Capítulo cinco: "reencuentro inesperado".

Me di cuenta de mis sentimientos hacia Iori después de nuestro segundo beso, cuando conocí por primera vez a la familia Asahina.

Estaba conciente, pero, lo negué, demasiadas veces. Me sentía culpable, sabía que mi corazón brincaba al tenerlo cerca, entonces, simplemente lo escondí en lo más profundo de mi ser y evitaba pensar en ello; el resultado, huí del país.

Mientras negaba o evitaba pensar en esa "punzada" de mi pecho, hizo que tuviera varios sueños, un poco estúpidos y cursis, que me causaban repelus.

De ellos se trataba que yo corría y corría, y frente a mi, Iori solo caminaba lentamente y con tranquilidad. Era más que nada, que aún que yo quisiera estar cerca de él, nunca lo alcanzaba. Era tan frustrante porque gritaba su nombre y extendía mi mano, pero él no me escuchaba.

—¡Iori, espera! —Después, al aceptar que no lo alcabzaba, bajaba mi rostros, sintiéndome cansada.

Sin respiración.

—¿Estas bien? —y desperté. Levanté mi vista, encontrándome con Iori, quién me miraba un poco extrañado. Su cabello estaba levemente pegado a su frente y un suave color carmín decoraban sus mejillas.

—¿Desde cuando eres tan atlético? —me quejé mientras me reincorporaba y me estiraba, ya que me dolía todo el cuerpo.

—Solo hemos dado cinco vueltas, TN. —contestó con soberbia mientras se tapaba la boca con su toalla, que estaba a sobre sus hombros, para que no viera su risa burlesca.

—Pero a diferencia tuya, yo tengo que soportar dos pesos extras, y es incómodo. —me abracé a mi misma, sintiendo un poco enrojecer mi mejillas—Hay muchas personas... Y me duele la espalda.

—¿"Dos pesos extras"?

—Me sorprende que seas tan limpio teniendo a Kaname, Hikaru y Tsubaki como hermanos. —Iori levemente ladeo su cabeza en forma de no comprender nada.

—¿Eh?

—Ah, no, yo no seré la responsable de arruinarte. —Bufé enojada mientras que él rió sin entender mucho.

Cómo cambia las cosas. Hace cuatro años atrás, corria para mantenerme lejor de él; hoy en día, lo persigo porque trota más rápido.

Hoy era su día libre. Normalmente no me gusta decirle que salgamos o hiciéramos algo en sus día libre, porque se lo cansado que se encuentra. Pero me sorprendió el hecho de que el mismo propusiera que hoy saliéramos a correr a un parque cercano.

Cuando acepté, me imaginé como todas las películas; corriendo juntos con una enorme sonrisa, luciendo conjuntos deportivos lindos y de pareja, en cámara lenta.

Bueno, no teníamos conjuntos a pareja, y él no corre a cámara lenta...

La verdad mi conjunto no está nada mal, es muy lindo...

Pero me condición física es un asco

—Pero bueno, ¿desde cuando eres bueno en los deportes? —pregunté con cierta molestia, ya que si lindo rostro no tenía ni una gota de sudor aún. —Se supone que eres un otaku de la jardinería.

—¿Debería ofenderme? —preguntó sarcástico, por mi lado le saqué la lengua. —Y, haciendo referencia a tu comentario pasado, tengo de hermanos mayores a Natsume y Subaru, se explica solo.

—¿Eh? Pero si el cabeza de zanahoria es un amargado, nunca lo he visto caminar rápido.—dije—De Subaru-san, es posible, pero no eres muy cercano a él.

—Tal vez, pero hubo días, que después de clases, hacía tiros con él. —explicó —Pero eso fue ya hace mucho tiempo. También, estando en la secundaria, pensaba en unirme al club de volleyball.

Okey, eso sí no me lo esperaba.

—¿Enserio? ¿No preferías entrar al club de jardinería? —pregunté pero luego me retracte.—Para empezar, ¿por qué no estabas en algún club?

—Bueno, recuerda que era obligatorio estar en club al menos un ciclo, ¿no? —suspiró—Entré al de jardinería y luego me salí. Después comencé a salir con Fuyuka, más las clases y el trabajo de ayudar en casa, me quedé sin mucho tiempo. —Explicó sin tanta importancia. —En segundo año, empezamos a hacer nuestro trabajo, —golpeó levemente mi brazo con el suyo, con una sonrisa. —¿recuerdas?

—Por supuesto que no. —le sonreí. —¿entonces cuando fue que pensaste unirte a volleyball?

—Ah, fue cuando... —mientras intentaba recordar, paró su caminar. —Ya lo olvidé. —giró levemente su rostro.

—Mientes. —era más que evidente.

—No, por nada importante. —siguió su caminar tratando de mirarme.

—Alto ahí, Asahina. —intenté correr y ponerme enfrente de él mientras extendía mis brazos, intentando impedir su paso. —¿Por qué tan nervioso?

—No es... ¡Oye no pongas esa cara!

Mi arma secreta. Inflar levemente mis mejillas, abrir un poco más mi ojos; mi cara adorable. Hace unos años, no funcionaba, ya que convivía con el pequeño Wataru. Pero ahora, siendo su novia, conozco más sus debilidades.

—¡ya basta! —bajó su rostro avergonzado. —la razón... —suspiró mientras posaba su mano en su nuca. —la razón por la que considere unirme, fue porque pasabas mucho tiempo con Kagari Ryuu en ese tiempo e... Ibas a verlo jugar muchas veces... Entonces, no quería que dejaras pasar tiempo conmigo...

No pude evitar sonreír. Con suavidad, toma su mano y me encogí para que pudiera ver su rostro bajo.

—Eres adorable.

—No digas eso...—suspiró mientras se reincorporaba. —Vamos, demos otra vuelta más. —habló adelantándose intentando cambiar de tema. Yo sonreí.

—Pero primero... —le tomé de la mano, parando su caminar. —¿Me compras un botella de agua?

—Pensé que no te gustaba que gastara en ti. —habló sarcástico.

—No te creas, hoy te la paso porque olvidé mi dinero en mi habitación. —me encogí de hombros. —Por favor.

—Bien, bien.

Segundos después, me estaba dando un billete para ir a la máquina expendedora que no estaba muy lejos de ahí.

—Comprame una a mi también. —dijo mientras se sentaba en una banca y limbiaba su rostro con la toalla que traía.

—Oh, pero no creo que me acabe la mía, ¿no te molestaría tomar de la misma? —hable sin prestar mucha atención. —Sería como si fuera un beso indirecto...

—¿Por qué pedir por uno indirecto cuando yo puedo tener muchos directos? —me sonrió ladino, con un toque pícaro y burlesco.

Evité decir mayor comentario y me dirigí a la máquina.

Suspiré, me siento feliz, pasar tiempo con Iori es increíble. Cada vez que estamos juntos, me hace pensar "wow, pude tener esto antes" se que el tiempo de cada quien es perfecto, entonces puedo comprender el hecho de que tal vez cuatro años atrás, no hubiera sido la mejor idea. Ambos teníamos ciertos problemas que no podíamos dejar.

A diferencia de ahora, pudimos hablar de cosas que tal vez nos incomodaba antes.

—Solo espero que eso nunca cambie. —hablé sola esperando el cambio de monedas en la máquina. Por lo que cuando cayeron, pero por intentar tomarlas, unas de las botellas se me resbaló y salió rodando.

Me lleva. Con la mirada baja me dirijo hacia la botella, que paró cerca de unos pies. Genial, ahora debo paracer un poco torpe.

—Lo lamento. —me disculpé mientras me agachaba a recoger la botella.

—¿TN... chan?

Sentí cierto escalofrío recorrer mi espalda, mientras que por un momento, juré que mi corazón se detuvo. Tragué en seco, con cierto miedo levanté con lentitud mi rostro, encontrándome con esos ojos rojos y cabellera pelirroja. Literalmente, hasta me fui de espaldas, mientras mi boca se cerraba y abría, como si de un pescado se tratase.

—Ryuu...

—Hay cosas que no cambian nunca, ¿no? —al verme en ese estado, sonrió y me extendió su mano para ayudarme a levantarme.

¿ACASO ESTO ES UNA JODIDA COINCIDENCIA?

No me malinterpreten, no es que odie a Ryuu. Si no mal recuerdan, él fue de mis primero amigos, y bueno, a la vez, fue el primer chico que realmente me enamoré. Él era muy amable y su amistad era increíble, hasta que...

—Iori es la persona que amo.

Después de eso, claramente, me alejé. Oigan, necesitaba cuidar de mi dignidad y no tirarla al basurero siempre. Después de eso, estuve agradecida que siempre me ofreciera su amistad, aún cuando ya no éramos tan cercanos. Además, no me podía permitir dejar de hablarle solo por sus gustos diferentes.

¡Pero no me lo esperaba aquí!

Él tomó de mi mano, y jaló, levantándome del suelo. En su tirón, terminé entre sus brazos aprisionandome en ellos sin escapatoria. Creo... Qué me falta aire.

—¡Pero como te he extrañando! —se separó de mi, pero su agarré estaba en mis hombros—¿Qué pasó? ¿Por qué te fuiste y sin despedirte? Te pasé buscando y llamando por semanas, me tenías preocupado ¿Cuando regresaste?

—Eh, si. —sería mentira si dijera que estaba prestando atención.

Estaba más alto, y un poco más delgado. No ha cambiado casi nada.

—Solo mirate, estas tan hermosa~. —me soltó de los hombros para tomar de mi mano y me dio una vuelta.—¡Qué guapa!

PAREN TODO.

Si alguien es complicado entender de gustos es a Ryuu con su maldito cosa de: "las gustos cambian".

—Gracias... Supongo. —dije soltandome y brindado una pequeña sonrisa incómoda. —Es bueno verte, y regresé hace como dos meses, tal vez.—Suspiré —¿Cómo te ha ido?

—¡Bien! —contestó energético como solía ser. Sonreí al recordar su versión más joven. —De hecho, ¿Por qué no vamos un café? Podríamos hablar y... —de nuevo, cambió su voz a un tona más bajo y ronco mientras me sonreía de lado. —Ver qué pasa, ¿qué piensas?

Bueno, ¿a usted le gusta las manzanas o papayas o naranjas? Había muchas razones para negarme su invitación con otras intenciones. Número uno, tengo novio; número dos, él estaba enamorado de mí actual novio; Número tres, soy hetero y él no mucho... ¿Solo a veces?

—La verdad es...

—Viene conmigo. —la voz seria de Iori sonó a sus espaldas, yo por mi lado me volví congelar.

Hay dos preguntas del millón, ¿como va a reaccionar Ryuu? Y ¿Debería estar celosa o no?

—Pero bueno, ¡esto si no me lo esperaba! —habló Ryuu mirando a Iori, quien tambien se quedaba en blanco y hacía cierta mueca.

¿Recuerdos de Vietnam?

—¿Kagari-senpai? —dijo Iori en un hilo de voz. Quería reírme.

—Venga Iori, ya no estamos en la secundaria. —rio, negando con la cabeza. Entonces, él paró su risa y nos dirigió su mirada a mi y luego a Iori, para después volverme a mirar nuevamente. —¡¿Eh?!?, ¡¿Usted dos juntos?!

—Larga historia.—contesté con cierto rubor en mis mejillas.

—No es tanto. —corrigió Iori para ponerse a mi lado, mientras tomaba mi mano. —Estamos saliendo.

¿Está celoso o está mostrando que no es candidato?

—¿Enserio? —asentí. —Vaya, al final te decidiste, TN-chan. Felicitaciones a ambos. Sabía qué era cierto que te gustaba.

—¡No en ese momento! —Ryuu rió.

—Se ven bien juntos. —dijo con una sonrisa, para luego acercarse a nosotros para susurrar. —¿Es una relación abierta? Podría unirmeles si es que se puede.

...

Es la primera ves que escucho algo así.

—Iori, te ves bien. —habló nuevamente, para guiñar su ojo cómicamente.—El pircing y el nuevo look te lucen. Te he visto en varias portadas, eres un increíble modelo.

—... Gracias...—si de por sí Iori es callado, esta vez realmente está avergonzado.

—Lo mismo te digo, TN-chan,—me sonrió. —Te ves muy hermosa.

—Gracias, Ryuu.—él asintió correspondiendo.

—Bueno, bueno, ya vine a estirar las piernas, debo de regresar. —nos comentó mientras estiraba sus brazos y sacaba su teléfono.—¿Cambiaste de número, no?—me extendió el dispositivo pidiendo mi número al cual no le negué.

—Fue bueno verte Ryuu. —y no mentía, él realmente me agradaba.

—¡Lo mismo digo!

Después de la pequeña despedida, él giró en sus talones, dándonos la espalda. Con Iori soltamos un suspiro al mismo tiempo. Estaba tenso esto.

—¡Ah, una cosa más! —Ryuu ya estaba a un par de metros alejados de nosotros, giró levemente su rostro para que podamos ver su perfecto perfil mientras hablaba. —Espero y podamos salir en alguna ocasión. —y giñó su ojo, coqueto, con una sonrisa ladin, para luego seguir con su camino.

¿Se puede considerar un hetero panic?

Volví a dirigir mi mirada a Iori, quien él, igualmente, volteó a verme.

—Se refería a ti, ¿no?

Dijimos a la vez mientras nos señalaba mutuamente.

—No, no, no... —habló Iori. —Te miraba a ti.

—Pero te sonrió a ti. —respondí.

Seamos sinceros, esta situación es un poco rara. Después de un si segundos, no comenzamos a reír. Esto no se ve todos los días.

—Mejor regresemos.—propuso él.

—Concuerdo.

Capítulo 5.5 (Especial): "Familia Asahina"

Hey listen! 🌠

Pero bueno, aquí también existe los rellenos.
Okey, si me dio risa JAJAJAJA.
Además, la inspiración me la dio la imagen de allá arriba :D

La verdad es que en un principio, cuando estaba estructurando el libro, no estaba para nada planeado que regresara Ryuu. De hecho, en un principio, que la mayoría de personajes de la primera temporada reaparecieran; Porque, al tener que manejar a la familia Asahina, son demasiados personajes y no quería saturar el libro.

Pero bueno, hace tres meses, se me ocurrió este escena y pos, la agregué xdxdxd. Pero dudo que vuela a aparecer Ryuu.

Quiero dejar la sexualidad de Ryuu al abierto. A veces hetero, a veces no 7u7r. JAJAJAJA él tiene más problemas de identidad que yo de mentalidad :D.

En otras noticias, por primera vez, me desagrada tener "clases" de dibujo 😔. Lo digo entre comillas porque mi docente en si no me enseña nada pero es muy malo en cuanto dar notas, a puras penas estoy pasando la materia :((((( y eso me está poniendo muy triste.

Pero bueno, que le vamos hacer.

Btw, qué les pareció? 👀
Agradecida con el de arriba, porque la otra semana tengo vacaciones 😎.

Por ciertoooo en este libro, a diferencia del anterior, estaré agragando capítulos espero que más cortos como especiales que no quisiera incluir en la historia oficial. Por ejemplo, el próximo capítulo se trata de cómo TN volvió a conocer a la Familia Asahina 7u7r.

See you in the next time,

Serenacast; A