Capítulo 3
Conforme ha pasado el tiempo, John ha tenido más confianza con Sara, han jugado juntos en la escuela y en la casa de Sara, aunque le pregunta sobre su casa, John siempre trataba de evitar esa pregunta, y eso da a Sara una curiosidad sobre cómo sería la casa de John.
En una noche comenzó a escuchar algo de sus padres antes de irse a dormir.
Padre de John: No puedo creerlo
Madre de John (emocionada): Lo sé, pero es una bendición que nos dieron.
Padre de John: Si, escuchaste pequeño, bienvenido a la familia.
John se sorprendió por lo que escuchó de sus padres, John tendría un hermano, y eso no lo dejó de pensar en toda la noche hasta que por el cansancio pudo cerrar los ojos.
En la escuela, John emocionado ve a Sara y le cuenta la noticia, eso la dejó sorprendida a Sara y lo felicita.
Sara: Felicidades Hermano mayor.
John: Gracias Sara.
Sara: Bueno me he preguntado, ¿Por qué nunca hemos ido a tu casa?
John se puso algo serio y comienza a sonreír de manera falsa.
John: Es que no vale la pena ir.
Sara: Vamos John, siempre has ido a mi casa y aun así, nunca he podido conocer tu casa, ni a tus padres.
John: Bueno es que...
Se escucha la campana de la escuela.
John: Mejor después te lo digo.
John se va al salón, aunque Sara tenía demasiada curiosidad y sospechas sobre lo que le sucede. Durante las clases, su compañera Valeria ve a John y se acerca.
Valeria: Hola José.
John: John.
Valeria: Claro, lo siento estuve distraída, quisiera preguntarte si...
John nota una ligera sonrisa nerviosa.
John (pensando): Si...
Valeria: ¿Podrías ayudarme con la tarea? Es que no lo entiendo y no tendré tiempo para hacerla, podrías hacerme ese favor, por favor.
John se notó desilusión por lo que le dijo, pero muestra una sonrisa, aunque Sara ve a Valeria con algo de enojo.
John: Claro, no hay problema.
Valeria lo abraza y John se sonroja.
Valeria: Gracias, gracias, nos vemos pronto.
John: Claro.
Valeria le deja su libro a John y se va a su lugar, John la ve hasta que Sara le pega en la cabeza.
John: Ah, ¿Por qué fue eso?
Sara mira otro lado con enojo y John decide mejor mirar la clase. Al momento de terminar las clases, John se sube al auto de la mamá de Sara como siempre, aunque esta vez, no han hablado durante el viaje, hasta la mamá de Sara notó una distancia entre ellos, intentó comunicarse, pero ya habían llegado y John decide irse pronto a su casa, la mamá de Sara le empieza a preguntar a su hija.
Madre de Sara: ¿Qué paso?
Sara: No entiendo, ¿Por qué John quiere ayudar tanto a la gente, sabiendo que igual no les presta atención?
Madre de Sara: Es que algo le pasa a John, será mejor que le preguntes.
Sara: Lo intento, pero trata de evitar la pregunta.
Madre de Sara: Bueno hija, hay personas que no se sienten seguras consigo mismos, tal vez John tenga algo difícil en su vida que lo está haciendo eso.
Sara ve la casa de John con cierta tristeza.
Sara: Pobre John, quisiera ayudarle.
Madre de Sara: Te gusta John, ¿verdad?
Sara se sonroja mucho y se pone nerviosa.
Sara: ¿Qué? No, no, no, no me gusta John, lo quiero como mi amigo, como un hermano.
La madre empieza a reírse un poco.
Madre de Sara: Creo que lo estás ayudando, dando tu amistad hacia él, pues tu eres su mejor amiga.
Sara (sonríe): Si, y él es el mío.
Mientras en la casa de John, Sus padres discuten en su habitación mientras que él se preparó su comida y escucha la pelea.
Padre de John: Mira lo que gastamos tanto en ese niño.
Madre de John: No me mires a mí.
Padre de John: Como no voy a mirarte, si tú lo consentiste y ahora mira como quedó ese cerdo, ni siquiera tiene la actitud de una persona común, a veces me da asco.
Mientras se sube a las escaleras, al terminar de escuchar las peleas de su familia comienza a verse en el espejo.
John: De verdad doy asco.
Tira la comida y comienza a hacer las tareas, hasta que escuchó el sonido del timbre y comienza a abrir la puerta ve a Sara y John se sorprende.
John: Hola Sara, ¿Qué haces aquí?
Sara: Vine a verte, además quisiera ver si podemos jugar juntos.
John: Suena bien, pero...tengo que terminar las tareas.
Sara: Bueno, quizás mañana.
John: Claro, mañana es buena idea.
Sara: Bueno, nos vemos.
John: Si, adiós Sara.
John le cierra la puerta y Sara notó a John algo de cansancio, la pone más inquieta por ver a John sufriendo de esa forma. Mientras John comienza a sentirse algo cansado, pero no le importaba y solo continuó hasta que terminó y después de ver la hora nota que falta 2 horas para la medianoche y comienza a prepararse para dormir.
Han pasado 3 meses después, John ha cambiado hasta la apariencia, ahora está más débil, su cuerpo ha estado enflacando demasiado que parece como un esqueleto del laboratorio, John trata de sonreír, pero a veces se siente demasiado cansado como para hacerlo, Sara cada vez que lo ve, se siente más preocupada y asustada por ver a John que se desvanece cada vez más.
Sara: John, quiero hablar contigo.
John (cansado): Cla...claro.
Sara: ven sígueme.
John (cansado): De...acuerdo Sa...ra.
Sara lo lleva hacia fuera del salón que afortunadamente nadie le presta atención y tenían la clase libre así que todos empezaban a jugar.
Sara: John, ¿Qué te sucede realmente?
John: ¿A qué te refieres?
Sara: Por favor dime que te sucede, has estado demasiado cansado, hasta tu cuerpo está demasiado delgado, como si no comieras por varias semanas.
John: Ah, esto es por una nueva dieta que me puse para poder enflacar y tener una nueva rutina.
Sara (sarcástica): Y las ojeras también son parte de tu nueva rutina.
John: Cla...ro todo es por una mejora en la vida.
Sara: ¿Mejora? Te estas destruyendo, vamos a ir con la enfermera.
John: No gracias, mejor vamos al salón.
Sara: No John, vamos con la enfermera, no quiero que sigas sufriendo.
John (enojado): Que no siga sufriendo, si ya no quisiera seguir con esta tortura me hubiera suicidado hace mucho tiempo.
Sara se impactó al oír lo último que dijo.
Sara: ¿A qué te refieres?
John (enojado): Todos los días, he querido suicidarme y porque razón, porque no lo tendrían, mis padres me odian, la gente abusa de mi confianza y siento todo el tiempo que soy una pérdida de tiempo en la vida de cualquiera que esté a mi lado, incluyendo la tuya.
Sara: No eres ninguna pérdida de tiempo, ¿crees que no haría esto si no me preocuparas?
John: ¿POR QUE TE PREOCUPO TANTO? ¿QUÉ TENGO DE ESPECIAL PARA QUE SIGAS ESTANDO A MI LADO?
Sara (enojada): ME PREOCUPAS TANTO PORQUE SI ERES ESPECIAL PARA MÍ, POR ESO ME GUSTAS MUCHO.
Sara reaccionó por lo que dijo y se tapó la boca, mientras que John se sorprendió.
John: ¿Yo te gusto?
Sara se quedó sonrojada, pero al saber que no había marcha atrás toma a John se la camisa y le da un beso en los labios, John fue el más sorprendido por tener ese momento, pero poco a poco empieza a corresponderla, al terminar el beso, Sara lo ve.
Sara: Desde que te conocí.
John: Sara, yo...
John intentó decir algo, pero se sintió demasiado cansado y se derrumba en el suelo.
Sara: John, John, JOHN.
FIN del Capítulo.
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