Tras el movimiento que tuvimos hasta las casi 7 de la mañana, nos vestimos y desayunamos lo que ya se había quedado frío, pero sinceramente nos daba igual. Ambos estábamos subidos en un cohete que no paraba de ascender, éramos felices en ese momento, después de ese pedazo de polvo.
-Ahora mismo me pediría el día libre en Ducati, con tal de pasar el día contigo.
-Lo mismo digo, pero tengo una entrega a las 12 y tendré que hablar con los profesores para el fin de semana en Portugal.
-Me encanta que hayas decidido venir -se levantó para abrazarme-, eres la mejor -besó mi frente.
-Tengo muchas ganas la verdad, aunque si te soy sincera me da mucho miedo la prensa.
-Me da miedo hasta a mí, pero no te preocupes. Hablaré con los de Ducati para que esto no se vaya de madre en ningún momento y ambos podamos disfrutar -salió del cuarto, camino a la ducha y por el camino se le oía-. Sigo queriendo besarle si gano la carrera.
-Yo quiero besarte aunque no ganes -dije mientras le perseguía hasta la ducha-, quiero besarte siempre, das muy buenos besos -me acerqué a él y le besé, hacía mucho que no sentía sus labios-.
En ese preciso momento, entró Nicola por la puerta quien se quedó flipando por lo que acababa de ver, en verdad al no estar en casa, no le pude contar lo que pasó estos dos días y ahora estaba blanco del susto.
-Bueno chicos, voy a mi cuarto y no molesto eh. Venga chao.
Me apoyé en el pecho de Pecco y empecé a reír como nunca, esa situación me había hecho muchísima gracia y no podía superarlo, hasta a él le hizo gracia, quien al oírme empezó a reír también.
-Bueno voy a ducharme y así paso un rato contigo antes de dejarte en la universidad.
-Puedo ir sola, no quiero que te reconozca nadie y sea muy incómodo.
-Déjame llevarte, no quiero que vayas andando o en bus cuando te puedo llevar en coche. El Chófer Bagnaia a su servicio.
-Me fío de usted Chófer Bagnaia.
-Gracias amore, ahora sí me voy a la ducha -dijo para después besarme y entrar al baño.

....

Estuve recogiendo todo lo que necesitaba para la universidad y me vestí, nada serio en realidad, con unos pantalones anchos y una camiseta ajustada más unas zapatillas era feliz. Cuando Pecco salió del baño y entró en mi habitación, no puede evitar mirarle a través del espejo. Seguía sin creerme que ese adonis italiano era mi novio, que él estaba enamorado de mí y que había hecho todo lo que pudo estos 4 meses para que yo me fijara en él. Era una chica con muchísima suerte. Ese cuerpo mojado, envuelto en una toalla por al cintura y lleno de lunares, era mi nueva debilidad.

Cuando ambos estábamos vestidos y listos para salir, nos encaminamos a la puerta. Salimos de mi piso dados de la mano y así bajamos las escaleras, a decir verdad, el pasillo era muy estrecho pero yo iba delante y él sin dejar mi mano ni un segundo, iba tres pasos detrás de mí. Llegamos al coche y este chico es un encanto, quitó mi bolsa de mi hombro para ponerla en el asiento trasero además de abrirme la puerta.

-No hacía falta tanto servicio.

-Te dije que te iba a llevar y mis servicios son completos señorita.

-Madre mía Pecco -reí- estás fatal. Arranca el coche anda.

-Marchando.

El camino estuvo lleno de risas, de canciones y por supuesto su mano en mi muslo mientras conducía, yo insistía en que pusiera las dos manos en el volante pero él reía y me decía que era piloto de MotoGP, sabía de sobra como conducir por el centro de su ciudad natal. Aparcó en la puerta de la facultad y nos estuvimos besando un buen rato. Disfrutamos de los últimos momentos juntos hasta saber cuando, entre los entrenamientos y mi fin de curso a lo mejor pasaba media semana sin verle.

-Pasa buen día, te quiero.

-Te quiero mi piloto favorito -dije haciendo referencia a cómo me despedí cuando nos conocimos y me llevó a casa después de la exposición.

-Me encanta esa frase desde el primer día que la dijiste -me atrajo por la nuca para besarme y en medio del beso, oímos unos golpes en el cristal.

-Hola parejita, ¿qué tal? -dijo Luccia tras llamar a la ventana-. Vamos pelirroja, que tenemos clase -le di un último beso a Pecco y salí del coche para abrazarla-. Adiós turinés, pasa buen día.

-Adiós guapas, luego hablamos, buen día.

Nos adentramos en el edificio y fuimos a clase. Luccia para mí es lo mejor que tengo, es quien me ha ayudado a estar bien y a estar en paz en un país nuevo. Me ha acogido como su hermana, es mi amiga y mi mayor apoyo. La quiero un montón y mi vida sin ella no sería igual. Llegamos al aula abrazadas por el hombro y riendo, al entrar nos separamos y nos sentamos juntas para compartir el material de estudio, había veces que yo hacía los apuntes y ella buscaba fotos o al revés. Luccia levantó la cabeza y puso una cara de asco que podía jura que iba a vomitar en cualquier momento.

-Tía, ¿qué te pasa?

-El hijo puta de Angelo que desde que hemos entrado no para de mirar para acá, le voy a matar.

-Tía pasando. Yo llevo tres días muy feliz y nadie me va a cambiar el humor, menos este gilipollas.

-Dilo reina -dijo para levantar su mano y chocarla con la mía.

La clase pasó bastante rápido y eso me permitió irme nada más sonar la alarma a la reunión con mis profesores para hablar del viaje a Portugal. En general, mis profesores eran muy agradables y dadas mis notas, no dudo en que hubiera ningún problema.

....

-De lo que yo quería hablarles es que el jueves y viernes de la semana que viene no voy a poder acudir a sus clases ya que me ha surgido un viaje.

-Comprendo su situación González y dadas sus calificaciones no creo que sea un problema. ¿Están conmigo claustro? -el resto de los profesores asintieron y depositaron enfrente de mí varias carpetas con las tareas pendientes.

-No es necesario que las entregues en estos días, con que lo mandes por correo cuando termines nos vale, eso sí, cuando vengas nos lo tienes que entregar -habló mi tutor en nombre de todos.

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Salimos de clase y fuimos a pasar la tarde en el centro comercial, teníamos que comprar unos libros y materiales para los últimos trabajos, así que ya aprovechamos y podía elegir algo para el viaje. No tenía ni la más remota idea de que ponerme, quería ir cómoda, ya que es algo que valoro mucho pero también quería ser elegante por dar una buena imagen ante la prensa y la marca. Estaba hecha un lío.

Nuevo capítulo de Pecco y Amelia. Esto avanza muy bien y dado que me gustó como quedó el capítulo anterior, he decidido que habrá más escenas +18, preparaos porque se viene. Muchísimas gracias por leer y por el apoyo, os quieroooooo