64- Dificultad

Pasaron varios días desde que la chica volvió a la tripulación. Fueron días pacíficos, no habían tenido ningún encuentro desafortunado con la marina y el ambiente en el barco era tranquilo en cuanto a luchas.

(Tn) rechazó el puesto de comandante de primera división, quería dedicar todo el tiempo posible a entrenar para poder enfrentar al último dragón, del cual no sabía nada, ni siquiera Viserion sabia nada de ese último dragón, según sus palabras era tan incierto el paradero de esa katana que ni él mismo sabia a que dragón pertenecía. Por lo cual la chica se entrenaba esperando cualquier tipo de poder.

La relación con sus nakamas fue mejorando hasta ser la de siempre, pero por otro lado Marco apenas hablaba con ella, se mantenía siempre alejado y agradeció enormemente que la chica hubiese rechazado el cargo de primera división, solo así podría alejarse de ella, tal y como prometió a Ace que haría si ella volviese.

En cambio Ace apenas hablaba con nadie, tan solo intercambiaba las palabras justas como comandante de segunda división, por lo que con la chica no cruzó palabra alguna desde el día en el que volvió a la tripulación. (Tn) cada vez que intentaba hablar con él este se iba o simplemente decía que tenia cosas que hacer y esto destrozaba enormemente a la chica.

Ahora se encontraba en el comedor almorzando mientras miraba disimuladamente a Ace, el cual comía sin hablar con nadie y con su mirada clavada en el filete de carne que había sobre su plato.

Cuando acabó de comer se levantó y caminó hacia él, le puso una mano en su hombro y se acercó a su oído pero antes de que pudiese decir nada Ace se levantó y se fue de allí sin apenas terminar su comida, dejando a la chica confusa y dolida.

Se mordió el labio intentando reprimir las lágrimas y se fue hacia el gimnasio, el lugar en el que podía desahogarse. Al llegar encendió las luces, se tumbó en la maquina de levantamiento de pesas y comenzó a hacer deporte.

Pensó en Ace, en su comportamiento tan distanciado con todos y sobretodo con ella, no pudo evitar sentirse culpable de ello, ella tenia la culpa de su comportamiento pero, ¿que podía hacer?, ¿seguir con él sabiendo que le hizo daño?, no podía permitirse eso, volvió a la tripulación para estar con él pero no como pareja, su amor por el chico no se centraba únicamente en el índole sexual, si no que la chica deseaba verlo bien, cuidarlo y protegerlo de todo aquello que quiera herir lo, por eso regresó.

La chica comenzó a levantar aquella pesa más rápido dejándose llevar por las emociones de sus pensamientos y comenzando a sudar por el esfuerzo.

Si tan solo pudiese retroceder en el tiempo e impedir que nada hubiese pasado...

La pesa se resbaló de sus manos húmedas por el sudor y cayó sobre su vientre provocando que un grito agudo lleno de dolor saliese de la garganta de la chica, pateó las demás pesas sin querer haciéndolas caer sobre el suelo mientra intentaba levantar la que aplastaba su vientre pero sus manos húmedas no hacían más que dificultar el intento.

Escuchó unos pasos apresurados acercarse hacia la puerta del gimnasio, la cual se abrió de par en par. No le dio tiempo a mirar quien era debido a que unas manos le ayudaron a levantar la pesa y ponerla en su lugar.

La chica tosio un poco y miró al chico que habia venido a ayudarla.

Ace- ¿Qué pretendías hacer? -dijo nervioso mirando su vientre rojo por golpe. - ¡Podía haberte caído en el pecho o en la cabeza!

(Tn)- L-lo siento...

Ace- ¿En que estabas pensando? Tienes que centrarte en el ejercicio y más si estás bajo una pesa.

La chica lo miró sintiendo una mezcla de sentimientos. - Lo siento. -susurró mirándolo.

Ace la miró a los ojos después de hace mucho tiempo, la chica tenía sus mejillas rojas, su escote mojado por el sudor, su respiración entrecortada por el golpe y el esfuerzo del deporte y una mirada llena de ternura hacia él.

Ace se mordió el labio intentando reprimir sus impulsos, no podía permitirse perder el control sobre su cuerpo ahora.

Se incorporó apartando la mirada sobre ella. - Llamaré al doctor para que te revise.

(Tn)- Ace.

El chico no dijo nada.

(Tn)- Te echo de menos...

Ace la miró.

(Tn)- No me ignores así, me duele que lo hagas. - le tomó la mano impediendo que se fuese en cualquier momento.

Ace- (Tn)...

(Tn)- Por favor, no puedo seguir con esto, me duele que me ignores, me duele verte tan distante con todos.

Ace- Te sigo amando, si no me alejo de ti temo hacer algo que seguramente no quieres que haga.

(Tn)- Yo también te sigo amando y dudo que deje de hacerlo algun día pero no quiero que te distancies, ni de mi ni de ninguno de nuestros nakamas.

Ace- Esto es difícil para mi.

La chica bajó la mirada sin soltar su mano, se sentó y miró su mano entrelazada con la de él.

(Tn)- Lo se, para mi también es difícil no poder abrazarte o besarte. -soltó su mano provocando que la calidez que Ace sentía en su pecho ante aquel contacto desapareciera. - Lo siento, no volveré a insistir. - se volvió a tumbar, se secó las manos y agarró la pesa. -Gracias por lo de antes.

La chica comenzó nuevamente con su ejercicio ignorando sus ganas de llorar.

Ace miró su mano, la cual ella sujetó hace unos instantes, giró la cabeza y la vio levantando aquella pesa.

Ace- He visto que últimamente estás entrenando bastante. -susurró apartando su mirada.

La chica se detuvo y lo miró algo sorprendía. - Sí, tengo que entrenar para enfrentarme al último dragón.

Ace lo miró alarmado- ¿¡Contra un dragón!?

(Tn)- Sí.

Ace- No... No puedes, es peligroso...

(Tn)- Debo hacerlo, si no comienzo la lucha yo lo hará él.

Ace- No quiero que lo hagas, te perdí una vez, no quiero volverte a perder. -sus ojos comenzaron a cristalizarse.

(Tn)- No puedo garantizar mi seguridad, quizás pueda ganar o quizás muera, eso no lo se pero de lo que si estoy segura es que lucharé con todas mis fuerzas.

Ace- (Tn)...

(Tn)- Zoro me enseñó a saber que si muero es por que no estuve destinada a ir más lejos.

Ace- No digas eso.

(Tn) dejó la pesa y lo miró dudosa.

Ace- No puedo vivir en un mundo en el que no estás tú.

(Tn)- Ace...

Ace- (Tn), yo no...

(Tn) le puso una mano en su boca impidiendo que continuase hablando. - Tranquilo, aun no me he ido. -sonrió.

Ace asintió y apartó su mano. - He de irme.

El rostro de la chica se entristeció. - De acuerdo.

Ace se dio la vuelta con la cabeza gacha, antes de que saliese del gimnasio una voz lo detuvo, haciendo que su corazón se estrujase.

(Tn)- Se que es difícil para ti asi que por ello intentaré estar alejada unos días hasta que estés mejor, odio verte triste.

Ace - ¿Y cuando será eso?

(Tn) bajo la mirada sintiendo su garganta arder reprimiendo las lagrima ante lo que iba a decir.

(Tn)- Hasta que te olvides de mi. - unas lágrimas cayeron. - Hasta que ya no sientas nada por ti...

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