El chico dragón me miró con curiosidad, incluso dedicándome una sonrisa amigable.

—¿Tú eres la dragona de fuera? Eres toda una celebridad en el reino draconico, es la primera vez en la historia que sabemos de un dragón que no nació en el reino.

"Bueno, nací como una dragoncita."

De alguna forma, me sentí algo superada, pero en lugar de desviar la mirada, lo confronté.

—Mi nombre es Kyvran, uno de los príncipes del reino draconico ¿Puedo saber tu nombre?

Tragué saliva, pero traté de no amedrentarme.

—Soy Irmyl E-Esmeralda Lomannes —musité.

—¡¿Tienes un segundo nombre?! —pregunta Selene visiblemente sorprendida.

—Princesa, lo vimos cuando se inscribió —musitó Alysanne.

Kyvran se sujetó la barbilla.

—Encima una dragona con apellido, eso si que es curioso —declara el príncipe dragón—. En todo caso, espero ver tus dotes artísticas, mocosa.

Con eso dicho, nuestro pequeño superior nos envió una disculpa silenciosa mientras nos despedimos hasta luego del almuerzo. Al igual que siempre, el lugar está bastante abarrotado, al menos por las plazas principales.

"Es sorprendente que casi no me tope con nadie, aunque considerando con son cerca de 100 alumnos en total, pues tampoco resulta tan sorprendente".

Por cierto, cuando digo bastante abarrotado, lo digo en estándares de este mundo. Si tuviera que ponerlo en comparación de la gente de mi vida pasada, se queda bastante corto.

De todos modos, por ahora lo importante es comer y luego ir al club para ver qué tal.

—No sabía que Selene era tan fan del teatro —declaré.

Selene infló su pecho con una confianza aparentemente salida de la nada.

—¡Claro que lo soy! Desde niña papá me ha llevado a los mejores teatros de Durkiz —Dijo con una expresión realmente brillante.

—Es la princesa, aunque sea así de extravagante, tiene varios talentos, aunque últimamente parece haberse relajado a tu alrededor —declaró Alysanne.

—Eso no es cierto —comentó Selene.

La miré de reojo.

—¿No es así siempre? —pregunté con sorpresa mirando a Alysanne.

Alysanne soltó un profundo suspiro.

—Entiendo tu incredulidad, pero estás ante probablemente la mayor genio en la historia de Durkiz, incluso se espera que eclipse a los héroes en términos de poder. Es la máxima candidata a suceder al archimago. Desde lo que se sabe, nació con una energía especial que le permite incluso dañar a los dragones con magia.

Tragué saliva, mientras Selene se interpone entre ambas.

—E-Eso no es para nada importante, solamente me gusta la magia y eso es todo —dijo Selene mientras juega con sus dedos.

Solté un suspiro.

—Bueno, no importa lo que termine o no siendo, Selene seguirá siendo Selene ¿No?

—¡Irmyl!

Selene me abrazó con una gran sonrisa.

"Aunque siendo honesta, ¿De verdad es tan increíble? Me cuesta creerlo viéndola actualmente, pero bien dicen que no debes juzgar a un libro por su portada."

Y, justo tras comer, llegó la hora de la verdad, fuimos acompañadas hacia la sede del club de teatro, y como cabía de esperar, éramos las únicas de primer año, además del propio Darwin.

Selene, siendo tan entusiasta como siempre, fue quién lideró el camino.

—¡Vamos, vamos! —Insistió Selene, casi rebotando en su lugar—. Estoy segura de que yo nacía para el escenario.

Selene dijo tal afirmación con una sonrisa inusualmente radiante.

—Una declaración muy audaz, princesa —declaró Alysanne con un tono extrañamente irónico.

Finalmente, llegamos al lugar, ubicado al margen de los terrenos principales, el teatro está rodeado de jardines.

Las puertas se abrieron sin que tuviéramos que decir una sola palabra, como si nos estuvieras esperando. Al cruzar las puertas, nos recibió una mezcla de actividad organizada y caos controlado.

Un grupo de estudiantes practica sus diálogos al fondo, en total deben de ser unos 7 u 8 estudiantes, además de cerca de veinte personas que no tienen el uniforme de la escuela.

"¿Serán de fuera?"

Ciertamente no pueden hacer obras con tan pocas personas.

—Ah, ¿Son chicos de primer año? —Una voz dulce y melódica nos llamó.

Era una hermosa elfa de cabello rubio platinado, con ojos de un verde brillante que se asemejan a un par de esmeraldas. No es particularmente alta, ni tampoco tiene grandes dotes, pero tiene un encanto que me hace incapaz de apartar la mirada de ella.

—L-Linda —musité, antes de taparme la boca y sonrojarme.

—¿Eh? ¿Irmyl? —Selene parece en shock por algún motivo.

Incluso Alysanne parece sorprendida.

—Irmyl, no me digas que... ¿Podría ser que te gusten las chicas? —Me susurró Alysanne en un tono apenas audible.

Nuestra superior nos miró con preocupación, sin saber muy bien que hacer, pero dándonos espacio y tiempo antes de volver a hablarnos.

—Eh... yo....

—E-Eso no podría ser... ¿No estás comprometida? —respondió Selene en un tono igualmente bajo.

—¿P-Podemos hablar de eso en otro momento? —dije sin poder quitar el sonrojo de mi rostro.

Ambas suspiraron y me miraron, como diciéndome que no podría salir de esta sin explicaciones, no parecían que les desagrade por eso, pero si parecían bastante sorprendidas, lo cuál hasta cierto punto debo decir que es doloroso.

Quiero decir, saben que fui un hombre, ¿O acaso lo olvidaron? Creería que se sorprenderían más de que hubiera accedido a comprometerme con Konath.

No, no pienses en eso ahora.

—Lamentamos eso —declaró Alysanne.

—No se preocupen por eso —dijo nuestra superior con una encantadora sonrisa—. Por cierto, yo creo que tu también eres bastante linda.

Aquello me dio un ataque de nervios y acabé por esconderme detrás de Alysanne, ambas me miraron con los ojos vacíos.

"No, no soy ninguna cobarde por esto, quiero decir, siempre lo he hecho ¿No? Soy una cobarde siempre, no sólo por esto."

—Veo que su amiga es bastante tímida, ¿Vienen a inscribirse?

Antes de que Selene pudiera hablar, Alysanne tapó su boca.

—En realidad, todavía tenemos dudas, nuestra amiga está más que dispuesta, pero tanto Irmyl como yo no estamos seguras de si entrar o no —dijo Alysanne.

—Ah, en ese caso ¿No se quedarían a ver una práctica? —dijo con un tono amistoso mientras nos invita a acompañarla.

Nos condujo hacia los asientos del teatro, dónde hay varios estudiantes preparándose para las prácticas del día. Algunos parecen estar revisando los guiones, mientras otros se coordinan con el personal para las luces y efectos de sonido que se hacen mediante algunas especies de gemas mágicas ubicadas alrededor del escenario.

También hay varios sirvientes preparando los vestuarios.

—Mi nombre es Kaylessa —dijo la elfa, presentándose con una leve reverencia—. Yo soy la vicepresidenta del club.

Caminamos hasta el frente, dónde está sentado nuestro pequeño superior mientras parece revisar algunas cosas, a su lado está Darwin quién nos salida efusivamente, como si no fuera suficiente con su altura para hacerse notar.

Y a su lado está un chico similar al príncipe dragón, pero visiblemente más pequeño, aunque sigue siendo un gigante a mi lado. Pero, a diferencia del que a priori debería ser su hermano mayor, su mirada parece ser más tímida.

Los miembros parecen bastante claro, debido principalmente a la insignia en su uniforme, por lo que puedo ver, sólo nosotras tres y Darwin somos de primer año. El joven dragón es de segundo, la señorita Kaylessa es de cuarto, así como el presidente y ese dragón de antes.

Hay otros dos dragones de cuarto año junto con el príncipe, parece ser que les gusta mucho las artes escénicas ¿No?

También en el escenario hay dos estudiantes de tercer año: otra elfa particularmente bella y un chico humano.

—Oh, son las chicas de antes —exclamó el presidente—. Mi nombre es Emer, como pueden ver soy un enano y el presidente del club. Generalmente soy director y ocasionalmente suelo actuar.

Emer se presentó mientras hace una reverencia.

—Es un placer tener a la joya de Durkiz aquí —declaró Emer.

—¿Eh? Jeje gracias —Selene parece algo avergonzada por ser tan alabada.

Cuando la conocí pensé que esto le era bastante típico, quizás porque últimamente se ha juntado más con nosotras que con sus sirvientes.

—Entonces ¿Quieren unirse? —pregunta Emer.

—En realidad, nos gustaría pensarlo un poco más —declaró Selene.

—Las traje para que vean a los demás practicar —dijo Kaylessa mientras sonríe.

Emer sonrió ampliamente.

—Lamentablemente todavía no tenemos ninguna obra asignada todavía, pero pueden ver nuestra práctica general.

Y así, los estudiantes comenzaron a ensayar cada uno por su lado, o en defecto, por parejas.

Durante este tiempo, el ambiente se mantuvo tranquilo, pero también cargado de una atmósfera intensa. Cada uno de los estudiantes tomaba su papel con una dedicación que era rara de encontrar en otros lugares.

Así pasaron las siguientes horas: aprendiendo sobre cómo se organizaban, qué tipo de obras son las que suelen actuar, y cómo los líderes como Emer, el presidente del club de teatro, manejaban la dirección del ensayo.

Emer estaba sentado cerca del escenario, observando atentamente cada detalle, asegurándose de que los movimientos, las líneas y las emociones de los actores fueran entregadas de la mejor manera. Aunque era un enano, su presencia imponía respeto por su actitud seria y su aguda percepción.

—¿Y bien? —preguntó Selene mientras nos enseña un par de formularios.

Alysanne me miró, y yo le devolví la mirada.

"Al menos, creo que es una oportunidad única para superar mi timidez."

Ambas rellenamos nuestro formulario y se lo entregamos a un sonriente Emer.

—Por hoy pueden irse, pero, recuerden que a partir de la próxima semana tendrán que unirse a nuestras prácticas.

Las tres asentimos, y tras eso, tanto Alysanne como Selene se miraron con un extraño fuego en sus ojos.

"Tengo un mal presentimiento."

Las dos me arrastraron fuera de ese lugar ante las incrédulas miradas de nuestros compañeros.

Fui llevada hasta la habitación de Selene, dónde ambas me acorralaron.

—Entonces...

—¿Qué pasa? —pregunté—. Chicas, me están asustando.

—No te hagas la tonta, sabes lo que queremos saber —declara Selene con una sonrisa amable pero, también bastante intimidante.

"No, enserio no sé a lo que se refieren."

Mientras pensaba en ello, una idea iluminó mi mente.

—Ah...

—¿Ya recordaste? —preguntó Alysanne.

—N-No sé a que te refieras —comento mientras desvío la mirada.

"Espera ¿Por qué no solamente se los digo? No debería tener nada de malo."

Quiero decir, ellas saben sobre lo de mi vida pasada.

—Entonces, ¿Te gustan las chicas? —preguntó Selene directamente.

—Um... eso creo —musité—. Digo, debería ser lo normal ¿No? Tengo recuerdos de mi otra vida.. y...

Comencé a jugar con mis dedos y a ponerme más nerviosa a medida que continue hablando.

Selene y Alysanne intercambiaron miradas, como si comprendieran a la perfección lo que está pasando.

—Bueno, cuando lo pones así, tiene bastante sentido —comentó con una sonrisa amable.

—Aunque, todavía eres una niña... me sorprende que ya lo tengas tan claro ¿Has hablado de esto con alguien más?

Niego con la cabeza.

—Para ser honesta, es algo en lo que no había pensado, ahora que soy Irmyl. Pensé que es algo que descubriría en un futuro, no ahora mismo... aunque ahora que lo pienso...

"¿No tuve una reacción incluso peor antes? Cuando recién conocí a mamá Rosa."

Lo pienso y no puedo comprender porque actúe así.

¿Realmente cambié tanto sin darme cuenta? O siempre he sido así.

—Pero, eres bastante audaz, aunque por otro lado ¿Acaso yo no te parezco linda? Me ofende un poco que ni siquiera hayas reaccionado o nada cuando me conociste.

—No, eres bastante linda, pero Selene es una niña aún, y mi primera impresión fue que me querías matar —dije tras soltar un profundo suspiro.

Alysanne acarició mi cabeza.

—Para ser tan poco tiempo, has crecido bastante.

—B-Bueno, es que te imaginé muy diferente y mi hermano... ya tenía a la hermana Maribelle y Elara. Por lo que...

—La princesa ama mucho a sus hermanas mayores —dijo Alysanne en casi un susurro—. Realmente las admira mucho aunque no quiera admitirlo, y por supuesto, también adora a su hermano mayor.

"¿No será Selene una brocon o algo?"

Considerando que es algo similar a la edad media, no me sorprendería para nada.

—¡¿Qué le estás contando?! —Recrimina Selene.

Y así, concluyó una larga primera semana en la academia de magia.

***

—¿Y bien?

—Definitivamente es sospechoso.

Alder miró de reojo a algunos miembros de su profesorado.

—No sabemos cómo, pero es un hecho que un demonio se ha infiltrado, pero incluso si lo sabemos, no podemos detectar su maná, ni ningún tipo de perturbación... es como si no existiera.

Farlon Cedric parece extrañamente perturbado por todo este asunto.

Mientras que Alden se mantiene con los ojos cerrados, pareciendo meditar sobre algo.

Theron Caelum soltó un suspiro por la actitud despreocupada del mago más fuerte de este mundo.

—¿Siquiera está escuchando? —preguntó.

—Por supuesto, pero ¿Qué puedo hacer si no logramos detectarlo? Tampoco sabemos de sus intenciones en este lugar. No se ha movido, ni ha hecho nada, ¿Qué demonios es lo pretende?

Theron miró de reojo a su jefe, antes de encogerse de hombros.

—Solamente dice eso para evitarse problemas.

—Créelo o no, estoy investigando por mi cuenta.

"Dyastri... ¿Dónde he oído ese nombre antes?"