Este capítulo está dedicado a susuya98 y a jithomi-bienvenida!

Caminaba de un lado a otro delante de la habitación, tanto Tyki como Lavi habían intentado calmarlo, llevaban mucho ahí dentro, ya casi amanecía y el sol empezaba a bañar con sus rayos las flores de primavera de esa mañana de abril, más el azabache no podía apreciar aquella belleza por andar dando vueltas de un lado a otro. Para acompañar su calvario, llegaron casi corriendo Neah todo mojado por el viaje repentino hecho por mar para llegar más rápido, llegando solo por su parte, y el Rey la Reina que llegaron velozmente en un carruaje ya que no estaban muy lejos.

-Cómo está Allen-chan?- dijo Neah agitado por correr desde el puerto.

-Kanda ya nació el bebé?- preguntó Mana.

-Aún no, lleva horas ahí dentro y no me dejan entrar- en eso se oyó escasamente un llanto debilitado por las paredes que los separaban.

-Ya nació!- dijo emocionada Cibeles -me pregunto si será niño o niña! Y como estará mi copo de nieve...

Luego de unos minutos más salieron el doctor y la partera, esta última sacando los tanques del agua que utilizaron para limpiar al recién nacido y paños manchados de sangre, en cantidades considerables asustando a más de uno de los presentes, luego el doctor se dispuso a hablar.

-Ya pueden pasar, sugiero no hagan mucha conmoción, el príncipe está agotado, pero ambos están bien, felicidades, es un varón muy saludable!- sin cruzar palabras el primero en entrar obviamente fue Kanda, mientras los reyes agradecen al médico y la partera por su ayuda.

-Moyashi, daijoubu desu ka?- el albino solo lo miro sonriente para descubrir al pequeño que mantenía caliente bajo las frazadas.

-Mira Yu, se parece a ti.

-*En qué?* Otro moyashi?

-Que malo... no lo tiene todo blanco...

-Oe, estás bien?

-Podrías sostenerlo?- Kanda lo toma en brazos y de inmediato, como si sus fuerzas se las llevara junto al pequeño, cayó en la inconsciencia.

-Allen!

-Cálmate hijo, sólo está agotado, está durmiendo, vez?- dijo la reina consolando al azabache que dio un suspiro de alivio -por cierto, cómo se llamará mi nieto?

-Kazuki.

-Paz y esperanza eh? Interesante elección, buscaron un nombre originario del idioma nativo, casi no los usan en estos días. Me parece perfecto, bienvenido al mundo, Kazuki-chan.

Cuando hay pequeños en casa el tiempo pasa velozmente, y eso no era la excepción en el palacio de Ambrosía, donde un pequeño de apenas siete meses daba mucho que hacer a cada habitante de este, era muy despierto, ya gateaba a velocidades olímpicas, y se levantaba apoyado de cualquier objeto cerca, una mañana desapareció de las narices de su madre en cuestión de segundos, y a los pocos minutos lo encontró dentro del ropero desdoblando cada pieza de ropa dentro de este. 

-Yu! Lleva a Kazuki a jugar un rato!

-Hah!? Y por qué yo?

-Él quiere jugar contigo.

-No me digas, y también me dirás que él te lo dijo?

-Sí. Kazuki-chan, llama a tu papá.

-Bababa.

-Moyashi, eso no cuenta. Ni siquiera suena como Papá, Kazuki, dí pa...pá...

-Bababa.

-Hahaha, que no entiendes Bakanda? Presta más atención.

-Bababa! Bababa!

-...- se queda pensando un momento -*Ba ba ba? Ba kan da?* Pero que dem... MOYASHI!!! Deja de enseñarle esas cosas al niño!

-Qué? Tú me dices moyashi delante de él, no es mi culpa que aprendiera a llamar así en lugar de papá.

-Y a ti como te dice? Kazuki, di mo-ya-shi...

-Mama.(no es error de gramática, los bebés no pronuncian papá o mamá, sino papa o mama)

-Sí, a tu mamá dile mo-ya-shi.

-Mama. Mama!

-PERO QUE CARAJOS!- y automáticamente lo asusta, a él y a Allen, pero el pequeño empieza a llorar silenciosamente.

-Yu! Lo estás asustando! Por qué haces tanto alboroto, es un bebé!

-Go-gomen, Kazuki, vamos a... jugar... Y qué coño voy a jugar con él?-susurró mirando al albino.

-Vayan al jardín, intenta las escondidas, pero no le pierdas el ojo, Yu en serio, disimula que no ves pero no le pierdas de vista.

Así salió el azabache con su pequeño al jardín, para "jugar" al escondite con él, quién diría que tendría que volver a jugar como lo hacía con Alma cuando tenía 20 (5 años humanos), sólo que ahora ya era un adulto que jugaba con un bebé, su bebé al que tanto amaba, a pesar de mostrarse reacio frente a los demás, él sabía y Allen también, que amaba mucho a Kazuki, que estaba feliz de tenerlo, y que si pudieran lo volverían a querer como es, aunque sea inquieto.

Se metió tanto en su pensamientos que jamás notó cuando Kazuki tomó su turno de esconderse, y tal como se lo había advertido Allen, al quitarle la vista de encima, desapareció.

-¿Kazuki? Oe, Kazuki donde estás? ¡Es una puta broma! ¿¡Dónde está el brote de judías ese!? KAZUKI!!!

-Oh oh- dijo una sirvienta que pasaba y escuchó los llamados al pequeño mezclados con improperios lanzados por el azabache -debo a avisar a todos que Kazuki-denka se escondió otra vez.

El azabache levantaba cada roca del jardín, removía cada arbusto y llamaba por su pequeño escurridizo, los sirvientes del palacio por su parte buscaban con fervor en cada rincón de la casa sin hacer mención alguno al azabache o al albino, ya sea porque no querían enfrentar las amenazas de silencio por el azabache o porqué no querían ver sufrir al albino, la primera vez que el pequeño desapareció así en un juego tardaron casi dos horas en encontrarlo y eso porque el pequeño tuvo hambre y salió llorando de su escondite, Allen había llorado por su pequeño y estaba desesperado, recordando lo que había sucedido en su pasado y creyendo que había perdido a su pequeño, además Kanda no estaba en casa, había ido a entrenar en un área boscosa que estaba relativamente cerca y luego supo lo sucedido, pero ahora era distinto, hacía poco había pasado su hora de comer, la próxima comida le tocaba en tres horas, y nadie tenía idea de donde estaría el pequeño, y la segunda prioridad, que Allen no lo supiera.

Una hora, su inocente juego se había tornado tenía fuera de sus casillas a todos, una larga hora para quienes estaban buscando, al final el azabache se dio cuenta que todos hacían lo mismo que él de hacía rato y con sus mismas intenciones, pero luego de la experiencia, el único capaz de encontrar los escondites favoritos de Kazuki, era Allen, luego de la primera vez fue perfeccionando el juego de su pequeño y lograba encontrarlo muy rápido, y Kanda lo sabía, decidió que lo mejor sería avisar a su moyashi de que el mini moyashi se había escondido demasiado bien. La primera impresión de Allen ante la revelación no fue la esperada por todos.

-¡Te lo dije, Bakanda! ¡No le quites el ojo de encima! Pero no... perderlo de vista fue tu primera opción, ¿En que diablos pensabas? Baka.

-Nada importante, solo tuve un recuerdo de mi infancia, es todo.

-Bien, la última vez que lo viste ¿fue en el jardín verdad?

-Hai.

-Vamos...- una vez en el jardín, Allen le preguntó a Kanda en que lugar exacto estaba cuando lo dejo en el suelo, siendo cerca de una banca del jardín -Bien, ya sé donde puede estar, sigueme y aprende.

-Tsk, ya veremos eso.

En el jardín había cerca de allí un espacio con árboles de manzanas, las hojas ya empezaban a caer, producto de la proximidad del otoño, hacía poco que el jardinero había amontonado las hojas para recogerlas luego, Allen se aproximó a uno de los tres montículos de hojas y los observó minuciosamente, poniendo atención particular al más mínimo detalle, bajo la mirada expectante del oji azul, se aproximó a uno de ellos y removió un poco las hojas para encontrarse con la más bellas escena, el pequeño Kazuki, acomodado entre las hojas, dormitaba inconsciente de lo que pasaba en su entorno.

-Aquí esta mi pequeño- dijo con una sonrisa llena de ternura, que provocó un clic en la mente del azabache -¡Miranda! Toma al niño y llévalo a su cama.

-Hai, hime-sama -desde que dio a luz al pequeño semi albino, dejaron de llamarlo príncipe, para llamarlo princesa y le tocó acostumbrarse, de igual manera, sus padres le enviaron a Miranda, quien fue su nodriza de pequeño, para que ayudara en el cuidado del pequeño Kazuki.

-Oe, Moyashi- dijo Kanda captando su atención -ven conmigo- dijo para tomar de su mano jalandolo hacia él para luego de aprisionarlo entre sus brazos y tumbarse con él sobre las hojas.

-Yu, baka, ¿qué estás haciendo?

-Me preparé para jugar con Kazu-yashi, y se durmió, así que ahora jugaré con mi Moyashi.

-Estamos esparciendo todas las hojas de nuevo...

-Y que importa- se acercó a su rostro robandole un tierno beso lleno de pasión desbordante -que las recojan de nuevo luego, te importa atenderme sólo a mí...¿un momento?

-Te podría atender el resto de mi vida sin que lo preguntes, Bakanda.

Todo en Ambrosía era paz y tranquilidad, pero las cosas no funcionaban igual en el resto del reino, Kanda y Neah habían sido llamados por el mismo rey Mana a presentarse junto con Tyki en el Palacio Real de Arcadia, al parecer en la última visita de Cross al reino de Minora, las cosas... No habían salido del todo bien entre él y la reina Rumiko. Allen temía lo peor, y se notaba que no era el único, ya que Tyki y Neah habían enviado a sus esposas e hijos a su palacio ya que este era el más alejado del reino de Minora, siendo que este se hallaba lo más al norte de Arcadia, y Minora estaba en los límites del sur, más cerca del palacio de Neah y del reino de Tyki. Después de que todos estaban ahí, los tres, Tyki, Neah y Kanda, partieron a Arcadia a su encuentro con el rey, dejando a sus preocupados omegas al cuidado de sus hijos y del palacio.

Unos meses después, era el primer cumpleaños de Kazuki, ya habían pasado los cumpleaños de Nadir y Lyzeth para cuando llegaron a Ambrosía, pero no era igual con el de Kazuki, el pequeño no entendía porque su papi no estaría en su fiesta de cumpleaños, ni él, ni su tío Neah, ni su abuelo, ni el papá de Lyzi, como llamaba a Lyzeth.
Su primer cumpleaños se volvió pronto más amargo de lo que podían pensar...

-¡Maldito viejo!

-Kanda calmate.

-¿Cómo carajos quieren que me calme? Hoy es el cumpleaños de mi hijo, y tengo que estar acá porque el viejo idiota este se creé "un conquistador", pero cuando logra su cometido sale huyendo como la gallina cobarde que es.

-¿A quién llamas gallina cobarde? Histérica.

-¡A ti, maldito viejo escurridizo! ¡Asume tu responsabilidad con la reina idiota esa y cásate con ella de una maldita vez! Nosotros y el resto del reino no tenemos la culpa de que la dejaras embarazada en tus misiones ni de que tengas complejo de solterón empedernido e idiota.

-Oe niño, te recuerdo que no eres el mejor para juzgarme.

-Por lo menos nunca me he escapado de las consecuencias de mis actos, ¡siempre doy la cara!

-Ya basta ustedes dos, y es una orden- dijo Neah firmemente a ambos alfas de rango 5 y S.

-¡¡¡TÚ NO TE METAS!!!- le gritaron al unísono.

-Bueno ya basta, parecen niñitas peleando una muñeca, yo no veo el problema de Cross en casarse con Rumiko-san, además de que es muy bella- dijo chocando el codo contra Cross y guiñando un ojo.

-Cierto, Tyki-pon y Kanda-kun no lo saben como Allen y yo, verán, Cross está enamo...-no pudo completar sus palabras porque una mano se lo impedía.

-Di una palabra más y le contaré a Road en persona lo que paso antes de la boda.

-Así que ahora se guardan secretos en esta familia eh... Bueno, espero que resuelvan si disputa pronto, allá viene la reina en persona a vernos a nuestra celda.

Toda la discusión se llevaba a cabo dentro de una celda en el Palacio de Minora, celda donde se encontraba Cross Marian desde hace unos tres meses, y que desde hace dos fueron a su rescate una comitiva real, conformada por Neah, Tyki y Kanda, quienes llegaron a negociar su liberación siendo tomados bajo arresto junto al General Cross por traición a la reina.

-Parecen bastante animados esta mañana, Cross, hago esto cada quince días desde que estás aquí, y vuelvo a caer en lo mismo, hazte responsable del hijo que llevo en mi vientre y comparte el trono conmigo.

-Mujer, ¿cuántas veces te diré que soy un alma libre y un fiel sirviente de mi Rey, Mana D. Campbell?

-Sabía que dirías algo así, entonces sólo obedecerás las órdenes de tu rey?

-Dalo por hecho preciosa.

-Bien, Marian, te haré otra pregunta, si tu rey te pide que te cases conmigo y te quedes en Minora, ¿lo obedecerás?

-Claro, pero eso no pasará.

-Claro que sí, Cross Marian, en este instante aceptaras su oferta y así liberarán a mis hijos, mi nieto está pasando su primer cumpleaños sin su padre por tus estupideces. Y es una orden- dijo el rey Mana apareciendo de entre las sombras detrás de la reina Rumiko, había ido personalmente al notar que ya habían pasado casi dos meses de su partida y no regresaban con el pelirrojo aún -Apresúrate Kanda, o no llegarás a tiempo y eso puede cambiar por completo a tu hijo.

"Cuán acertadas eran sus palabras..."

Y cerramos así esta semana cargada de emoción, tragedia e intriga con este capítulo adicional (sí, es adicional porque me dio la locura de subir dos capítulos seguidos cuando procuro subir uno entre lunes y miércoles y el otro entre jueves y viernes para cumplir mis dos por semana) y además no quería dejarlos sin saber del bebé de Allen y Kanda hasta la otra semana...

Y para darles un recorderis que tiene que ver con las edades en este mundo y el desarrollo de los personajes desde su nacimiento. Recuerdan que los alfas y omegas aquí tienen un promedio de vida de unos 500 años, es decir, que envejecen más lento, pero si envejecen ya que no son inmortales, el promedio de saca dividiendo la edad entre 4, no se extrañen de que Allen tenga por ahí unos 77 años y Kanda unos 80(17 y 20 respectivamente en sus cuerpos).

Pero el crecimiento en los primeros 4 años de vida es distinto, es equivalente a un año humano en cuanto a promedio, sin embargo el crecimiento y desarrollo en sí es igual al humano hasta alcanzar los 5 años, es ahí donde el reloj cronológico comienza a marchar más lento, esto debido a que nadie soportaría tener dos años a un bebé que apenas gatea, así que al decir que Kazuki cumple un año, si luce como un niño de un año (No se si me explico).

Bueno para sus dudas no se abstengan de preguntarme que con gusto las disiparé todas, dejen sus bellos comentarios, añadan a su biblioteca si aún no lo han hecho, si te gusta como escribo sígueme, y si te gusto dejate una estrellita ⭐en el camino [le encanta dedicar capítulos por eso] y nos vemos mañana en Una vida diferente/AU y la otra semana por aquí...

Bye~
Marlene-shan
マレーネ・シャン