33- Más presiones
Narra (tn)
Padre- Escúchadme, tengo que anunciaros algo.
Marco hizo desaparecer el agarre y cuando vi el cielo abierto para alejarme de él y correr hacía Ace algo hizo detenerme y retroceder.
Padre- Marco y (tn), acercaros.
Bajo la mirada de todos los nakamas y una mirada asesina por parte de cierto pecoso nos acerquemos a padre poniéndonos a su lado frente todos mis nakamas.
Padre- Tengo que anunciar que habrá ciertos cambios. - todos oían las palabras de padre con atención. - En primer lugar, Marco dejará de ser el comandante de primera división y pasará a ser el vicecapitan, por lo cual en esos momentos en los que yo esté débil debido a mi ya avanzada edad le tenéis que obedecer a él, ¿Entendido?
Todos al unísono - ¡Sí padre!
Padre- Por otro lado el puesto de Marco que tenia como comandante de primera división pasará a manos de (tn), ¿Entendido?
Todos al unísono - ¡Sí padre!
Bajé la cabeza intentando ignorar las miradas de mis nakamas, temía encontrarme con alguna mirada de odio o rencor, de todos modos yo soy la última en entrar en la tripulación, los demás pasaron aquí más tiempo luchando por barbablanca y que le diesen un puesto tan importante a alguien que entró después de ellos no debería sentar bien.
X- ¡Sí, (tn)-chan será nuestra comandante!
X- Es tan linda... miradla como se sonroja.
Levanté la vista confusa y vi a mis nakamas sonriendome.
- ¿Qué... no estáis enfadados conmigo? -dije atónita mirándolos.
X- ¿Por qué?
X- Sí padre lo ha querido así es porque eres la mejor para el puesto.
X- ¡Confiamos en ti (tn)-chan!
Todos asintieron con un sonoro griterío.
Miré a padre confundida y este me dedicó una sonrisa. - ¿Ves como no ibas a crear conflictos, mocosa?
Sonreí. -Gracias por confiar en mi, padre.
Padre comenzó a reír y miró a Marco. - Y de ti espero grandes cosas mocoso.
Marco- Por supuesto, no le decepcionaré.
Padre- Ahora que tú eres el vicecapitan y tú la comandante de primera división debéis pasar tiempo juntos. -lo volvió a mirar a él. - Enséñale todo lo que debe saber para ser una buena comandante.
Marco- Por supuesto Padre.
Padre -¡Mocosos! -dijo alzando su botella de sake. - Esta noche habrá banquete para celebrarlo.
Todo- ¡Sí!
Sonreí mirando como aplaudían felices a excepción de uno. Me acerqué hacia él colocándome enfrente suya.
- ¿No te alegras por mi? -dije con pena.
Ace- ¿De que tengo que alegrarme exactamente? - su tono era frio y cortante. - ¿De ver como te tocó o quizás de que ahora pasarás más tiempo con él?
- Ace...
Ace chasqueó la lengua y me miró, antes de que pudiese hablar lo abracé haciéndolo retroceder unos pasos. - No seas así, en ninguno de los dos casos pude hacer nada. -levanté la mirada para mirarlo.
Ace me miró con el ceño fruncido por unos segundos sin responder a mi abrazo. - Tienes razón... tu no tienes la culpa. -sonrió un poco y me devolvió el abrazo. - Estoy orgulloso de tu puesto. -me levantó la mejilla y acercó sus labios a los míos en un suave beso.
Oímos varias burlas de nuestros nakamas y no pude evitar sonreír avergonzada en el beso provocando que Ace se alejará un poco con una sonrisa.
Padre- ¡Vamos mocosos! -dijo levantándose. - Rumbo a la siguiente isla.
Todos asintieron con un grito yéndose a sus puestos y padre volvió a su habitación.
Ace- ¿Qué te apetece hacer? -me rodeó con sus brazos mientras esbozaba una sonrisa.
- Me gustaría entrenar un poco, nunca se cuando... me encontraré con el portador.
Ace suspiró y me acarició la mejilla. -Estoy seguro que ganarás.
Sonreí un poco intentando alejar los pensamientos pesimistas de mi mente y me alejé un poco de él y miré a Viserion. - ¿Listo para otra fusión?
Visetion - Siempre estoy preparado.
Ace- ¿¡Qué!? -me miró alertado.
- Tengo que acostumbrarme, si no no podré luchar bien. -sonreí al ver su cara de preocupación y pena. - Estaré bien. - le di un beso en los labios y le sonreí. - voy a cambiarme.
Me alejé de él y comencé a caminar hacia mi habitación, por el camino vi a Marco mirarme con una sonrisa, se la devolví y entré a mi habitación.
Me decanté por un bikini, de todas formas mi forma fusionada con Viserion no me deja la opción de ponerme pantalones.
Tomé la katana y sali nuevamente ignorando las miradas de mis pervertidos nakamas.
Ace- En la siguiente isla podemos buscar ropa adecuada para la fusión... ¡Volved a vuestros puestos! -dijo enfadado mirando alrededor.
-Me vendría bien...
Viserion - ¿Lista? -dijo volando delante de mi.
Suspiré y asenti. - Aléjate un poco Ace.
Ace dio unos pasos atrás mirándome atento, sentí varias miradas de mis nakamas pendientes de lo que iba a pasar.
Tal y como la primera vez el espacio que había a mi alrededor se iluminó de una luz azulada. Miré fijamente a Viserion por unos segundos a los ojos, tras unos segundos voló rápidamente hacia mi pecho introduciéndose en el.
Abrí la boca por el dolor, mis piernas fallaban pero luché por mantenerme en pie.
El dolor se fue, tenia mi respiración algo agitada, para mi sorpresa mi vista no estaba borrosa, miré mi cuerpo y ahí estaba todo como la última vez, la cola, las escamas, los cuernos, colmillos y ojos de dragón sin contar con las garras que me salían de las manos a mi antojo.
Ace se acercó con cuidado mirándome. - ¿Estás bien?
Lo miré y sonreí un poco. - Estoy bien, he lidiado mejor esto que la primera vez, supongo que es una buena noticia.
Ace sonrió algo aliviado. - ¿Qué piensas hacer ahora?
Practicaré bajo el agua con la katana.
Y así pasé toda la tarde, me sorprendí al comprobar que podía abrir unos segundos el agua con la katana de Viserion y que podía permanecer más de cuatro horas bajo el agua sin llegar a perjudicarme.
Cuando me sentí lo suficientemente cansada salí del agua.
Marco- Has entrenado mucho, no te sobre esfuerces demasiado.
- Quiero estar a la altura. - dije jadeando y tomando la toalla que me tendía.
Marco- Eres buena, estoy seguro que ganarás.
Ace caminó hacia nosotros y me tomó de la cintura provocando una mueca por parte de Marco. -¿Cómo estás?
-Cansada, me daré una ducha y volveré a mi forma normal.
Ace- Voy contigo. -dijo sonriendo picaramemte.
Me riboricé y le di un golpecito en la nariz. - Pervertido.
Ace me jaló de la cintura y me invitó caminar en dirección a mi habitación. - Hace tiempo que no paso tiempo contigo. -dijo cuando cerré la puerta dejándonos solos.
Lo miré algo extrañada.. -Anoche dormimos juntos.
Ace- Ya sabes a que me refiero... -dijo acariciandome mi mejilla.
Sentí mis mejillas arder y di un paso hacia atrás. - Eh... ¡Viserion sal!.
Nuevamente sentí un terrible dolor invadir mi cuerpo, mi vista se nubló e intenté mantenerme en pie con la ayuda de los brazos que me ofrecía Ace.
Cuando el dolor cesó supiré agotada mientras me recostaba en el pecho de Ace mientras recuperaba la respiración. Aunque la fusión no me había dolido tanto como la primera vez a la hora de romper la fusión se sigue sintiendo horrible, el mismo dolor, no se si más o menos como la última vez, quizás olvidas la intensidad del dolor de una vez a otra hasta que te acostumbras a el.
-¿Estás bien? - mi voz era cansada debido al rendimiento en el entrenamiento y al dolor de la fusión.
Viserion. -Sí, los dragones tenemos más resistencia aunque me dio hambre. Voy al comedor. -sonreí y le abrí la puerta dándole paso.
Viserion salió volando en dirección a las cocinas y volví a cerrar la puerta.
Ace- ¿Tú como estás? -dijo tomándome el rostro para mirarlo.
-Mejor que la primera vez.
Ace sonrió satisfecho y se acercó a mi. - Ahora estamos solos... -susurró en mi oído mientras sus manos viajaban por mi cintura.
Lo miré a los ojos algo nerviosa, él apoyó su frente en la mía manteniendo el contacto visual. Sin poder evitarlo miré sus labios, se veía tan atractivo, Ace sin duda era un chico increíblemente guapo, tenia una forma de mirar, de hablar y de sentirte especial cuando estás con él.
Sin poder evitarlo lo besé, él respondió con una sonrisa rodeandome con sus brazos acercándome a su cuerpo. Sentí su calidez, sus húmedos labios jugando con los míos, su lengua pidiendo entrar en mi boca, sus manos acariciando mi espalda desnuda, una bajando y la otra subiendo hasta mi nuca profundizando el beso. Llevé mis manos a sus caderas, acariciando cada centímetro de su cálida piel, le permití entrar en mi boca provocando un juego con mi lengua. Sentí mis mejillas arder, oía su respiración agitada, sus manos comenzaron a temblar levemente sobre mi piel, sentí su cuerpo calentarse. Me separé para tomar aire y mirarlo, tenia sus ojos entrecerrados, sus mejillas rojas, sus labios separados húmedos buscando nuevamente los míos. Pronunció mi nombre en un susurro antes de volver a besarme, esta vez de una forma más apasionada, más intensa y más cálida provocando que se me escapase un gemido sobre sus labios y pegadome más a su cuerpo. Recordé que vestía un bikini y el torso de Ace estaba desnudo, lo que provocaba contacto piel con piel, algo que no pasó desapercibido por Ace. Comenzó a jadear, a morder mis labios y deslizar sus manos por mi cuerpo hasta llegar a mis piernas, me tomó en brazos colocando mis piernas alrededor de su cintura. Me rodeó con sus brazos mientras caminaba en dirección a la cama donde me tumbó con delicadeza colocándose él entre mis piernas sin dejar de besarme. Me tomó las manos entrelazando sus dedos con los míos mientras bajaba entre besos por mi cuello donde comenzó a besarlo y a lamerlo provocando que de mi boca saliesen jadeos y pequeños gemidos envueltos con su nombre, algo que parecía volverlo loco, comenzó a jadear, a dar pequeños suspiros temblorosos en mi cuello, su cuerpo empezó a calentarse cada vez más.
Ace- (tn)...
- Te amo Ace. -sonreí de la manera mas dulce que podia buscando sus ojos. - Eres lo mejor que queme ha podido pasar.
Ace - Eres mi luz... sin ti no sabría que hacer... -me pegó más a él volviendo me a besar mientras su cuerpo se deslizó hacia arriba para llegar a mis labios.
Abrí la boca al notar el bulto del peligro rozar mi intimidad, un roce que se pronunciaba más al vestir solo la ropa del bikini. Ace notó el motivo por mi expresión y me miró avergonzado.
Ace- L-lo siento... yo... no pude...
Lo miré con ternura mientras llevaba mis dedos a sus labios. - No pidas perdón por esto...
Ace- Será mejor que... te deje ducharte... yo... iré a ver si necesitan algo los chicos o...
- Cierra la puerta con el seguro y vuelve aquí... -susurré sobre sus labios mientras le acariciaba el pelo. - Quiero mi recompensa por el puesto.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top