Capítulo 30| Feliz cumpleaños.
Emma Jhonson.
Sábado, no hay mejor día para celebrar un cumpleaños que un sábado.
Me levante con ánimos hoy, el sonido de mi alarma era una canción muy buena para empezar el día, Ciao Adios de Anne Marie. En este momento me encuentro saliendo del baño con una toalla envolviéndome el cuerpo.
Busqué en mi armario unos jeans negros rasgados en las rodillas, un crop top blanco y me puse tenis blancos. Peiné mis alocados rizos y me apliqué un labial ligero en los labios. Me miré al espejo y asentí con una sonrisa, satisfecha con mi aspecto.
«Hoy nada arruinara mi día.» pensé dándome una última mirada para bajar a desayunar.
Cuando llegué a la sala no pude avanzar más porque alguien se me había abalanzado encima para abrazarme, y ese alguien era Blair.
— ¡Feliz cumpleaños mejor amiga! —gritó prácticamente en mi oído.
— ¡Gracias rarita! —grité de vuelta abrazándola con fuerza.
—No puedo creer que ya tengas los dieciocho, ¡si eres un bebé! —me aparté un poco y la miré con una ceja enarcada.
La muchacha esta, está loca.
—Blair te recuerdo que tú también los tendrás dentro de unos meses. —sonrió y volvió a abrazarme.
—Bueno Blair, préstame un momento a Emma, yo también quiero darle un abrazo a mi niña —dijo mi tía y Blair se apartó para que mi tía me abrazara—. Feliz cumpleaños mi niña, no puedo creer que ya tengas dieciocho. Te deseo lo mejor mi bebé y recuerda que siempre estaré para lo que necesites, estoy muy orgullosa de ti. —besó mi frente y a mí se me cristalizaron los ojos.
Últimamente estoy más sensible y por extraño que suene, recientemente no me odio por tal debilidad.
—Gracias tía mamá. —volví a abrazarla y pestañeé varias veces para evitar las lágrimas que querían salir.
—No hay de que Em, siempre estaré ahí para ti. —me dedicó una sonrisa y luego se fue a la cocina.
—Tengo muchas cosas planeadas para hoy. —musitó Blair haciendo un bailecito raro y sentándose en el sofá.
—Vaya, creo que tú quieres más que yo celebrar mi cumpleaños. —negó con los ojos entrecerrados y yo reí.
Caminé a la cocina para desayunar y al llegar a la cocina mi tía me había preparado mi comida favorita, panqueques con chocolate.
—Tía, hoy por favor prepara la casa, celebraremos mi fiesta de cumpleaños aquí. —sonrió de una manera que no puedo explicar.
Esta feliz, muy feliz, y me alegra verla de ese modo.
Desayuné con una enorme sonrisa adornándome el rostro, amo los días de mi cumpleaños, desde que tengo once no celebro mi cumpleaños como se debe, la mayoría de ellos lloraba por sentirme sola y vacía, pero desde que tengo quince años empecé a celebrar mi cumpleaños de otro modo, no como una niña normal de quince años, con la familia y amigos reunidos en casa para celebrar, sino que me iba con mis amigas y me emborrachaba hasta perder la noción del tiempo. Decidí que de hoy en adelante celebraré como se debe, no embriagándome y perdiendo la conciencia en cualquier lado, sino que haré una reunión con mis amigos –los que me quedan– y pocos familiares que tengo, y celebraré como se debe.
Le agradecí a mi tía por el desayuno y le dije a Blair que me siguiera hasta mi auto. Nos subimos y Blair se veía confundida.
— ¿A qué club iremos hoy lindura? —cuestionó mirando su teléfono.
—No iremos a ningún club, Blair, hoy haré algo muy distinto. —me miró con el ceño fruncido en confusión y luego asintió aun confundida.
Conduje alrededor de unos 10 minutos y todavía no llegábamos, Blair se veía un poco impaciente y ansiosa. Pasaron unos 5 minutos más y Blair abrió los ojos como platos al ver algo en su teléfono.
— ¡Emma detente! —la miré extrañada, pero aparqué el auto.
— ¿Qué pasa Blair? —me tendió su teléfono aun con una "O" perfecta adornando sus labios.
En la pantalla se podía ver que Ashley recién había actualizado su historia en Instagram. Ahí aparecía la foto de Ashley con un chico, uno muy lindo y no solo eso sino que había posteado junto a la foto las siguientes palabras.
"Aunque una vez haya caído, hoy me levanto gracias a ti, novio."
Miré a Blair con una sonrisa que curvaba mis labios y Blair se veía sorprendida pero también feliz.
— ¿Estás bien? —le pregunté, ya que no reaccionaba.
—Estoy más que bien. —dijo en un pequeño susurro.
Sonrió y me abrazó, dejando caer algunas lágrimas de felicidad, ambas sabemos lo que significa. Al fin Blair podrá juntarse de nuevo con Mateo.
Les explicaré un poco... Blair y Mateo habían quedado que hasta que no se solucionara todo con Ashley, no se juntarían más, ni como amigos. Por eso Blair está tan emotiva y sobre todo feliz.
—Bueno, ¿Ahora estas lista para lo que haré hoy? —sonrió pero con confusión.
—Emma aún no sé qué harás, pero sí. —volvió a sonreír.
Me alegra tanto ver a mi mejor amiga siendo feliz. Ella es perfecta y se merece ser feliz.
—Esto haré amiga.
Conduje un poco más y ella se dio cuenta de lo que haría al instante. Estábamos a una cuadra de llegar a la casa de Ángela y mis nervios estaban creciendo.
Aparqué frente a su casa y le indiqué a Blair que se quedara en el auto. Caminé un poco insegura, pero finalmente llegué frente a la puerta y toqué el timbre.
1...
2...
3...
Y salió Ángela.
—Hola. —saludé con timidez y al instante Ángela se acercó y me abrazó. Algo que no me esperé pero igual correspondí su abrazo.
—Lamento todo lo que les dije Emma, estaba tan enojada porque Ashley estaba enojada e hice muchas cosas que nunca quise hacer, pero me gustaría saber que me perdonas. —dijo entre jadeos y pequeños sollozos que escapaban de sus labios, y mientras hablaba, más fuerte me abrazaba.
—Te perdono Ange, te entiendo estabas enojada y no sabías que hacer para recuperarla, pero ahora ya todo está bien. —nos apartamos, nos miramos y una lagrima de felicidad rodó por la mejilla de ambas.
—Feliz cumpleaños amiga. —me sonrió ampliamente.
—Gracias. —le devolví la sonrisa y en eso alguien salió de la casa y se posiciono junto a Ángela.
AY MI HERMANO QUE VIVA EL AMOOOOR...
—Feliz cumpleaños Jhonson.
—Gracias Evan —le di un corto abrazo—. Bueno chicos quería decirles que hoy haré una fiesta en mi casa y me gustaría que fueran.
Ambos con una gran sonrisa asintieron. Hablamos un rato más y así como Ángela se disculpó conmigo también se disculpó con Blair, Ángela también dijo que le diría a su prima, ósea Ashley, para que vaya también a la fiesta. Rato después me encontraba en el auto nuevamente con Blair, ahora en camino a la casa de Mateo, pero Blair dijo que no quería ni acercarse aun, así que respete su decisión y le dije que se quedara en el auto.
—Hola Mateo. —saludé cuando salió.
Tenía unas grandes ojeras y se veía un poco desaliñado. Pobre.
—Hola Jhonson, feliz cumpleaños. —saludó con una media sonrisa.
—Gracias... Mateo hoy haré una fiesta por mi cumpleaños y me gustaría que fueras, ¿Qué dices? —hizo una mueca como de disgusto o desacuerdo.
— ¿Ella estará ahí verdad? —aun seguía con esa mueca.
—Si... Y creo que tienen mucho de qué hablar. —frunció el ceño en confusión.
— ¿De qué hablas?
—Tendrás que ir a mi fiesta para saberlo. —enarcó una ceja y sonrió.
—Eso se llama manipulación Jhonson —me encogí de hombros—. Bien, iré.
—Te veo en mi fiesta, ponte bello Mateo, no quieres que Blair te vea así. —rió con bastante humor y me fui.
Me gusta ver feliz a las personas que quiero o que les he agarrado cariño, no me gusta que esas personas que tanto quiero sean dañadas, yo he pasado tanto como para no querer que nadie más sea infeliz, puede que suene difícil creer que una chica como yo –fría, egoísta en ocasiones y a veces manipuladora–, quiera a una persona, lo sé suena difícil de creer, pero no quiero verlos dañados, no me gusta que dañen a las personas que quiero.
—Ya está todo listo Blair, ahora iremos a mi casa para ayudar a mi tía. —Blair me miró con el ceño fruncido.
Luego me miró con nostalgia.
—No todo está listo, Emma aun te falta invitar a alguien. —me miró con una sonrisa suave y llena de nostalgia.
Bien, sé que se refiere a Lucas y que es algo injusto que intente arreglar todo con todos menos con él. Pero véanlo como yo lo veo. Uno, no creo que Lucas me quiera cerca después de romperle el corazón. Dos, sería raro decirle "oye Lucas, ya se solucionó todo, volvamos" cuando claramente ya todo se rompió, las cosas no volverían a ser igual. Como lo veo yo, ya todo está roto aunque me muera de ganas de estar con él, no creo que sea buena idea luchar por algo que ya no será igual.
—No lo haré Blair, lo tuyo con Mateo tiene solución, en cambio lo mío con él ya está roto. —negué.
— ¿Cómo estás tan segura? —cuestionó aun con esa sonrisa suave adornando sus labios.
La miré sintiendo un nudo instalarse en mi garganta— No quiero hablar de él Blair, todo está roto.
Me miró con tristeza y algo de... ¿rabia? ¿Impotencia?— Nunca digas que algo está roto Emma... Sabes que mi madre dijo eso. No quiero que seas como ella Emma, que después que se dio cuenta del error quiso remediarlo con tontas palabras como "Todo estaba roto", cuando todos sabemos que ella le fue infiel porque quiso y no porque lo de ella con mi padre "estaba roto" —una lágrima cayó de sus ojos—. No quiero que pienses de ese modo, no quiero que cometas el mismo error de echarlo todo a la basura sin intentar y menos que uses esa palabra, no digas que todo está roto cuando ambas sabemos que ustedes de verdad se quieren y jamás se harían algo como lo que se hicieron mis padres. —empezó a sollozar, así que se dio la vuelta y miró por la ventanilla.
—Lo siento, no quise... —intenté decir pero ella me interrumpió.
—No seas como Elizabeth, Emma. —susurró finalmente y yo también me derrumbé con ella.
De algún modo me dijo, "no te rindas con Lucas".
A Blair nunca le ha gustado hablar de la situación con su madre y tampoco le gusta que la vean llorar. Me siento horrible sabiendo que Blair se siente de ese modo por mí, ella se preocupa, es mi mejor amiga y no quiere que yo cometa los errores que algún día cometieron nuestras madres.
Elizabeth, mi madre. Ella le dijo a mi padre que todo "estaba roto" y se fue, sin más, sin intentar, sin nada más, solo se fue porque quiso... No quiero ser como ella, no quiero repetir los errores que ella cometió, no quiero dejar de pelear por lo que quiero y derrumbarme a la primera, no quiero estancarme y quedarme en un "Está roto", quiero avanzar.
Puse el auto en marcha y alrededor de unos veinte minutos después estábamos en frente de mi casa. Bajé y cuando estaba a punto de entrar Blair me tomó del brazo y me detuvo.
—No olvides nada de lo que te dije Emma, recuérdalo, nada está totalmente "roto" si no lo consideramos así, hay cosas que por más destruidas que estén pueden tener arreglo si no nos rendimos en remediar el daño. —le sonreí y asentí.
Cuando entré a casa me encontré con Emilia y su novio, ellos me felicitaron y me dieron un regalo cada uno, y dijeron que me darían otro más tarde. Por lo menos un regalito me dieron los estúpidos esos. Luego entré a mi habitación y allí me encerré.
Tengo que hacerle caso a Blair, no puedo vivir siempre con él "Está roto" en mi mente, no puedo dejar que obstáculos dañen mi felicidad, tengo que aprender a ser una chica que va por sus sueños y por lo que quiere, y lo que yo quiero es a Lucas Morris en mi vida.
No sé cómo lo haré, no sé cómo le diré que vuelva a mi vida después de haberle dicho que se fuera de ella, lo quiero, y mucho, pero no sé cómo decirle que entre a mi vida nuevamente, no sé cómo hacer que regrese. Por primera vez, no sé qué hacer...
(...)
La tarde la pase así, encerrada, pensando en todo, pensando en él.
En este momento me encontraba debatiendo en si ponerme un vestido azul o uno blanco. Tenía ambos vestidos en ambas manos, el azul tiene una abertura en la espalda y tiene pequeñas perlitas que adornan el escote, no tiene un escote excesivo y me gusta, es un poco más arriba de las rodillas. El blanco es parecido, un poco más arriba de las rodillas, este tiene un escote pronunciado y se amolda al cuerpo, es muy lindo.
Después de casi media hora me decidí por el azul, me coloqué los tacones negros que utilicé para la fiesta que organizó Lucas, peiné mis alocados rizos y los dejé sueltos, me hice un maquillaje ligero, compuesto por base, un poco de brillo en los labios, un poco de sombra en los ojos y listo. Ni tan excesivo, ni tan simple.
Escuché pasos acercarse, luego escuché dos golpes en la puerta.
—Adelante. —Grité y Blair entró cubriéndose los ojos— ¿Qué te pasa?
Sonrió y se quitó las manos de los ojos, mirándome con asombro— Por esto —me señaló—, quería sorprenderme.
Ja ja, ay pero que hermosa es mi amiga. Y pensando que estaba loca. Bueno si está, pero es perfecta así.
—Pero tú tampoco estás tan mal. —sonrió como diva y yo rodé los ojos.
Blair va vestido con un vestido color piel, es ajustado arriba y suelto de la cintura para abajo, lleva unos tacones blancos que hacen un lindo contraste con el vestido. Tiene el cabello suelto y un maquillaje muy lindo. Siempre he dicho que Blair es dueña de ese color, le queda de maravilla.
Reímos y ella se sentó en mi cama, revisando su teléfono con preocupación.
— ¿Qué te pasa? —ladeo la cabeza.
—En menos de media hora empezará tu fiesta, estoy nerviosa Emma, no quiero arruinarlo todo con Mateo. —sonreí con dulzura.
—Sé que puede ser difícil Blair, créeme que lo sé, porque yo aún no puedo siquiera mirar a Lucas sin sentir miedo de lo que diremos. Pero te puedo asegurar algo Blair, aunque yo sea una cobarde y no haya podido invitar a Lucas a mi cumpleaños, yo sé que tu si vas a poder arreglarte con Mateo y saldrán de mi fiesta sonriendo, abrazándose y llenándose de besos mutuamente. —sonrió de lado.
—Bien, ya dejaré de escucharte porque no quiero arruinar mi maquillaje. —agitó sus manos frente a sus ojos, abanicándolos.
Reí y miré la hora en mi teléfono, gusto ahora debería de ir bajando, la fiesta ya va a empezar. De repente por toda la casa empezó a sonar Bag guy de Billie Eillish, mi canción favorita. Miré a Blair y me hizo una seña para bajar.
Dentro de risas y canturreos raros de Blair y míos, bajamos las escaleras. Mi tía no me había dejado salir en todo el día de casa y cuando me di cuenta de todo los que hizo me asombré. La casa está totalmente decorada y no solo eso, sino que la mayoría de las decoraciones están de mis colores favoritos, azul, violeta y negro.
—Creo que vine combinada con las decoraciones. —miré con una mueca mi vestido.
—No cariño, las decoraciones vinieron combinadas contigo. —Blair me guiñó un ojo y me guió hacia el patio de mi casa.
Todo estaba oscuro pero sonaba la canción de Billie Eillish como ya les dije. Nos acercamos más y cuando pisé la grama se oyó el grito de Mateo, de Ashley y su novio, de Ángela y Evan, de Blair, de Emilia y su novio y mi tía, diciendo "Feliz cumpleaños"
Bueno y así empieza mi cumpleaños...
***
Nota de la autora: Jolas!
Bueno, sin mas rodeos les diré algo... Doble actualización!!
¿Que les pareció este cap?
Betzabeth A.
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