Narra Ace

Me desperté abriendo poco a poco los ojos. Ella estaba ahí, tumbada boca arriba, su cara estaba hacia mi, aparté varios mechones de su rostro y la miré sonriendo. Bajé más la mirada y vi que su camisa se había subido hacia la cintura, dejando ver su ropa interior, me volví a tumbar a su lado con la cara ardiendo. Me preguntaba si ella había escuchado lo que le dije anoche...

(Tn)- Ace...

La miré y ella estaba sonriendome aún con los ojos cerrados.

-Buenos días - dije devolviendole la sonrisa aunque ella no me veía.

Ella se incorporó y se puso una mano en el abdomen.

(Tn)- He de ir a cambiarme las vendas y echarme el líquido que me dio Law.

Me levanté y caminé hacia ella- ¿Necesitas que te ayude?

(Tn)- Descuida, puedo yo sola - Me sonrió y salió de la habitación.

Cuando bajé a desayunar ella estaba tomando unos cereales, cuando me vio sonrió alegre.

(Tn)- Ya lleguemos a la isla, ¿te parece bien si vamos después de desayunar?

-Claro- Dije poniendo mi desayuno junto al de ella- ¿Cómo tienes las heridas?

(Tn)- Mejorando -dijo tomando una servilleta y limpiando mi mejilla- Siempre comes como si fuese la última vez, recuerdo cuando tú y Luffy pusisteis la casa de Dadan llena de restos de carne y destrozos- dijo sin evitar reír.

Sonreí recordando y la miré alzando la ceja- Creo que tú también comias como si se fuese a acabar el mundo.

(Tn)- Normal, con vosotros quien no se da prisa no come -dijo riendo- luego nos lanzó a los tres a la bañera.

Sonreí y le revolvi el pelo.

Narra (tn)

Cuando terminemos de desayunar nos bajamos del barco, lleguemos a una isla estaba formada de un bosque muy espeso. En estas islas por el día hace calor y por la noche frio, no pensemos estar todo el día fuera asique nos fuimos sin ropa de abrigo. Caminemos adentrándonos en la espesura. Al cabo de unos instantes apareció un oso de un tamaño muy poco normal.

-Ace, ¿No te recuerda a las bestias que había en la isla donde nos criemos?

Ace sonrió y asintió- Ha pasado tiempo pero... ¿Lograrás vencer a uno tú sola?

-¡CLARO QUÉ SÍ! - Dije ofendida y enfadada.

Ace río ante mi reacción- Demuestra- se sentó en una de las rocas que había allí y me observó.

Narra Ace

(Tn) comenzó esquivando todos los ataques del oso gigante, tras unos cuantos segundos haciendo esta técnica (tn) puso la mano en el suelo, el oso saltó encima de ella y justo antes de que sus garras impactaran contra ella unas gruesas y fuerte enredaderas salieron del suelo atando al oso y suspendiendolo en el aire, (Tn) saltó encima del oso haciendo que este cayera al suelo dejándolo inconsciente e impedido.

Me miró con una sonrisa alzando los brazos diciendo que si lo había visto.

Le sonreí, realmente mi hermana pequeña era increíble.

Se acercó a mi corriendo.

(Tn)- Hehe ¿Qué te pareció? -dijo sonriendo con el ceño fruncido.

- No está nada mal- le sonreí y empecemos a caminar.

(Tn)- No hay nada interesante, es todo bosque, alguna que otra casa de madera pero nadie vive aquí...

Empecé a pensar que poder hacer pero en ese instante comenzó a llover.

(Tn)- Qué suerte tenemos... ¡¡Ace!! El agua te debilita, tenemos que encontrar refugio...

-(tn), el agua dulce la soporto mejor, ¿Cómo si no crees que me baño?

(Tn)- Tiene sentido -dijo riendo y buscando un lugar donde ocultarse de la lluvia- pero aún así no podemos quedarnos aquí.

- Allí hay una cabaña -entremos a esta, era algo pequeña pero tenia de todo lo necesario para vivir - esperaremos aquí a que pase la lluvia.

Narra (tn)

Mi ropa estaba totalmente empapada, miré a que estaba de espaldas mirando la cabaña y lo abracé por detrás.

-Ace... hace frio... enciende el fuego.

Ace volteó la cara y me miró sonriendo- Aquí no se puede, esta casa es de madera, sí enciendo fuego se quemaría todo.

Me separé, Ace se volvió y me miró. Su ropa estaba mojada, al igual que la mía. Miré por la ventana y no tenía pinta de parar de llover pronto.

-Ace...

Ace- ¿Sí?

-Cuando me fui a aprender magia... ¿me echaste de menos?

Ace me miró soprendido y un tanto molesto.

Ace- ¿Qué te crees?, tanto yo como luffy lo pasemos muy mal con tu partida... Recuerdo ese día -dijo cambiando el tono de la voz a una más triste- fue en tú cumpleaños de los 13, todos estábamos en la casa de Dadan celebrándolo cuando apareció ese hombre... Dadan tuvo que golpearme varias veces para que no te siguiera y aún así no sirvió de nada y me ataron a un árbol toda la noche. Luffy no paraba de llorar llamandote, Dadan y el resto también lo pasaron muy mal. Estuvieron varios días sirviendo un plato de más, cuando se acordaban de que no estabas ella se iba a otro lado a llorar.

Me quedé mirándolo sin saber que decir, no sabía que hubiese afectado tanto mi partida.

Ace- Todo fue distinto, cuando estaba con Luffy o en el bosque no me sentía bien, sentía que me faltaba algo, algo que realmente era importante para mi. -Me miró serio y con un pequeño brillo en los ojos y una voz temblorosa- no ha pasado un solo día desde ese entonces que no haya pensado en ti, cada día pensaba en lo que podría haber hecho para evitarlo. Cuando oí tu nombre en aquella posada, me giré y te vi, no sabes como me sentí, no pude evitar no pedirte que te unieses barbablanca, no quise volver a separarme de ti.- Me miró atentamente y se acercó más a mi- Asique no pienses por ningún segundo que no me importó tu partida.

Sentí unas lágrimas correr por mis mejillas, Ace sostuvo con sus manos mi cara alzando la para mirarlo.

Ace- Eres muy importante para mi, daría mi vida por proteger la tuya.

- Yo también daría mi vida por ti- le sonreí y le puse mi mano en su mejilla.

Ace- (Tn) estás helada, vas a enfermar si no te secas.

-Es difícil secarme... no puedes hacer fuego aquí.

Ace pensó durante unos segundos y luego me volvió a mirar con la cara ruborizada, me guió hasta uno de los sillones que había allí y me sentó.

Ace- Quítate la camisa... -su voz temblaba y miró a otro lado.

Hice lo que me dijo- Ya está...

Volteó su cabeza hacia mi y sin mirarme me tomó del brazo y tiró de mi hacia él, se tumbó boca arriba y a mi me puso encima.

-Ace... -dije confundida pero note que de su cuerpo salía calor, el iba a usar su cuerpo para calentarme. Sus brazos me rodearon y me abrazó, le miré y su cara estaba completamente roja y sus labios estaban ligeramente apretados.

Recoste mi cabeza en su pecho sin dejar de mirarlo.

Estuvimos así varios minutos, en silencio y escuchando la lluvia, cuando estuve seca y movió sus manos y me miró.

Ace- Ya estás seca... puedes levantarte.

No quería, quería estar así más tiempo.

Ace- (tn)...

Levanté la cabeza y la puse encima de la suya mirándolo, separé las piernas y las puse a ambos lados de él. Me miró nervioso.

Le besé la frente y le sonreí. -Gracias por cuidarme tanto.

No dijo nada, solo me miraba ruborizado, apartó la mirada avergonzado y sonreí a esto. Me levanté pero antes de que yo lo hiciera él me empujó y me puso debajo de él.

-¡Hey! -le miré molesta- ¿A que viene eso?

Ace- No puedo... no puedo más ...

Le miré confusa pero antes de que pudiera decir nada me besó.

Fue un beso apasionado donde él parecía no quedar satisfecho, empezó a jugar con mi lengua y se retiró para tomar aire, me miró, estaba más rojo que nunca. Yo no sabia como reaccionar, él me miraba preocupado esperando mi reacción, pero no sabia que hacer

Ace- Lo siento, (tn)... soy un hermano mayor horrible...

-Ace... no...

Ace-... ¿Qué hermano desea a su hermana?...¿Qué tipo de hermano se enamora de su hermana pequeña?...

-¿Qué...?...¿Tú...?

Ace- Estoy enamorado de ti- dijo mirándome avergonzado- desde que eramos pequeños, por eso nunca me fijé en otra chica. (Tn), estoy enamorado de ti.