Anteriormente...

Héctor: mmh~ mi hermosa Talia... mia para siempre... ahg~ -se esta moviendo demasiado-

Talia: -buscando como lograr que se calmara, lo abrace- +¿Que estoy haciendo? Si despierta va hacer algo de lo que me arrepienta+

Héctor: +hay Talia... un día me amaras... aunque tenga que llevarte conmigo+

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Desperté al día siguiente me sentía extraña, al abrir los ojos me di cuenta de que Héctor seguía acostado sobre mis piernas. Repentinamente abre los ojos, se levanta y me mira como si me pidiera algo; estaba por hablar cuando entra Jesie.

Jesie: la cafetería esta en mantenimiento por una semana, las comidas serán en sus cuartos. -dijo dejándonos el plato-

Talia: g...gracias

Héctor: *tan linda...* -dejo entre dientes-

Jesie: déjese de tonterías paciente 34-Q.

Héctor: moriras mas pronto de lo que crees. -la mira con deseó y rabia-

Ella salió del cuarto dejándome como el día que llegué aquí, sola con una mirada que me tiene nerviosa. Pude ver que el desayuno era huevos revueltos, pan con mantequilla y jugo de naranja.

Héctor: ayúdame linda -su tono de voz me asusto- o crees que puedo sin manos.

Talia: *no seria... no seria tan distinto que tener tijeras en vez de manos* -dije a mis adentros pero al parecer me escucho-

Héctor: te estas burlando -me sobresalte-

Talia: nn...nooo....no no... yo solo... pareció...emh. -me asuste tanto que de mis ojos salieron gotas saladas que se resbalan por mis mejillas-

Héctor: jajajajaja -su risa resalta en la habitación- es gracioso que te pongas nerviosa... me recuerda a mis aventuras pasadas -se acerco-

Talia: a...alej...jate -me aparte hasta quedar contra la pared-

Héctor: me tienes miedo y eso me gusta... tan asustada de que me quite la camisa de fuerza y te haga sentir dolor...

Talia: bast...ta... ¿no.. tienes hambre? -le cambio el tema lo que parece funcionar-

Héctor se aparta y se pone enfrente de su plato esperando que le de el primer bocado; me acerqué un poco temerosa, tome el tenedor con un poco de huevo y le di el pedazo. Durante cada vez que metí el cubierto en su boca con un poco del desayuno, su expresión se mostraba tranquila como disfrutando la comida.

Al terminar de ayudarlo, tome mi plato y empecé a comer sin dejar de sentir su mirada en mi; esto es incómodo. Acabe mi plato, lo deje en una esquina para que lo recojan mas tarde, me senté en mi esquina de siempre y no pasó ni 10 segundos cuándo se volvió a acercar.

Héctor: ¿Aún me tienes miedo? -se puso frente a mi-

Talia: si...siem...pre lo... tu...tuve -mi tartamudeo se hizo presente, él se burlaba-

Héctor: eso me fascina~ -me mira a los ojos- quítame la camisa.

Talia: ¿C...cómo sé q...que no me ha...ras daño? -se acerca a mi oído-

Héctor: porque lo haría, tienes mi marca -sentí como beso lo que quedaba de la mordida que me dejo- solo quiero tomar aire.

Talia: ¿Y c...cómo pl...planeas salir?

Héctor: tú sueltame y ya.

Por miedo a sus ataques de ira, pase mis manos por su espalda buscando los seguros, le gustaba; al soltar las correas él se levantó rápidamente para quitarsela, me asuste. ¿Que acabó de hacer?, él es un desquiciado y yo de pendeja lo solte, una vez sin la camisa me miro, tenia una camiseta.

Se me acerco, yo me levanté rápidamente y me aparte; el miedo me dejaba sin pensar hasta que choque con la esquina acolchada, me acorralo. Solo cerre mis ojos esperando alguna señal de dolor, pero solo sentí unos brazos rodearme; abrí los ojos para enterarme que me estaba abrazando.

Héctor: al fin... te puedo sentir con mis propias manos... puedo tocar tus mejillas, sentir tu calor. -paso sus manos por mi rostro-

Talia: ¿Que ha...ces?

Héctor: shshsh... *no digas nada preciosa... dejame disfrutar.*

Talia: no no no -me salían lágrimas- sueltame -desvíe la mirada, pero el tomo mi rostro-

Héctor: al fin te podré besar.

Me besó, sus manos recorren mi espalda buscando mi reacción pero solo trato de apartarme de él, solo lo excitava. Trato de que correspondiera hasta que mordió mi labio logrando meter su lengua, esto me tenia asqueada y aterrada.

Me estaba quedando sin aire cuando por fin se separó dejándome agitada y con lágrimas recientes en mis mejillas; paso su mano por debajo de mi ojos, secando las gotas saladas que mostraba mi dolor.

Héctor: realmente sabes delicioso... como las pocas drogas que he consumido... me tienes volado... tan perdido en tu sabor.

Jesie: ¿PERO QUE CREES QUE HACES? -se abre la puerta y entra Jesie con 2 guardias- apartate.

Fue tomado por los guardias y apartado de mi, me caí y Jesie se acerco a revisarme; noto la mordida en mi labio, la limpió dejando ver sangre en el pañuelo; ¿Tan fuerte me mordió?. Los guardias le pusieron la camisa de fuerza y la enfermera le puso un bosal.

Jesie: paciente 25-Q

Talia: ¿sí? -me asuste-

Héctor: no le contestes, se acostumbrara a tu nombre de interna.

Jesie: silencio 34-Q. 25-Q mañana tiene consulta la buscaré a esta hora.

Talia: es...ta b...bien. -baje la mirada-

Jesie: oye -me tomo de los hombros- se que te aterra, pero si logras superar esto podras salir.

Talia: ¿Y c...cómo...lo...grare eso?

Jesie: no lo hagas por ti... hazlo por tu hermano y por tu futuro ¿Ok? -asentí- solo sobrevive Talia.

Ella salio del cuarto junto a los guardias cerrando la puerta, Héctor me miraba extrañado, yo solo me puse en mi esquina a pensar hasta que el rompió el silencio.

Héctor: eres la primera paciente que llama por su nombre.

Talia: *no te creo*

Héctor: ¿Que me dijiste?

Talia: q...que no... te creo -me mira sorprendido- me dijiste que solo tomarias aire y mira el lío en que nos metiste.

Héctor: es la primera vez que me respondes así.

Talia: s...solo olvidalo... qui...quiero silencio.

Él se quedo callado y se sentó, acabó de representar una frase que mi padre me decía "el cobarde lo sera hasta el punto de quiebre y bravucon lo sera hasta que se lo permitan".

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Bueno paps, eso es todo, espero que no haya sido un desastre y que no me de un ataque escribiendo estas cosas. Lamento para los que esperaban cap pero llegué tarde y estaba cansada, pero bueno, he aquí el capítulo.

Comenten lo que les parece y voten. Así me despido.

Y la whovian se fue en su TARDIS, gritando...

GERONIMO.