Miré mi teléfono en la mesita de noche mientras mordía mis uñas sin parar... bueno, si es que se pueden llamar uñas... más bien lo que queda de ellas. He estado haciendo esto por un largo rato.

 Abby bufó— ¿Podrías ya dejar tu orgullo a un lado de una buena vez por todas, tomar el maldito teléfono y llamarlo?... te lo pido por décima vez.— dijo con cansancio— Te lo pido por ti, no por mí, amiga.

—Jamás había sentido tantos nervios en mi vida...— continué mordiendo lo que me queda de uñas

 La razón por la que tengo tantos nervios en porque si, Sky no se equivocaba cuando dijo que no estuviera tan segura de que Jace iba a llamarme... él no me ha llamado, causando en mí una sensación que jamás había sentido... es una mezcla de nerviosismo, preocupación, miedo y pánico a perderlo.

 No puedo perder a mi idiota por una estupidez tan grande como esta.

 Ella quitó mi mano de mi boca— Ya basta... toma el teléfono y llámalo antes de que te arrepientas.

 De veras pensé que Jace me llamaría al instante de su ataque de celos, en la noche o incluso al día siguiente en la escuela... pero no. Ya pasaron más de 24 horas y nada que me llama.

 Ya sé que cualquier persona normal optaría por llamarlo, pero deben saber que soy la persona más orgullosa que existe en el universo entero y no puedo hacerlo porque no pienso que haya hecho nada malo como para disculparme o algo por el estilo.

—¡Scarlett, me estás volviendo loca!— exclamó Abby molesta. Tomó el teléfono y lo puso en mi mano— deja de actuar como una niña de 3 años y llama a Jace... te conozco y sé que te estás muriendo por no saber en lo que está pensando él en este momento.

 ¡¿Komo lo zupo?!

—¿Sabes qué...?— una idea brillante vino a mi cabeza. Sonreí— haré una llamada...— ella sonrió— pero no exactamente a Jace...— su sonrisa se convirtió en una mueca 

—Literalmente eres una bebé... No entiendo cómo puedo soportarte...— se rindió y se acostó— haz lo que quieras.

 Marqué el número de Alicia y coloqué el teléfono en altavoz— ¡Hola, Cachetitos!— la enérgica chica contestó al instante

—Hola, unicornio... ¿cómo estás?— pregunté

—De maravilla como siempre... ¿y tú?

—No tan bien, verás...— le conté lo que está sucediendo con Jace

—Realmente no entiendo cómo es que los dos pueden ser tan inmaduros a veces...— Suspiró— ¡ustedes se aman!, ¿por qué terminar por una estupidez tan estúpida?

—¡Opino lo mismo que tú, Alicia!— dijo Abby   

 Ay, si... miren quienes hablan de inmadurez, la chica unicornio y la copia barata de Taylor Swift.

—Si, si... soy muy inmadura, supérenlo.— fulminé a Abby con la mirada— ...te llamo porque necesito tu ayuda urgentemente...

—¿Qué necesitas?, dime...

—Por favor... ¿podrías invitarlos a todos a tu casa para poder reunirme con Jace sin perder mi orgullo?

 Si Jace y yo nos encontramos en el mismo lugar, no tendremos de otra que entablar una conversación.

 ¡Dejen de juzgarme, soy muy orgullosa!

—No, no lo hagas, Alicia... ella tiene que dejar a un lado sus niñerías y llamarlo.— dijo Abby

 La miré mal— ¡Tú cállate, copia barata de Taylor!... por favor, Alicia... lo extraño mucho y lo necesito.— le rogué

—Está bien...— aceptó— pero tráeme una pizza, ¿quieres?.

 Solté un grito de emoción, haciendo que Abby se asustará— ¡Claro... te amo tanto, rubia!

—Duh, todos me aman, soy un unicornio...— dijo obvia— nos vemos luego... las amo, piñas.— se despidió antes de colgar   

 Miré a Abby con una sonrisa de extremo a extremo, y ella me miró con cara de: ¿es en serio?

—¿Por qué me ves así?— la miré divertida

—¿Cómo quieres que te mire?... Si me hicieras caso y hubieras hablado con Jace desde un principio, seguramente ya habrías arreglado las cosas con él.

—Arreglaré las cosas con él, cálmate...— rodé los ojos

—Ya te dije que hicieras lo que quieras... luego no te arrepientas.

 #DramaQueen.

—Hello, deja el show.

***      

—Toma, amiga...— le entregué la pizza que le prometí a Alicia— te adoro tanto...— dije antes de entrar seguida de Abby

—Lo de la pizza era en broma pero agradezco mucho que te lo hayas tomado en serio...— abrió la caja y sacó una rebanada enseguida— esto es amor verdadero.— le dio un beso y luego un mordisco

 Abby y yo reímos por su acción y las tres nos adentramos a la sala, en donde ya estaban todos, incluyendo a Jace.

 Los saludé a todos, exceptuándolo a él, quien evitaba hacer contacto visual conmigo.

 Y luego dicen que yo soy la inmadura... por Dios.

—¡Oigan... vengan a comer pizza!,— dijo Alicia desde la cocina— ¡hay suficiente para todos menos para Scarlett y Jace, así que no vengan y quédense ahí solos!... 

 La adoro.

 Todos le hicieron caso a Alicia y se fueron a la cocina por su pizza, dejándonos a Jace y a mí solos.

 Jace se quejó— ¡Pero yo también quiero pizza! 

 Ups...

 Me encogí de hombros— Supongo que no hay suficiente para todos.— tomé asiento frente a él   

—Ya sé por donde viene esto... no sé cómo no me lo imaginé antes.— bufó

—Vayamos directo al punto, ¿bien?... ¿por qué no me llamaste?— apoyé mi barbilla en mi puño

 Me miró confundido— ¿Para qué te llamaría?... si querías hablar conmigo, ¿por qué no me llamaste tú?

 ¡Como si no supiera que mi orgullo es más grande que su cabeza! 

—Ok... ¿quieres que te recuerde quién fue el que actuó como un completo celópata?

—Por favor...— rodó los ojos— ya no tenemos más nada de qué hablar... tú y yo terminamos, comprende...

—¡Oh. por. Dios!— dijo Austin

 Jace y yo volteamos al marco de la cocina, en donde se encontraban todos espiándonos; pero al vernos, todos se escondieron.

—Tranquilos, no nos dimos cuenta de que nos espían...— les dijo Jace con sarcasmo

 Justin asomó su cabeza de nuevo— Gracias a Dios... por tu culpa casi nos descubren, Austin...— suspiró de alivio  

 Idiotas de nacimiento.

 Jace y yo decidimos ignorarlos— ¿Podrías dejar de decir tonterías?— cuestioné alzando una ceja

—No son tonterías, te lo digo muy en serio... me cansé de todo.

—Bueno, "todo" iba bien hasta que tu prima linda llegó a entrometerse en todo... sólo digo.

—Y luego dices que yo soy el celópata...— se cruzó de brazos— te pido que dejes de meter a Kendall en esto.

 ¡Ella es la que se entromete!

—¡¿Qué quieres que haga si ella no deja de meter sus narices en donde no la llaman?!— me levanté

 Se levantó también— ¿Sabes qué?, no vine aquí a pelear, así que...

—¿Así que qué?... esto no puede terminar así...

—Lo nuestro ya terminó... estoy cansado de que no des el 100% en la relación mientras yo si lo hago.

 Lo miré ofendida— ¿Disculpa...?, ¿Dar el 100%?... ¿te parece que dejarme tirada por estar con tu prima es dar el 100%?... ¿te parece que eso es dar el 100%?

 Se quedó callado por varios segundos— No estamos destinados a estar juntos.

 Esas 6 palabras fueron como si alguien me echara sal a una herida— Eso es lo más doloroso que me has dicho...— mis ojos se transformaron en cascadas

 Me miró con tristeza— Yo... lo siento...— intentó abrazarme pero lo aparté bruscamente

—No me toques...— sequé mis lágrimas— Wow, Jace... dale a Kendall un gran aplauso de mi parte...— aplaudí— no pensé que lograría lavarte el cerebro pero lo hizo... lo hizo y la felicito por ello. Suerte con tu prima.— alcé mi dedo pulgar en señal de aprobación y me alejé de él. Salí de la casa de Alicia y casi corriendo volví a mi casa

 No puedo creer que hablaba en serio cuando dijo que lo nuestro había acabado.

 Todas esas veces que dijo que siempre estaríamos juntos, que siempre estaría a mi lado y que jamás me dejaría sola no fueron ciertas... y me duele saberlo.

 Mi idiota ya no es más mi idiota.