En un mundo en donde nacen personas con ciertas anormalidades y estás tienen dos opciones: entregarse u ocultarse.

Nadie sabe cómo es que estas personas lograron nacer así, la ciencia aún no se explica cómo es que esto sucedió aunque si bien, han hecho diferentes estudios, nadie sabe exactamente lo que tienen estás personas, más si se puede neutralizar para que no causen daños.

Los padres de Kim Namjoon estaban felices de poder tener a su primer hijo, tenían todo preparado para la llegada del pequeño, ellos no les importaba nada, solo querían tener a su hijo ya en brazos.
El día del parto de la señora Kim, el padre estaba trabajando así que uno de los vecinos cercanos a la pareja llevaron a la mujer al hospital, le avisaron al padre y este enseguida pidió permiso para salir.
Mientras tanto con la señora Kim, ella estaba comenzando con sus labores de parto ya estando en la sala de parto

—Vamos señora Kim, respire profundo–la doctora que estaba ayudando a que se tranquilizara la agarraba la mano–Su esposo viene en camino

—Y-Ya no a-aguanto! A-ah!!–aunque era la pero sensación ella no se arrepentía de nada.

Los minutos que tardo su esposo fueron eternos para ella, cuando el llegó, ella comenzó con ataques un poco más fuertes haciendo que prepararán todo lo necesario para traer al pequeño al mundo.

—Tranquilozate mi amor, todo estará bien, tranquila–el hombre beso la mano de su mujer y después su mejilla, la mujer como pudo sonrió.

—Bien, por favor, respire hondo y puje señora–habló el doctor, eso fue más que suficiente para que la señora Kim hiciera lo que le pidieron

—A-Aah!!–la señora gritaba del dolor que eso le causaba, ella agarraba fuertemente la mano de su esposo y este mismo le daba ánimos a su esposa

Todo fue tan rápido pero a la vez tan lento, el pequeño había nacido sano y fuerte. Solo le habían echo unos análisis para saber si estaba bien, grande fue la sorpresa al saber que el niño tenía una anomalía.
Los doctores se miraron entre ellos y negaron entre si, solo uno estaba en desacuerdo así que salió enojado de la sala. Sabían que tratar de ocultarlo sería malo pero valía la pena, todos salieron del laboratorio y un enfermera cargo al bebé, llegaron y la señora, quien se había desmayado del esfuerzo había despertado unos minutos después y su esposo la tranquilizaba diciéndole que su hijo había nacido bien y que había hecho un buen trabajo.

—Tranquila cariño, todo está bien, el bebé está bien, hiciste un buen trabajo–la puerta fue abierta y entro una enfermera con el bebé en brazos, la señora Kim no pudo evitar soltar lágrimas al ver a su bebé bien—Te dije que todo estaría bien cariño

—M-Mi bebé... N-Nacio bien, está bien–la enfermera le pasó el bebé a su madre y sonrió, ellos no merecían que su hijo fuera un super dotado–T-Todo está bien, ¿Verdad?

La enfermera asintió pero a los segundos negó bajando la cabeza, ella no sabía cómo decir eso así que justo cuando iba a hablar un doctor llegó, no sabía cuál sería la reacción de los padres al enterarse

—¿Les has dicho?–la enfermera negó y el asintió, ambos padres se miraron preocupados esperando a que el doctor hablara–bien, lo que les diré espero que no lo tomen a mal pero... Su hijo es un superdotado, controla la electricidad y...

-No! A mí hijo nadie se lo llevará!!–el padre se separó de su esposa quien tenía al bebé pegado a su pecho, el doctor trato de tranquilizarlos, ellos jamás delatarian a una pareja tan feliz como se veían ellos

—No, no, no nada de eso, solo queremos saber si están dispuestos a cuidarlo y enseñarle que debe ocultar su poder

—Haré lo que sea pero por favor, no se lo lleven–suplico el padre, el haría lo que fuera para que su hijo viviera bien y estuviera bien en un futuro

—Muy bien, entonces todo está perfecto, cuiden de su hijo–la enfermera solamente sonrió y salió de aquella sala.

Los Kim se sentían felices y es que teniendo a un hijo así era bueno, podrían enseñarle cosas para que use su poder para el bien.
El doctor también había salido de la sala y fue a revisar unos papeles dejando a la pareja hablando. Ellos estaba más que felices y cuidarían de su hijo cueste lo que cueste e incluso si eso significaba vivir en otro lado para que nadie se lo llevará del lado de sus padres.
Kim Namjoon podría vivir en paz con sus padres cariñosos y atentos.

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En ese mismo hospital hace dos años nació Kim Seokjin, un chico que en cuanto nació y se supo que era un superdotado sus padres lo rechazaron.
Ellos habían decidido que no querían un hijo " fenómeno", así que cuando preguntaron que harían con el, lo decidieron dejar a manos del gobierno en un orfanato especial para ese tipo de personas. Aunque no era un orfanato como tal, ya que en este mismo ellos jamás en sus vidas podían salir a menos de que ya no los necesitaran y los hayan denigrado al punto en el que ellos ya no podrían siquiera poder tener una vida normal al ser "señalados".

No se sabe nada de los padres de Seokjin, nadie sabe que pasó con ellos o donde están, solo que abandonaron a su hijo y desaparecieron por lo que desde que Seokjin nació ha estado en ese lugar, aunque para un niño inocente como el no era malo el lugar, tenían a algunas nanas que cuidaban de los más pequeños, no todo era bueno y mientras más pasa el tiempo peor se vuelve la estancia o en este caso los castigos aumentan cada que rompen una regla.
El se tendría que acostumbrar a estar en ese lugar toda su vida y no por que quisiera si no que no tenía opción. Para un niño de 2 años todo parecía perfecto ya que tenía amigos pero cuando estos se portaban mal se les prohibía verlos a parte del castigo físico que se les daba. Seokjin solo esperaba que algún día pueda salir más haya de dónde estaba y no solo tener que asomarse a una ventana o estar en el invernadero del lugar.