Luke en multimedia.
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Flashback. • 23 de Dic. 3 días para navidad.
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—¿Es enserio, cariño? Me parece muy raro que de la noche a la mañana haya cambiado de parecer...

—¡Igual a mi! Pero no importa, estoy feliz porqué no tardó en entenderme... ¡Ayer hasta nos preparó una cena!—decía el mayor mientras le contaba con entusiasmo lo sucedido ayer a Gabe. Este realmente no se la creía toda. ¿En serio? ¿Ayer me odiaba y hoy lo acepta como si nada? Aquí hay gato encerrado...—pensó el de cabello largo.

—Pues me parece perfecto amor, ahora si pasaremos una navidad en familia...—respondió y Jorge asintió contento. No debía negarlo; le encantaba ver a su amado papasito así de feliz, pero aún así no bajaría la guardia... Luke le parecía una bomba que no tardaría en explotar. Así que no estaba de más ser precavido.

Los dos hombres estaban comiendo tranquilamente en un Starbucks mientras hablaban, al terminar Jorge le propuso a Gabe ir a comprar las cosas necesarias para Nochebuena y Navidad cómo consecutiva. El de cabello largo no lo pensó dos veces y aceptó, además si resultaba ser verdad lo de Luke entonces él tenía un plan romántico para esa noche con su papasito y aprovecharía a comprar algunas cosas para ello.
Por otro lado Luke estaba en la casa jugando videojuegos con Jerry.

—¿De verdad crees que tu padre se la haya creído?

—Yo digo que si, parecía muy feliz y así...—respondió este mientras le aplicaba un combo y terminaba el combate en "Naruto Storm Revolution.".—Solo espero que el otro maricón se la tragué toda y así mi plan se ejecutará con excelencia.

—¡Rayos! Siempre pierdo en este juego...—respondió Jerry.—Bueno, suponiendo que todo funcione... estaría genial... pero... ¿Y si no?

—No hay falle, lo tengo todo fríamente calculado.—dijo por último para luego seguir jugando. Tiempo después su padre llegó a la casa y a su lado él siempre radiante Gabe.

—¡Señor Williams!—saludó Jerry.

—Hey, ¿Qué hay Jerry?—saludó de vuelta el mayor.—Mira, te quiero presentar a mi novio; él es Gabe.—Jerry lo saludó sonriente y Luke al escuchar eso nuevamente casi que vomitaba.

—Un gusto,—inquirió el de cabellera larga.—Luke te traje un pre-regalo navideño. Espero te guste.—dijo extendiéndole la caja de un videojuego el cual era nada más y nada menos que "INJUSTICE 2". Jerry casi que muere del asombro.

—¡Luke, tu padrastro es asombroso!—el mencionado no respondió nada y solo miraba con desdén la caja.

—¡Amor! ¿Por qué no empiezas bajar las cosas? Ahora te alcanzo.—Jorge asintió y salió nuevamente, en eso Gabe se acercó a los menores.—Oigan, necesito pedirles un favor a ambos...

—¡Lo que necesites Gabe!—respondió el sonriente Jerry y Luke casi que lo mata con la mirada.

—Bien, Luke; hoy tengo planeada una cena especial para tu padre, es por nuestro aniversario... y necesito la casa para ambos ya que no quiero llevarle a un restauran. El caso es que... ¿Qué tal si te quedas a dormir en casa de tu amigo? ¿Si se puede no, Jerry?—este asintió aún contento.—¡Genial! Entonces yo invitaría el cine... ¿Les parece?

—Claro Gabe...—dijo de la mejor manera posible Luke. Hasta te ayudaré para que esa velada sea "perfecta".—pensó y sonrió para si mismo.—¡Es más Gabe! ¿No podemos ayudarte en algo?—el rubio de cabellera larga lo pensó un momento, no sabía si confiar en él.

¿Y si de verdad nos aceptó? Pero... ¿Y si no?—Eran los pensamientos que rondaban la cabeza de Gabe.—Bien, podrían hacer limpieza en la casa y tal vez... ¡Comprar algunas cosas que se me olvidaron! ¿Les parece?—los dos jóvenes asintieron.

—¿Entonces nos das la lista de compra? Para que vayamos de una vez...—dijo Luke y Gabe les hizo una.—genial, volveremos en un minuto.—salieron de la casa y tomaron la camioneta 4x4 para ir al centro comercial.

—Amor... ¿A dónde van?—preguntó Jorge y Gabe lo besó.

—Van por un mandado...

Minutos después los chicos estaban comprando las cosas pedidas en la lista de Gabe. Jerry aún seguía revisando la caja de videojuego anonado.

—Jerry, ¿No podías ser menos amable con Gabe? ¡Por que pareciera que te cae de maravilla!

—Realmente me cae muy bien, es muy buena persona... no entiendo porqué lo odias tanto.

—Por que quiere venir a tomar un lugar que no le corresponde a él ni a nadie más. Y además ¿Como te sentirías tú si tu padre te hiciera lo mismo?

—Pues me daría igual, mientras él fuera feliz supongo que todo estaría bien... y tendría un padrastro muy buena onda como el tuyo.

—Eso lo dices por que no estás en mi lugar...

Después de aquella plática los dos se concentraron en comprar, pero no crean que Luke lo hacía de "buena fe", tenía todo bien planeado desde que la palabra "Cena especial" entró por sus orejas. Después de haber terminado las compras tomó una de las latas de cóctel de frutas y le inyectó un poco de su "pócima secreta" haciendo un diminuto hueco en la lata para que no se notara tanto. El curioso Jerry veía lo que su amigo hacía con mucha ímpetu.

—¿Podrías calmarte Jerry?

—¡Es que no me dejas ver bien! ¿Qué le haces a esas latas?

—Solo les pongo un toque especial para esta noche...

—¿?

Luke se estrelló la palma de su mano en señal de frustración.—Si planeaban tener algo de "acción asquerosamente gay" hoy, esto les arruinará por completo la noche.

—Aún no entiendo Luke...—contestó Jerry con un puchero.

—Es como si les bajara el mes... algo así como "Andrés gay". Aunque esto no es todo, toma...—dijo pasándoles unas pequeñas cámaras.—hay que posicionar bien estás en la casa para no perdernos de la película... y toma...—le extendió un bote de vaselina.—esto es para lo otro que tengo preparado.

Luego de haberle explicado un poco de su plan los muchachos salieron del mall y se dirigieron a casa, al llegar le entregaron las cosas al rubio de cabello largo y después se pusieron a hacer limpieza mientras Gabe llevaba las cosas con una amiga que le haría la cena. Mientras tanto Jorge se bañaba en su habitación o más bien se había quedado allí por órdenes de su amado rubio. Al no ver muros en la costa Luke inició con la segunda fase de su plan; tomó los paquetes de "trocitos de carne para perro" y los destapó, tomó uno de los cojines de una de las sillas, lo abrió y lo empezó a rellenar de carne.

—Joder Luke, que apesta a... ¿Pero qué rayos haces?

—Segunda fase... dejar sin pantalones a Gabe...—respondió terminando de rellenar el cojín y volviéndolo a poner en la silla correspondiente.

—¿Eso no es de una película?—Luke asintió, sin duda las películas daban buenas ideas.—¿Y crees que Boster lo hará?

—Ese perro está loco, cuando tengo uno de estos sobres de carne casi que me arranca el brazo.

—¿Cómo sabes que Gabe se sentará allí?

—Es fácil, la mesa solo es para cuatro personas, mi padre siempre se a sentado en la silla frente a la que tiene carne en este momento, ya que allí se sentaba mi madre, como consiguiente Gabe se sentara frente a él. Bien, ahora para que no noten el olor podré aromatizante automático, así jamás dejará que se apeste.—explicó.—Ven, ahora la tercera y última fase, trae la vaselina.—Jerry obedeció y siguió a Luke hasta el baño.—Pásala...—pidió y este se la dió. Entonces tomó un buen puño de esa mezcla y la embarró en la perilla, luego quitó todo el papel higiénico y por último descompuso el lavado, así una vez que se abriera ya no podría cerrarse. Se limpió las manos y suspiró victorioso.—¿Las cámaras están colocadas?—Jerry asintió.—Perfecto.

—Todo esto me da mala espina Luke.

—Tú no te preocupes, todo saldrá bien.—respondió aquel seguro. Después de haber conectado las cámaras con la PC de Luke se fueron de la casa (o más bien eso le hicieron creer a los mayores ya que se quedaron en el patio trasero con Boster). Cuando Gabe sintió que se habían quedado solos inició con su cena especial.

—Por aquí mi caballero plateado...—dijo sacándolo de su habitación.

—¡Por fin! Ya me estaba aburriendo, ¿Qué tanto hacían todos acá abajo?

—Pues ya lo verás papasito.—dijo mientras bajaban las escaleras hasta la cocina, donde la pequeña mesa tenía algunas velas aromáticas prendidas y una deliciosa cena preparada, todo buen ambientado con la canción "Perfect" de "Ed Sheeran".

—Amor... esto es... hermoso.—dijo Jorge al observar todo.—No debiste...—mientras tanto, Luke observaba todo asqueado desde la PC junto a Jerry, este sonreía.

—Es solo un detalle, pero vamos, hay que probar.—propuso Gabe y eso hicieron, se sentaron para empezar degustar de la comida. El rubio de cabellera larga se sintió algo raro sentado en aquella silla, algo en el cojín se sentía "raro", no le tomó importancia y siguió. Después de haber terminado el plato fuerte Gabe fue por el postre, que era el cóctel de frutas, Luke sonrió maquiavélicamente a verlos comer de su obra maestra. Cuando vió que estaba terminando le indicó a Jerry que fueran por Boster, lo dejarían entrar por la puerta trasera de la casa.

—¡Todo estuvo delicioso mi amor!—inquirió Jorge muy satisfecho y Gabe le brindó una sonrisa.

—Bueno, debo de agradecer a una amiga que fue quien hizo toda esta...—y de pronto un sonido al fondo de la casa le llamó la atención... se escuchaban pasos en el piso... ¿Eran garras?, los dos hombres voltearon a ver al mismo tiempo a la entrada del living a la cocina donde estaba un hambriento Boster viéndolos directamente.—¿Ese... es tu... tu perro?—inquirió nerviosamente Gabe.

—Oh, si... es Boster. Me pregunto cómo se habrá soltado...

—¿Es ino-inofensivo ver-verdad?

—¡Claro! ¿A qué si muchacho?—el perro pareció oler lentamente al aire y entonces su mirada se fijó directa y seriamente en Gabe.—¿Boster?—el perro no lo pensó dos veces y se abalanzó por debajo de la mesa hacia el rubio de cabello largo, tirándolo y mordiendo el cojín, por supuesto Gabe estaba en pánico por el miedo que le tenía a esos animales, aunque Boster no le hacía nada. Jorge no vio ni como se lo quitó de encima y lo sacó al patio trasero nuevamente. Por supuesto; Luke y Jerry se habían esfumado de allí. Cuando el mayor regreso encontró a un asustado Gabe en el living.—¿Estás bien, cariño? ¿Te hizo algo?

—N-no...

—Que bien, no sé cómo entro, la cadena estaba bien, pero alguien le había quitado el collar... aunque la puerta de la cocina está intacta y cerrada.

—Está bien papasito, no pasó nada... sigámonos divirtiendo ¿Va? Tengo algo más preparado para ti...—inquirió más calmado y con una mirada pervertida.

—¡Uy amor! Has sido un niño muy malo y tendré que castigarte...—respondió Jorge tomando la rienda del asunto. Empezaron a besarse en el sillón del living, primero lentamente y luego comenzaron a intensificar el beso y las cosas se pusieron MUY, MUY calientes hasta que...

—Segunda fase... a iniciado.—dijo Luke mientras veía sonriente la pantalla de su PC.

El estómago de Gabe se retorció y él detuvo el beso en aquel instante. ¡No! ¡No ahora Dios santo!—pensó.

—¿Qué pasa amor?

—Creo... creo que tengo que ir al baño, es rápido papasito...—dijo mientras se paraba y otro retorcijón hizo que frunciera la cara.—¡Ya vengo!—salió volando del living a encerrarse en el baño, se sentó en la taza y el espectáculo comenzó.
Luke no paraba de reír al ver a su padre del otro lado de la puerta.

¡Por un demonio! ¿Pero qué comí? Si he llevado una dieta estricta y en su mayoría solo frutas y verduras... ¡Mierda!—pensaba el pobre rubio, entonces se percató de que no había papel higiénico y maldijo su suerte en ese momento.

—¿Todo bien cariño?—inquirió Jorge desde afuera. La vergüenza estaba matando a Gabe en ese momento pero no tenía de otra.

—Amor... ¿Me pasas el papel higiénico?

—Si, claro...—dijo y se escuchó como se iba en busca de lo pedido. Gabe suspiró rendido; su noche se había arruinado con esto.—cariño, abre la puerta para que pueda dártelo.—el rubio se paró y cuando puso la mano en la perilla casi que vomitaba. ¿Pero qué demonios? ¿Qué mierdas es esto?—se preguntó mentalmente al ver aquella mezcla embarrada en la perilla. Iba a ser imposible abrirla, se dirigió al lavado para enjaguarse las manos pero cuando lo iba a cerrar la llave ésta se calló y el agua seguía saliendo y se acumulaba hasta llegar al tope y empezar a caer en el suelo. Para ese momento TODO estaba claro en la mente de Gabe.—¿Cariño?

—Jorge... creo que me he quedado encerrado... y... tenemos un pequeño problema...

—¿Aún quieres el papel?

—Si...—Entonces el mayor le empezó a pasar de poco a poco por debajo de la puerta.

—Iré por la llave del baño... ya regresó... más bien... creo que también iré al baño.—dijo por último el mayor que también comenzó a sentir los retortijones.

Esta me la pagarás malcriado... si quieres jugar sucio pues ¡Que inicie la GUERRA!

CONTINUARÁ.