Despierta El Deseo

CAPÍTULOS_10

En fin, decidieron que esa noche me dejarían a solas, se dieron cuenta que necesitaba mi espacio y tiempo para pensar las cosas, cuando se fueron yo estuve pensando en que le pasaba a Edgar...

Están llamando

Es Alex, que hace llamando a las 11:00 de la noche?

-Hola Alex.

-Mira por la ventana.

No lo podía creer ahí estaba con su coche, que hace él aquí?

-Alex qué haces?

-Solo quería verte.

-Estás loco, si mi madre te ve se estaría preguntando quién es hasta que muera.

-Estás nerviosa?

-Que preguntas, estas loco.

-Puedes salir?

-Espera, ya voy.

Abro la puerta y salgo a donde él.

-Alex estas loco.

Me miró y sonrió, se acercó y su mano acarició mi pelo hasta llegar al cuello y me besó.

Y me susurró al oído.

-Mañana nos vemos pequeña.

Mi piel parecía gato erizado, me daban ganas de seguir besándole. Cálmate Aria. Está completamente loco, me tiene enferma. Sentía que vivía una de esas novela de puro romance, nunca sentí tanta atención, Toby siempre fue alguien distante, me daba demasiado espacio, no me invitaba mucho a salir, siempre me sentía sola.
Me hizo una seña con el ojo y despacio salió en su coche

-Este chico está enfermo

Axel estaba acariciando mis piesitos y hacía un frío de muerte

-Axel entremos, hace frío...

Fui a dormir. Definitivamente mañana será un día lleno de sorpresas seguramente.

Al levantarme me vi a mi madre en la cocina.

-Madre qué pasa?

-Estoy bien, solo fue que algo me afectó mi estómago.

-Madre hoy me quedaré hasta que mejores, después le pido los apuntes a Leyla.

-No es necesario Aria.

-Tranquila, tu hija es inteligente y se mas arregla fácil, ve a la cama.

Llamé a Leyla y le hice saber, dice que la maqueta quedó bien y que lo que escribí para discutirlo salió bien y por eso me dieron mis puntos...No hay nada mejor que escuchar buenas noticias
Estuve todo el día en casa con Axel, haciéndole fotos, videos y dandole caricias
Mi madre ha mejorado, son las 3 de la tarde, era temprano y me preparé para salir...

-A dónde vas Aria?

-Voy a donde Leyla madre, nos vemos después, llama si te sientes mal vale.

-Vale Aria, cuidate.

Llamando a Leyla

-Aria?

-Leyla voy a donde Alex, le dije a mi madre que estaría contigo.

-Aria que tramas? Por favor cuidate.

-No te preocupes.

Llegué a donde Alex.

Llamando a Alex

-Pequeña.

-Estoy justo al frente.

Abrió y entré rápidamente.

La última vez no pude apreciar mucho por los nervios que sentía... La verdad es que tiene muchos cuadros y bien bonitos.
La casa es alta, espaciosa pero bastante personalizada, tiene 4 habitaciones en la parte inferior, parecía una mansión, tenía un color marfil y algunos tonos azules como adornos, esquinas y muebles

-Te gusta mucho el arte verdad?

-Si, la verdad me encanta.

-Ven conmigo.

Lo seguí hasta una habitación, llena de botellas de pintura por cada rincón, lienzos y pinturas bastantes exquisitas.

-Que lindo, están muy buenos. ¿Todo esto lo hiciste tú?

-Gracias. Y si, desde pequeño es a lo que me dedico, aunque la verdad es que estas me gustan más.

Imposible, en serio ese era mi rostro?... Estaba impactada, sacó unas pinturas que al parecer era yo.

-Te gustan?

-Alex esto es precioso.

Estaba muy contenta, así que a esto es a lo que se dedica. Tenía mucha emoción, estaba felíz.
La felicidad no ocurre por casualidad, es una elección. Yo me sentía felíz, quería estarlo

-Cuando quieras aprender aquí tienes un profesor, soy el mejor que tendrás

-Tenías que arruinar el momento con tus presumidas palabras.

-Si claro, pequeña odiosa, admite que soy lo mejor que te ha pasado.

Juro que si sigue así lo mato.

-Te gustaría conocer mi habitación?

-Tu habitación?

Me puse nerviosa, yo sólo me imaginaba escenas en mi cabeza que me hacían tener un poco de miedo

-Aria ven, tranquiliza ese cuerpecito

-Vale vale, no estoy nerviosa

Lo sé, lo sé.. Es todo lo contrario pero ni modo, se cree el Rey de España
Su habitación no parecía ser de un chico normal, quedaba en la planta de arriba y me encanta, detrás de su cama tiene un cuadro de un bosque, combinaba perfecto con el gris de su cuarto, unas ventanas de cristal con unas cortinas color negro que rozaban el piso de la habitación, los muebles de un color negro brillante felpuditos, una guitarra como adorno en una esquina, el espejo al frente era un tanto estrecho pero largo y una alfombra blanca en el piso tan peludita.
Nos quitamos los zapatos.

-Es muy acogedor.

-Si, lo es.

Se tira en la cama

-Que cómodo, ven

Le da una palmada a la cama, me estaba invitando a tirarme

-Vale

Había muy poco diálogo y aquí va una sorpresa, tiene un espejo en el techo, me estaba observando y de pronto se gira a hacia mí, me giré y nos miramos, una mirada profunda entre nosotros, se acercó y no dudé ni un segundo en besarle, estaba sintiendo deseos. Los besos al principio iban lento pero se empezaron a poner muy fuertes y empecé a sentir en mi cuerpo el deseo completo, algo que parecía arder. Alex apretaba mi cintura...

-Alex

Me mira en silencio y se queda inmóvil

-Si quieres paramos

-No es eso

-Qué pasa?

Bueno, otra sorpresita...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top