Al llegar a ella mis nervios estaban de punta. Toque 2 veces y el abrió enseguida. Lo mire a los ojos y ya no los tenía llorosos.
- Yo no me pienso alejar de ti, Agustín... - Dije con mi voz quebrada. - No voy a dejar que me alejes solo porque  Valentina no tuvo la suerte de seguir viva y...
- ¡Tú no tienes derecho a opinar si te quedas o te vas! - Me interrumpió gritándome no enojado, si no triste. - Te recuerdo que esta es mi casa...
- ¡NO ME IMPORTA! ¡Yo me quiero quedar contigo a tu lado! ¡Porque TE AMO! - Una lágrima corrió por mi mejilla. - Mierda Agustín, ¡Te amo! - Mis lágrimas brotaron exageradamente.
Era cierto, lo amaba con toda mi alma, el me hizo sentir de todas las maneras posibles, me hace sentir protegida, excitada, amada y muy feliz. Si el me alejaba de su vida, yo... no podría seguir, no podría continuar con mi vida... porque él es mi vida ahora y lo necesito de una u otra manera, lo quiero en mi vida.
- Por favor Carolina... Deja de hacernos esto... - Suspiro como si fuera a llorar. Me tomo de las manos. - No vas a lograr nada, mi decisión está tomada... Así que prepara tus maletas... Ruggero viene en camino. -
Me soltó bruscamente, pero yo lo detuve y lo acerque hasta mí.
- Hazme tuya aunque sea una vez más... Te necesito Agustín... por favor... - Y lo bese.
El me siguió el beso.

Narra Agustín.
Yo también la necesitaba, la amaba con todas mis fuerzas, pero Carolina era mi vida, si la mataban yo... No podría vivir, no sin ella, me devolvió la vida, la felicidad. Tenía que hacerla mía de nuevo, antes de que partiera.
Comencé a besar su cuello, dejándole pequeñas marcas, mientras la recostaba en la cama de mi habitación. No teníamos mucho tiempo. Ella se quitó la ropa y lo mismo hice yo, quedando completamente desnudo. Ella sabía cómo excitarme en tan solo unos segundos. Y vaya que dolía.
Seguí besándola, mientras nuestras lenguas tenían una pelea entre si y nuestros sexos rozaban. Ambos gemimos por esa situación.
- Hazlo ya Agustín. - Me dijo sin despegar nuestros labios.
Y sin pensarlo me fui metiendo en ella. Se sentía tan bien, maldición.
- Ahhhh... Agustín... si...
Empecé a hacerlo un poco más rápido. Gemí.
- Ohmmm... más rápido... - Dijo agitada. Y así aumente mis embestidas.
Me sentía en cielo y por como pude sentir, Carolina estaba por venirse, al igual que yo.
Di 2 embestidas más y ella se corrió, otras 2 y yo me corrí. Ella era la mejor en todos los sentidos. Me acosté a su lado abrazándola por la cintura y dándole un beso en la frente. Ella se recostó en mi pecho, luego me voltio a mirar.
- Te amo tanto...
Y me dio un dulce beso.
- Yo también te amo.
Dije después de ese beso.
Estuvimos así por unos minutos más, luego me pare y me puse mi ropa, después me dirigí a la habitación de Carolina.
Comencé a guardar todas sus pertenencias en su maleta roja. Minutos después ella entro.
- ¿Que estás haciendo? - Me dijo un poco sorprendía, solo venia en la sabana envuelta. Chingado, quería volver a hacerla mía, pero me contuve.
- Guardo todas tus cosas, te dije que Ruggero ya venía, no ha de tardar en llegar...
- ¿Pero, creí que... - La interrumpí.
- Te dije que no cambiaría de decisión... - Termine de guardar todas sus cosas y cerré la maleta. - Y aunque me encanto... - Le di un corto beso en los labios, al cual no correspondió porque seguía impactada. - Lo hago por tu bien, preciosa. - Me salí de ahí para llevar esa maleta y una pequeña mochila a la sala. Y en eso recibí un mensaje de Ruggero.
"Hey amigo, llego en 5 minutos".
Carolina bajo, pero ya se había puesto su ropa.
- Agustín, te lo pido por favor, no me abandones... - Me miro muy triste.
- Preciosa, te iré a visitar, porque también te amo. - La abrace muy fuerte y sentí como mi hombro se mojaba. Ella estaba llorando.
- ¡No me quiero alejar de ti! - Grito llorando.
- Carolina por... - El timbre sonó y me aleje de ella para abrir la puerta. Ahí se encontraba Ruggero.
- Pasa Rugge...
Entro a la sala y le señale las maletas, Carolina se abalanzo para quitárselas.
- ¡NO YO NO ME VOY A IR!
Ruggero soltó las maletas y se hizo para atrás.
Abrace a Carolina enseguida.
- Llévatelas ahora... - Le ordene a Ruggero.
Carolina empezó a gritar y tratar de zafarse de mi agarre. Me dolía tanto verla así, y sé que a ella también le calaba, pero tenía que hacerlo.
-¡No Agustín! ¡NO! - Lloraba tanto, ella corrió hacia arriba y yo la seguí rápidamente, pero antes tome un pañuelo y una botella de cloroformo. Estaba a punto de cerrar la puerta pero la detuve.
- Carolina, mi amor... - Ella se quedó parada y yo me le acerque lentamente y la bese, apasionadamente, que ella supiera y entendiera que jamás la iba a dejar sola.
Nos separamos y ella me miro.
- Te amo, te amo tanto preciosa... - Y le di la vuelta. Poniéndole el pañuelo con cloroformo, ella intento zafarse, pero le fui inútil. Una lagrima cayo por mi mejilla... Quedo inconsciente, la cargue con su espalda en uno de mis brazos y sus delgadas piernas en mi otro brazo.
Le di un beso en la frente y la lleve cargada hasta la camioneta de Ruggero. La coste en los asientos de atrás.
- Te ire a ver, lo prometo mi amor... - Susurre.
- Cuídamela con tu alma, Ruggero, confió en ti. - Le dije, el asintió y nos despedimos.
Pronto subió a su camioneta y pude ver como se alejaba, el amor de mi vida, involuntariamente.

Estoy pensando en hacer una nueva novela, but no seria Aguslina. Pero aquí tienen otro capitulo🌚
Gracias por sus votos, las quiero mucho chavaaas💘

- A.A.M. -💟🔥