Narrador omnisciente

Viserion- Bueno... no te ves tan mal.

(Tn)- ¿Cómo no me voy a ver mal?, ¡Si parece que tengo la cara rota!.

Viserion- El poder de la luz es uno de los poderes más fuertes, al parecer tu cuerpo le costó adaptarse.

Zaldrizes- Por fin lo admites.

(Tn)- Sal de mi cuerpo. -dijo enfadada.

Viserion- Deberías entrenar un poco.

La chica suspiró pesadamente mientras volvía a ver su cuerpo en el espejo. Se parecía un poco a la transformación que adoptaba con Viserion, pero el color de las escamas eran negras con destellos dorados, sus ojos eran rojos y blanquecinos, sus cuernos mas retorcidos y raros y al rededor de estos parecía estar la piel agrietada formando cicatrices negras. Estas marcas no sólo se encontraba por su rostro, si no también en su vientre y espalda. Las tocó con cuidado esperando una textura rara o algún tipo de dolor pero no presenció nada, sintió su piel sin ningún tipo de alteración.

(Tn)- Parece que están pintadas... estoy horrible...

Viserion- ¿Esperabas parecer un mapa en relieve?.

(Tn)- A pesar del tiempo aun no me acostumbro a esto.

Viserion- Es normal, no todo el mundo tiene este honor.

La chica río un poco. - Supongo...

Viserion- ¿Te duele algo?

(Tn)- Un poco la espalda...- la chica suspiró- No pienso quedarme contigo dentro como hice con Viserion.

Zaldrizes no respondía.

(Tn)- ¿Me oyes?

Zaldrizes- No pensaba hacerlo.

(Tn)- Bueno, vamos a entrenar un poco con está forma... te lo prometí.

En ese momento se oyó unos fuertes toques en la puerta acompañados de una voz que la chica reconoció al instante.

Ace- ¿¡(Tn), estás ahí!?

La chica no sabia que hacer, no quería que Ace la viese así pero Viserion obró por ella y fue a abrir al insistente Ace, él cual entró alarmado buscando a la chica.

(Tn) se giró rápidamente tapándose el rostro presa de la vergüenza.

Ace la observó desde atrás y se dirigió hacia ella más tranquilo.

Ace- (Tn)...

(Tn)- N-no me mires...

Ace- ¿Por qué...? (Tn) mirame. -su tono era lo más cariñoso que se podía permitir con tal de calmar a su chica.

(Tn)- Estoy horrible... vete por favor...

Ace se puso delante de ella y se inclinó sonriendo tiernamente. -Eres preciosa, no importa que te ocurra en la piel, siempre serás la chica más hermosa que pude ver.

(Tn)- No ves a muchas chicas...

Ace- Contigo no me hace falta ver a nadie más. -acarició sus manos. -Vamos...

(Tn) dudó unos segundos. - ¿No te reirás y te asustarás...? Parezco un monstruo... tan solo mirame el cuerpo... -Ace bajó la mirada hacia su cuerpo percatandose de las escamas y las cicatrices negras. - Se te van a quitar las ganas de abrazarme por meses.

Ace- Eso nunca pasará, (tn).

La chica deslizó sus manos con cuidado mientras evitaba mirarlo. El chico la observó un poco sorprendido por el rostro de la chica.

Pasaron unos minutos en un silencio incomodo para la chica, la cual evitaba mirarlo.

(Tn)- No dices nada...

Ace no respondió. La chica comenzó a sentir más vergüenza y sintió sus mejillas calentarse y sus ojos empañarse.

Viserion- Ace.

El chico parecía no reaccionar. - Yo... no se que...

La chica lo miró mordiéndose un poco el labio.

Ace- Estás... bueno,yo pienso que...

(Tn) bajó la cabeza mientras se cubría un poco el cuerpo.

Ace- Pienso que estás graciosa. -dijo con una amplia sonrisa.

(Tn)- Graciosa... -susurró.

Ace- Sí, estás rara pero graciosa.

(Tn)- ¿Te doy risa? -su tono era apagado.

Ace- Parece como si Buggy te hubiese maquillado. -estalló en una carcajada.

Zaldrizes- ¿Quien es ese? -dijo ofendido desde el interior de la chica.

Ace- Oh, es un pirata.

Zaldrizes- ¿Cómo te atreves a compararme con un humano?

Ace- Eh... -su risa desapareció.

La chica se mantuvo en silencio.

Ace- (Tn)...

Viserion- Será mejor que te vayas, tenemos cosas que hacer.

Ace miró a la chica percatandose de que se estaba mordiendo su labio tembloroso mientras unas lágrimas le bajaban por las mejillas.

Ace- Sí...

Viserion se acercó a ella preocupado. -(Tn)...

La chica se secó las lágrimas y negó. -No importa, comencemos el entrenamiento.

Viserion- ¿Estás segura?

(Tn)- Sí, luego rompemos la fusión, vamos a ducharnos y a cenar.

Por otro lado Ace se encontraba en la borda del barco sentado y sujetándose la cabeza con sus manos.

Ace- ¿Cómo he podido ser tan idiota...?

Marco- No tendrías que haberle dicho eso... ella estaba insegura de su aspecto y decirle que estaba graciosa no fue buena opción.

Ace- Estaba llorando... la hice llorar.

Marco suspiró. - Deberías pensar las cosas antes de decirlas... -cerró la boca mordiéndose el labio.

Ace- Lo se... soy idiota.

Marco- Deberías arreglarlo.

Ace- ¿Cómo?

Marco- Ojalá pudiese saberlo... -dijo esta vez en voz baja.

Ace- Hasta Viserion se dio cuenta de mi error...

Marco suspiró. -Deberías relajarte y ver las cosas desde otra perspectiva. Deja de lamentarte así no consigues nada.

Ace- ¿Y que hago?

Marco- Pídele perdón.

Ace- Eso haré.

Horas más tarde la chica salió del gimnasio con su aspecto normal, sus ropas rasgadas y su rostro rojo por el ejercicio.

Pasó por la borda ignorando las miradas pervertidas de sus nakamas y las preocupadas de los dos chicos.

(Tn) entró a su habitación cerrando la puerta y los dragones se tumbaron en la cama mientras ella tomaba ropa limpia del armario y entraba en el baño.

Intentó relajarse en el agua olvidando el comportamiento de Ace pero le era difícil, le hizo sentir mal por esos segundos en los que él le dijo eso.

Pasó un par de horas allí dentro que le parecieron segundos, se sentía agotada con el ejercicio y la fusión. Cuando salió de allí se vistió y se arregló un poco para la cena.

Viserion- ¿Te quedaste dormida?

(Tn)- No, es que se estaba muy bien. -sonrió un poco.

Zaldrizes- Los humanos hacéis cosas extrañas.

(Tn)- ¿Vosotros no os bañais?

Viserion- Nuestras escamas se limpian solas.

(Tn)- Oh... ¿Os limpiais el uno al otro?

Zaldrizes- ¡¡No digas estupideces!!

Viserion- ¿¡Cómo te atreves a decir eso!?

(Tn) río un poco. - Vale vale, lo siento.

Viserion- Ah... tengo hambre.

Zaldrizes- Inferior... -le rugió el estomago.

Viserion- Ya, inferior dice.

Zaldrizes- ¡Silencio!

(Tn)- Venga, no discutais.

Viserion- (Tn)...

(Tn)- Dime. -se tumbó en la cama y Viserion voló hasta posarse en sus rodillas levantadas.

Viserion- ¿Estás enfadada con Ace?.

La chica suspiró. - Me molestó que se riera de mi cuando dijo que no le importaba.

Zaldrizes- Me comparó con un humano.

(Tn)- ¿Vamos a cenar?- dijo intentando evitar el tema.

Viserion- ¡Sí!

La chica se levantó tomando a Viserion y miró a Zaldrizes. -¿Vienes? -dijo extendiendo le la mano.

Zaldrizes- Tsk... yo se volar.

(Tn)- No importa, puedo llevarte. -sonrió amablemente.

Zaldrizes- No gracias.

(Tn)- Bueno...

Zaldrizes- Abre la puerta, quiero salir.

La chica abrió la puerta y vio como el dragón salia sin detenerse a esperarla.

(Tn)- No le caigo bien...

Viserion- Él es un dragón muy poco social, con su otro portador apenas se comunicaba.

La chica se sorprendió. -¿Y como se mostró al momento de aceptarme?

Viserion- Eso es algo que tienes que preguntarle a él.

(Tn)-Tienes razón, intentaré hablar con él más tarde.

Viserion- Vamos a comer.

(Tn)- Voy voy. -sonrió.

Cuando llegó al comedor se encontró con todo el mundo comiendo menos Ace, el cual no se encontraba en aquel lugar. La chica notó la mirada de Marco e ignorando la se dispuso a tomar la comida que se iba se comer mientras los dragones tomaban la suya.

Se sentó en la mesa y para su desgracia el único asiento que estaba libre era el que había al lado de Marco. Sin mirarlo llegó y se sentó.

El chico notaba la tensión pero no podía dejar de mirar la con cuidado de que ella no se percatase.

Viserion- Acabamos de llegar a una isla.

(Tn)- Eso parece.

Viserion- ¿Te gustaría ir?

(Tn)- ¿Ahora? -asintió. - Pero es de noche, es un poco peligroso...

Zaldrizes- Los humanos siempre con tanto miedo, no se que vi en ti.

La chica lo miró por unos segundos y luego suspiró. -Está bien... iremos un rato, ¿te vienes Zaldrizes?.

Zaldrizes- Ya veré.

Marco no pudo evitar oír la conversación, se preocupó por la seguridad de la chica.

Cuando acabaron de comer la chica notó que Ace no había venido a cenar, cosa que era muy rara en él.

La chica se levantó con los dragones y salio hasta la borda observando aquella isla iluminada por la luz de la luna y las luces que había en cada árbol iluminando caminos. Habían llegado a la parte sur de la isla, una isla que tenia un invento pero hermoso bosque en un una parte y en la otra el pueblo.

(Tn)- ¿Vamos? -asintieron. -No os separis.

La chica salió del barco y caminó hacia el interior del bosque disfrutando de la brisa nocturna, la luz de la luna que bañaba las copas de los árboles y la luz cálida que iluminaba el camino con una claridad acogedora.

Tras varios minutos los dragones pidieron permiso para volver al su tamaño original y volar por el aire a una distancia considerable para no asustar asustara los habitantes feliz pueblo.

La chica se sentó en el césped observándolos tranquilamente hasta que una voz la sacó de todos sus pensamientos.

Marco- (Tn).

(Tn)- ¿Qué quieres?

Marco- Te quería pedir perdón nuevamente.

(Tn)- No puedo perdonarte, me hiciste creer que Ace se fue con otra y que no me amaba... solo para acostarte conmigo.

Marco- Lo que hice estuvo horrible, lo se..

(Tn)- No esperaba eso de ti... no esperaba que fueses capaz de jugar tan sucio.

Marco- Estoy enamorado de ti.

(Tn)- ¿Y por eso me mientes?

Marco- Era la única forma que veía para tenerte. -hizo una pausa. - Se que he traicionado a Ace pero yo...

Ace- ¿Traicionar en que?