—No conseguirás nada aquí.

— ¿Qué? ¿Por qué?

Sierra ensancha las fosas nasales. Parece molesta. No entiendo porqué. Y parece ser que ella tampoco entiende que necesito verla.

— ¿Por qué? —Exclama, burlona—. ¿Te parece poco el abandonarme por la vagabunda?

Oh, vaya.

Pienso en mil maneras de decirle, que sí no lo hubiera hecho estaríamos en problemas. Pero en vez de eso, suspiro.

—Te necesito —dije al fin.

—Vete a la mierda —Cierra la puerta de su casa contra mis narices.

Aprieto los ojos. Y mentalmente maldigo a la vagabunda, como ella le dice.

Sólo un tonto dejaría a Sierra por ella. Tenía toda la razón en sentirse ofendida.

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Nota: Estuve un poco perdida. Pero ya encontré de nuevo el hilo. Actualizaré más seguido, ¡os amo!

Les agradecería su apoyo, con sus comentarios, especulaciones y votos. Los leo todos:)