Nota🤍

Bueno días, o tardes. (⁠;⁠ŏ⁠﹏⁠ŏ⁠) Feliz inicio de semana. ✨ Me disculpo por tener tan abandonada está historia, (⁠٥⁠↼⁠_⁠↼⁠) hoy les traigo dos capítulos, dije que serían tres. Pero, el tercer capítulo lo subiré uno de estos días o el sábado, me disculpo nuevamente por la demora.🙇 Y gracias por esperar pacientemente. (⁠◍⁠•⁠ᴗ⁠•⁠◍⁠)⁠❤

Att: Yessi.A

En la villa castillo, una vez mas se encuentra animada como en en los viejos tiempos, risas y música alegré se escuchaba por dónde quier. Se encuentra festejado la recuperación de Alan, dándole una calida bienvenida. El alfa por había salido de ese molesto hospital y regresar con su familia a casa.

Sentirse en casa y rodeado de sus seres queridos era lo mejor de lo mejor, no había algo más grato que disfrutar de esta manera luego de estar a borde de la muerte, olvidarse por un momento que allá a fuera todavía hay alguien que lo quiere destruir a toda costa, su felicidad principalmente.

Pese a eso, no piensa esconderse o darle el gusto de verlo temblando de miedo, no. Vivirá su vida como siempre lo ha querido, vivir con miedo no era una opción ni su deseo. El sacrificio de su pequeño pez de volver el tiempo atrás no iba hacer en bano.

Es por eso que solo por un momento Alan y todos los demás se toman un descanso de esas preocupaciones. Festejado lo que tenía que ser festejado.

Para los señores y los ancianos Castillo, no había cosa más hermosa que ver a sus hijo, nieto y bisnieto Sonriendo ampliamente mientras bailan juntitos los tres.

Tenían que seguir protegiendo esas sonrisas, todo aquel que amenace con borrarlas y cubrirlas de sufrimiento tenían que desaparecer de la faz de la tierra, ya se estaban encargando de eso los abuelos de Alan.

Tenían que recompensar de alguna manera el tiempo ausente, se culpan de haberse ido por un largo periodo de tiempo alejados de sus hijos, nietos y bisnietos. Solo que los ancianos Castillo, en nigún momento se pusieron a pensar que cosas así de graves sucederían durante su ausencia.

Después de todo, su apellido es "Castillo" sinónimo de respeto y miedo en esta ciudad,  país, sin embargo para algunas personas eso no importó absolutamente nada.

—Estoy feliz por el despertar de Alan y como la alegría a vuelto a la familia, sin embargo, ¿por qué siento que me falta algo?—Juega con el anillo de matrimonio que cuelga de su cuello.—No me siento completo y si respiró es porque he olvidado algo importante.

Oliver se encuentra apoyado en el barandal de la terraza, con una copa de vino en su mano y su mirada melancólica en ese cielo.

—¿Qué olvidé?—Agrega presión a la hora de sostener la copa de vino.—¿Por qué mi corazón se estruja dolorosamente cuando tocó está sortija? ¿Cuándo la compré? ¿Perteneció a alguien?—La lamentable mirada en sus ojos se va volviendo más agotada.—¿A quién perteneció y que era esa persona para mí?

Es algo que Oliver se preguntaba ya sea en voz alta, o en su mente cada vez que tiene la oportunidad, a tratado de tirar esa cadena donde llave ese anillo pero no puede. Presentía que si hacía eso sería como estar abandonado su corazón, por lo tanto ni pata bañarse se la quita. La tiene presente en todo momento.

Luego está eso de Harry, ambos hemos estado evitando el encontrarnos. Les decimos a Franck o Tommy que día iremos al hospital para evitar ir el mismo día, a visitar a mi primo cuando estuvo en coma.

De alguna manera los dos estamos evitado enfrentar el hecho que somos destinados, no queremos aceptarlo porque sin importar que nuestras feromonas reaccionen al igual que la parte animal, nuestros corazones y cerebro reniega de ese destino.

No queremos que nuestra vida o relación sea decidido solo porque el destino así lo decidió. Para algunas personas eso debe de ser sensacional, sentirse en un cuento de hadas como sucedió con mis tíos, padres de Alan. Respeto eso, sin embargo cuando se trata de mi vida, entonces mi pensar cambia completamente.

No quiero ni puedo aceptar un amor como ese, esa no es la persona que estoy esperando, no es mi otra mitad. Estoy seguro que por quién estoy esperando anda allá afuera, a la espera de que un día nos vamos a reunir y solo entonces no me sentiré incompleto como me estoy sintiendo la mayor parte del tiempo.

—¿Uh?

Harry se tenso al encontrarse con esa mirada amarilla, quería esconderse de Oliver y al final terminó enfrente de él. Quizás era una señal para que hablaran, poner las cosas en órden.

—Como sea.—Suspiro profundamente.—No podemos seguir huyendo.—Bebio el vino de su copa de un solo sorbo.—¿Puedo?

—Como guste.—Señalo un lugar cerca de él.

—¿Lo siento ese día, verdad?—Se sostiene fuertemente de ese barandal.

—Sí, lo hice.—Sigue mirado el cielo.—Desde el momento en que lo vi no logré controlar mis feromonas y solo quería morderlo.

—No tengo nada encontra de usted, pero no lo acepto.—Mira fijamente a Oliver.—No aceptó que el destino elegía por mí, seré yo quién elegí a la persona que me acompañará el resto de mi vida.

Tengo que romper este lazo si es necesario, Oliver es un hombre guapo con un porte dignó sin embargo no es mi tipo, en este momento mi omega interior podría estar emocionado pero mi corazón ni siquiera se acelera. No estamos hechos para estar juntos.

—Yo tampoco lo aceptó, su sola presencia y tenerlo cerca podría emocionar mi cuerpo pero no mi alma.—Sostiene con fuerza el anillo colgado sobre su pecho.—No acepto este destino, ya me encuentro esperando al dueño de esto.—Señalo el anillo.—Tal vez solo sean mis delirios, anhelos, pero así sea solo eso seguiré esperando a que el vengan por mí.

—Espero que logró encontrar lo que busca.—Extiende su mano.—Le deseó mucha suerte, siga así y no se rinda porque allá afuera es extenso, todo puede pasar.

—Gracias.—Estrecho la mano con la de Harry.—Usted también no se rinda y siga persiguiendo los sueños que quiera seguír e experimentar.

—Así será.—Sonríe.

Fue leve pero los dos sintieron como ese hilo se tensaba con cada declaración y pensar de ellos dos, llegando al punto en que ese hilo produjo un "clic" rompiéndose perdiendo comunicación y dirección de los dos agentes del destinos encargados de llevar acabó la unió de esa pareja.

‹Michael, al final la persona de la cual te enamoraste terminó escogiendote aun cuando no tiene recuerdos de ti. Le entregastes tu corazón a una persona merecedor de él.› Fue lo que Franck le comentó al viento mientras miraba a esos dos hablado sin incomodidad alguna, no sería una sorpresa si llegasen hacer buenos amigos.

‹El final de esa lucha entre Alan y su destino está por llegar a su fin, solo esperamos que su bisabuelo ya dejé de culpar a Mateo y a su hijo de lo que le sucedió a su amada hija. Desde un principio su hira terminó en el lugar equivocado, hizo sufrir tanto a Alan, cuando él no debe absolutamente nada›

Sí, Alan era bisnieto del creador de este mundo y abuelo de la madre de mateo, la diosa que terminó enamorándome de Dámaso Reyes, abuelo de Alan y padre de mateo.

—Papá, padre.—Habla el pequeño pez, aferrado del cuello de Alan y Nick.—¿Quieren estar solos?

Ellos dos no han podido tener algo tiempo a solas, mis tíos, primos, llegaron al hospital y no tenían la intención de irse o dejar solo a papá, por lo tanto ellos no han hablado mucho como lo quisieran.

—¿Por qué piensas eso?—Ambos padres se sorprendieron por tal pregunta.—Queremos estar así, juntitos los tres.—Frotan sus mejillas contra las del Jackson.

Pasar tiempo con Jackson es y será lo más importante para el par de alfas, tienen que proteger a su pequeño pez que no lograron proteger en la primera línea, llenarlo de besos, de momentos inolvidables.

—Lo sé.—Sonríe al sentir los mimos de sus padres.—Sin embargo, los dos merecen un tiempo a solas.

Para todos nosotros el tiempo que papá estuvo inconsciente postrado en esa cama fueron y se sintieron como siglos en agonía, principalmente para padre. Él poco a poco iba cayendo en ese oscuro abismo, pero logró resistir de seguir cayendo cuando papá, mostró signos de despertar.

Eso le ayudo y mi presencia también fue su consuelo, por mí no se dejó vencer por completo. No quería hacerme sufrir o hacerme pasar por mortificaciones y mucho menos dolencias más de lo que ya estaba pasando.

Aun cuando lo trato de ocultar era doloroso verlo tan perdido sin vida en sus ojos, era como ver un cadáver viviente respirando por simple obligación.

—Llamaré la atención de todos mientras ambos, se escabulle a la habitación.—Besa la mejillas de sus padres.

—¿Qué?—Ambos padres siguen sin comprender nada.

—Hoy me quedaré a dormir en la habitación de mis abuelos o bisabuelos.—Cualquier de ellos está bien.—Quién logré convencerme primero será el ganador de tener mi presencia.—Sonríe un poco malvado.

Alan y Nick se desconcertaron por unos segundos, sin embargo al final solo sonrieron ante las palabras de su inteligente y algo pícaro de su pequeño y muy amado pez.

—No se preocupe por mí, estoy bien protegido por todos ellos.—Aparte, mañana y mañana tendré a papá solo para mí.

Lo lamento por padre, pero el tiene que ir a trabajar. No puede seguir dejado la empresa en manos del tío, Tomy. Se irá a la quiebra antes de que yo, tome control de ella. Sí papá me da un hermanito entonces él o ella será la dueña de la empresa familiar castillo.

Mis tíos y primos ya dijeron que ellos tienen su propio legado que este le pertenece a los hijos de papá, por esa parte es genial que mi familia no luchen por quien será el sucesor.

—De acuerdo, pondremos toda nuestra confianza en nuestro adorable pez.—Baja de sus brazos a Jackson.

—Sin embargo.—Nick miro a lo lejos ese pequeño niño, Kory hijo de Antón.

Desde hace un buen rato que esos ojos grises se encuentra en Jackson, eso no le pareció nada agradable a Nick. Presentía que un cerdo estába codiciado a su precioso pez.

—No te acerques mucho a Kory.

—Él es mi amigo, él único que a estado conmigo y a venido al hospital todos los día.—Expresó.—No puedes pedirme eso, padre.—Nick mordió un pañuelo invisible, enojado y feliz por ver a su hijo refutarle con ternura.

Gracias a él distrayendo mi atención y hablado de algo más pude dejar de sentirme tan sofocante al ver el estado de mi papá en ese entonces en el hospital.

—No me refiero solo que...

—Puedes ir a jugar con él tanto como quieras.

—¡Sí!—Sonríe.

—Pero, sol...

—Solo son niños.—Susurró al oído de su alfa.—Cuándo estén grandes entonces vamos advertirle que ni crea que se comerá a nuestro pequeño pez.

—Tienes razón.—Levanta en sus manos al de ojos amarillos.—Vámonos, no podemos dejar que nuestro hijo llame la atención de todos en vano.

Alan se sostiene del cuello de Nick, mirándose en todo momento no quería perderse ni un segundo de esa sonrisa hermosa en los labios del alfa ojos turquesas.

Cuando nadie podía verlos fue entonces que Alan, saboreó los labios de su amado, perdiéndose en el deseo y pasión que desbordaban sus cuerpos.

Antes de caer a la cama ellos ya estaban completamente desnudos apreciando el cuerpo del contrario, acariciando con besos y caricias su acalorada piel que ardía con el roce de sus dedos deslizándose suavemente por todos los lugares de su cuerpo.