Megan se encontraba frente al departamento de Sebastián, respiro un par de veces, mientras acomodaba sus senos para que estuvieran un poco más a la vista. Toca la puerta y espera que su dios del sexo aparezca.

--Hola muñeca.--saludo un total desconocido para ella.

--Uh...hola.

--¿Que buscas, muñeca?.--pregunto. Megan iba a contestar pero apareció Sebastián atrás del desconocido.

--Meg, ¿que haces aquí?.--pregunto asustado. El barrio donde el vivía era muy peligroso y para los vagabundos y jóvenes hormonados seria muy fácil cogerla donde sea.--Ian vete de aquí, por favor.--Sebastian lo pedía amablemente mientras que Megan lo miraba confundida.

--Nos vemos muñeca.--Ian le guiño un ojo a Megan mientras asentía hacia Sebastián y salia rumbo a su departamento.

--Te repito otra vez Meg, ¿que haces aquí?--Volvio a preguntar frustrado no sabia que haría si algo le pasara a su maravillosa Megan.

--Solo quería venir a saludar.--Megan contesto de la misma forma que Sebastián, no permitiría que le hablara de esa forma.

--¿Tienes la idea de lo peligroso que es este barrio? ¡No vuelvas a venir sola!--Megan pego un salto cuando Sebastián le alzo la voz.

--Si tanto te molesta no volveré más.--ella también termino alzando la voz.

--ESTA BIEN. SOLO LARGATE.-- Sebastián grito perdiendo la paciencia.

--BIEN.--Megan grito y salió rápidamente cogiendo un taxi, que afortunadamente paso por ahí.--Hola Daniel, hoy estoy libre. Mi amiga canceló y quisiera salir contigo.-- hablo apenas contesto su amigo.

--Claro, paso por ti a las 8:00 pm. Nos vemos Meg.--dijo su amigo y colgó.

Ella no iba a echar a perder su moche con alguien que no valía la pena y que no era nada, ni novio, ni esposo, ni amigo, NADA.

Hoy saldría con Daniel sin importarle la pelea con Sebastián Salvatorre.