El trabajo de Sonic no esperó más, el último día de permiso por matrimonio se había terminado y era hora de regresar al labor.

Silver le entregaba su almuerzo en una bolsa y le despedía con un tierno beso corto y rápido en la mejilla, se veía distraído desde ese día del supermercado y el encuentro con aquel erizo negro taladraba la mente de ambos, Sonic disimulaba muy bien sus emociones pero estaba a punto de explotar, quería salir de ahí y gritar porque de todos los ex que pudo haber tenido su mujer tuvo que ser Shadow The Dark, alguien con quién no podría ni siquiera un poco compararse.

El camino en bus del trabajo lo usó para aclimatarse, volver a la rutina mientras la oscura madrugada daba fin con los primeros rayos del sol, esperaba a su primo que también usaba esa ruta para llegar al trabajo y cuando lo vio subir se reacomodó en su asiento ansioso por salir de su conflicto mental.

-Buenos días Sonic, ya de nuevo a la rutina.-El equidna se sentó justo a su lado dejándose caer de golpe.-Odio los Lunes pero ni modo, así es la vida, cuesta horrible abrir el ojo despues de un Domingo.

Sonic intentó seguir la conversación pues prefería no hablar de sus problemas.

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Silver volvió a la cama, cansado y con algunas náuseas atendidas se recostó hundiéndose entre las cobijas, su cuerpo estaba experimentado el cambio hormonal y físico que comenzaba a doler bastante, pronto entraría en estado de metamorfosis y sería como una planta marchitándose dolorosamente para luego renacer como otra.

Su lívido a este punto era nulo y el dolor en sus genitales era un dolor que cada vez más bi géneros evitaban con tratamientos modernos y caros que obviamente Sonic no podría costearle.

Su pecho dolía normalmente en la noche y la madrugada no era la excepción, su voz también estaba cambiando siendo cada día más delgada y femenina así como sus huesos se estaban preparando para reestructurarse.

Todo estos cambios y dolor sólo por su deseo de ser madre.

Silver cerró los ojos y trato de dormir para recuperar energías, el dolor pasaría a medio día y podría hacer un poco por esta casa aún hecha un lío.

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La jornada laboral no fue problema, le ayudaba a distraerse, su primo pasaba por su área para invitarle a ir al comedor juntos, la hora de comida había empezado.

Sonic lo siguió sin más, volviendo su mente al tema de Silver y su ex.

-Ya nos ganaron nuestra mesa mmm sentemonos aquí.

Knuckles jaló a su pariente hasta la mesa disponible y notó como el erizo no reaccionaba como de costumbre.

-¿Y a ti qué te pasa?

Sonic negó con la cabeza recargando su mejilla izquierda en la mesa mirando hacia la pared.

-Tengo un problema, no... varios problemas.

-mmm no llevas ni una semana casado y ya empezaron los problemas ¡te dije que no te convenía ni por muy belleza!- Knuckles le recriminó señalandolo con el cupón de comida.- Sabes, dame tu cupón para ir por nuestras charolas, en ese estado me sorprende que hagas bien tu trabajo.

El erizo hizo lo demandado y en un par de minutos Knuckles ya estaba comiendo y Sonic tratando de comer.

-Por la cara de difunto que traes la cosa no mejora con las horas ¿verdad? Mejor habla y desahógate ¡ñam!

Sonic asintió con la cabeza dando un pequeño suspiro.

-¿Te acuerdas que te mencioné que Silver tenía un ex que tenía dinero?

-Mmm si algo, como que me suena ¿Qué tiene que ver?

-Pues que el ex apareció y se acercó a él e incluso a mí.

Knuckles siguió comiendo sintiendo que eso no es para tanto.

-Sabíamos que la belleza tenía pegue así que un loquito que aún no le supera era de esperar que apareciera, sólo déjale claro que él perdió y ya, eres fuerte, puedes mandarlo a que le suturen un par de cortecitos y que le soben unos golpecitos nada del otro mundo ya sabes, ¡ah pero si trae compañía háblame! Que ya sabes que conmigo traes ejercito.

Sonic no pudo evitar reír un poco ante semejante propuesta.

-Y sobre si tiene un par de rings más que nosotros, nada que el buen Scourge no sepa estafar, ya sabes, todos ganamos.

Sonic rodó los ojos recordando su hermano gemelo, la oveja negra de la familia según su madre.

-Ahh... no voy a recurrir a él, además que dudo mucho que salga vivo de eso, hasta Scourge tiene sus límites.

-Ahh conque es un pez gordo eh, ¿muy gordo? ¡ñam!

-Ballena... una gran ballena.

-Mmm ¿rodeada de pecesitos o de otras ballenas?

-Aunque él aún es un ballenato, pronto será una ballena y es protegida por su gran familia de ballenas, tiburones, orcas etc.

-¿Orcas? Uy, entonces es de la creme de la creme eh, vaya esa belleza anduvo en las grandes ligas eh.- aún no muy impresionado toma otro mordisco a su comida- mmm entonces ya dime quién es el tal ex.

-Shadow The Dark.

Knuckles cierra la boca y siente que se le atasca el bocado, se da unos golpecitos en el pecho para luego tomar agua y respirar hondo.

-¡Debes estar bromeando Sonic!

-No lo hago, el día del supermercado con el dinero que me diste compré muchas cosas y él ya estaba hablando con mi esposo y tomándole de la mano, mirándole con ojos de amor, fue tan obvio e incluso descarado remarcando que es su mejor, mejor amigo o algo así.

Knuckles quedó enmudecido.

-Silver no ha dicho nada al respecto, se hace como que ese momento no sucedió.

-Pero... pero entonces ¿Shadow se presentó como el ex? o ¿cómo lo supiste?

-El erizo carga un colgante a juego de un sol que Silver posee su otra mitad, una luna.

-Tal vez te estás armando una novela y sólo es coincidencia o el colgante es de amistad no sé, la familia de Shadow jamás permitiría que en su linaje entre un bi género y además pobre.

-No me equivoco, ya investigué, encontré en una libreta que celosamente mi esposo guardó bajo su cajón de la ropa interior evidencia de su relación. Silver forro esa libreta haciéndola de pasta dura pero en realidad guarda todas las cartas que el erizo le daba y ahí hablaban de toda su relación y sobre todos sus deseos y pasiones.

-M-me estás diciendo que entonces... ¿¡el bebé ni siquiera es tuyo!?

-No dije eso, no saques conclusiones apresuradas.

Knuckles azotó con ambos puños la mesa provocando las miradas de los demás.

-Si entonces ya tienes pruebas y estás seguro ¡¿Qué haces con él?! Lo más seguro es que ese bebé ni siquiera sea tuyo.

-Silver era virgen para cuando le tomé.

-¡ja! ¡Seguramente te mintió! Ya sabes por ahí van a las curanderas y ¡consiguen remedios para sangrar!

-Cállate Knuckles, nos están escuchando y yo recién casado...

-grr ¡es que no seas tonto Sonic! Si fue su novio obviamente que le tomó, no creas que Shadow The Dark es de manita sudada.

-Yo sé lo que vi y sentí, no puedes fingir algunas cosas y además, eso no importa, sé cuando y cómo hice ese bebé y es mío.

-Lo dudo mucho primito, te estafaron, seguramente le votó y fue a buscar al primer tonto que se dejó, discúlpame pero ahora todo tiene sentido, con razón se entregó tan fácil a ti, ¡ya venía preñado!

Sonic se levanto de la mesa sin probar siquiera haber comido algo, fastidiado más que ayudado dejó hablando a su primo.

-¡Sonic ven aquí! ¡No huyas de la verdad!

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Shadow estaba sentado en una de las bancas del parque que justo estaba en una esquina de la casa de la pareja recién casada, acechaba a Silver a quién por fin pudo ver salir de su casita de ratón con una bolsita de mandado.

-Silver- Shadow se acercó con calma caminando a un lado de él provocando que el erizo diera un pequeño salto de susto- Tranquilo, soy yo.

El erizo pálido se detuvo dándose la media vuelta para volver a su casa.

-¡hey! ¡Quiero hablar!- Shadow tomó la mano bastante caliente del erizo que se veía enfermo.-¡ah! Estás...

Llevo hasta él al bi género que no opuso resistencia y la razón era descubierta por Shadow, el erizo estaba empezando su metamorfosis.

-¡Estás ardiendo en fiebre! ¡¿Qué haces fuera de tu casa?!

Silver sólo atinó a mirarle a los ojos y los propios suyos se cerraron al caer inconsciente en los brazos de su ex.

-¡SILVER!

Continuará....

Creo esta historia será la más dramática de toda mi carrera aquí jajaja

Gracias por leer.