo sorprendido y tuvo que ocultar su rostro en la cama.

Joder... eso era trampa.