Mi Más Alejado Deseo

Capítulo 02

Desde tu partida todo se me ha convertido en un completo caos, estar en un punto en el que creí que ambos pasaremos por este proceso de criar a nuestro hijo en su primeros días y por muchos años más, pero así tan de repente en lo que la luna se posó encima de nosotros para estar por la noche pero que a la mañana se va, y que vuelve a regresar en la siguiente, pero contigo fue más doloroso porque con la luna llegó Jadhiel pero tú te fuiste para siempre, ya no estarás nunca más con nosotros, tal vez en alma pero no en presencia.

Jadhiel es un niño muy educado, me ha ayudado demasiado aunque no lo parezca por la cantidad de pañales que cambio, pero no llora mucho y duerme tranquilamente por las noches, solo me levanto una o dos veces por lo mucho. Desearía que pudieras cargarlo, sentir su suave piel, y vieras que saco tu hermoso cabello negro, no sé aún su color de ojos es muy pronto, aun no los abre. Me encanta a pesar de todo pasar tiempo a su lado aunque sé que tarde que temprano debo conseguir empleo, ya no estoy solo ahora lo tengo a él, y bueno también mi mamá que me está ayudando, aunque no entiendo porque tu familia no nos quiere ver, me culpan de tu muerte sin tener nada que ver en ello.

—Hijo Jadhiel necesita su biberón de la 7.

—Ya voy mamá ya lo estoy preparando. -Me alegra tener a mi madre aquí ayudando con la casa mientras me encargo del bebé.

—Está bien. Por cierto cuando comenzarás a buscar trabajo.

Voy caminando con el biberón hasta llegar a ella que se encuentra con Jadhiel esperando una respuesta a su pregunta que aún está en el aire, pero exactamente no sé qué decir.

—Si te soy sincero no sé, creo que lo mejor es que espere a aje Jadhiel tenga por lo menos dos meses por si me tocase viajar a otro país u otra ciudad y no quiero hacer algo parecido en estos momentos.

—Si te comprendo, pero sabes que si te vas a otro país o tan siquiera otra ciudad yo no te podría acompañar, te tocaría estar solo con el bebé.

—Sí también sé que no puedes ayudarme porque no puedes viajar, pero no te preocupes yo me resolveré de alguna forma.

—No pidas eso, porque es muy difícil cuidar a un recién nacido y te lo digo por experiencia propia.

—Yo lo sé mamá pero yo sé que de alguna forma lograré cuidarlo y trabajar.

—Pero será muy agotador hijo.

—Lo sé pero yo solo de asumir esto ya no puedo echar para atrás el tiempo. -Veo de mi madre salir unas lágrimas y como bajan de sus mejillas y no saben cuanto me duele verla de esa forma, me dan ganas de llorar y soltar todo pero debo mostrarme fuerte además no estoy derrumbado esto es solo un escalón más que debo subir.

—Esperemos que no te tengas que ir a ningún lado y te quedes cerca para que yo pueda ayudarte hijo.

—Si mamá pero si debo vender esta casa e irme a otro lado, lo haré y debes entender eso aunque sea difícil la trayectoria.

—Ay hijo de verdad lamento tanto que Andrea falleciera, ella hubiera sido de mucha ayuda.

—Sí mamá pero no está y yo debo seguir adelante no me puedo estancar, tengo conmigo un bebé no puedo perder la cabeza.

—Entiendo.

Me ha dolido ver cuán preocupada se encuentra mi madre, sé que cuidar un recién nacido no es fácil pero es algo que no puedo evitar, debo cuidar a Jadhiel y darle mucho amor a mi chiquitín. Extraño mucho a Andrés por todo lo que un día fuimos pero no por estar enamorado de ella, eso se había acabado desde muchísimo antes.

Por algún motivo no me siento para nada culpable de su muerte, tener un hijo fue algo que se dio no tengo culpa ni siquiera lo planeamos o algo y ambos a fin de cuentas lo aceptamos, no entiendo porque sus padres me culpan de algo tan ilógico, todo lo que le sucedió a ella le ha pasado a muchas otras mujeres, es algo común y no lo digo por que no me duela lo que le sucedió porque sí, sí me duele es la madre de mi hijo, cómo no va a dolerme si viví con ella tantas cosas, ahora mismo estoy enfocado en esperar a que mi hijo esté un poco más grande ya que con los ahorros de Andrea y los míos podemos sobrevivir dos meses sino ocurre nada extraordinario y esperemos que no.

Tener un recién nacido en casa gasta muchas horas del día, entre quitar pañales, darle de comer, ducharlo, ponerlo a dormir, darle su fórmula todo eso requiere mucho tiempo ahora cuenten las cosas de la casa, si llego a conseguir trabajo debo contratar a una niñera a tiempo completo y que viva cerca de nosotros, en pocas palabras necesito mi ángel guardián, por favor Dios padre deja que ese ángel llegue a mí sí llego a necesitar de ella y más si me llega a salir un trabajo mucho antes de lo que tengo planeado, aunque claramente confió en tus designios divinos porqué con cada obstáculo que me sale sé que son una de tus batallas y yo las ganaré por mi hijo Jadhiel Stone.

El tiempo pasa y mi hijo está creciendo tan sano y ahora veo sus ojos como el profundo océano, o el encantador cielo azul pero mucho más vibrante y cristalino, ahora sentir cuando sus manitos intentan apretar mis dedos en una sensación indescriptible, me da mucha felicidad y saber que ahora tenemos que mudarnos después de tanto que nos costó acoplarlo a él en esta casa, pero todo será para vivir bien y tener un mejor futuro antes de que el presente se nos enrede demasiado. Hace unos días me llamaron para trabajar en una empresa comercializadora, quieren que trabaje en el área de administración, realicé la entrevista y he quedado debo presentarme el lunes a trabajar por lo que tengo este fin de semana para viajar a la ciudad y conseguir quien me cuide a Jadhiel, lo bueno es que la empresa tiene una urbanización donde viven trabajadores o pensionados de su empresa por lo que no tengo que buscar donde vivir, solo debo ir porque está amueblada, aunque claro traeré mis muebles ya que algunos son necesarios, la jefa me dijo que probablemente puede que yo allí mismo encuentre quién cuide de mi hijo mientras voy a trabajar y ruego a Dios que así sea por eso viajaré hoy miércoles para estar allá antes y conseguir una niñera, aunque trataré de que sea alguien amable, no quiero que abusen con mi hijo.

Todos mi muebles ya van en camino, gracias que decidí llevarlos lo que vivían allí antes desocuparon toda la casa, la dejaron completamente vacía, pero como ya van en camino es hora de ir a despedirnos de mi familia porque me iré y no sabré cuando venga de regreso o ellos puedan ir a visitarme, espero que puedan hacerlo algún día. Viajare en mi auto ya que iremos a otra ciudad y sé que lo necesitaré, por lo que es una buena razón para traerlo conmigo. Voy durante este camino tan largo con un bebé de dos meses, espero que no se estresa mucho, pero gracias qué saco mi carácter de relajado, se que eso no podrá suceder, además él nunca me dio problemas solo dormía plácidamente sin preocupaciones, lo único malo era la cantidad de pañales que gastaba, pero creo que eso es normal en los bebés.

—Señor Azael le hablamos los chicos de la mudanza.

—Si díganme ¿Qué necesitan?

—Señor lo que pasa es que ya llegamos a la urbanización y estamos frente a su casa porque nos dejaron entrar, sin embargo nos dicen que no pueden darnos las llaves de la casa, que debemos esperarlo a usted ya que solo las entregaran en sus manos ¿Cree usted que demorará?

—No se preocupen entiendo perfectamente, y ya estoy pronto a llegar a unos... —quedo pensando cuanto puedo durar en los que falta para que no se vayan —en unos 25 minutos estoy llegando, solo espérenme no se vayan pase lo que pase.

—Está bien señor esperaremos lo más que podamos.

Al cortar aquella llamada acelero un poco para tratar de llegar y a la vez le estoy orando a Dios padre para que ellos no se vayan y me dejen todo afuera tirado, porque eso sería fatal. Luego de andar en este largo camino llego por fin a las residencia y veo desde lejos a los chicos de la mudanza, —gracias que nos esperaron mi niño— estoy afuera y el vigilante se acerca a mi.

—Nombre por favor.

—Azael Stone.

—Le hago entrega de sus llaves señor, comprenderá que son reglas de aquí.

—Si no se preocupe, sé que es su trabajo cuidar de nosotros y eso me alegra mucho por que tengo un hijo de dos meses.

—En serio tiene hijos mi señor. -Aquel señor me ha hecho reír ante su expresión al enterarse que tengo un hijo.

—Uno solo, pero solo tiene dos meses, por cierto si sabes de alguien que pueda ayudarme a cuidarlo mientras trabajo me la envías a casa, quiero a alguien joven entre 20 y 28 años que tenga la energía suficiente la encargarse de él.

—Creo que ya tengo a alguien en mente señor apenas vea a la chica le digo que se acerque a usted, aunque lo más probable es que llegue sola, suele siempre llevarle algo a los vecinos nuevos, si ves a alguien así es ella la que te digo y ya usted le menciona para ver si le interesa.

—Muchas gracias, pasaré entonces, tengo mucho que desempacar y muebles que bajar.

—Fue un gusto señor Azael y bienvenido a la urbanización Deseos que disfrute su estadía aquí.

—Muchas gracias.

El lugar se siente agradable y acogedor, me agrada saber que los vecinos son buenas personas, en estos momentos solo espero poder tropezar camino con la chica que el vigilante mencionó, aunque no me dijo cómo es ella, tendré que tener una intuición muy alta para dejar salir las palabras con tal confianza que ha dicho él. Ya es tarde y no ha venido nadie como dijo él pero agradezco que me haya alcanzado el día para arreglar el cuarto de Jadhiel que era mi prioridad, así podría dormir tranquilo, yo dormiré en el sofá mañana arreglaré mi cuarto y el resto de la casa.

Ahora mismo siento como si un tractor hubiera pasado por encima de cuerpo, estoy tan jodidamente molido, tengo mucho cansancio. Me levanto y busco entre el mini botiquín que mi madre me empacó alguna pasta para este horrible dolor en mi cuerpo, en estos momentos creo que ya no recibiría a nadie, pero si toca lo haré. Entre buscar y buscar por fin encuentro algo, sin pensar me la tomo, con un poco de agua, gracias enfrió el agua, detesto beberla caliente, miro mi reloj y ya marcan las nueve —el tiempo vuela demasiado— busco alguna cobija y mi almohada favorita para dormir por fin, estoy muy cansado y mis días comienzan desde muy temprano, no puedo darme el lujo de dormir hasta tarde, cuando tenemos hijos es así y creo que muchos padres me entenderían, pero creo que mucho más las madres que son todas unas luchadoras, ahora sí estoy seguro que esto es muy agotador, mucho más que trabajar en una oficina todo el día, de verdad las admiro el cuánto aguantan moviéndose sin parar durante el día.

Me siento muerto en vida, fueron mucho tiempo en el auto y al llegar me tocó arreglar un poco y más lo de Jadhiel pero ahora mismo solo quiero descansar, ya será mañana que intente averiguar quien es la chica que me puede ayudar a cuidar al niño mientras trabajo, espero que sea una buena chica, y si pudiera se lo agradecería mucho porque tendría que extender la búsqueda de una niñera para el día.

Espero que pueda acostumbrarme a todo este trote de padre soltero, es difícil, no lo niego pero me esforzaré mucho para lograrlo. Solo le pido a Dios que me de las fuerzas necesarias para sobrellevar todo este caos, nunca me imaginé que me tocaría vivir esto y que la madre de mi hijo muriera al dar a luz, mi vida dio un vuelco muy grande desde esa noche, ya pasaron dos meses y aun me duele su muerte, nunca le deseé algo así jamás, pero así fueron los designios de Dios y por algo será que los tiempos de ella fueron escritos así, y por algo nuestros caminos se separaron, aunque nuestro amor murió mucho antes, da lástima que todo terminara de esa forma, y ahora no sé si dejaré que un nuevo amor renazca en mí y que mi corazón vuelva a latir con la fuerza de aquel loco enamorado que llegué a ser un tiempo, a veces siento querer sentir ese sentimientos que nos hace volvernos locos de tanto amor juvenil, ese que tiene esa increíble chispa que sentimos en un beso una fuerte corriente eléctrica pasar por cada parte de mi cuerpo, y sobre todo admirar aquella belleza que solo las mujeres suelen tener, esa belleza natural tan encantadora y cautivadora e impactante a la vez.

Yarenis Guzmán.