Alan y su molesto primo llegaron a la mansión castillo.

__Bienvenido, maestro. Y joven Oliver.

__¿Dondé esta, Jackson.?.__ el esta tomado una siesta después de jugar se cansó y el sueño lo venció.

__qué descanse entonces, Oliver acompáñame a mi despacho.

Oliver lo siguió obedientemente como si Alan fuera su amo, al llegar al despacho los dos entraron Alan se siento en el sillón Oliver siguio su ejemplo.

__Entonces cuéntame más sobre tu compromiso.

__Veras, Marisa es una alfa qué desde la infancia está obsesionada conmigo no me deja tener a nadie qué se me acerque es como un clique pegada a mi es frustrante.

__Y Michael, ¿ya sabe que el te atrae..?

__Pues eso es más qué obvio, el se siente igual, pero por culpa de marisa no podemos estar juntos esa loca podría hacer cualquier cosa.

Alan se quedó pensando si ayudar o no este Oliver siempre fue bueno con alan bueno toda la familia se llevan bien es un gran alivio que no hayan rivalidad ya que todos son alfas y betas capaces, así es la familia no tiene ningún hijo oh nietos omegas, Jackson cuando cumpla siete será un alfa o no. Lo cual no importa para mí, pero para este mundo retorcido es diferente.

__visitare la casa de mi tío Fred la otra semana dile qué primero tenemos que evaluar dicho compromiso.

__Gracias prim.. una voz interrumpió a Oliver.

__Maestro, el joven maestro ya despertó esta aquí conmigo ¿lo dejo entrar.?

__Deja qué entre.__ Dilan abrió la puerta dejando qué Jackson entrara corriendo para ir abrazar a su padre se veía tan tierno con esas piernas cortas.

__Dilan, tráeme una taza de café y para Jackson un fresco de naranja y tu Oliver.__ todo lo dijo mientras sostenía al pequeño Jackson.

Oliver estaba embobado por lo bonito qué se veía Jackson, ahora ya no esta tan desnutrido, sus mejillas ya se ven un poquito regordetas.

__¡OLIVER.!__Ese pequeño grito lo sacó de sus pensamientos.__ ¿Qué decías.?

__¿Qué deseas de tomar.?__ una taza de té.

__Enseguida..__ dijo Dilan para luego retirarse.

__Papá, hoy me divertí mucho__ comento el niño mientras sonría.

__¡Encerio.!..__Si.

__Eso me alegra muchísimo, todos tus días serán así de felices lo prometo.

Jackson al escuchar eso, ledio un pequeño beso en la mejilla de Alan algo tímido por lo que había hecho.

Ignorando al pobre Oliver.

__Alan, no me presentara.

__¡Oh, Es verdad.! Jackson miras a esa persona de ahí.

El niño solo asistió.

__Es tu tío aunque es un poco molesto, es una buena persona, ¿oh, qué dices tu.?

__El, no me causa miedo, susurró el niño un poco incómodo.

Oliver quedó un poco desconcertado, volteó a ver en dirección a su primo para que este le dijera qué después le contaría los detalles.

__Bueno, Jackson espero y nos llevamos bien ya qué vendré seguido.

Dilan entró con los pedidos, alan tomó su café como todo amante de la cafeína.

__Alan.__ Si.

__Jackson aún no asiste al Kinder.

__aun no, tiene qué sanar primero para que se le haga más fácil.

Oliver no comento más al respecto después de un rato se fue, pero con una amenaza de por medio Alan le dijo que si llegaba hablar de Jackson con la familia haría que se casara con Marisa.

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En lo más alto de una montaña se podía observar una casa donde estaban dos hombres entre los 36 y el otro 40.

El de treinta seis años tiene cabello negro ojos azules sus rotro seve tan hermoso como si los años no pasarán por el, con una altura de 1.69 cm.

El de 40 años es hombre tan fuerte que parece tener unos 30 su piel es clara un hermoso cabello azulado su par de orbes amarillos, sin ninguna arruga en su cara su altura de 1.74.

Ellos estaban tomados de las manos mientras veían el hermoso paisaje sentados en una silla mecedora.

__Alejandro cariño, como estará nuestro pequeño Alan.

__Mateo, Alan ya es todo un adulto se puede cuidar solo, aparte ya quiero un nieto no importa si lo tiene de una aventura de una noche.__ Dijo Alejandro castillo padre de Alan.

__Lo se, pero me causa lástima qué no encuentre a quien amar.

__Lo tendrá, tal vez ahora no pero más adelante ya lo veras qué si Mateo cariño, aparte ya solo faltan dos semanas para que volvamos.

Mateo solo asistió, mientras le daba un beso en los labios a su amado esposo.