32_ Hierva mala nunca muere
Se preguntan si estoy muerta. En realidad lo estoy desde el día en que perdí a mi madre, pero físicamente estoy vivita y coleando.
Hierva mala nunca muere.
Lo primero que hice al estar libre fue visitar a Alex. Fue emotivo el momento. ¿Cómo será capaz de no sentir nada, y con él es todo lo contrario? Me conecta a mi humanidad.
Traté de hacerle creer que todo había sido parte de un juego de mal gusto, que no volverá a pasar. Ya me había asegurado de eso.
Deben tener muchas preguntas sobre cómo sobreviví, qué me pasó en la gran mansión y sobre todo cómo estoy libre.
Son las mismas preguntas que Aron se hace.
—No entiendo cómo pudiste escapar. Aron me mira confuso, dejando un basto de leche caliente en mis manos.
Al regresar de casa de Alex y dejarlo totalmente tranquilo, me vine directo a la casa. Entré por la puerta trasera, ya que Aron nunca le pone el seguro. Por el simple hecho de que quién quisiera entrar a robar o con cualquier otro objetivo quedaría muerto al instante.
Lo busqué por todo el lugar, pero no estaba, así que me decidí a darme una ducha. Luego de varias horas apareció, y es así como nos encontramos en esta situación.
Él está mirándome muy curioso, pero puedo jurar de que está feliz. Y yo sentada en el sofá mientras tomo la leche que me ha preparado el don odioso.
¿Quién iba a imaginar que Aron Tamson me estaría cuidando y minando de esta manera?
—Ya te lo he dicho, ví una oportunidad y la aproveché —respondo a su misma pregunta por tercera vez y cambio la vista hacia el televisor y este se sienta a mi lado.
—Me alegra que mi labor como profesor haya servido de algo. —Le sonrió y nos miramos fijamente. —Lamento mucho lo de nuestra última pelea, mentí, si me importas y mucho. La sorpresa se hace visible en mi rostro.
Aron me estaba dejando ver sus verdaderos sentimientos. Ese mismo que se llama psicópata, el acosador, el asesino sin escrúpulos, ese que juraba que no podría nunca sentir.
—Podrías repetirlo. —cometo coqueta y este se enfurece.
—Espero que hayas escuchado bien porque no pienso repetirlo. — Se levanta. —Que descanses.
—No seas odioso, ven —le indicó que se vuelva a sentar y ríese.
—¿Estás buscando una reconciliación a modo cliché?—se acerca y deja un pequeño beso en mis labios.
Pues sí, una reconciliación no es una buena reconciliación si no se tiene sexo después de hablar.
—No sé qué quieras tú, pero yo quiero hacer el amor a lo bestia.
Este me sonríe y comienza a besarme de forma apasionada.
(…)
Esa noche dormimos juntos. Sentir nuestros cuerpos uno al lado del otro, su respiración en mi oído, sus brazos rodeando mi cuerpo. Juro que quería quedarme ahí para siempre.
Han pasado varios días desde aquel trágico incidente; Alex ya se encuentra más calmado y tranquilo; lo bueno de ser un niño es que no le das mucha importancia a las cosas.
En la escuela ya han realizado varios exámenes en los cuales no he dado mi máximo, pero al menos no estoy suspensa.
Enzo se ha convertido en un gran amigo; realmente ha estado en los momentos que lo he necesitado. Siempre con una sonrisa y las palabras adecuadas, como si pudiera leer mi mente o adivinar solo por mis expresiones.
Nos hemos seguido viendo en estos días, aunque a Aron no le hace mucha gracia.
El alguacil sigue vivo, al igual que todos los integrantes de Sol Naciente. Es una larga historia, pero lo realmente importante es que yo también lo estoy.
Nos encontramos en camino al museo. Sí, por fin conocería el famoso museo de luna llena, y por ende conocería a algunos asociados de la hermandad.
Aron se encuentra al volante mientras yo vengo sumergida en mis pensamientos.
Habían pasado tantas cosas con mi vida; estoy segura de que soy el personaje principal, sino ya estaría muerta. Es que mi vida parece una novela: ya necesito calma, necesito tranquilidad, no tantos giros inesperados. Aunque esa calma que tanto busco está un poco lejos de llegar aún.
Habían cosas que debía hacer para estar en paz con el pasado. Y como dicen por ahí, antes de la calma llega la tormenta.
—Hemos llegado. —menciona Aron y me percato que el auto estaba estacionado. — No has hablado palabra en todo el camino. ¿Estás bien?
—Estoy bien.— Sonrío falsamente y me quitó el cinturón de seguridad, para seguido de eso bajar del auto.
Miro hacia todos lados; es una calle bastante hermosa; había pasado varias veces por aquí, pero nunca supe que este gran edificio era un museo, menos que le pertenece a Aron y ni hablar de la hermandad que se esconde tras esta fachada…
No soy de visitar está parte de Morris, pero las pocas veces que caminé por aquí, las grandes puertas estaban cerradas, justo como ahora.
—Está cerrado. —Aron me mira y ríe.
—Para los demás sí, para nosotros nunca. Sube la pequeña escalinata hasta llegar a las grandes puertas y yo sigo sus pasos.
Él deja tres golpes fuertes en éstas y esperamos pacientes. No tardó mucho en que las puertas se fueran abriendo, dejando ver el contenido de su hermoso interior.
Me adelanto y el chico que se encontraba en la puerta hace un saludo.
—Bienvenida —asiento, en forma de agradecimiento, y dirijo mi vista hacia el lugar.
Era realmente hermoso, indescriptible. Todos estamos de acuerdo que la luna es símbolo de belleza; hipnotiza con su presencia.
Imaginen un museo lleno de lunas, en pinturas, esculturas, lienzos, pequeñas manualidades. Simplemente perfecto.
—Es hermoso —me dirijo a Aron y este me besa la mejilla.
—Tú eres hermosa —susurra en mi oído. —Me gustaría sentarme a ver la luna contigo, aunque sé que me distraería viéndote más a ti.
Por primera vez en el tiempo que lo conozco, Aron Tamson estaba siendo romántico. No era su estilo, pero supongo que le cuesta mucho de vez en cuando dejar que sus sentimientos tomen el control.
No sabía qué responder, ya que al igual que él, me costaba expresarme. Éramos tan iguales en tantas cosas, pero si él salió de su zona de confort por un instante, yo debería hacer lo mismo.
—En ese caso, podemos sentarnos y que la luna sea quien nos observe a nosotros ser felices. Sonríe de boca cerrada y luego deja un beso en mi frente.
Algo hermosooo ❤️
ameee escribir esa escena.
¿Qué opinan de que al fin nuestra prota quiera conocer el museo?
Teorías aquí👉🏻
Imágen del museo:
...
No olviden dejar su estrellita ✨
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top