Pov. Jack

Jack: JA! Y pensaban que no podía llegar a su lado dulce una vez más! – dije mientras entraba a mi camerino después de terminar mi plan maestro con éxito.

Gibbs: nunca creí que te vería hacer algo como eso Jack. – dijo mi fiel primer oficial que venía detrás de mí con una botella de ron.

Jack: te digo Gibbs – dije mientras me sentaba en la mesa que estaba en medio de toda la habitación. – hace mucho tiempo que no veía a Tarrant de esa manera. Era como si de alguna manera hubiera viajado en el tiempo a ese momento en que nos conocimos.

Gibbs: diablos Jack, cuando te volviste tan cursi? – dijo mientras destapaba la botella y me la pasaba.

Jack: no es que me volví cursi, es que siento.....como decirlo?... – titube en ese momento ya que no estaba acostumbrado a decir eso – sentí como....algunas...alteraciones.

Gibbs: alteraciones?

Jack: alteraciones....creo que emocionales. – dije mientras le pasaba la botella.

Gibbs: ósea, que sentiste amor.

Jack: no, no es que sentí eso, es que.....- me quede callado por un momento – sí. Sentí amor.

Gibbs: y por lo que me imagino, tú lo dejaste por un tiempo, verdad?

Jack: ......sí.

Gibbs: Ahí, que cruel fuiste Jack. – dijo eso lo cual yo me quede callado por un momento.

Jack: gracias....creo. Porque ahora no estoy seguro de lo que digo? – dije aun confundido.

Gibbs: porque estas arrepentido de lo que hiciste.

Jack: eso no es cierto. Yo nunca me arrepiento de lo que hago. Lo que decido hacer así se queda. Es mi destino.

Gibbs: dime, que sentiste al ver a ese chico por primera vez? Que es lo que sintió tus egoísta y oscuro corazón en ese momento?

Cuando Gibbs me pregunto eso, yo quede con la mente en blanco. La primera vez que vi a Tarrant fue toda una sorpresa ya que nunca había visto a un chico como él. Su manera de ser, su actitud, su alegría, su inocencia, su bondad, su dulzura, todo eso y más me cautivaron ese día. La manera de como actúa y todo lo que dice, me hace amarlo cada día mas. Ya sé que suele ser un poco terco y todo eso pero, justo eso, lo hace mucho más especial. Nunca llegue a admitir el amor que ciento hacia alguien en voz alta ya que nunca avía sentido este amor antes. Salvo por una persona....pero eso no es lo que importa. Después de eso, mi amor se quedó en el olvido. En lo más lejano del mar y no pensaba en eso, hasta que un día, conocía a ese joven sombrerero que hacía que mi corazón latiera más fuerte que los cañones del perla negra.

Jack: bueno....yo...la verdad yo...

Gibbs: lo amas verdad?

Jack:...sí. Hasta se puede decir que es un amor que nunca avía experimentado antes. Es que...el están bueno y dulce....y yo...yo no soy ni la mitad de lo que es el.

Gibbs: en cierta manera, tienes razón. Pero te digo, ese chico se ve que también siente algo por ti, y si sigues por este camino que comenzaste a seguir esta noche, quizás logres cambiar tu destino.

Jack: tú crees?

Gibbs: sí. Te conozco desde hace mucho tiempo Jack, y sé que tú nunca te rendirás. – dijo para luego tomar un último trago he dirigirse a la puerta de salida – sé que no será fácil, y más para alguien como tú, pero....si el mar te favorece, quizás tengas una oportunidad con él. – dijo para luego irse.

Me quede ahí mirando la botella de ron que tenía en mis manos por un momento mientras pensaba en todo lo que me dijo Gibbs. Él tenía razón, tenía que de alguna manera arreglar mi vida. Ya me avía metido en muchos problemas y condenas de muerte para seguir viviendo así. Tarrant era mi salvación y cuando terminemos esto, are lo que sea para estar lo más cerca de él.

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Pasó unas horas y ya me encontraba profundamente dormido. En esta noche quería soñar con mi pequeño Sombrerero, pero se ve que el destino quería otra cosa para mí. Me encontraba en el mismo perla negra pero solo. No avía ni un solo hombre a la vista. Solo yo y el gran mar sin fin. Caminaba por la borda mientras que la luz de la luna me pegaba en todo el cuerpo. En ese momento, siento como si alguien me estuviera hablando detrás de mí. Me volteo y veo una figura muy extraña de un hombre. No lo pude distinguir muy bien pero luego este le tomo de la mano derecha y en esta apareció la mancha negra. Siento como si me condena estuviera sellada en ese momento y la cosa empeora cuando escucho una música extraña. Era una música de un piano que reconocería en cualquier parte. Era la música que tocaba Jones en su barco. Veo al Holandés Errante al lado de mi barco con una imagen demacran ten. Veo que sus cañones salen de los lados y me apunta y cuando lanzan el primer tiro, despierto de un solo golpe.

Cuando despierto, me encontraba agitado, sudado y también estaba respiraba muy rápido. Mi corazón latía a mil por hora ya que eso fue casi como una pesadilla. Poso mi mano derecha al frente de mí y veo que la misma mancha negra se encontraba en ella. No sabía si me estaba volviendo loco, pero comencé a escuchar esa música una vez más. Me puse paranoico en ese momento, miraba a todos lados de manera desesperada ya que no estaba listo para el juicio final.

Jack: Tierra. Debo ir....a Tierra. – dije para luego levantarme de manera desesperante, tomar mi sombrero y salir de mi habitación.

Cuando salgo, lo primero que hago es tocar con desesperación la campana del barco mientras grito que se levanten todos.

Jack: TODOS A CUVIERTA!! LEVANTENCE TODOS!! TODOS AL FRENTE!!

Vi como varios de mis hombres salían corriendo de la parte baja del barco y comenzaban a preparar todo para zarpar de inmediato. Veo que muy pronto llegaron los hermanos de Tarrant y también su padre pero no lo vi lo cual qué bueno ya que no quería que el supiera lo que pasaba.

Jack: todos preparasen y no dejen la guardia! Preparen todo para ir a Tierra! – dije mientras tomaba una de las telas de uno de mis hombres y me la ponía en la mano en donde estaba la mancha.

Gibbs: Jack! A que puerto!? – Me dijo Gibbs al llegar junto con migo.

Jack: yo no dije puerto! Dije tierra! – luego vi como el mono que teníamos en el barco me toma el sombrero para luego lanzarlo al mar.

Gibbs: paren el barco! Vallan por el!

Jack: NO! – les dije lo cual todos me voltearon a ver muy extrañados. – haaa...corran. – dije para luego ir a otro lugar apartado de todos.

Me puse detrás de las escaleras que conducían a mi camarote para luego ver que Gibbs se me acerco un poco confundido.

Gibbs: Jack, que monstruo inmundo nos persigue ahora? – me dijo en susurro.

Jack: nada. – dije para luego callar y esperar a llegar a la tierra más cercana.

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Pov. Tarrant

Me encontraba durmiendo plácidamente y también con un poco de felicidad, y es más que obvio que iba a estar así después de esa pequeña sorpresa de parte de Jack. Pensé que esto solo llegaría a pasar en mis sueños pero, al final si se hizo realidad.

En un momento comienzo a escuchar la música de unos pájaros y también del mar rompiendo en una playa. Me voy despertando en ese momento y luego me quedo muy extrañado al no ver a mis hermanos ni a mi padre en sus hamacas. Me levanto y noto que no avía nadie en toda la planta baja del barco. Subo a la plataforma y veo que no avía nadie ahí tampoco. Todo estaba muy solitario. Como si todos hubieran desaparecido.

Tarrant: Padre?! Hermanos?! Jack?! – comencé a llamarlos pero nadie respondía.

Veo que el barco estaba encallado a la orilla de la playa lo cual yo bajo por una soga y termino en la oriya mientras salpico un poco de agua.

Tarrant: Jack!!! – comienzo a llamar a la nada a ver si alguien respondía pero nadie hablo. – donde estan? – dije para luego caminar hacia la gran selva que tenía al frente.

Estaba armado con una espada por si me encontraba con algo que me pudiera atacar. En un momento veo que el loro de uno de los hombres de Jack aparece.

Tarrant: hola pequeño. – le dije amigablemente.

Loro: Arr no me coman!

Tarrant: no te are daño. – le dije un poco confundido por lo que me dijo.

Loro: Arr no me coman! No me coman! – siguió diciendo lo cual yo solo seguí mi camino.

Me adentro mas en la selva lo cual veo al frente de mí una cantimplora de agua lo cual el hilo que tenía me conducía por un camino. Tomo eso y voy siguiéndolo ya que quizás me conduzca a todos. Paso un rato siguiéndolo para luego llegara un lugar donde termina. En ese momento, veo que una flecha cae sobre un árbol que estaba ahí y yo reacciono pero cuando me doy cuenta, caigo en una trampa lo cual termino con colgado de cabeza en el aire.

Veo que unos nativos salen de sus escondites y se veían agresivos. Todos tenían lanzas y yo no tengo otra opción que tomar mi espada y tratar de apártalos. Ellos dejan de gritar y solo me ven mientras yo sigo moviéndome y forcejeándome ahí arriba. Luego de eso, veo que uno de ellos toma un tronco de madera y me lanza algo en el cuello. Cuando pasa eso, yo caigo en un profundo sueño.

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Cuando despierto, siento que estoy atado de manos y pies en una especie de palo de madera largo mientras unos hombres me llevan como si fuera su presa. Veo a mi alrededor y me doy cuenta que me llevan a su aldea donde se encontraban más nativos. En un momento pasamos por un gran puente para luego llegar a una parte de la aldea que parecía el lugar del jefe. Ahí recupero por completo la conciencia y me doy cuenta que estaba preparando como un fogata muy grande y también se podían escuchar los tambores. Me llevan a frente del que parecía su jefe y cuando abro bien los ojos, me doy cuenta que se trataba de Jack. Se veía un poco difieren. Tenía un poco de la vestimenta de ellos y tenía un maquillaje un poco extraño. Tenía 6 ojos pintados en sus mejillas y dos más en sus parpados y que se veían cuando serraba sus ojos. Un sombrero muy extraño que más bien parecía una corona y me comenzó a mirar de una manera muy extraña.

Tarrant: Jack? – Dije casi delirando por la anestesia que me dieron – Jackie, te digo que no me avía sentido tan alegre de verte. – dije con una sonrisa.

Veo que él se levanta de ese gran trono en donde estaba sentado y creía que era para liberarme pero veo que me mira de una manera extraña para luego tocar con curiosidad mi hombro. Luego de eso veo que se dirige a uno de los nativos.

Tarrant: Jackie? Jack, soy yo, Tarrant. – dije con un poco nervios por la manera de como actuaba.

Jack: Basekao! – Dijo en un idioma desconocido que yo no conocía.

Nativo: Indada! Misipi!

Los demás Nativos: Misipiii.

Tarrant: Vamos, liles que me suelten! – dije ya un poco desesperado ya que tenía el presentimiento que me iba a convertir en su Sena.

Jack: cole lamb, la wiki figh y lamb. – dijo para luego acercarse a mí, se agacho y comenzó a ver mis piernas.

Tarrant: Jack?

Jack: lohan diche diche, eurique, chatp chatp. – cuando dijo eso, escuche como todos los nativos decían ahhh chatp chatp de manera lenta como si les hubiera gustado lo que dijo Jack.

Tarrant: Jack, por favor dime que está pasando? Donde están todos? si esto es solo algo para que te diga que te quiero pues sí, te quiero mucho pero por favor sácame de aquí. – le dije ya un poco desesperado por la situación. Veo que él se vuelve a acercar a los nativos. Creo que al fin logre hacer que me entendiera.

Jack: Diche Diche lamdt antcho Misipi. Paleke leke.

Nativo: Paleke Leke!!! – dijo uno de los nativos para luego seguirle el resto. Ahí todos gritaron y los tambores comenzaron una vez más. Veo que Jack se me acerca rápido y me susurra algo.

Jack: Sálvame. – dijo para luego alejarse de mí y ver como los nativos me llevaban una vez más.

Tarrant: Jack, que les dijiste a los nativos? – le dije para luego ver que él se iba a otra parte – Sparrow! Vuelve aquí! JACK! – le grite para ya me estaban alejando mucho para que me escuchara.

Pov. Jack

Se preguntaran como es que me metí en este lio. Bueno, digamos que después de tener esa pesadilla entre en pánico. Le dije a mi tripulación que fuéramos a cualquier isla que viéramos y terminamos en esta isla. Todos bajamos del perla y fuimos a ver el área hasta que nos dimos cuenta que esa isla estaba evitada por unos nativos indígenas que al parecer estaban con hambre. Capturaron a todos mis hombres pero a mí, al parecer me confundieron como una especie de dios y no me aprisionaron pero tengo que actuar como un dios pata que no me coman. Así que, prácticamente también soy un prisionero.

Cuando veo que traen a Tarrant ante mí, atado y vulnerable, eso me hace sentir muy mal. No quería meterlo en más problemas así que tuve mucho cuidado con lo que le decía a los nativos. Se lo llevaron a donde están el resto de los que quedan de mis hombres y por suerte sus hermanos y padre siguen con vida, ya que mayoría de todos fueron devorados por estos salvajez.

Veo que un par de minutos después, se encontraban tocando tambores, cantando y bailando alrededor de una fogata que aún no estaba encendida. Yo intentaba mantener la compostura en todo ese rato pero se me era muy difícil. Veo que dos de ellos viene a mí con un collar hecho con dedos de personas en forma de ofrenda pero la verdad, me causaba mucho asco y escalofríos.

Jack: Gracias. – dije manera forzosa.

Tomo uno de esos dedos y lo miro detenida mente para luego morder un poquito de la piel. Lo mastico un poco para luego escupirlo. Sabia horrible. Espero que mi Tarrant este mejor que yo.

Pov. Tarrant

No me encontraba para nada bien. Me avían metido en una especie de jaula hecha de huevos donde tenían a la tripulación de Jack también. En la jaula que me toco estaba el señor Gibbs, ese hombre siego, un enano y también mi padre y mis hermanos. Yo miraba por todos lados, tratando de encontrar alguna manera de cómo salir pero no avía ni una sola.

Tarrant: porque nos hicieron esto? Si Jack es el jefe...- dije mientras me acercaba al señor Gibbs.

Gibbs: si, los nativos lo convirtieron en su jefe, pero debe actuar como jefe si quiere seguir siendo el jefe.

Tarrant: no tiene elección. Es un prisionero como todos nosotros.

Gibbs: No Tarrant. Es que los nativos piensa que Jack es un Dios, en su forma humana. Le concedieron el máximo honor, de liberarlo. – veo que el hombre siego toma un dedo del señor Gibbs y lo muerde. – Haaa! Suelta! – Ahí se libera – se lo van a comer. – cuando dijo eso, yo me quedo cayado. Un segundo después, comienzo a escuchar unos tambores. – el banquete ya va a comenzar. Cuando los tambores callen, Jack abra muerto.

Tarrant: bueno, no nos quedaremos aquí esperando a que eso pase – dije para luego quitarme del borde y mirar atrás de mí.

Farrent: y que planeas hacer?

Hatter: ya intentamos romper estas jaulas pero es inútil.

Briadeaz: sin mencionar que nos espera una larga caída cuesta abajo. – dijeron mis hermanos ya sin esperanzar de salir de este problema.

En ese momento, se me ocurre una idea.

Tarrant: tengo una idea, pero todos tenemos que colaborar para que funcione.

Zanik: y cuál es? – pregunto mi padre lo cual yo solo le respondí con una sonrisa.

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Pov. Jack

Veo que estos salvajes comenzaron a preparar el fuego para mi sacrificio lo cual eso me angustiaba mucho. Yo no hago más que solo levantarme y decirles en ese idioma que quería más fuego.

Jack: HE! No! No no! Más leña! Mucho fuego! Mucho fuego! Quiero mucho fuego! Yo jefe! – veo que estos cabezas de coco no me entendieron ni un carajo, así que me volteo y les hablo a otros que estaba al lado del trono. – babuskus nichos! Tu tweet! Que esperan! Más leña! – en ese momento que todos estaban distraídos, aprovecho para escapar.

Salgo corriendo a todo galope de ese lugar de muerte. Llego a un puente y de igual manera corro y corro lo más rápido que me dan mis piernas. Llego a un lugar donde estaban dos chozas pero no les presto mucha atención y sigo corriendo. Cuando ya me acerco al borde de ese lugar, pego el freno ya que si seguía, caería al vacío. Veo a mi alrededor y me doy cuenta que avían unas cañas muy grandes que quizás me sirvan pero cuando las tomo, veo que no son lo suficientemente largas. Decido entrar en una de esas chozas y ver si estos caníbales tenían cuerdas. Cuando entro veo que tenían muchas cosas de distintos viajeros que avía llegando aquí, ya sea armas o juegos de té de plata. Yo solo tomo una cuerda que se encontraba en una esquina. Ya tenía todo lo que necesitaba, pero no contaba con lo que me encontrar al salir.

Jack: hui que mal. – dije para luego darme cuenta que toda la tribu se encontraba ahí mismo. Mirándome con sus lanzas y de más. Yo solo tiro la cuerda y con una sonrisa tomo un frasquito que tenía que adentro contenía especias y me lo hecho en las axilas. – algo que sazón, He? - dije para luego mostrarme ya '' listo'' para el ritual.

Los nativos en ese momento tomaron una palma grande y me ataron ahí como si fuera un pedazo de carne. Me posan sobre los pedazos de leña ya listos para que se encienda. Lo único que faltaba era el fuego.

Jack: bien hecho. – dije con sarcasmo al ver que ya estaba más que frito.

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Pov. Tarrant

Tarrant: AHORA! – dije para luego ir una vez más asía donde estaba la pare de piedras que teníamos al frente.

Nos estuvimos columpiando por un buen rato ya que mi plan era llegar a donde estaban las enredaderas para luego comenzar a escalar asía la punta. Todos los que estábamos en las dos jaulas estábamos haciendo lo mismo lo cual se parecía a uno de los actos que solía hacer con los del circo. Parecíamos trapecistas versión pirata.

Tardamos un poco pero después de tres intentos más, logramos llegar a donde estaban las enredaderas. Tanto mis hermanos, como mi padre, como el resto de la tripulación se sujetaron de las enredaderas. Avía funcionado.

Gibbs: PIERNAS FUERA Y A ESCALAR! – Dijo el señor Gibbs para luego todos comenzar a escalar por esa pared de piedras.

Tarrant: Arriba! Necesitamos que ayude toda la tripulación!

Farrent: esto es una locura!

Briadeaz: es un plan de Tarrant! Que esperabas?!

Tarrant: Cállense ustedes dos y ayuden! – dije para luego seguir subiendo con el resto.

Todos ayudaban y poco a poco íbamos llegando a la sima. Pensé que todo iba a salir bien, pero luego vi algo que me preocupo. Veo que pasaba uno de los nativos por el puente mientras hacía guardia.

Gibbs: ASTA LA SIMA! SIGAN!

Tarrant: algo. Esperen! Shh! – dije en susurro para luego mostrarles que era lo que pasaba. – ustedes! - les dije a los que estaban al lado de nosotros. – paren! Paren!

Todos se quedaron en silencio esperando que ese guardia pasara para seguir subiendo. Hecho un ojo a mi izquierda u veo que uno de los que estaban en la otra jaula comenzaron a subir en silencio.

Tarrant: no. Alto. Que están haciendo?! – le dije pero ellos solo se reían – esperen! Los van a matar! Esperen! Esperen! – les dije en voz baja pero los muy pendejos no me hacían caso.

Ahí, uno de ellos tomo a una serpiente pensando que era una cuerda y ahí entro en pánico. Todos se soltaron por el susto que les pego el otro y cuando ya iban cayendo, la cuerda se rompió. Todos los que estaban en esa jaula murieron por no hacer caso. Alzo la mirada y veo que el guardia nos vio.

Tarrant: MUÉVANSE!

Gibbs: SUBAN! – ahora si teníamos que llegar rápido a la sima.

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Pov. Jack

Los minutos pasaban y yo aún me encontraba en ese lugar. Veo que uno de esos salvajes se acerca con una antorcha para luego gritar algo que no sé qué carajos quiso decir para prender la fogata que me daría muerte. Pensé en ese momento, hasta aquí llegue. Parece que el gran Capitán Jack Sparrow terminara siendo la Sena de estos caníbales. Ya estaba dando mis últimos pensamientos para cuando en un momento vino uno de los que estaba haciendo guardia y dijo no seque, pero creo que vio algo. Todos los demás se pusieron en silencio y me miraron. Parece que esperaban mis indicaciones.

Jack: síganlo! Que esperan! Benlala! – le dije lo cual todos pensaron que les avía dado permiso. Esta era mi oportunidad para escapar.

Veo que todos se van pero el muy tonto que tenía la antorcha la dejo caer al suelo lo que género que la fogata se fuera prendiendo. Yo desesperada mente intento apagarla soplando pero solo género que se intensificará más. Si no hago algo pronto, termino rostizado.

Pov. Tarrant

Veo que ya llegamos a la sima del acantilado y los nativos no estaban.

Tarrant: busquen una roca! Corten la soga! – les dije sin más para cortar la cuerda que nos tenía atados aun. A este paso, lograremos escapar, pero no sé qué fue de mi Jackie.

Logre encontrara una piedra lo cual con eso, logramos cortar las cuerdas. Me levanto al escuchar unos gritos y veo a toda la tribu corriendo asía nosotros.

Tarranrt: rueden la jaula! Pronto! – dije para luego comenzar a rodar dentro de la jaula como si fuéramos roedores.

Seguimos corriendo dentro lo cual funcionaba pero no contaba con algo que teníamos al frente. Llegamos a un precipicio y la jaula cayo rodando por ahí con nosotros aun dentro. Gritos era lo único que escuchaba. Yo solo rogaba que esto no terminara peor. Vi que en una parte fuimos contra un árbol y subimos un poco para luego volver a bajar. Eso causo que la jaula se detuviera. Todos terminamos en el suelo después de ese alboroto.

Tarrant: por dios. – dije quejándome de una dolor en todo el cuerpo.

Zanik: ya termino? – pregunto mi padre que estaba al lado de mí. Yo alzo la mirada y veo que los nativos se acercaban a nosotros.

Tarrant: levante la jaula! Ya!

Gibbs: ya escucharon! Como el vestido de una dama! – dijo el señor Gibbs que en un momento me dio risa para luego seguir con esto.

Todos levantaron la jaula y comenzamos a correr. Por lo menos todos valoraban sus vidas y corrían rápido.

Pov. Jack

En un momento de desesperación, intento salir de esta dando saltos aun atado en ese tronco. Sentía como el fuego llegaba a mi ropa y me quemaba un poco. Fui más rápido en ese momento y logre salir de esa per, aún estaba atado. Cuando caigo al suelo, levanto una pierna con todas mis fuerzas y logro desatarme de las piernas. Ahí, empiezo a correr.

Corría de la manera más incómoda posible ya que aún tenía este tronco sobre mí. Llego a la misma parte donde avía llegado antes y ahí me detengo para intentar desatarme. En un forcejeo, veo a un pequeño niño que tenía un tenedor y un cuchillo esperando a que le dieran comida. Yo me le acerco un poco y le quito el cuchillo para intentar liberarme de la soga. En ese plan, alzo la mirada y me encuentro con los que serían sus padres. Ahí, me pongo a correr gritando asía ellos que no sé por qué pero no les peque. Choco contra el muro y ahí avían muchos cocos lo cual uno se queda clavado en la punta de la cosa que estaba atado. Yo en un intento se los tiro pero el padre lo detiene con sus manos y ya se veía que se avía enojado.

Esos dos comenzaron a lanzarme cocos, frutas y de más cosas para atacarme. En varios momentos, las frutas se incrustaban en el palo que tenía en mi espalda como si fuera una especia de varilla de frutas. Llego un momento en que no sabía qué hacer y luego grite.

Jack: YA BASTA! – dije y todo paro. De seguro me veía ridículo con esto. Qué bueno que Tarrant no está aquí o se moriría de risa.

Salí corriendo de ahí ya desesperado y choque una vez más contra la pared lo cual me impulso para llegar al otro lado. Pensé en ese momento que ya estaba a salvo pero luego la gravedad me llevo asía el vacío y mámense a caer. En un momento el tronco que tenia se atascó contra las paredes de piedras y yo giro barias beses como un trompo para luego terminar colgando de un pie.

Ahí, pienso que lo peor ya paso pero luego el tronco va bajando poco a poco.

Jack: valla. – fue lo único que dije para luego comenzar a caer una vez más.

Voy cayendo sin más con temor que ese tronco me traspase de una sola. Choco contra muchos puentes lo cual eso va amortiguando me caída y también muchos guardias me vieron caer. Llego hasta el final lo cual caigo en el suelo. Las frutas que estaban en el tronco caen alrededor de mí y luego el tronco cae a un lado de mi cabeza. Eso sí es tener suerte. En ese momento pienso que en verdad, lo peor ya paso pero luego veo a esa tribu loca una vez más y comienzo a correr una vez más. 

Pov. Tarrant

Seguíamos corriendo sin parar lo cual no teníamos opción, ya que teníamos a una gran tribu de caníbales atrás de nosotros. Llego una parte donde llegamos al borde de un acantilado y caímos. Por suerte no era tan larga la distancia y caímos en el agua. Cuando caímos en el agua, la jaula se rompió y ahora lo único que nos quedaba era nadar.

Tarrant: Ha! - salgo de ahí casi ahogándome por el impactó.

Zanik: Tarrant!

Tarrant: aquí estoy! – dije saliendo de ahí e indo con mi padre. – todos están bien?! – dije en conjunto lo cual estábamos bien.

Hatter: cuidado! – grito mi hermano para luego ver que los nativos comenzaban a lanzarnos flechas.

Tarrant: Naden! Rápido! – dije para luego todos empezar a nadar y rogar que no nos calera ninguna flecha.

Todos comenzamos a nadar bajo el agua para que no nos cayera ninguna flecha pero esos nativos no cedían nunca. Todos nos escondimos detrás de una piedra para evitar ese ataque pero luego ellos nos encontraron. No fue sino gracias a un pequeño niño también de la tribu que los llamo a todos y se fueron. Ahí, todos nos largamos de ese lugar.

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Todos llegamos en poco tiempo a donde estaba el perla lo cual la corriente avía subido un poco desde que nos fuimos.

Gibbs: muchachos a zarpar! – cuando el señor Gibbs dijo eso yo intervine de inmediato.

Tarrant: Aun falta Jack! Sin él no me voy! .- dije de manera imponente ya que hablaba en serio.

En ese momento, todos escuchamos un grito a lo lejos que era de Jack. Veo que corría del otro lado de la isla asía nosotros. De alguna manera logro escapar, lo cual me alegraba mucho. Poso una sonrisa en mi rostro al verlo pero luego se borra al ver que lo seguían de cerca los nativos.

Tarrant: tal vez sí. – dije para luego ir ayudando a soltar bien el barco para luego ir subiendo con el resto de la tripulación.

Gibbs: nos vamos ahora!

Todos subimos al barco lo cual ya estábamos listos para zarpar. Me poso al borde de él y veo que Jack viene de cerca.

Tarrant: Un poco más, un poco más Jack –dije en susurro al ver que ya estaba cerca.

Unos segundos después se sujetó de las cuerdas del barco y ya estaba a salvo. Veo como los nativos gritaban para que se quedara ya que aún querían ''liberar'' a Jack.

Jack: lo siento amigos míos! Recordaran este día en que casi se comen!...- no termino su frase ya que una ola lo golpeo – al capitán Jack Sparrow. – dijo para luego subir.

Gibbs: que suerte que logramos salir de esta isla Jack!  - dijo el señor Gibbs mientras le daba una tualla a Jack para secarse. - ahora alejémonos de este lugar de muerte!

Jack: si a eso, pero mientras nos mantengamos en aguas poco profundas.

Tarrant: Jack! 

Jack: ha! mira te digo, es una historia muy divertida. Lo que pasa es que....- no lo deje terminara ya que lo abraze en ese momento.

Tarrant: que no vuelva a pasar. Si? - le dije aun en el abrazo.

Jack: como tu digas. - dijo para luego soltarme.  - bueno, se ve que todos estamos completos! bueno, casi. así que, sera mejor que zarpemos de una vez ya que ahí alguien que ya nos esta persiguiendo. 

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Ya avía caído la noche de ese día. Fue un día muy loco la verdad pero me gusta el hecho de que Jack este con vida. Yo me encontraba en la borda del barco mientras miraba al horizonte. 

Tarrant: Madre, en donde quieras que este, te tengo que decir que todo esta saliendo muy bien.

 dije al cielo estrellado esperando de que ese mensaje le llegará a mi madre de alguna manera.

En un momento  Toro se vuelve un poco extraño comienzo a ver que la marea está un poco extraña y luego comienza a escuchar una música que nunca había escuchado antes Una música que venía como de una pequeña cajita musical era tranquila y dulce pero en ese momento que la escuchó comienzo a sentirme extraño era como si la música me estuviera controlando de alguna manera la mente hacía que mis pensamientos se alteraran y en ese momento todo se nubló y sinceramente ya no me sentía yo mismo