Los meses pasaban volando, y conforme pasaban los meses también pasaron un par de años desde que comenzó la terapia

Ahora, un joven Lincoln de quince años, y una joven Lynn de diecisiete, seguían igual o más aferrados a estar juntos. A pesar de la terapia, a pesar del desprecio por parte de un gran sector de la sociedad, y a pesar de los insultos, el amor entre ambos nunca se esfumó, al contrario, se fortaleció aún más

Tanto sus padres, como Michael, que había sido su terapeuta durante los últimos dos años, habían intentado tantas cosas que ya estaban sumamente desesperados

¿Era eso bueno? Definitivamente no, Rita y sobretodo el Sr. Lynn serían capaces de casi cualquier cosa a partir de ahora, con tal de que sus hijos dejen de sentir ese tipo de amor entre ellos

Durante algún tiempo, tanto Lynn como Lincoln fueron excluidos de casi cualquier actividad. Desde fiestas o reuniones, hasta un simple trabajo en equipo de la escuela, que tenían que hacer solos porque nadie estaba dispuesto a hacer algo con junto a ellos

Pero conforme pasó el tiempo, ambos lograron hacer nuevas amistades, muchas menos que antes, pero los que aún estaban con ellos, eran amistades en las que siempre podrían confiar

Lynn acababa de terminar su segundo año en la preparatoria, y Margo seguía siendo por lejos su mejor amiga, sería imposible que no lo fuera, después de haberla apoyado tanto durante estos dos largos años, algo que nadie más había hecho por ella

Ambas habían continuado con los deportes, y siguieron siendo igual o aún más exitosas que en la secundaria

Además de Margo, su grupo de amigos lo completaban otros 3 chicos más, uno de ellos, llamado John, se le había insinuado a Lynn en innumerables veces, pero Lynn no se cansaba de rechazarlo una y otra vez

Aunque la deportista no lo dijera, les había quedado muy claro a todos que a pesar del paso del tiempo, el amor por Lincoln parecía que no iba a desaparecer jamás

Había visto al peliblanco tan sólo tres veces durante estos dos años, y estaban planeando verse una cuarta vez, sin embargo, el miedo que tenían era casi tan grande como las ganas de verse. Miedo a que alguien conocido o alguien de su familia los vea juntos, que significaría, probablemente, que Lincoln a sus quince años, se vaya a vivir a Minnesota sin que ninguno de los dos pudiera hacer algo por impedirlo

A estas alturas, la deportista ya no recibía insultos de nadie en la preparatoria, se había ganado el respeto de todos, o el miedo, como lo quieran ver

*Flashback*

Era el primer día de Lynn en la preparatoria, estaba algo perdida, todo era bastante diferente a la secundaria. Caminaba por los pasillos buscando su salón sin poder preguntarle a nadie, ya que todas las personas que lograba reconocer, era porque se la pasaban acosándola en los últimos días de la secundaria, después de que se hizo de conocimiento público su relación amorosa con Lincoln

Después de preguntar en varios salones, finalmente encontró el suyo

—Disculpe, buenos días—dijo la castaña al abrir la puerta—¿es este mi salón?—le preguntó al profesor

—Buenos días—respondió—¿cuál es su apellido?—preguntó el profesor

—Loud

Todos en el salón se sorprendieron al escuchar una vez más ese apellido, incluyendo al profesor, ese apellido que desde hace un par de años, tiene bastante mala fama en la pequeña ciudad de Royal Woods

—Oh... vaya, veo que eres otra de la muchas Loud que han pasado por aquí—dijo el profesor, ocultando su sorpresa

—Y no seré la última, ¿dónde me siento?

El profesor le indicó donde sentarse y continuó con la clase

Mientras el profesor daba la clase, la deportista no pudo evitar notar como un grupo de chicas no dejaban de susurrar entre ellas mientras la veían, sobretodo una, que no mucho tiempo después supo que se llamaba Taylor

Lynn supo también tiempo después que esta chica era muy popular en la escuela a pesar de que aún era de primer grado. Esto porque ya era su segundo año estudiando en la preparatoria, debido a que reprobó el primer semestre dos veces seguidas

Gracias a la popularidad que tenía la chica, lo que pasaría a continuación se supo inmediatamente en toda la escuela

Después de varios minutos en que Taylor se la pasó hablando en voz baja con un grupo de chicas, que no veían de una forma muy amigable a Lynn, se levantó de su asiento, aprovechando el tiempo que tardó en venir el profesor de la siguiente clase

—¿Tú no eres la loca que se besaba con su hermano hace un par de años? ¿Cómo es que estás aquí y no en un manicomio?—preguntó Taylor, mientras miraba a Lynn con desprecio, y también mientras algunos de sus compañeros estaban detrás de ella, expectantes para ver que podía ocurrir

Lynn no quiso responder y se limitó a voltearla a ver con furia

—¿Por qué esa cara Loud?—preguntó Taylor al darse cuenta del notorio enojo de Lynn

—Me llamo Lynn, no Loud—respondió Lynn, conteniendo su ira

—Lo sé, te conozco Lynn Loud, aunque no te conozco por algo especialmente agradable

—Me conoces lo mismo que yo a ti, es decir, ¡nada! No deberías meterte conmigo si no me conoces, ni tampoco sabes de lo que soy capaz de hacer—dijo Lynn, en un tono bastante serio

Estas últimas palabras amenazantes de Lynn causaron risa a todos los que la escucharon, sobretodo a Taylor que soltó una gran carcajada

—JAJAJA, ¿enserio Lynn? ¿Y qué eres capaz de hacer? ¿Me besarás como a tu hermano?—respondió Taylor, respuesta que causó una risa generalizada en todo el salón

Las risas lo único que hicieron fue enojar aún más a Lynn. Así que en un ataque de ira, se levantó rápidamente de su asiento y en un abrir y cerrar de ojos, le dio un puñetazo a Taylor directo a la cara

El golpe fue tan fuerte que la hizo estrellarse con varias de sus amigas que estaban detrás de ella, derribando a dos

Después del fuerte golpe, a Lynn no le resultó suficiente, así que la castaña se lanzó hacia Taylor con intención de seguirla golpeando, lo cual logró a medias ya que solo le pudo dar otro golpe, haciéndola sangrar a chorros por la nariz

Varios chicos la tomaron de los brazos intentando detenerla, sin embargo, uno de los chicos se quedó sin muchos de sus dientes, después de un brutal codazo de Lynn directamente a la boca

La deportista se volvió a lanzar contra Taylor y golpeó cada parte de su cara, la joven rubia quedó completamente noqueada en el suelo, mientras sangraba como nunca lo había hecho en su vida

En ese momento el profesor de la siguiente clase entró al salón, y al darse cuenta de lo que pasó, Lynn fue llevada a la dirección

Mientras tanto, Taylor fue llevada urgentemente a primeros auxilios y terminó con la nariz y el pómulo fracturado, gracias a la brutal paliza que recibió por parte de Lynn

Los cuarenta días de suspensión valieron completamente la pena, la deportista, sin saberlo, había logrado parar casi por completo con el acoso que recibía constantemente en la escuela

Por primera vez en su vida, ser tan temperamental le había traído algo bueno

*Fin del flashback*

Por su parte, en el último año de secundaria de Lincoln, los insultos hacia él seguían siendo cosa de cada día, solo que después de tanto tiempo recibiéndolos, era inevitable que en algún momento iban a ser menos que antes

Y por supuesto, después de tanto tiempo, Lincoln también había aprendido a ignorar a los que lo despreciaban constantemente, que cada vez eran menos

A su manera, se había ganado el respeto de la mayoría de sus compañeros y profesores, y había conseguido dos verdaderos amigos, que lo habían apoyado en todo momento, Marcus y Karl, que habían decidido seguir con él a pesar del escándalo que ocurrió, ya hace un par de años

De cierta forma también terminó recuperando cierta parte de la amistad que alguna vez tuvo con Clyde. No se veían de forma tan regular pero Clyde era de los pocos o tal vez el único chico de su antigua escuela que no lo despreciaba y no lo veía como un loco incestuoso, como sí lo hacían sus antiguos amigos, como Rusty y Zach

La vida de Lincoln había ido mejorando, pero seguía siendo muy difícil para él haber estado estos dos años lejos de su familia. Habían pasado más de dos años desde la última vez que vio a su padre, meses desde la última vez que vio a la mayoría de sus hermanas, y casi un año desde la última vez que pudo ver a Lynn, que era lo que más le dolía

Afortunadamente para él, se sintió apoyado por Rita en todo este tiempo, todo lo contrario a su padre

De todas sus hermanas, la que veía con más regularidad era Luna, que a pesar de las discusiones que pudieran tener de vez en cuando debido a que Lincoln se la pasaba hablando de Lynn, pasaba mucho tiempo con la rockera

Y el tiempo que pasaban juntos se incrementó aún más, después de que Mazzy, la baterista de la banda de Luna, la abandonara por una gran pelea que tuvo con Sam

Luna convenció a Lincoln de que aprendiera a tocar la batería, lo cual fue un rotundo éxito, ya que Lincoln resultó tener un gran talento en la batería, y a partir de ese momento comenzó a ir a tocar con Luna, convirtiéndose en el nuevo baterista de la banda. Todo esto, hace poco más de un año

Esto, motivado por supuesto, por la pequeña pero buena fuente de dinero que representaba para Lincoln el ir a tocar con la banda de Luna, que tiempo después, Luna bautizó como Cabras Lunares

La única desventaja que traía esto, era que a Lynn no le había agradado demasiado, cuando se lo contó, la última vez que se habían podido ver en persona

*Flashback*

—Lincoln... ¿¡Es enserio!?—preguntó molesta—por favor, dime que es una broma

—S-sí Lynn, es enserio, pero no entiendo porque te pones así—respondió Lincoln

—¡Te lo he dicho tantas veces y sigues sin entender!—exclamó la castaña, aún molesta

—¿Entender qué?—preguntó el peliblanco

La deportista dio un largo suspiro y logró calmarse un poco

—No me malentiendas Lincoln, me alegro por ti, me alegro que aprendas y pruebes cosas nuevas

—¿Entonces cuál es el problema?

—¡Luna! ¡Ella es el problema!—respondió exaltada

—Lynn... estás muy equivocada con Luna

—Lincoln, ¿no te lo había dicho ya? Estoy segura de que Luna está completamente enamorada de ti, pero veo te resistes a creerlo...

Lincoln se quedó pensando durante un par minutos, tratando de recordar algún indicio de que lo que estaba diciendo la deportista era verdad

El peliblanco se sumergió dentro de sus propios pensamientos, y no salió de ese trance hasta que inesperadamente, Lynn lo besó. Lincoln continuó con el beso y continuaron así durante un par de minutos

—¿L-lo dices enserio Lynn?—preguntó Lincoln en el momento en que terminó el beso—lo siento pero no soy capaz de creerlo, creo que Luna es amable conmigo, pero no pasa de ahí

La felicidad de Lynn por besar a Lincoln se esfumó al escuchar lo que había dicho el peliblanco

—¡Le gustas Lincoln! No sé que más puedo decirte para que te quede claro...

El peliblanco trató de cambiar el tema pero Lynn comenzó a responder todo con un simple sí o no, y la conversación fue mucho más fría que antes

—Bien... creo que aún sigues molesta por lo mismo. Así que si te soy sincero, no creo gustarle a Luna... me parece imposible

Lynn se quedó callada y dejó a Lincoln seguir hablando

—Pero te pido que confíes en mi, en mi corazón solo hay espacio para ti, a Luna la quiero, pero es solo mi hermana

—¡Yo también lo soy! ¿Qué me asegura que no te puedes enamorar de ella?—preguntó Lynn, bastante molesta

Lincoln se quedó callado durante algunos segundos después de oír la pregunta de Lynn, que si te pones a pensar, tenía bastante sentido

—¿Enserio me crees capaz de eso?

La pregunta de Lincoln hizo que Lynn bajara la cabeza, reflexionando sobre esto último

—Lo siento Lincoln, después de todo lo que hemos pasado creo que debería de confiar mucho más en ti, de verdad lo siento... solo que me frustra mucho que sigas sin creerme después de tantas veces que te lo he dicho

—Lynn, te prometo que si llego a saber que esto es verdad, trataré de evitar verla

—Está bien, Linky

La deportista abrazó a Lincoln y siguieron disfrutando el resto de su día juntos, que hasta la fecha, es el último en el que se han visto

*Fin del Flashback*

La promesa que el peliblanco le hizo a su hermana deportista seguía en pie. Sin embargo, por mucho que Luna siguió siendo muy amable y a veces algo cariñosa con él, siguió sin creer lo que Lynn le había dicho tantas veces

Comenzó a ir a tocar a algunas fiestas y pequeños conciertos, y la banda comenzó a tener cierta fama en la ciudad. Esto sin haber grabado ninguna canción aún, debido a la falta de apoyo a la música rock que lastimosamente se vive en estas épocas

Cuando Lincoln mensajeaba con Lynn, evitaba hablar mucho de sus presentaciones, ya que aunque Lynn le había dejado claro que lo apoyaba, prefería prevenir una mala reacción de la castaña, así que no le contaba tanto sobre como le estaba yendo en la banda de Luna

Además, no se mandaban mensajes de manera tan constante, así que era normal que el peliblanco prefiriese que en las pocas veces que hablaban, no hubiera ninguna discusión

Lincoln se encontraba caminando con sus dos mejores amigos, hace solo unos minutos habían salido del cine, y hablaban mientras caminaban hacia el bus que Lincoln tenía que tomar

—Cada vez me sorprendes más Lincoln, ahora resulta que además de ser dibujante eres baterista—dijo Marcus justo antes de que Lincoln abandonara a sus dos amigos, y se fuera a tocar con la banda

—Bueno... resultó que tocar batería no es tan difícil como parecía en un principio—respondió Lincoln, quitándose algo de mérito

—Tienes talento amigo, llevas solo poco más de un año desde que empezaste, y ya ganas algo de dinero haciéndolo—repuso Karl

—No creo que sea muy talentoso, solo que Luna me facilitó bastante las cosas, y me la paso bien, que es lo que me importa

Después de esas últimas palabras del peliblanco, se despidió de sus amigos para tomar el bus que lo dejaba a unas cuantas cuadras de una pequeña casa que Luna rentaba algunos días de la semana, solo para practicar

Lincoln llegó y abrió la puerta, que ni siquiera tenía seguro, entró a la casa, y después de abrir y cerrar un par de puertas, oyó un poderoso riff de guitarra en la habitación que estaba al final de la casa

Entró a la espaciosa habitación donde solían practicar y se llevó una gran sorpresa, porque solamente estaba Luna ahí

La rockera volteó para ver quien había entrado y se emocionó mucho al ver a Lincoln. E inmediatamente después de verlo, fue a abrazarlo muy alegremente

—Que onda bro, te llevo esperando un buen rato

Tan sólo escuchar esas palabras de su hermana, bastó para que Lincoln se diera cuenta que Luna había estado tomando durante un buen tiempo

—H-hola Luna, ¿dónde están los demás? ¿No va a venir ni Sam ni Sully?—preguntó Lincoln al no ver a nadie más en la habitación

—Sully se enfermó y Sam no podrá venir porque rompió las cuerdas de su bajo y fue a ponerle unas nuevas—respondió—pero no importa, no creo que tengas problema con estar aquí conmigo, a solas...

Luna tomó un último trago a su cerveza y la tiró al piso, junto a otras cuatro latas que ya estaban ahí

Al peliblanco no le agradaba que Luna haya empezado a tomar, y menos cuando tenían que practicar, pero aún así decidió ponerse a tocar un poco la batería

Comenzó a improvisar y sin querer terminó componiendo un ritmo de batería realmente bueno

—¡Wow! ¡Eso fue increíble Linc!—exclamó la rockera muy sorprendida por lo que acababa de escuchar

Luna comenzó a improvisar y logró sacar un riff con la guitarra bastante acorde al ritmo, a pesar de las botellas de cerveza que acababa de tomar

Después de una media hora, teniendo ya la guitarra y la batería de la canción que sin querer comenzaron a componer, Luna agarró una pluma y una libreta, donde solía escribir las letras de sus canciones

—Ven Linky, necesito tu ayuda

Lincoln se sentó junto a ella en el suelo, Luna le dio la pluma, y comenzaron a pensar en cual podría ser la letra de la canción

Mientras Lincoln escribía, Luna estaba bastante cerca de él y lo tenía rodeado con su brazo derecho, incomodándolo bastante

El peliblanco trató de alejarse un poco de ella, pero Luna lo abrazó con fuerza

—¡Luna! Estás demasiado cerca—dijo Lincoln, para que la rockera se alejara finalmente

La rockera se alejó un poco, se cruzó de brazos y después de unos segundos explotó

—¡Si fuera Lynn no tendrías problema! ¿Verdad? ¡Hasta te acercarías más a ella!—declaró Luna, molesta

Lincoln estaba muy sorprendido por la mala reacción de Luna

—Luna, lo siento, no lo tomes a mal, solo que me estabas incomodando un poco—dijo Lincoln, con tranquilidad

—¡¿Y Lynn no te incomoda?!—dijo Luna, volviéndose a exaltar

—Luna... tú sabes que con Lynn es diferente—respondió el peliblanco

—¿Por qué? ¿Por qué tiene que ser diferente con ella?—dijo Luna ahora con un tono triste, en lugar de molesto

—Luna, creo que estás un poco rara... ¿qué tal si nos vamos a descansar?—sugirió Lincoln

—¿¡Por qué Lincoln!? ¿Por qué no eres capaz de amarme?—dijo mientras miraba hacia arriba, aún con más tristeza que antes

—Amar es un poco fuerte, pero claro que te quiero y te aprecio Luna, eres mi hermana—dijo Lincoln, ocultando lo extrañado que estaba por el comportamiento de su hermana mayor

—¿Sólo tu hermana?—preguntó

—Claro Luna, eres mi hermana

Después de escuchar eso, Luna se puso a llorar desconsoladamente, sorprendiendo aún más a Lincoln, que seguía sin entender que era lo que pasaba con su hermana

—¡Yo te amo Lincoln! ¡Eres lo que más quiero en este mundo! ¡Muero por un beso tuyo! Pero tu prefieres a esa odiosa y soberbia deportista—confesó finalmente—no sé que más hacer para conseguir que me ames...

Lincoln estaba en shock tras escuchar esa confesión, simplemente no lo podía creer

—E-está b-bien, L-Luna... creo que estuviste tomando mucho, s-supongo que por eso dices lo que dices

—¡NO!—gritó Luna—¡Yo te amo Lincoln! No es cosa del alcohol, ¡es lo que siento!

El peliblanco se quedó en silencio por algunos segundos, procesando lo que acababa de escuchar, como su hermana rockera de diecinueve años de edad confesaba estar enamorado de él

—Lynn tenía razón...—dijo Lincoln, mientras se levantaba

—¿Sobre qué? ¿¡Por qué tienes que mencionarla en todo!?—preguntó Luna muy molesta, aún en el suelo

—¡Sobre ti! Y pensar que has tratado como una loca a Lynn, y ahora tú me confiesas esto...

—Es diferente, Lynn se enamoró de ti aún sabiendo que está mal, ¡pero yo sé la verdad!

—No digas estupideces Luna, es exactamente lo mismo

—Por favor Lincoln, te lo ruego, ámame como yo te amo a ti

El peliblanco se dio la vuelta con intenciones de abandonar lo más pronto posible la casa donde estaban, pero cuando trató de abrir la puerta de la habitación donde estaban practicando, no pudo

—¿Qué? ¿Cuándo cerraste la puerta?—preguntó el peliblanco sorprendido, pero Luna no respondió

Y al voltear nuevamente para ver a la rockera, Lincoln se dio cuenta de que Luna estaba acercándose hacia él, con lágrimas cayendo sobre sus mejillas, y también con su ropa cayendo al suelo, dejándola solamente en ropa interior

—¡Oh dios! Estás loca Luna...—dijo Lincoln al darse cuenta de esto

—No estoy loca Lincoln, solo estoy muy enamorada de ti—respondió

Luna intentó besar a Lincoln pero el peliblanco se pudo alejar a tiempo

Para lograr salir, Lincoln tomó una vieja guitarra que estaba en el suelo y la estrelló con todas sus fuerzas contra la puerta, rompiéndola inmediatamente. Logró salir de la casa, y después de correr durante varios minutos, decidió llamar a Lynn, por muy arriesgado que fuera

Llamó e inmediatamente la castaña contestó

—¿Lincoln?—dijo Lynn en voz baja

—Sí Lynn soy yo, sé lo arriesgado que es llamarte pero es urgente, tenías razón

—¿Razón en qué?

—Bueno... hoy fui a tocar con Luna y-

—¡¿Qué te hizo esa loca?! ¿Estás bien?—preguntó, algo preocupada

—Ahora te cuento, ¿puedes ir al parque que está por mi casa?

—Lincoln... me queda algo lejos y es muy arriesgado, ya sabes que-

—Por favor Lynn

Lynn lo pensó durante algunos segundos

—Al menos dime que estás bien, me estás poniendo nerviosa Lincoln

—Lo estoy, estoy bien, pero necesito hablar contigo

Tan pronto como el peliblanco colgó, Lynn salió de su casa, para ir directamente al lugar donde Lincoln le indicó, algo nerviosa por lo que pudo haber pasado

La deportista tenía un leve presentimiento de que era lo que pudo haber ocurrido, pero no estaría segura hasta hablar con Lincoln