Alan llego a la empresa, todos los empleados lo observa muy curiosamente ya que se trae una cara de pocos amigos nada al anterior Alan que era solo risas y coqueteó con las empleas.

La secretaria maya se le acercó dándole una carpeta de todos los pendientes que realizar ahora.

__Maya y sobre la investigación.

__Presidente aún no hay resultados al parecer alguien está cubriendo dicha información.

__Ya veo, sigue aun así tarde oh temprano hallaremos algo.__ Entiendo.

Alan fue a su oficina y comenzó a revisar todo los pendientes era una montaña llena de foldes con propuestas que tenía que firmar.

Se sentó mientras suspiraba ya que no saldrá luego.

Pensé que al ser rico ya no trabajaría pero me equivoque es más pesado qué ser un asalariado.

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__Ya vieron como el presidente parecía tan frío, ahora ni siquiera nos volteó haber como lo hacía antes.__ dijo una de las empleadas.

__Habla más bajo mari y si, por un momento sentí miedo ver eso ojos amarillos sin expresión como si todos aquí fueros nada.

__Pero debemos admitir eliza qué ahora me parece más guapo.

__Dejen de chismear señoritas, ahora el presidente será incansable para usted.

Comentó maya mientras pasaba, con un café qué era para Alan.

Las empleadas sólo la miraron con molestia, odian a maya por qué ellas siempre les recuerda qué Alan jamás se fijará en ellas aún si pasan una noche juntos, maya sabía bien que su presidente solo le gustaba jugar nada más eso no tomaría nada encerio. Y verlo ahora con este cambio lo admira ¿por qué.? Así debería ser un alfa dominante multimillonario.

Toc Toc Toc.

__Pase.__ su café bien cargado con media cucharada de azúcar.

Alan tomó el café, lo necesitaba ya que es adicto a la cafeína.

__Presidente, qué hago con las cita de esta noche.__ ¿qué cita.? Alan la miró confundido.

__Cada día sale con una empleada diferente de aquí de la empresa.

Fue un alivio qué no tubiera café en mi boca ¿porqué.? lo hubiera escupido, lo cual seria una tragedia por el montón de papeleo enfrente de mi.

__Maya apartir de ahora nada de eso volverá a suceder, traslada a todas esas personas con las qué me relacione a otras instalaciones.

__Como gusté.__ dicho eso me retiré ahora seria un día ocupado ya qué son como 15 personas suspirar su presidente era todo un caso aunque nunca se acostó con ellas lo cual nunca entendí y ni quiero entender.

Maya caminaba distraídamente cuando chocó con alguien sacándola del mundo de los pensamientos.

__Auch, lo siento..__ dijo maya mientras frotaba su frente para luego dirigir su mirada a la persona enfrente de ella.

Un hombre alto 1.89 cm de altura, piel clara un cabello azulado,ojos amarillos, sus cejas son rectas un poco pobladas, nariz bien definida sus labios delgados, lleva un traje negro resaltando su figura con un par de zapatillas café bien lustradas.

Maya cuándo se dio cuenta qué era Oliver castillo el primo del Alan, aunque nunca lo haya visto sabia qué era familia por qué solo hay una familia con cabello azul y ojos amarillos y esa es la castillo.

__No te preocupes, yo tampoco venía prestando atención.__ dijo mientras sonría.

__Podria ayudarlo en algo.__ Si, busco a mi primo, les dije qué soy Oliver castillo pero aquí en recepción no quieren darme el pase.

__¡Oh.! lo siento, es algo qué el presidente nos pidió estrictamente ya qué hubo un tiempo un alborotó. Puede seguirme lo llevaré al la oficina.

Ambos subieron el elevador, era algo incómodo ya qué ninguno de los dos hablaba. Maya estaba deseando llegar rápidamente al séptimo piso. Y sus oraciones fueron cumplidas ya el elevador se detuvo.

Ambos salieron, maya volvió a tocar la oficina de su presidente.

Toc Toc Toc

__Adelante, Maya y Oliver entraron y por un momento casi jadean al ver tal vista espectacular, Alan tenía su cabello azul desordenado lo que lo hacía lucir lindo se había quitado el chaleco de su traje su camisa tenía tres botones sueltos dejando ver esa hermosa piel tan clara se había enrollado las mangas de la camisa mostrando esos fuerte brazos era algo que no se veía todo los días.

Querían disfrutar más de la vista pero Alan levantó su vista solo para ver a dos personas con ojos bien abiertos.

__¿Qué sucede, por qué no dicen nada.?

__Cof, cof. Lo lamento presidente, el joven Oliver castillo.

__Si, ya lo sé puedes retirarte Maya, y tu Oliver puedes sentarte.

Maya se despidió de ambos para luego salir.

__¿Qué te trae por aquí Oliver..?__primo casi no te reconozco con ese estilo qué traes.

__Deja tu sarcasmo y responde.

__Quiero qué le digas a mi padre qué no estás de acuerdo con mi compromiso con la hija de la familia Salazar.

__¿Por qué haría eso.? ¿qué gano yo.?

__No le diré al abuelo qué todo este tiempo te metiste con cualquier que de milagro no tienes un hijo.

__Ya lo tengo.__ se lo dije sin mirar su cara aún concentrado en trabajo.

__QUÉ. Oliver gritó por la conmoción por dicha declaración.__ ¿Estas bromeando verdad.?

__No es ninguna broma, tiene seis años se llama Jackson.

Me recoste en la silla mientras procesaba todo, como diablos logró ocultar esto durante tanto tiempo, si antes lo admira ahora un más.

__Alan, eres mi modeló a seguir, así qué primo podrías intervenir en mi compromiso, no quiero estar con esa acosadora aparte ya tengo a alguien qué me gusta.

__Si ya lo se, es Michael..

__ entonces lo harás, Alan por favor.

__Esta bien hablaré con el tío..__ lo dijo mientras suspiraba, vio su reloj y noto que ya era la hora del almuerzo, su trabajo ya está echo ahora ira dónde su preciado hijo.

Alan tomó su saco sin acomodar su ropa y salió, Oliver lo iba siguiendo como una garrapata ya qué este quería conocer a su sobrino.