El sonido del choque de espadas resonaba por el patio, Euron junto a Miércoles luchaban manteniendo a raya a Kronk quien estaba ahora a la defensiva. A pesar de tener solamente un ojo por la herida provocada por Tn, era muy bueno y se defendía bien. Atacaban a la par logrando una sincronización buena o atacaba uno y luego el otro evitando así que Kronk pudiera contraatacar. Aun así, estaban demasiado parejos.

—No está nada mal—dijo el hombre—. Pero todavía no he terminado.

Empezó ahora un ataque mucho más rápido y fuerte haciendo que retrocediesen unos cuantos metros. Parecía que en ese momento se lo estaba tomando un poco más en serio.

—Ese chico...después de mataros, le mataré—dijo con una sonrisa provocando a la pelinegra.

—No le tocarás, y pagarás el haber lastimado a mi mayordomo—replicó la joven con cara enojada—. nadie toca a mi mayordomo.

—Oh...el amor...la debilidad de toda persona—atacó a la pelinegra con unos cuantos golpes antes de retroceder para evitar los ataques rápidos de Euron.

Ahora tomaron una breve pausa para recuperar el aliento. Miércoles veía que era demasiado fuerte, superaba sus expectativas y la habilidad de la espada era increíble. Para la joven era como si se lo estuviese tomando como un entretenimiento para ponerla a prueba junto a Euron.

—¿Ya estás cansada? —le preguntó con una gran sonrisa—. Todavía estamos calentando.

—Es más fuerte de lo que creía—el hombre se colocó junto a su compañera—. ¿te encuentras bien?.

—Si, no soy débil.

Miércoles recordaba como el hombre había herido a su chico y empuñó el arma con más fuerzas que antes atacando de la mejor manera posible. Kronk se sorprendió tanto que perdió el equilibrio unos segundos, momento que aprovechó la pelinegra para devolver el golpe que le había dado a Tn incrustando la espada en su pecho. Una gran cantidad de sangre brotó de éste mientras gritaba de dolor.

La pelinegra se alejó unos cuantos pasos y vio que el enemigo cambió el gesto de su rostro por uno de normalidad. La herida se curó casi enseguida.

—Eso ha dolido, pero mi cuerpo es duro—comentó mientras caminaba relajado.

—¿Algún plan? —Euron miró a la chica.

—Si, atacar hasta que no pueda regenerarse.

Ambos respiraron para recuperar fuerzas y enseguida se lanzaron de nuevo a atacar ante Kronk quien sonreía emocionado pues hacia mucho tiempo que no se sentía así de emocionado ante un combate. Y más viendo que eran dos contra uno.

Mientras tanto, Enid estaba tratando a Tn quien estaba ya sin camisa y con un vendaje. Estaba cansado y se le veía en los ojos la frustración de no poder hacer nada por ayudar. La loba le dio un beso en la mejilla diciendo que había hecho más que suficiente hiriendo a ese idiota y ganando tiempo para preparar el arma.

—Enid...necesito pedirte algo—dijo tomando su mano.

—¿De qué se trata?—preguntó ella sentada a su lado.

—Ayuda a Miércoles—respondió—. ve a ese cajón de allí—señaló un lugar no muy lejano.

Ella abrió el cajón y vio unas granadas. Aunque estaba acostumbrada a las cosas peligrosas de su roomie, aquello lo superaba con creces.

—Se las quite a la señorita Addams—soltó una leve risa que acabó en quejido para el dolor—. quiso usarlas. Ahí al lado hay unas que compre...son de humo. Aprovecha el momento adecuado para golpearlo duro...se puede regenerar, pero eso debe consumir poder y creo que podría llegar el punto donde lo agotarían tanto para volverse vulnerable.

—¡Es una excelente idea!—exclamó ella—. ¿y por que no las ha pedido ella?.

—No recordó que se las guardé.

Enid asintió y las cogió para acto seguido marcharse al lugar donde estaban peleando. Su plan era esconderse para lanzar la granada de humo en el momento adecuado.

—Has luchado bien—dijo Bianca—. me quedaré aquí para asegurarme de que estás bien. Además, odio admitirlo, pero tu chica pelea mejor que yo. No podría hacer nada contra Kronk.

—Bueno, tú tampoco peleas nada mal—aguantaba por no cerrar los ojos.

—Duerme un poco, confía en nosotros—le dijo Bianca.

Al poco apareció Xavier diciendo que también iría a pelear con su arco. Estaba con uno más profesional y flechas más fuertes, podrían atravesar a un jabalí. Tn asintió y cerró los ojos para no tardar demasiado en quedarse dormido debido al agotamiento y la medicación.

Enid estaba preparada, miraba desde su posición a Miércoles ya algo cansada por el esfuerzo. 

—Aguanta roomie—pensó antes de quitar la anilla.

Cuando vio el momento oportuno, lanzó la granada sorprendiendo a los presentes. Enseguida la pelinegra y el hombre reconocieron de que tipo era así que retrocedieron. Una capa de humo salió de ella haciendo que Kronk no pudiera ver. Enid corrió antes de transformarse por completo y lanzarse contra el oponente. Con sus zarpas hirió a este quien gritó de dolor pues aunque podía regenerarse, podía sentir el dolor.

El humo pronto se disipó y en ese mismo instante una flecha se clavó en el brazo de Kronk. El vidente esbozó una sonrisa antes de dispararle otra que logró esquivar. Enid usó ahora sus colmillos antes de dar un salto y esquivar un espadazo del hombre.

—Esto se pone cada vez más emocionante—comentó eufórico.

Kronk esquivó ahora a Enid y luego un ataque de Xavier. También detuvo con su espada el ataque de Miércoles y se agachó para evitar que Euron lograse impactarle. A pesar de la superioridad numérica, el hombre no daba muestras de debilidad, algo que preocupó a la pelinegra que esperaba lograr dejarle algo más cansado.

—Cuatro contra uno eh...¡me encanta!—exclamó emocionado—. voy a mataros uno a uno, disfrutaré viendo como Miércoles, a quién mataré la última, contempla la muerte de todos y cada una de las personas que quiere.

—No tocarás a mi roomie, antes de mataré—amenazó Enid.

—Ten cuidado Enid—dijo la pelinegra—. es más fuerte de lo que aparenta.

Euron se lanzó a la carga, atacando con fuerza y valentía a Kronk quien mantuvo el duelo hasta que vio una oportunidad. Con el pie, hizo tropezar a este antes de hundir la espada por la espalda del hombre. Euron cayó al suelo vomitando sangre y muy malherido.

Miércoles se acercó mientras Enid y Xavier atacaron para mantenerlo distraído y lejos.

—Miércoles...lo siento, hay algo que no te conté...—dijo éste.

—¿Qué es?—se acercó y él le susurró algo sorprendiendo a la joven.

—Por favor...debes hacerlo—le apretó la mano—. es la única forma, tanto él como yo...no somos de está época, el futuro les pertenece a ustedes.

A pesar de la herida y cerca de la muerte, Euron sonreía feliz.

—Es mi destino—dijo mientras Miércoles sacaba el cuchillo.

—Me aseguraré de matar a ese desgraciado—contestó ella aguantando el tipo.

Miércoles hundió el cuchillo en su cuerpo dando muerte al hombre. Tras sacarlo, una pequeña luz verde brilló y se fundió con el arma...ahora estaba completa.

Continuará...

Espero que les haya gustado.

Un saludo.