"...Algo especial...nos unió...no importa como sucedieron las cosas...solo se que tengo que decidir...por mi misma..."

Querido Diario...

El día de hoy, han ocurrido muchas cosas, desperté como todos los días en la aldea, había tenido un sueño con el señor Sesshomaru que me llevaba por el cielo a través de las nubes, era algo sencillamente hermoso, pero los rayos del sol me hicieron despertarme, no pude evitar enojarme por eso, quería seguir durmiendo y soñando

Cuando abrí los ojos, me di cuenta que había algo diferente en mi, sentía algo extraño en mis piernas, me mire de inmediato encontrándome con manchas de sangre sobre mi futon, ¿Qué me paso? Me levante asustada y avergonzada, la anciana Kaede se enojara conmigo ¿o no?, cogí las sabanas tratando de que ella no se diera cuenta, para ir al rio a lavarla y si me preguntaba, le inventaría cualquier excusa, pero cuando cruce la puerta me descubrió, no tuve mas opción que mostrarle esperando un regaño, pero no lo hizo, es mas me felicito y me dijo que debía estar orgullosa porque ya soy una mujer...

-una mujer...-musito Sesshomaru finalizando de leer el párrafo que había escrito su protegida, miro de reojo a colmillo sagrado que lo tenia en su cinto como siempre junto con su otra poderosa espada

Recuerdo...

Rin luego de haber escuchado toda la explicación de la anciana Kaede sobre su nueva etapa en su vida, salió de la cabaña perdida en sus propios pensamientos, podía ver los demás hogares de sus amigos, a los aldeanos que frecuentaba y trabajaban con esfuerzo en la tierra para las próximas siembras, jamás en su vida había visto las cosas de un modo diferente, las palabras de su amo le hacían sentido un poco, aunque no del todo, avanzando por el pueblo, podía apreciar a las chicas de su edad, siendo cortejadas por los muchachos con el fin de que en un futuro casarse-ellos se ven felices...-susurro mirando la escena, una joven adolescente como ella de 13 años y un chico de 15 años pidiéndole un compromiso formal, a lo que la azabache solo volteo corriendo a lo que sus pies le daban, tropezando con las raíces que sobresalían de un árbol cayendo inevitablemente al suelo, se puso de pie, sacudiéndose el kimono que había estrenado por ser para ella un día especial siendo cubierta por una extraña sombra, levanto la vista entristecida encontrándose cara a cara con su amo

-Señor Sesshomaru!-dijo ella apartándose las lagrimas en sus ojos, cuando uno de los finos dedos del Dai youkai rosaron sus mejillas capturando una gota de tristeza de sus ojos

-¿Por qué lloras Rin?-pregunto con su tono usual, aun con la lagrima en su dedo, ella solo limito a bajar la mirada avergonzada, por todo lo que había sucedido ¿Cómo explicarle? ¿Cómo explicarle a su amo?, levanto la vista con una sonrisa

-solo me dolió la caída, señor Sesshomaru-respondió sonriendo, mirándola con seriedad

-Rin-la llamo expresando su molestia, haciéndole comprender de que se había dado cuenta de que no le confeso la verdad

-etto...-jugo con sus dedos sentándose en una de las raíces, sentándose a su lado, con sus ojos cerrados- el día de hoy me convertí en una mujer

-hmp!-abrió sus ojos con sorpresa, había sentido un aroma diferente en ella, no podía decir que era malo, pero aquella dulce fragancia que siempre le acompañaba se volvió de un momento a otro un poco mas atrayente de lo normal, por esa razón que fue a la aldea para confirmar sus sospechas, ya su protegida cruzaba una nueva etapa en su vida, aunque no le entendía ¿Por qué estaba de así? ¿Por qué estaba triste?

-¿es genial? ¿no cree?-le sonrió, era un hecho que se sentía mas grande y claramente ya no era una niña que había crecido y mucho desde la ultima vez, guardando silencio

-¿Qué te preocupa?-pregunto sorprendiéndola dejándola boquiabierta

-bueno..., yo...

-ya te lo dije-la interrumpió de forma cortante

-¿Qué cosa?-pregunto con ingenuidad, mientras él, le tomaba el amuleto que le había obsequiado, mientras ella se perdía en su mirada, cuando él rompió el contacto visual, dándole la espalda

-la decisión es tuya, nadie puede intervenir en ella ¿entiendes?-aquellas palabras algo severas, fueron la tranquilidad que ella tanto necesitaba, la azabache aun no sabía si ser una "aldeana" común que se casaría en un par de años con un hombre y tener hijos a futuro, o ir con su amo, quien para ella significaba otras cosas que ni si quiera ella misma entendía

-gracias señor Sesshomaru...-respondió con una gran sonrisa

-ten...-volteo para entregarle un par de aretes con una fina figura de una flor de cerezo

-están muy bellos

-tengo que irme-y se marchó de su vista elevándose lo mas rápido que pudo perdiéndose de sus ojos, se sentía tranquila y apoyada, regresando corriendo a la aldea felizmente con la corta visita del peli plateado, encontrándose de un momento a otro con el hanyou

-señor Inuyasha

-¿vino Sesshomaru?

-eh...si-contesto confusa

-quería averiguar algo...-musito con intriga, al ver el rostro de la pequeña solo sonrió un poco-Kagome quiere verte, bueno también a Sango pero ya esta allá, le tenemos una sorpresa

-¿enserio? Que bien!-siguió su camino hacia la cabaña de la joven sacerdotisa encontrándose también con la exterminadora y su pequeño hijo

-hola señora Kagome y señora Sango ¿Cómo están?

-estamos bien gracias Rin-ella se acerco a sentarse con ellas

-¿Cómo te fue con Sesshomaru?-pregunto la sacerdotisa con interés

-como lo...

-Inuyasha fue corriendo a enfrentarlo-respondió con una sonrisa

-ya veo..., tuvo que marcharse

-es verdad, pero no te desanimes, siempre viene a verte aunque sea un momento ¿no?

-si!!!-contesto con entusiasmo-aunque me gustaría obsequiarle algo...-suspiro la niña captando la atención de ambas mujeres-siempre me da obsequios y me gustaría hacer lo mismo por él...

-bueno-pensó Kagome posando una de sus manos sobre la barbilla-quizás deberías hablar con Totosai, él podría decirte algo que le podría interesar a mi cuñado ¿no crees?

-wooo!! Kagome que buena idea-siguió Sango

-es genial, cuando venga Kohaku, le diré que me lleve con el señor Totosai-dijo con entusiasmo-gracias...-se pauso-oh! El señor Inuyasha me dijo que usted tenia una sorpresa que decirnos ¿Cuál es la sorpresa?-dejando a la sacerdotisa en completo silencio avergonzada

-si, Kagome me dijiste que cuando llegara Rin nos ibas a decir

-este...

-hay ya dinos

-estoy embarazada!-grito completamente roja

-¿¿¿Qué???!!!-gritaron ambas emocionadas

-un bebe viva!-grito Rin –felicidades señora Kagome

-felicidades amiga

-gracias, estoy muy feliz, Inuyasha también lo esta, al fin estoy completamente feliz

-¿completa?...-se pregunto mentalmente Rin-la señora Kagome vive con el señor Inuyasha sin importar que es  un hanyou, ¿acaso es eso lo que se refiere el señor Sesshomaru sobre mi decisión?...

...la decisión es tuya Rin...no importa los demás...

Esas palabras me tranquilizaban, y me animaban a sonreír, muy pronto el señor Inuyasha y la señora Kagome van a ser padres, y no solo eso, también, el señor Sesshomaru se convertiría en "tío" me pregunto que cara pondrá cuando se entere...

-hmp!

Me preparaba para dormir, cuando siento el Ah-Uhn llegar a la aldea sumado al escándalo que hace el señor Jaken al bajar de mi dragón, me asome por la ventana dirigiéndose hacia la casa, a lo que salí rápidamente para recibirlos, diciéndome que querían hablar conmigo

-Rin sucede

-¿Qué sucede señor Jaken?

-el amo bonito no vendrá por unos meses-contesto

-¿Qué?

Debo confesar que me entristecí un poco, el señor Jaken me explico que hay algunos enemigos que quieren tomar el palacio de su padre, pero eran solo insignificantes intrusos, pero aun le quitarían tiempo, espero que el vuelva victorioso, yo se que él es muy fuerte, él regresara...

-siempre confió en mi...-pensó...

Recuerdos...pov Sesshomaru

Hay un alboroto en el ambiente, ¿Qué es lo que sucede?, la región sufre cambios extraños, mi madre no recuerdo mucho de aquella lluvia carmesí que invadió la zona, era una cachorra como para recordar, tal vez tengo que ir a los limites que conectan este mundo con el otro, a la tumba de mi padre

-tienes el mismo presentimiento que yo ¿no es asi Sesshomaru?

-¿Qué quieres?-le pregunte a mi madre, últimamente ha venido muy seguido al Oeste, ¿Qué estará tramando esta vez?

-hay demonios en tus dominios, debes eliminarlos

-lo se-iba a partir a desaparecer a los estorbos que osan a entran a mis territorios

-y sobre tu humana...

-no te metas con ella-le advertí

-ella es tu debilidad, nunca lo olvides, y si es quien debes proteger, procura hacerlo bien, recuerda que ella ya no tiene mas oportunidades

-hmp!

-hay muchos espías en el palacio y lo sabes, procura ser cuidadoso, solo te digo eso

-¿te vas?

-ya no me necesitas, bueno ya lo sabes cualquier cosa, sabes que puedes contar conmigo-me hablo dándome la espalda, transformándose en su forma demoniaca, elevándose al cielo –al fin y al cabo eres mi único hijo...

-Jaken!

-si, amo bonito

-avísale a Rin que no iré a verla en un par de meses

-¿¿Qué???!! ¿Por qué señor?

-estorbos en las fronteras, hazlo

-si, amo-vi como se marchaba con Ah-Uhn, Rin esta lejos del peligro, tiene el amuleto y a los amigos del bastardo, aunque debo asegurarme, ella nunca estará sola

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Holaaaa espero que les guste este capitulo, muchas gracias por seguir la historia y esperarla, perdon las faltas de ortografia, lamento no responder sus bellos mensajes, no cuento con mucho tiempo, pero estoy muy agradecida, abrazos!!!

proximamente.........................................Pagina 20 (Un ataque inesperado)