Pov. Jack

Me quedé ahí mirando a Héctor sin decirle nada. Lo que me dijo la verdad si me dejo sin palabras. No sabía que él en verdad me quería, pensé que solo me usaba para su propio placer y que no habría sentimiento alguno. Como si fuéramos amigos con derechos y ya. Nunca pensé que al irme en verdad le estaría causando algún dolor ya que un pirata no está acostumbrado a sentir ese tipo de cosas, y eso que Héctor es un pirata que si tiene experiencia en el mar y uno de los más reconocidos y respetados.

Me voy acercando un poco a él mientras que juego con la cinta que usaba en mi frente entre mis manos y con la mirada baja. Cuando llegó a su lado solo me quedo mirando al suelo y luego lo veo de reojo aun sin decir nada.

Barbossa: sé que me vas a decir. – dijo mientras no dejaba de ver por la ventana.

Jack: así? – dije mientras lo miraba.

Barbossa: vas a decir que no importa lo que pasó con nosotros antes, que eso solo quedó ahí y que no quieres caer en el mismo juego sin sentido. Quieres seguir adelante, seguir tu propio camino y encontrar tus propias respuestas. Quieres estar con alguien más, alguien que te pueda sacar de este juego del destino, Y crees que ese alguien es Tarrant. – dijo mientras me miraba a los ojos una vez más – piensa s que él te podrá sacar de esta vida ruin que solo te pone en riesgo cada día que pasa, piensas que él es la cordura que creías perdida, que él es que te sacará de este abismo y que no te dejará caer en la misma trampa una y otra vez.

Jack: si eso es lo que piensas, porque quieres alejarlo de mí?

Barbossa: - él se quedó mirándome por un momento para luego mirar a otro lado – porque yo también planeaba sacarte de todo esto Jack. Quería darte una vida segura donde no tendrías que poner en riesgo tu vida por cualquier cosa. Pero, eso es imposible. – Dijo para verme – soy un pirata, y el peligro siempre me perseguirá. – dijo para luego quitarse de la ventana y tomar un chaqueta pero cuando se la iba a poner sólo se quedó ahí parado sin hacer nada.

Yo voy a donde está el y me quedo ahí parado a sus espaldas por un momento para luego abrazarlo por detrás. Cuando hago eso, cierro mis ojos y recuerdo todo lo que Héctor hizo por mí. Quizás tuvimos nuestra rivalidad en un tiempo, pero debo admitir que sin él, yo no estaría donde estoy ahora.

Siento como él pone su chaqueta una vez más donde estaba para luego posar una de sus manos donde estaban las mías juntas.

Barbossa: amas a Tarrant? – me dijo mientras yo seguía detrás. Levantó la mirada y luego veo que él me ve de reojo.

Jack: - me quede callado por un momento para luego responder – sí. Más de lo que yo creía.

Barbossa: ok. – dijo para luego hacer que yo lo soltara y él va por una pistola y me entrega. – dispara cuando quieras. – dijo mientras se quedaba ahí al frente de mí.

Jack: qué? – dije con el arma en mis manos.

Barbossa: quieres estar con él, y ahora por mi culpa Tarrant está en grave peligro. Quieres cambiar Jack, pero yo no te dejo. El único obstáculo que ahi entre tú y el......soy yo. Soy tu pasado, y es hora de superar el pasado capitán Jack Sparrow. – cuando me llamo así, yo me quede mudo. Era la primera vez que me llamaba con mi nombre completo y con la palabra capitán.

Me quedo ahí parado mientras tenía el arma en mis manos. En un momento solo la preparó para disparar lo cual veo a Barbossa y el no muestra expresión alguna.

Jack: no vas a hacer nada? – dije mientras apuntaba un poco pero no muy seguro.

Barbossa: creo que mi tiempo ya termino. Quiero que seas Feliz Jack, y por eso yo tengo que irme.

Jack: quieres....que sea feliz? – eso si me impresiono.

Barbossa: veo que cuando estas con ese muchacho, no eres como los demás te ven. Eres tú mismo. Te sientes libre, libre como un gorrión. Solo te estoy facilitando la entrada a esa libertad. – dijo mientras no se movía de su lugar y esperaba mi disparo.

Levantó un poco mi mano mientras está tiembla. Nunca antes me había temblado la mano a la hora de disparar, era como si no quisiera hacerlo. Veo a Barbossa y este parece que ya aceptó su destino.

Ahí, yo cierro los ojos y disparó.

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Barbossa: pero qué? – el vio que el disparo dio es a una silla al fondo de la habitación y la bala ni lo toco. – pero Jack.... – no deje que terminara de hablar ya que suelto la pistola y voy y le doy un abrazo.

Jack: quizás ya sea tarde.....pero no puedo seguir sin ti. Es cierto, amo a Tarrant y no dejaré de hacerlo, pero....tú también eres una persona importante para mi Héctor. Quiero que estés ahí para que me sigas ayudando, porque....a veces aun me siento como ese chico que conociste ese día. – dije mientras sentía que mi orgullo y fortaleza se desvanecen.

Barbossa se quedó callado en ese momento y luego el solo me acaricia el cabello con una de sus manos lo cual causa que yo me sienta un poco mejor.

Barbossa: mi pequeño Gorrión. - dijo para luego corresponder mi abrazo – te ayudare en lo que sea y si veo a Jones, te juro que cancelare mi trato con él.

Jack: sabes cómo es él con los tratos. Nunca los dejará hasta que tenga lo que quiere o las consecuencias serán fatales.

Barbossa: lo sé, así que estoy dispuesto a pagar el precio necesario. – dijo para luego mirarme. – fue un gusto estar contigo Jack.

Jack: lo mismo digo Héctor. – dije mientras no para de verlo lo cual el solo me da un último beso para sellar nuestro curso juntos.

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Pov. Tarrant

No sabía que había pasado después que escuche esa melodía la noche cuando estuvimos en esa isla. Era como si me hubiera quedado inconsciente de mí mismo por un momento.

Cuando voy despertando veo que no me encontraba en el camerino de Jack, ni tampoco en la planta baja del perla, ni en ningún lugar que se pareciera al barco de Jack. Cuando me voy despertando, no veo la luz del día. Todo estaba oscuro en ese lugar. Estaba acostado en una cama grande pero esta estaba un poco mojada.

Voy abriendo los ojos y me doy cuenta que la habitación en la que estaba no era la de Jack. Veo que había algunas mesas con velas en el lugar y también una detalle que me pareció muy curioso. Avía otras de moluscos en varios lugares. Me voy levantando de esa cama y veo que su diseño era como arrecife de mar pero de tonos sombríos. Me volteo y veo que en el fondo de la habitación había un gran órgano. Era muy grande y muy peculiar. Hasta llegaba a dar terror.

Tarrant: este no es El Perla negra. – dije mientras miraba todo a mi alrededor.

Intentaba recordar lo que paso pero no podía. Solo me acordaba de esa melodía y luego no tenían ningún recuerdo. En un momento cuando me siento en esa cama y veo todo, siento un escalofrió en mi cuerpo. No me sentía cómodo estando ahí, ni sabía de quien era esta habitación. En un momento, siento que algo me sube por el brazo. Cuando veo, me doy cuenta que se trataba de una especie de babosa marina que estaba subiendo. Yo me altero un poco para luego quitarla de mí y luego levantarme de esa cama.

Cuando ya estoy parado, comienzo a ver si encontraba una salida de ahí pero se ve que estaba atrapado. En un momento, siento como el barco comienza a avanzar lo cual navegaba de una manera violenta y ruin por el mar. Era tan fuerte que casi me caigo lo cual veo como ahí algunas criaturas marina que salen de los lugares oscuros y me ven. Yo en asustó y solo me dirijo a la puerta de salida.

Cuando salgo de ese lugar, veo el infierno en el que estaba.

Veo que era de noche y el mar estaba muy agitado en donde nos encontrábamos. Veo que los hombres que estaban ahí eran los mismos que vi cuando Jones me atrapo en Infratierra. Un terror como ningún otro invade mi cuerpo al ver tal infierno. En ese momento, me di cuenta que me encontraba, en El Holandés Errante.

En un momento empieza a llover pero nosotros seguíamos. El barco se movía mucho lo que me dificulta mantenerme de pie. En un momento me balanceo y chocó contra alguien. Yo me aparto y luego él se voltea y era uno de esos hombres.

Tripulante: valla valla valla, miren lo que trajo la marea – me dijo mientras me miraba de manera sínica y también mientras se acercaba a mí. – te perdiste niño? – me pregunto pero yo no respondo. Solo tomo un cuchillo que tenía y se lo clavó en la pierna para luego salir corriendo de ahí.

Cuando bajo, siento como el agua del mar me pega en la cara y también por la lluvia. Voy corriendo sin rumbo alguno para luego toparme con varios de esos monstruos. Retrocedo y solo me encuentro con algunos que estaban tirando de una soga lo cual yo causo que se les caiga lo que estaban subiendo y ahí, todos me miran.

Tripulante: que es esto?! – dijo uno que parecía un tiburón martillo. – este chico otra vez?! – mientras dijo eso, otro me sujeta por detrás lo cual hace que no pueda correr. – se ve que el capitán escogió un buen rehén. – dijo mientras me examinaba detalladamente.

Luego, siento como el que tenía atrás comienza a sujetarme con las fuerza mientras se acerca a mi cuello.

Tarrant: ¡suéltame monstruo! – dije ya un poco enojado lo cual veo como el que tenía al lado me da un solo golpe en el rostro lo que genera que yo caiga en el suelo.

Tripulante (1): dime, cómo se siente su piel? – dijo el que me dio el golpe.

Tripulante (2): es muy suave y tiene un cuerpo lleno de vida – dijo el que me estaba sujetando hace un momento.

Tripulante (3): de seguro nos hará sentir vivos otra vez. – dijo uno para luego sentir como me levantaban del suelo. Escuchaba sus risas lo cual eran desagradables. Veo que el que se parecía a un tiburón martillo se acerca con una sonrisa para luego verme de pies a cabeza.

Tripulante (1): se ve que tienes potencial niño. – dijo mientras posaba una de sus manos en mi rostro lo cual yo hago que me suelte mientras tenía una mirada de ira.

Tarrant: ni te atrevas a tocarme maldito monstruo asqueroso. – dije con el ceño fruncido. El solo me pega una sola bofetada en la cara lo que género que yo voltear.

Tripulante (1): parece, que alguien necesita aprender modales. – dijo para luego sentir como me llevaban a otro lugar de la cubierta.

Luego, veo que le dirigen al mastín del barbo lo cual ahí me ponen mientras me  sujetaban las manos y me las amarran alrededor de esa cosa. Yo intentaba liberarme pero se me era imposible, sin mencionar que habían muchos tripulantes ahí que no me dejaban en paz. Cuando me sujetaron las manos bien, ellos se paran detrás de mí mientras que yo solo podía ver a ese tronco de madera en el que estaba atado.

Tripulante (1): que puedo hacer contigo ahora? – dijo para luego sujetar la camisa que tenía puesta y rasgarla de una sola dejando mi espalda al descubierto.

Tripulante (2): piel blanca cual luz de la luna.

Tripulante (1): y una silueta irresistible. – dijo el mientras se me acerca y se podía sentir como sus manos se posaban en mi espalda. Yo intentaba moverme para desatarme pero no podía.

Tarrant: ¡maldito cerdo asqueroso! – dije mientras que vi que estaba cerca de mí y le daba un golpe con mi cabeza lo que género que él se apartara.

Tripulante (1): ha! Ya verás niño! – dijo para luego darme otro golpe pero esta vez en la espalda lo que género que yo casi no pudiera mantenerme de pie.

Sentía un golpe tras otro y no solo en mi espalda, sino también en mi cabeza y piernas. En un momento ya no sentía fuerzas y me dejo caer en el suelo aun con mis manos amarradas en ese mástil. Sentía como el cuerpo me temblaba y también como las lágrimas salían de mis ojos. Ya ni tenía fuerzas para defenderme.

Tripulante (1): así está mucho mejor jajajaja – dijo para luego ir a donde yo estaba tendido. – ya no eres tan valiente verdad? – me dijo con un tono malicioso lo cual yo solo frunzo en ceño ante su pregunta.

En un momento, escucho como todos esos monstruos se acercaban a mi mientras reían lo cual, por un disparo pararon su andar. En un momento yo suelto un suspiro de alivio para luego escuchar que alguien se aproximaba. El que tenía muy cerca de mí se levanta y yo me volteo un poco para ver que alguien estaba subiendo desde la parte baja del barco. Cuando me doy cuanta, se trataba del capitán del barco.

Davy Jones: que es lo que hacen? – dijo con un tono enojado.

Tripulante (1): mi capitán, el chico se salió de su camerino y causó que un grupo de la tripulación soltara la soga he interrumpiera el trabajo.

Davy Jones: no me digas. Y dime porque todos están por violarlo en este momento?

Tripulante (1): pensamos que sería un buen castigo.

Davy Jones: el chico es parte de un trato mío, si lo matan mientras hacen eso ya no podré cumplir con mi plan. – dijo para luego escuchar cómo se dirigía a mí. – son todos unos idiotas. – dijo para luego ir a donde yo tenía mis manos atadas lo cual el con un cuchillo me libera.

Yo tomo mis muñecas y comienzo a sobármelas para calmar el dolor que sentía y veo a todos esos mal nacidos con furia.

Davy Jones: que sea la última vez que veo esto. – dijo para luego ir a mi lago y tomarme con una de sus manos – y tú, no vuelvas a salir de mi camerino sin permiso. A menos que quieras terminar muerto. – dijo para luego hacer que yo caminara de regreso a esa habitación. El venía detrás de mí lo cual no me quedó más opción que ir.

Cuando yo entro no pasa mucho para Jones entrarán también y cerrada la puerta con seguro. Yo no digo nada y él solo pasa a un lado de mi sin hablarme. Yo en ese momento no tenía nada que me cubriera mi torso ya que mi camisa había terminado hecha añicos y ya se podía sentir el frío del agua en ese lugar. 

Pongo mi mano en mi cuello para luego sentir el rosario que tenía. Era un pequeño regalo que me dio mi padre cuando yo tenía 6 años de edad, lo cual me dijo que esto me ayudaría en todo momento. Que cuando me sintiera solo o con miedo, me pidiera a mi señor Jesucristo que me protegiera y que así todo estaría bien.

Voy caminado por esa habitación y luego veo una especie de cajita musical en la mesa. Yo voy a tomarla pero luego Jones se posa al lado de mí mientras me asusta. Él toma la caja de música de una y luego solo me ve.

Davy Jones: ni se te ocurra volver a intentar tocar esto. Me entendiste? – me dijo con autoridad lo cual yo solo asiento. 

Él se va cuando yo le respondo lo cual solo pone esa cajita de música en donde está su órgano y pone que toque una pequeña melodía. Era muy dulce y armoniosa que podría calmar a cualquiera. Él se queda sentado al frente de ese gran órgano mientras escucha esa melodía mientras canta en susurro una canción. Yo me acerco y logro escuchar un poco de la canción.

Davy Jones: cruel y fría eres, como el mar.....¿cuándo a mi tu regresaras?......oh, Calipso, oye...mi cantar.....mi amor no morirá..... –cuando terminó esa parte, la cajita de música paró y él también dejó de cantar.

Tarrant: quien es Calipso? – le pregunto detrás de él lo cual solo levanta su mirada sin voltear.

Davy Jones: es mi amor eterno, mi diosa del mar. Ella es mi todo y siempre espero su regreso a mí. Ningún mortal la puede contener y les muestra siempre quien domina el mar. La amo tanto que ese mismo amor me hace daño. – me dijo para luego empezar a tocar el órgano.

(Autora: aquí pongan la canción.)

Cruel y fría eres, como el mar

¿cuando a mi tu regresaras?

oh, Calipso, oyes mi cantar

mi amor no morira.

Jurare en el nombre del mar

Mi corazón tuyo será

por diez años yo he de esperar

para contigo estar.

después de cantar de esa manera lenta, comenzó con un tono más fuerte y el barco se comenzó a mover una vez más rápido.

Ven, mi amor, y unete a mi

Deseo ser eterno junto a ti

Llevalos al fondo del mar

Y mías sus almas serán

Toca aquella bella canción

Trae contigo la destrucción

Ven a mi, y tuyo seré

Por siempre te amare

Ni un mortal te puede contener

Trae el caos y muerte también

Oh, mi amada diosa del mar

¡Contigo quiero estar!

pasó un momento, yo estaba tendido en el suelo por tanto movimiento y luego el canto una vez más de manera lenta.

Cruel y fría eres, como el mar

¿cuando a mi tu regresaras?

oh, Calipso, oyes mi cantar

mi amor no morira.

Después que él terminara esa canción, que fue a la vez romántica y aterradora, se levanta y me ve a mi tendido en el suelo con una mirada perdida.

Davy Jones: al parecer, no eres como yo me imaginaba.

Tarrant: q-que?

Davy Jones: pensé que no me servirían de nada pero, ahora ya veo claro. – Dijo para luego entender una de sus manos para que me levantara lo cual yo por miedo que me hiciera algo, le tomo la mano para levantarme – vi cómo enfrentaste a mi tripulación. No mucho son capaces de eso. Tenías miedo, pero igualmente te defendiste, a pesar que eso te costaría caro. – dijo mientras se acercaba más a mí. Yo solo quedo paralizado ya que sentía que no estaba del todo consciente. - con un poco de arreglo de mi parte, servirían muy bien en mi tripulación.

Tarrant: qué?! – dije ya sintiendo mucho miedo lo cual sentía que el barco se hundía en el mar y ahí si entre en pánico.

Comienzo a ver por todas partes y veo como el agua entra lo cual mi respiración se acelera y los nervios se me hacen presentes. En ese momento, Jones me toma del rostro con una de sus manos lo cual sentía un gran escalofrío en ese momento.

Davy Jones: no tengas miedo mi pequeña anguila, muy pronto, te gustara estar en el agua. – dijo para luego acercarse más y ver cómo los tentáculos que tenía como barba se posan en mi cara lo cual yo siento que algo en mi cambiaba.

Siento como ya el agua estaba a la mitad de mi cuerpo y seguía subiendo cada vez más rápido. Ahí siento que perdía la conciencia más rápido y luego pasa algo que no me lo esperaba. Davy Jones posa sus labios contra los míos mientras siento como ya algo estaba cambiando dentro de mí.

Cuando el agua ya me cubrió por completo yo tenía los ojos cerrados y luego los abro de golpe y siento que si puedo respirar bajo el agua pero al mismo tiempo, mi conciencia se nubla un poco y no podía pensar como yo mismo.

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Pov. Jack

Pasó el resto del día y llegó la noche. Me quedé un momento durmiendo junto con Barbossa mientras no dirigimos con ''ella''.

Me encontraba en una de las plataformas para ver por la ventana acostado mientras que Héctor estaba recostado a un lado de mí mientras dormía.

En un momento, el mono de Barbossa se me posa sobre de mi lo cual hace que yo despierte.

Jack: qué? – dije mientras me incorporaba.

El mono me miraba de cerca lo cual yo solo lo apartó de mí. Veo un momento a la ventana y vi que ya nos acercamos a nuestro destino.

Jack: Héctor? – dije mientras intentaba despertarlo. – Héctor despierta. – dije mientras le daba un ligero golpe en el hombro.

Barbossa: mmm Jack? – dijo mientras se despertaba. – qué pasa?

Jack: llegamos. – dije para luego ver que él me miraba para luego levantarse del suelo y comenzar a arreglarse.

Yo me levanto y me pongo mi traje y en poco tiempo ya estaba listo para salir.

Barbossa: crees que ella nos podrá ayudar en esto? – me dijo mientras iba por su espada y pistola.

Jack: lo que espero es que nos pueda ayudar sin que tengamos que darle algo a cambio. – dije para luego salir de la habitación.

Cuando salgo, veo que ya estos estaban viendo a dónde nos dirigíamos.

Gibbs: Jack, estás seguro que es bueno que vengamos a ver a ella? - me pregunto Gibbs mientras miraba al mismo lugar que el resto.

Jack: es mi última opción. No quiero que Jones lastime a Tarrant, así que necesitamos toda la ayuda posible. – dije mientras miraba a esa gran isla. – dónde está el señor Hightopp y sus hijos?

Gibbs: quizás planeando como destriparte.

Jack: oh – dije para imaginarme eso – que lindo.

En un momento voy bajando para dirigirme a la parte baja del barco. Tenía que arreglar las cosas son ellos ya que en este momento voy a necesitar su ayuda.

Cuando bajo, veo que todo está oscuro y no podía ni ver mi propia mano al frente de mí. Voy caminando a tientas por ese lugar, para luego sentir como alguien me sujeta de por detrás y me lleva a otro lugar. Ese alguien me cubre la cabeza con un saco mientras siento como me sientan en una silla y me amarran las manos en ese momento.

Jack: si es un motín, háganlo cuando ya no estemos con el tema de Davy Jones. – dije mientras sentía como ponían una vela cerca de mí y también como alguien ya me quitaba el saco de la cabeza y me doy cuenta que se trataban de el señor Hightopp y sus hijos. – ah, justo los estaba buscando. – dije con una sonrisa pero ellos no quitaban sus expresiones serias.

Zanik: haber Jack, será mejor que digas algo para convencerme – dijo para luego posar una pistola en mi frente – de no volarte los sesos en este momento pirata mugriento.

JacK: o-ok, sé que está enojado y lo entiendo. Mayoría de esto es mi culpa.

Hatter: por tu culpa, ese tal Jones tiene a nuestro hermano y ahora no sabemos si está bien o está siendo torturado.

Briadeaz: se acabaron los juegos para ti Jack. Quizás no somos piratas, pero cuando se trata de alguien de nuestra familia, somos capases de lo que sea.

Farrent: Tarrant confió en ti, pero tú solo lo guiaste al peligro. Que tienes que decir ahora? – yo me quedo callado por todo lo que me dijeron.

Jack: está bien. No tengo excusas. Tienen razón, esto es mi culpa. Yo los atraje a esto y por mí, Jones se llevó a Tarrant. Les diré la verdad, yo no quería que esto pasara. No quería lastimar a nadie ni causarles ninguna molestia. De seguro ya deben de saber que Tarrant está, de cierta manes, enamorado de mí, y bueno, yo también hice que él se inclinara a mi mundo. Yo no quería causarle daño más bien, quería que esto en verdad funcionara. Sé que soy un pirata y que nunca debes confiar en uno pero, lo que siento en verdad en verdadero y les digo, no dejare que Davy Jones le haga algo a Tarrant. No importa lo que me cueste, encontraré la manera de cómo traerlo de vuelta.

Zanik: que insinúas Sparrow? – dijo Zanik mientras no dejaba de apuntarme con esa pistola.

Jack: - yo cierro mis ojos un momento para luego bajar la cabeza y hablar una vez más – estoy enamorado de su hijo. – Dije sin más para luego levantar una vez más miraba y ver cómo me miraban con los ojos muy abiertos – cuando lo veo, siento que mi cordura regresa. Cuando él está conmigo, siento que al fin estoy en paz, me siento libre, sin preocupaciones. Al principio pensé que solo me gustaba su apariencia pero, me di cuenta que es algo más. Quizás no soy lo que usted se imaginaba para Tarrant pero, si le puedo asegurar, que no importa lo que pase, siempre voy a protegerlo y si llegan a hacerle daño, no dudare en asesinar al maldito que se atrevió a lastimarlo. Quizás no soy como ustedes, pero puedo llegar a cambiar si es que es necesario. Puedo dejar muchas de las cosas que atraen los peligros solo para estar con Tarrant. – dije para luego ponerme ya firme al frente de ellos - Por él, cambiare. 

Pov. Zanik

Cuando Jack dijo eso, sentí que quizás, si me estaba diciendo la verdad. Yo le quito la pistola con la que le apuntaba a la cabeza lo cual mis hijos voltearon al ver mi acto.

Zanik: más te vale cumplir cada una de esas cosas Jack.

Farrent: qué? – dijo mi hijo mayor mientras se posaba a un lado de mi – lo vas a dejar así como así? Y que paso con todo lo que provocó?

Zanik: el ya vio de lo que yo soy capaz. – dije para verlo – si cometes otra estupidez Sparrow, no tendré piedad contra ti. – Dije para luego liberarlo – además, Tarrant también siento lo mismo por él.

Briadeaz: si, se nota.

Jack: bueno, no podemos perder tiempo. Ya estamos llegando con una amiga mía que de seguro nos podrá ayudar con esto.

Hatter: quién es? – dijo Hatter con un poco de extrañeza.

Jack: yo le digo Tía Dalma, pero su verdadero nombre es Calipso.

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Pov. Jack

Estábamos en el rio de esa isla mientras navegamos en los botes que teníamos del barco. Yo iba en el de adelante junto con Gibbs, el señor Hightopp y sus hijos. Nos acercamos cada vez más la casa de Calipso. Siempre que venía a este lugar sentía un escalofrío.

Cuando llegamos al centro de ese río, amarramos el barco a un extremo de la casa.

Jack: no se preocupen, Tia Dalma y yo somos muy buenos amigos, casi, des hace un tiempo. – Dije ya casi preocupado.

Gibbs: no te preocupes Jack. Te cuidaremos la espalda.

Jack: es mi cabeza lo que me preocupa. – dije mientras subía las escaleras para entrar.

Los que íbamos a entrar sería, Gibbs, El señor Hightopp y todos sus hijos, Barbossa y dos hombres más de mi tripulación, ha y el enano y yo. El resto se quedaría afuera.

Cuando entramos, la decoración de terror no pudo faltar. Criaturas por todas partes y una sensación que te pueden comer en cualquier momento. En ese momento, veo como Calipso se aparece caminada por ahí y nos ve.

Calipso: mmm Hola Jack. – me dijo con una sonrisa.