○002○
El día transcurrió con calma, las clases fueron como el típico primer día, los nuevos maestros se presentaron y dieron su discurso, otros sólo comenzaron con las lecciones y las actividades.
Aquella pelí___ se encontraba sentada en su pupitre mientras miraba hacia adelante y fingía prestar atención a lo que el profesor que daba clases decía. Pero su mente rondaba por todas partes, eran los momentos existenciales que cualquiera tiene, y eso era algo normal en ella.
Su mente iba y venía, con ideas muy extrañas, estas la hacían entender algunas cosas, pero a la vez complicaban otras.
Claro que el motivo de su momento existencial era el hecho de que le habían ganado.. Algo que no iba a aceptar, no se iba a creer eso del empate, y tampoco lo del favoritismo.
Tenía que existir alguna razón lógica para ella del porqué pasaron las cosas.. Aunque esta fuera obvia.
El profesor comenzó a escribir en el pizarrón así que abrió su cuaderno para empezar a anotar mientras su mente seguía acomodando todo. Era increíble la concentración que tenía y el hecho de que copió todo a la perfección.
La clase había acabado, el profesor se despidió rápidamente ya que tenía una junta por el inicio de clases y los demás alumnos terminaron de guardar sus cosas para salir.
La de orbes ____ sólo se dedicó a mirar por la ventana y suspirar, no quería salir al patio.
Terminó por salir del aula y caminó un momento por los pasillos, era terca, muy terca, tanto así que aún quería respuestas. Llegó a la biblioteca para encontrarse con la persona que le daría esas respuestas.
—..¿Qué tanto me ves? —preguntó la de lentes notando como la menor la miraba.
—Tú sabías —soltó.
Ella entendió a que se refería, ya que era de lo único que hablaba días antes, así que sólo miró a otro lado restándole importancia.
—¿Por qué me ilusionaste? —se quejó poniendo las manos en la mesa un poco alta.
—Yo nunca dije nada, tú te ilusionaste sola —contestó riendo por el reclamo de la menor.
—¡¿Y ahora qué hago?! —se dejó caer en el pequeño sofá.
—¿Sobre qué?
—Para recuperar mi lugar.
—Por dios, de seguro sólo es momentáneo, no creo que le tomen importancia —respondió terminando de guardar unos libros.
—¿Pero y si todos le toman importancia?
—No lo harán.
—¿Y si decía la verdad? —se levantó.
—¿De qué?
—¡¿Y si vuelve a ganar el primer lugar este año?! —se colocó las manos en la cara.
—Creo que estás haciendo mucho escándalo por un tema que no tiene importancia —se acercó –Al final todos terminan aprobando.
Ella se quedó callada, era verdad, terminaría pasando, eso era casi un hecho.. Pero no saldría como el primer lugar.
—..Tal vez tengas razón —la contraria sonrió —Pero sólo tal vez —se separó para ponerse de pie.
—¿Y ahora qué harás?
—El primer paso para no perder mi puesto —se alejó hasta llegar a la puerta —¡Nos vemos después Luci! —salió.
Esta sólo negó con la cabeza y río.
Talvez sí estaba exagerando, vamos, ¿Quién le podría quitar el primer lugar? De seguro sólo tuvo suerte.
No debía dejarse llevar por una tontería que se creo en la cabeza, lo vio bien, él no era competencia.. O eso quería creer.
Ahí es donde entra el primer paso, no bajar la guardia ante ninguna situación, estaba confiada, pero tampoco iba a caer por eso.
Siguió caminando por el pasillo, no tenía algo que hacer en verdad, no estaría mal salir un rato al patio.
Eso hasta que su sonrisa se borró.
—Ahg.. —murmuró al ver al que menos se quería encontrar.
Ahí estaba, el chico al cual detestó desde que supo de su mera existencia, hablando con una chica.
No le interesaba en lo más mínimo saber que pasaba pero quería seguir hasta la salida que justamente estaba de ese lado.
Bueno, no saldría, dio la vuelta y comenzó a caminar.
—¡Señorita ____! —se escuchó por detrás.
Ella paró y volteó lentamente.
Era el subdirector el que la estaba llamando.. No tuvo de otra.
Caminó hasta allá viendo que el superior se encontraba con Alemania y la chica.
—Me alegra haberte encontrado —sonrió —Necesitó un favor —soltó mirando a la chica.
Se puso a pensar su respuesta, pero el mayor se le adelantó.
—Ella es mi sobrina, Nathalia —dijo tomando del hombro a la otra chica que se encontraba con ellos —Acaba de llegar y quería saber si podías darle un pequeño recorrido por las instalaciones.
Miró a la chica.
—Eh.. Por supuesto —contestó sin cambiar su gesto.
—Gracias, tengo algunas cosas que hacer así que nos vemos después —le habló a la chica de cabello castaño quién sólo asintió.
Sin más, el mayor se fue quedando solamente ____, la chica nueva y.. El otro.
—Bien, nos vemos Nathalia —habló el chico.
—Adiós —respondió haciendo un ademán con su mano.
Las dos chicas se voltearon a ver.
—Bueno.. ¿Te parece si comenzamos? —dijo mirando hacia los pasillos, para luego verla.
—Claro.
La de cabellos ____ comenzó a avanzar mientras era seguida por la castaña, al menos parecía que podría hablar español con ella.
Estuvieron un rato caminando mientras ella le mostraba cada aula y salón de la escuela.
La contraria no decía mucho, sólo escuchaba y la seguía.
—Y bueno por último esta la cafetería —paró frente a la puerta del lugar.
La chica le dedicó una sonrisa como agradecimiento. Ella correspondió y miró a otro lado.
—Emm, creo que entonces.. Ya me voy —soltó.
Giró y comenzó a caminar.
—¡Espera! —habló la chica.
Ella volteó.
—Bueno yo.. No conozco a nadie y..—desvío su mirada, parecía que había batallado un poco por atreverse a decir eso.
—..Quieres.. ¿Caminar un rato?
La castaña abrió los ojos y dibujó una sonrisa asintiendo.
Tímidamente se acercó y se colocó al lado de ____ para comenzar a avanzar por el pasillo.
—Eres.. Nathalia, ¿Cierto?
—Sí, ¿Y tú ____?
—Síp.
—Te vi en la mañana por los pasillos, te veías apurada.
La chica reaccionó al recordar el momento en la mañana.
—Oh, sí.. Tenía cosas que hacer.
—Lo supuse.
—..Oye.
La contraria la miró esperando a que continuara.
—¿Por qué.. Estaba Alemania con ustedes?
—Ah, mi tío le preguntó si podía enseñarme la escuela, pero dijo que estaba algo ocupado —respondió.
____ sólo siguió caminando sin tomarle importancia al hecho de que fue la segunda opción.. Sí, se toma todo personal.
—¿Qué sueles hacer cuando estás aburrida? —volvió a hablar.
—Emm, usualmente me la paso en la biblioteca —respondió sin mirarla.
—Así que eres una chica nerd, ¿Eh? —se atrevió a bromear.
La contraria la miró y pensó.
—No sabría si decir que soy una nerd.. No soy tan fan de la ciencia —respondió juntando sus manos con una pequeña sonrisa.
—¿Qué es lo que te gusta leer?
—De todo, pero más lo que es de aventuras o crímenes, me la paso descifrando que va a pasar ja.
No sabían cuánto tiempo había pasado, pero se habían entendido muy bien, Nathalia lograba sacar conversación y ___ no se negaba.
—¡¿Dime qué clase de persona hace eso?! —reía la de orbes ___ al escuchar las anécdotas de la contraria.
—..Pues yo —soltó para después reír con ella.
—Uff, ya me había hecho falta esto.
—¿Tuviste un mal comienzo?
—Ni te imaginas y todo por culpa de un niñato —explicó.
—¿Qué hizo?, ¿Chocó contigo haciendo que cayeras quedando en ridículo frente algunas personas en el primer día de clases? —habló con total calma.
Esta la miró y quedó callada un momento.
—..Yo tampoco tuve el mejor inicio —confesó apenada.
____ río bajo para darle palmadas en el hombro como consuelo.
—Bueno, creo que los profesores no tardan en salir de la reunión —dijo mirando el reloj en la pared —¿Te parece si te acompaño a tu aula?
—¡Claro! De igual manera no sé ni en donde me voy a sentar.
La guió hasta el que sería su nuevo salón para después despedirse y tomar camino a su salón.
Subió las escaleras y siguió caminando hacia su aula mirando sus zapatos para luego ver las puertas de los demás salones, sin darse cuenta de por donde iba y terminar chocando con alguien.
—Oh, es tut mir.. leid (Oh, lo lamen..to) —habló el chico cuando vio a la contraria.
Ella sólo se quedó viendo al más alto para desviar la mirada.
Éste no despegó sus ojos de la chica quien sólo asintió para después irse.
Él se quedó viendo a la contraria hasta que volvió a voltearse para seguir su camino, pero paró, miró de nuevo a la chica; recordó como había tratado de evitar el contacto visual cuando estaban con el subdirector al igual que hace un momento.. Rio y comenzó a caminar a la misma dirección que ella.
Se acercaba cada vez más a la de tez ___, pero sin dejar de "leer" su libro, así hasta que se le adelantó.
La chica se sorprendió por la aparición de este, ¿Se suponía que iba en la otra dirección no? Sólo frunció un poco el ceño al ver que casi vuelven a chocar, pero lo ignoró.
Eso hasta que él la miró de reojo para sonreír, dando una señal a ____ de que de algún modo se estaba burlando, haciendo que recibiera la cara molesta de la chica.
Miró al frente de donde se encontraban, encontrando las puertas de lo que era la biblioteca, ese era su destino principal, no sabía si era el de la chica, pero tenía una idea de como hacer que lo fuera.
La miró y luego volvió a mirar las puertas, ella entendió a lo que se refería y empezó a ir más rápido pero sin correr, él igual, provocando que la chica comenzara a correr. Este claramente no se quedó atrás y la "intentó" arrevazar, cosa que no logró pues la menor parecía correr un maratón.
Llegó antes que él abriendo las puertas bruscamente, recibiendo las miradas de los que se encontraban ahí.
Después entró Alemania como si nada y se paró junto a ella.
—..No sé si te diste cuenta pero, te dejaste en ridículo —susurró a la chica quien sólo volvió a fruncir el ceño.
Algo le decía que iba a odiar a ese chico.
Miró al más alto irse hacia unas repisas, ¿Acaso el lee?, Entonces ella también.
Fue hasta un estante y escogió un libro, giró para ver en donde podría iniciar su lectura y notó un lugar vacío así que se acercó, pero otros ojos ya habían puesto su atención donde mismo.
Felizmente logró tener el lugar que quería.. Pero en frente se había puesto él, esto hizo que moviera su silla hacia un costado alejándo su visibilidad de esa horrible vista.
El sólo río y siguió leyendo.
Pasó un rato así, sinceramente ella esperaba que hiciera algo más además de leer, pero no hubo nada.
—¿Vas a seguir viéndome así? —cuestionó sin apartar su vista de la lectura.
Ella no contestó y sólo siguió viendo su libro.
Él miró el libro que tenía y río.
—¿Te digo el final? —ella lo ignoro —Nunca encuentran al asesino —le sonrió.
Ella levantó la vista dándole una mirada de desprecio, vio el que él tenía y sonrió.
—¿Te digo el final?.. Los dos se mueren —soltó haciendo que el contrario sólo riera.
Los dos suspirarón, ahora tenían que buscar otro libro.
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