Veía divertida como su otra mitad regañaba a su hermano menor, apenas habían llegado a la aldea, pudo ver en la entrada a un niño de no más de cuatro o cinco años vestido como un pequeño emo, parecía una mala imitación del pelinegro en forma de culo de pato, su Naruto al verlo vestido de esa forma reaccionó de una forma cómica.

~ Flash Back ~

¡Konohamaru!, ¡Te volviste como el Teme! - Al gritar eso, el niño llamado Konohamaru bajo levemente la cabeza, avergonzado de aceptar el reto de sus compañeros de clase, aunque Moegi y Hudon le advirtieron de que no lo hiciera, al final, aceptó por la presión social.

¡Que deshonra!, ¿!sabés lo qué te ganaste¡? - Konohamaru solo asintió, más avergonzado que antes, algunas personas los estaban viendo, para algunos, parecían una familia, en especial para Kakashi, era como ver a su sensei con Kushina-Sama regañando a Obito por haber hecho una estupidez.

¡Así es, te ganaste una rosiadita!, ¡malo, malo! - Termino de decir para sacar, sabrá Dios dónde lo sacó, un rociador y empezar a mojar al niño, el cual solo se cubría de las gotas de agua.

[Suspiró] Bueno, vamos, tienes que cambiarte esa ridiculez que llevás puesto - Konohamaru asintió a las palabras de su hermano mayor y se dejó cargar por el, aún se sentía avergonzado.

~ Fin del Flash Back ~

¿Quieres venir Haku-Chan? - Haku solo sonrió por las palabras de su Naruto.

Claro Naruto-kun -

¿Naruto-Oni San, ella es tu novia?, por fin te alejaste de la loca de pelo rosado -

Haku se sonrojo por las suposiciones del niño, mientras que Naruto también se sonrojo levemente, aunque rápidamente negó con la cabeza, dejando esos pensamientos raros de lado.
Al final los tres se fueron a buscar ropa nueva para el segundo niño más problemático de toda la aldea.

Kakashi solo los dejó irse, podía informar de la misión al Hokage el solo, sus alumnos necesitaban descansar, luego vería que pasaría con la usuaria de hielo, sabía que si se enteraban de su Kekai genkai la usarían como máquina de cría, pero también sabía que había algo que bloqueaba esa posibilidad, y ese muro, se llamaba Uzumaki Naruto.

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Haku miraba como su otra mitad dormía pesadamente con los niños que se consideraban con sus hermanitos en su pecho, se acercaría y sin alguna vergüenza, pondría la cabeza del rubio en sus piernas, veía sus marcas de bigotes, su cabello, pero sobretodo, recordaba sus ojos.

Esos bellos ojos color zafiro, no quería parar de verlos ni por un segundo, ella no quería dejarlo, ni por un segundo. No tenerlo a su lado, inclusive por poco tiempo provocaba en su interior sentimientos negativos.
Sentía angustia, dolor, ansiedad, entre otras sensaciones más, las cuales solo la dejaban peor que antes.

Pero solo una cosa provocaba su sentimiento de enojo, el pensamiento de que su otra mitad tenía un interés en la peli chicle, que tenía ella que ella no?.
Pero no pudo seguir carcomiendo su mente con enojo debido a que sintió una presencia.

Era débil, pero aún la notaba, mirando disimuladamente hacia un costado, vería a una peli azul de ojos perlados, la cual, claramente los estaba espiando. Pudo ver en sus ojos algo que la dejo, paralizada, eran, celos.

Y ahí lo comprendio, esa chica estaba enamorada de Naruto, lo podía notar claramente al ver cómo sus ojos color lavanda veían al rubio bigotudo con un enorme sonrojo.
Su mano se volvió un puño, lo apretó con tanta fuerza que los nudillos de volvieron aún más blancos que antes.

(¿Quien... es... ella...?) - Esos y más pensamientos acompañados con sentimientos, no solo negativos sino también caoticos en su interior provocaban en ella un daño irreversible a su alma y mente.
Y ahí vino un pensamiento, el cual, bloqueo a todos los demás.

(La mataré...) - Y al darse cuenta de eso, solo se dio una bofetada mental, pensar eso la confundió de sobremanera, ella, ella no quería hacerle nada a nadie, pero...
La idea de hacer eso le parecía tan tentadora...

Sintió como la niña de ojos perlados se iba del campo de entrenamiento 15, habían tomado este campo de entrenamiento para divertirse un momento y tratar de ayudar a su Naruto en el comienzo de su aprendizaje de sus elementos.

Mío... - susurró viendo a su luz que iluminaba sus caminos más oscuros, susurró al sol que iluminaba sus mañanas, susurró a su salvador, susurró a la otra parte de su hilo rojo.

Tranquilo mí Naruto-kun, no dejaré que nada ni nadie nos separé... - Dijo lo más bajo posible, acariciando suavemente la mejilla con tres bigotes de zorro de su luz.

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Abrazaba a su otra mitad con algo de fuerza, estaban en el departamento del rubio, ya había empezado a anochecer hace algunas horas. Habían dejado en sus respectivos hogares a Konohamaru, Moegi y Hudon.
No podía dormir, el recuerdo de esas dos malditas le provocaban dolores internos.

Su mente y alma se estaban deteriorando. Había pasado por tanto en su vida, tantos eventos traumáticos; presenciar el asesinato de su madre por su propio padre, haber sido maltratada tanto tiempo por Zabuza, ser usada solo como un arma, pensó que viviría así toda su vida.

Pero llegó el, Naruto, su otra mitad, la persona con la cual estaría toda su vida, la había ayudado, la había salvado, recordaba con un enorme sonrojo y una sonrisa que le pondría los pelos de punta a cualquiera, la promesa de su Luz.

"Prometo protegerte, a toda costa"

Yo prometo, que no voy a dejar que nada ni nadie nos separe Naruto-kun, nosotros estaremos juntos por siempre - Diciendo su juramento silencioso, cerraría sus ojos, sin dejar de abrazar a su Naruto, dormiría colocando su cabeza en el pecho del jinchuriki, este solo devolvió el abrazo.

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Espero que les guste el capítulo de hoy cualquier recomendación, sugerencia o critica que tengan siempre será bien recibida, los quiero.

Capitulo 5: Deterioro...