CAPITULO 20
Cap. 20
AIDEN.
Los ojos de Blake me miran llenos de curiosidad, esperando mi relato.
-Todo comenzó el diez de Octubre de hace doce años...-Comienzo a relatar-
"Mi madre acababa de hacer la merienda, papá por supuesto no estaba en casa. Robert lo hacía trabajar hasta tarde, era uno de sus mejores trabajadores, recuerdo que estaba en la sala jugando con mis carritos a control cuando escuché un quejido de la parte de arriba de la casa, así que subí.
Me acerqué a la habitación de mis padres y vi a mi madre tirada en el suelo llorando y quejándose con las manos en la cabeza, asustado me arrodillé a su lado sin entender lo que pasaba y ella sólo me dijo "Aiden, llama a tu padre" Rápido baje las escaleras y tome el teléfono local junto con la agenda, marque el número de la oficina de mi papá y le dije lo que paso, dijo que vendría lo más rápido posible. Volví con mi mamá y me acosté a su lado, acaricié su cabello y la consolé en su dolor. Mi padre llegó después de veinte minutos, tomó a mi mamá en sus brazos y lo último que dijo fue "Aiden, quédate y no salgas" Me quedé sentado en el sofá mirando a la puerta con impaciencia hasta que me dormí, ya cuando anocheció la puerta se abrió y mi madre entro junto con mi padre, ella subió sin siquiera mirarme... mi padre se sentó a mi lado y dijo "Es tiempo que seas hombrecito, tu madre está muy enferma y puede que muera pronto"
Hago una pausa y suspiro, recordar esto duele tanto.
"Para resumir los siguientes cuatro años, sólo te diré que hubo dolor, quimioterapias y mucho sufrimiento. Mi madre se internó en el hospital, tenía un cáncer en los huesos muy avanzado y su tratamiento era muy costoso. Ya nada era lo mismo en casa, me quedaba solo todo el tiempo, mi padre se fue convirtiendo en un hombre duro y frío con el tiempo. La noche en que mi madre murió recuerdo que mi papá llego furioso a casa y de su closet sacó un revolver."
-Esa noche... la recuerdo. -Dice ella-Magnus entro a nuestra casa, Luke me despertó a media noche y dijo que teníamos que escondernos. Se escucharon disparos y luego llego la policía. -Mira el suelo-Unas noches antes los oí discutir, Magnus estaba en casa y papá lo inculpó de robar a la empresa.
-Robert no le pagaba suficiente a mi padre. El tratamiento de mamá era muy caro, en ese tiempo no teníamos una buena economía. -Explico-Papá paso unos meses en la cárcel, ahí conoció a Jack quién se convirtió en su mano derecha, fundaron Flower Black y compraron a los guardias, después de salir de ahí, papá mató a Jack y se convirtió en el jefe de la organización. Nos mudamos aquí, a Port Ángeles y desaparecimos del mapa, nos estuvimos formando y preparándonos.
-¿Tu mamá nunca supo nada?
-No. -Niego con la cabeza-
"Mi padre cada vez se llenaba más de rencor y odio. Su plan era acabar con Robert Johnson y todo lo relacionado a él, cuando cumplí trece mi padre se comprometió con Kate y cuando llegaron de su luna de miel, ¿sabes lo que él me dijo? "Aiden, debes aprender a ser un hombre, te mandaré a Rusia" Pase tres años de mi vida en un internado militar, donde me maltrataron físico y psicológicamente. Cuando salí de ahí y volví a Estados Unidos no fui recibido con los brazos abierto, él solo me dijo: Bienvenido a la organización"
-Desde entonces soy así. -Finalizo, los ojos de Blake están llenos de pena-He cometido cosas horribles, he matado, me he ensuciado las manos de sangre... ¿Pero sabes? No me arrepiento de nada.
-Aiden...-Ella toma mi mano-No debí presionarte a que me contaras.
-Ya no importa. -Beso su mano-Está en el pasado.
-¿Lo dices enserio? -Muerde su labio inferior-
-Por supuesto que sí, amor. -Beso sus labios-Tú llegaste a mi vida para mejorarla.
(...)
La noche llego rápido y nos quedamos en la habitación de Aiden viendo películas. Ya era una costumbre dormir en su cuarto, la sexta entrega de Harry Potter iba solo a la mitad y el sueño ya me envolvía.
-¿Por qué siento que me ocultas algo? -Suelto de repente-
Aiden pone el Netflix en pausa y me mira.
-¿Qué más podría ocultarte? -Me sonríe-Te he contado cosas que nadie más sabe.
-Debo estar cansada, es todo. -Le restó importancia-
Aiden se quita la camisa y se acuesta a mi lado abrazándome por la cintura.
-Tú siempre serás mi Blake. -Susurra en mi oído-
(...)
Voces y más voces son lo que me despierta de golpe al siguiente día, abro mis ojos y no veo a Aiden a mi lado. Las voces distorsionadas siguen y vienen de abajo si no me equivoco, me levanto de la cama y me asomo por el pasillo, lo único que veo es la cabellera de Aiden moviéndose, están discutiendo, pero ¿él y quién más?
Bajo las escaleras y finalmente veo de quien se trata, Chris y el otro tipo, ¿Michael? Si mi memoria no me falla. Más atrás viene caminando Magnus, cuando llego abajo todos me ven.
-Blake. -Fue lo único que salió de la boca de Aiden-
Magnus colocó su mano firme sobre su hombro y me miro con una sonrisa.
-Buen día, princesa. ¿Dormiste bien? -Cuestiona-Traigo muy buenas noticias para ti.
-¿Ah sí? -Me cruzo de brazos-
-Tu mediocre padre logro la cantidad necesaria. -Admite-Pago tu rescate. Hoy te vas, querida Blake.
Mis ojos se abren debido a la impresión. Volveré con mi familia, lo logre, todo volverá a ser como era antes.
¿Pero dónde entra Aiden en todo esto?
Volteó a verlo, su mandíbula está tensa y mira el suelo derrotado. Mi corazón se divide en dos, por un lado, está mi familia y libertad y por otro está él.
-Chris y Michael, enciendan la camioneta. -Les ordena-Aiden, ayúdalos. Blake debe hacer sus maletas.
Subo las escaleras y entro a mi antigua habitación, me cambio de ropa y recojo mis pocas pertenencias. Veo la habitación con nostalgia y justo cuando cierro mi bolso siento una presencia a mis espaldas.
-Aiden, sé que eres tú. -Me giro y me encuentro con Magnus-
-No, no soy Aiden. -Entra a la habitación-
-¿Qué quieres? -Desvió la mirada-
-Blake, cómo sabes soy un hombre de negocios. -Musita-Quiero hacer un trato contigo, es todo.
-¿Trato? -Levanto la ceja-¿Qué tipo de trato?
-Recuperaste tu libertad, ahora yo quiero recuperar a mi hijo. -Sonríe-Confesarás todo a la policía, Blake. Harás lo que sea para incriminar a Aiden, miente si es posible.
-¡¿Qué dices?! -Empujo a Magnus-¡Estás loco si crees que haré tal cosa!
Magnus me toma de ambos brazos con fuerza y me aprieta contra él.
-¡Mi hijo está embobado contigo, zorra! -Masculla cerca de mi rostro-Es la única forma para recuperar a mi Aiden, mi máquina de matar. Si no lo haces, él pagará las consecuencias.
Lo miro con horror. El nudo en mi garganta se forma y es imposible hacerlo bajar.
-Tú decides, Blake. -Me suelta-La vida de Aiden depende de ti.
-Si lo hago... ¿prometes liberarlo lo antes posible? -Le doy la espalda-
-Te lo juro. -Asegura-
Cierro los ojos con fuerza. Perdón, Aiden.
-Entonces, sí.
-Perfecto, tomaste la mejor decisión.
Magnus sale del cuarto, dejándome sola. Tengo que ahogar mis sollozos, el fuego en mi pecho debido a la gran impotencia hace que el corazón me duela, voy a traicionarlo y seguramente él me va a odiar de por vida.
Me limpio las lágrimas y tomo mis cosas, al bajar me encuentro con Aiden.
-Papá tuvo que irse, nos iremos con Chris. -Informa-
Asiento con debilidad.
Aiden tomo mi maleta y la dejo en el maletero. Me subo al asiento trasero y él imitó mi acción, Chris iba al volante no dijo nada en todo el trayecto. Y era mejor así. Di un último vistazo a la casa y la nostalgia se apoderó de mí.
Fue el viaje más largo y pesado que he tenido, nadie hablo y Aiden solo se limitaba a ver por la ventana.
"Bienvenidos a Seattle"
Es el letrero que me hace entender que todo ha acabado, las calles comienzan hacerse más familiares y poco a poco nos acercamos a mi casa. Me armo de valor y veo a Aiden me regala una sonrisa triste y el estomago se me revuelve cuando recuerdo lo que debo hacer.
La camioneta se detiene a una esquina de mi casa, hasta aquí llego todo.
-Chris, ¿me das unos minutos a solas con Blake? -No deja de mirarme-
-Claro, lo que tú digas. -Chris sale del auto-
-Blake.
-Aiden.
Decimos al mismo tiempo, él apenado saca una caja de su bolsillo.
-Ten, quiero que lo conserves. -Me entrega la caja azul-
La abro y veo que se trata de un collar con una mariposa.
-Aiden...
-Era de mi madre.
-No, es muy importante para ti. -Me niego-
-Acéptalo, es para que tengas un pedacito de mí. -Insiste-
Siento ganas de llorar y la culpa de carcome.
-Bien. -Levanto mi cabello para que él abroche la cadenita-
-Vamos, te acompañaré hasta tu casa.
Asiento y nos bajamos de la camioneta. Chris está sentado sobre el parachoques, pero al vernos se levanta.
-Escoltaré a Blake hasta su casa. -Le dice Aiden-
-Que no te vean, hermano. -Su mirada se posa en mí-Y tú, cuídate mucho. Créeme que fue lindo conocerte, Reinita.
El me jala y me envuelve en un fuerte abrazo.
-Adiós, Chris.
-Vámonos. -Aiden se pone la capucha de su sudadera-
Empezamos a caminar lentamente, las casas se me hacían cada vez más familiares hasta que finalmente llegamos a la mía. Solo debía pasar el portón y todo volvería a la normalidad, no esperaba que este día llegaría tan pronto, ni que dolería tanto.
Hasta aquí llego todo.
***
¿Qué creen que suceda a partir de ahora? El secuestro acabo, pero el amor entre Blake y Aiden sigue más vivo que nunca.
Sígueme en mis redes:
Twitter: GreciaSworld
Instagram: novelsofgreece
Facebook: Lectores de Grecia (Grupo)
Si te gusto el capítulo házmelo saber dejando tu comentario.
Grecia.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top