"Solo quería que me vieran a mi"

Aun no lograba sacar esas palabras de su mente... ¿Por qué? Nunca ha tenido el mejor de los conceptos hacia la idiota de su rommate, no toleraba su forma de ser, era tan escandalosa, cínica y burlista... entonces ¿Por qué? Su subconsciente le estaba jugando una mala pasada, lo estaba traicionando. ¿Acaso se veía reflejado en ella?

Bakugo sentía empatía

Toda esa mierda él también la vivía día a día. Trabajaba con ira, frustración e impotencia. No entendía porque la sociedad tenía ese maldito miedo de ver a dos jóvenes promesas superando las expectativas del resto, era como si tuvieran que pelear contra el mundo..., ¡Aaaaah!!!, se maldecía a sí mismo por pensar tanto en eso. Tal vez solo de daba demasiada importancia al asunto, más de la que debería.

A él poco debería importarle, los niños ricos y sus problemas no eran asunto de él, y menos los de esa castaña despreocupada. Después de todo ese misterio y tanto drama que hizo, era increíble ver como al día siguiente estaba de lo más tranquila, restándole importancia a todo lo que había pasado... ¿Cómo lograba ser así de desinteresada?

Bakugo pensó y pensó...y no quería pensar, pero convivir con ella era tan... tan... extraño. Ella era extraña. Tal vez el exceso de dinero hacía así a las personas. Bueno, no era la primera vez que convivía con gente acaudalada, durante sus años en preparatoria convivió con el mitad y mitad y el cuatro ojos. Todoroki era muy parecido a su compañera en varias cosas, siempre tranquilo y relajado, parecía que nunca se preocupaba de nada. En cambio, Ida, bueno, este sí parecía vivir en un estrés y caos total.

Así que...no, nunca iba a entender a los ricos. Y no lo malentiendan, a él todo eso no le robaba el sueño, ni el dinero ni las clases. Su familia siempre ha trabajado arduamente, nunca le faltó nada, y no se sentía menos por eso. Aunque no iba a mentir, algo que le dijo el mitad y mitad a la hora de almuerzo lo descolocó un poco...

"- ¿Los Utsumishi?... Comparados a su fortuna, la de mi familia parece un chiste- "

¿Es enserio?

Bueno, eso igual no cambia su manera de pensar...

- ¡Date prisa!!!-

- ¡Pon atención! -

- ¡Mueve el maldito culo!!!-

- ¡Qué carajo!!!-, No solo era el poco de gritos e improperios que le estaban dando, también el sonido de varias bocinas lo hicieron regresar en sí... -Joder-, no se había percatado que el semáforo se había puesto en verde... Ahora que les pasaba a ese poco de malhumorados conductores, ¿cuál era la maldita prisa? Todo esto le estaba pasando por culpa de ella, ya debería dejar de distraerse con tanta mierda y prestar atención a la carretera, iba a su trabajo y no podía atrasarse más...

Su maldito trabajo

Eso era otro tema que lo tenía cansado... Sin previo aviso lo había vuelto a llamar para cubrir un compañero bueno para nada, solo porque el muy idiota no tenía la capacidad de organizar al personal, y él tenía que limpiar los platos rotos... ¿Qué por qué mantenían a un incompetente como ese?, solo por ser el lame culos del jefe, y porque lo mantenía al tanto de todo lo que decían de él el resto de empleados, era un completo imbécil.

Había aguantado demasiado, ¿era un trabajo de mierda?... Sí, claro que lo era... Pero no le pagaban tan mal, lo suficiente para mantenerse. Además, no era como si pudiera imitar a la insufrible de su compañera. ¿Dejar tranquilamente lo que haces y dedicarte a algo más?, no era tan fácil para él, se lo repetía constantemente a sus amigos cada vez que le pedían que renunciara, encontrar otro trabajo no era tan sencillo.

Sin embargo, estaba exhausto, tanto física como mentalmente, sus llamadas repentinas, que lo trataran como un principiante bueno para nada y subestimaran sus habilidades en la cocina, estaba cansado que no valoraran su trabajo. Y lo peor de todo, ya estaba afectando sus estudios en la universidad.

Así que en esta ocasión iría con los tacos de frente, ya se había decidido a ello, hablaría con su jefe y pondría las cartas sobre la mesa. La situación lo había superado y ya no se quedaría callado.

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- ¡Oye Cams!!!-

La chica volteó rápidamente la mirada hacia la persona en cuestión, -Kiribro... ¿Cómo estás? -

-Aquí...vamos- respondió un poco entrecortado

Ambos se encontraron en las afueras de la universidad, cuando iban de salida de sus respectivas clases, aunque el pelirrojo más bien parecía que venía de correr alguna maratónica...

-Lo... lo siento-, prosiguió el joven, -te vi... te vi desde el otro edificio y ... y bueno, me apuré en alcanzarte-

- ¿Está todo bien? -

-Oh sí, tranquila... ya pasará ...Pero dime... ¿tienes algo que hacer ahorita? -

Ella negó con su cabeza, -Estoy tipo accesible para cualquier cosa iluminada que sugieras-

La miró un poco nervioso, a pesar de todo lo que había hablado con su rubio amigo no sabía cómo hablarle a una chica como esa ahora que sabía de donde venía...

-Ah bueno... esto...quería hablar contigo... supongo jeje- le dijo apenado poniendo una mano en su nuca

Ella solo lo miró divertida al ver su nerviosismo, -Claro Kiri... pero no te pongas así, no es como si fuera un alíen depredador-

-Jajaja lo siento Cams-, le regaló una enorme sonrisa haciendo visible esos lindos colmillos, -pero qué tal si vamos a comer, muero de hambre, conozco un buen lugar, aunque...bueno, solo es un lugar de hamburguesas-

- ¡Fírmalo!!!... las hamburguesas son totes iluminadas-

Kirishima se alegró tanto por esta reacción, después de todo esta chica sí tiene los pies bien puestos sobre la tierra, - ¿Tú auto o el mío? -

-Pues el tuyo fam... el mío está en casa-

- ¿Y eso? -

-La mitad del tiempo viajo en bus fam...el aparta está cerca, es mejor, así contribuyo a que haya menos tráfico-

-Jajaja bueno Cams, un auto no creo que haga mucha diferencia-

-Bueno... por algo se empieza-

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Se fueron hacia el estacionamiento donde el pelirrojo tenía su vehículo, una vez dentro de él procedieron a marcharse a ese lugar que tenía a la castaña muy emocionada, sí, así era ella de entusiasta. Durante el camino hablaron de sus vidas, ella hacía un pequeño y rápido resumen de todo lo que había hablado con su rommate, obviando alguna que otra cosa más personal. En tanto Kirishima le contaba a ella de su trabajo en un gimnasio como entrenador personal, que estudia enseñanza de la educación física, y que desde siempre él y Bakugo han entrenado juntos, varias veces a la semana, ya sea en el gym o en su casa.

-Oh enserio Kiribro?... eso explica muchas cosas- dijo en forma maliciosa recordando el grato y pequeño incidente del día que conoció al rubio...

- ¿A qué te refieres? -

Fijó su mirada hacia la ventada, y apoyo su brazo en ella, y divertida respondió, -Es top secret-

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Era un lugar hermoso, sencillo pero muy rústico y acogedor, quedaba a la par de la costa, así que el panorama que los chicos tenían ante ellos era el océano y la arena. Estaba muy sorprendida, fascinada... la vista era maravillosa, la brisa del mar era palpable en su rostro, el sonido de las olas relajaba sus oídos, sentía que estaba en uno de esos lugares tropicales que había conocido en alguno de sus viajes, Hawái, Islas vírgenes... lo que fuera, en el mar la vida es más sabrosa, al menos eso era lo que había aprendido.

-Este lugar es... tipo de lo más hermoso que he visto bro-

-Jeje ¿Verdad?... espera a que pruebes los batidos-

Kirishima se preguntaba qué tipo de ser mitológico habitaba dentro de su amiga... pues con solo mencionar la sencilla y común la palabra "batido" vio como sus ojos se ensancharon, y un brillo mágico resurgió de ellos al instante, iluminando todo a su paso...

Se sentaron en una de las mesas que se encontraban en la terraza, así tendrían un mejor panorama del magnífico paisaje ante ellos. Pidieron lo que cada uno se comería, una hamburguesa especial con doble cuarto de torta, queso y tocino, una canasta grande de papas a la francesa junto a las salsas de la casa, y para rematar sus batidos jumbos de piña colada.

- ¿Sabes fam?... si no fuera porque tienes una súper iluminada novia y aun no cae el atardecer, diría que quieres ligar conmigo, este lugar es súper romántico-

A Kirishima le dio un poco de pena este comentario, -Vamos Cams, es solo un lugar de hamburguesas-, respondió rascando una de sus mejillas, -Aunque bueno, jeje, de hecho, aquí fue mi primera cita con Mina... comimos y luego caminamos por la playa-

A la castaña le brillaron los ojos de solo imaginar la tierna escena, - ¡Oh fam!... ¿Y luego que pasó? -

-Ah bueno... le pedí que fuera mi novia, ella aceptó, y ya dos años de eso- respondió con una gran sonrisa

-Kiribro...eso es muy romántico-

Estaba muy conmovida por la historia, sus manos estaban entrelazadas entre sí, quien diría que dentro de ese fornido y muy varonil físico había un suave y empalagoso bombón.

-Jajaja gracias Cams... aunque te confieso que fue ella la que se me insinuó primero-

- ¿Por qué no me extraña? -

-Jajaja si... Ashido es una gran mujer...eso sí, a veces me dan ganas de pegarla a una silla y que se quede quedita un rato-, mencionó resignado por lo impulsiva que es su novia, -pero la amo con todo el corazón-

La expresión de Camie decayó un poco, y mantenía una sonrisa medio forzada, -Eso es lindo, es una chica afortunada-

Kirishima se preocupó un poco por este repentino cambio - ¿Estas bien? -

Al percatarse de su obvio y extraño comportamiento, trató inmediatamente de reincorporarse y actuar lo más normal posible, - ¡Ah si Kiribro! todo good... y bueno, hablando de la pinky, ¿Dónde está? -

Kirishima no está muy convencido, y con una mirada escéptica responde, -Está en clases de baile, hará una presentación para un examen en unos días, así que lo más probable es que no la vea hoy... Así que aproveché y te invité a ti-

-Me siento como plato de segunda mesa-, bufo, -pero te perdono solo porque tu chica es primero-

El chico ríe por eso, y prosigue, -bueno Cams... A decir verdad... quería saber cómo iba todo con Bakubro-

- ¿A qué te refieres? -

-Tú sabes... después de todo lo que ocurrió

Quería escucharlo de ella, su amigo es complicado, y necesitaba estar seguro que las aguas se hayan calmado, para bien de ambos...

-Ah eso...-, suspiró la joven, -creo que mejor, a veces es solo Bakumie siendo él mismo, pero hay otras en que su carácter supera mis estándares, solo va y se encierra, y al día siguiente vuelve a ser el gritón de siempre... Al menos no me ignora del todo-

-Que te grite y no te ignore es bueno...supongo-

- ¿Vedad?... es un paso a nuestra nueva y no sé si mejorada relación- dijo en un tono sarcástico

El pelirrojo volvió a sonreír ampliamente por esto, sabía a lo que ella se refería. Después tomo una postura más seria y continúo....

-En cuanto a los cambios de actitud de Bakubro... no te los tomes personal-

- ¿Qué quieres decir? -

-El trabajo de Bakubro es una porquería-

Camie pudo notar como cambió el semblante de su amigo pelirrojo, se veía molesto, algo raro viniendo de él...

-Su jefe es un idiota, lo hace trabajar en horarios con baja clientela, le alterna las horas como le da la gana, a veces solo trabaja de 2-3 horas, y de la nada lo hace ir hasta 12 horas, muchas veces hace que choque con sus clases, y Bakugo tiene que buscar quien le cambie las jornadas-

-He notado que Bakumie a veces, cuando llega de trabajar, llega mal... es como si trabajara en algo que no le gusta hacer, lo normal sería llegar cansado y esas cosas, pero la forma en que lo hace no es la mejor - dijo con mucho pesar

El pelirrojo asintió por esto, - ¿Sabes que es lo peor? -, la castaña negó, -ni siquiera lo ponen a cocinar como tal, prepara, pela y pica ingredientes, sí, pero no le permiten explotar sus habilidades culinarias como tal... Lo menosprecian por su edad y eso a él lo frustra... El otro día uno de sus compañeros de trabajo hacia una salsa especial para una proteína, no recuerdo bien que era, Bakubro lo corrigió, a su manera, y preparo la salsa él. Cuando su jefe lo supo le dijo cosas como que recordara cuál era su lugar y que no debía interferir en sus recetas, aun sabiendo que el otro estaba mal... Bakugo estaba tan irritado cuando me lo contó-

Irritada estaba ella

Estaba molesta, fijó su mirada al mar, sus puños apretaban fuertemente la servilleta que sostenía entre sus manos... y tenía esta enorme necesidad de abofetear a alguien.

-Eso no es nada genial...yo misma he visto cocinar a ese chico, y ama lo que hace, siempre está concentrado en cada detalle y desborda su pasión por la cocina como muy pocas veces he visto, y créeme fam... he visto a muchos chefs de talla mundial, sé de lo que hablo-

-Así es-, una sonrisa nostálgica salió de él, -eso es porque ama la cocina más que nada, especialmente la francesa, y eso es en gran parte gracias a su ídolo...-

- ¿Ídolo? - preguntó curiosa

-Así es... Bakubro lo admira desde pequeño. Como sus padres siempre estaban afuera trabajando él solo se encargaba de preparar su comida y la de ellos. Lo miraba por televisión, revistas, etc... de ahí obtenía varias de sus recetas, era muy curioso. Luego empezó a hacer pequeños trabajos en primaria y secundaria, como repartidor o dependiente en supermercados, todo para ahorrar y poder costearse los libros de Best Jeanist... -

La castaña dio un suspiro al imaginar a su Bakumie trabajando duro con el deseo de conseguir aquello que más anhelaba, -Es bastante genial ¿no?, Bakugo-, tenía su mirada fija sobre la mesa, pensando en todo lo que había que tenido que pasar el rubio para llegar hasta acá, en lo mucho que tuvo que esforzarse... Si hubiera sido ella con solo parpadear tendría eso y muchas cosas más...

-Patética-

...

..

.

Espera... ¿Qué?... Fue en ese momento de introspección que se dio cuenta de algo, algo muy importante, abrió sus ojos como platos y miro al pelirrojo que la veía asustado por la forma en que ella lo estaba viendo a él...

-Cams...? -

¿Cómo no se dio cuenta antes?, todos esos libros de cocina, las revistas, ¡o sea todo!!! se maldecía a si misma... Ya sabía ella que era una maldita despistada, pero, aun así, ¿cómo no reaccionó antes a lo que estaba escuchando?... es más, ¡¿Cómo no pensó en eso desde el principio!!!?

-Espera Kiribro... ¿Dijiste Best Jeanist"? -

-Sí... bueno, ese es solo su alias-, dijo algo extrañado, -creo que su nombre real era... Tsuna... Tsuna...- intentaba recordar

- ¡Tsunagu Hakamata!!!!- gritó la castaña poniéndose súbitamente de pie y golpeando sus manos sobre la mesa

-Ah... ah sí... ese- el chico estaba aturdido por su reacción

En cambio, ella, que volvía a tomar asiento lentamente, parecía feliz, demasiado en realidad, - ¡Dios!!!... Kiribro, esa es la solución... ¿Cómo no me di cuenta antes? -

Inmediatamente sacó su celular del bolso, y con sumo entusiasmo empezó a marcar un número en él, - ¿A quién va a llamar? - se preguntó a sí mismo un Kirishima curioso y expectante

-A ver... si acá van a ser casi las 4, ahí debe de ser..., - susurro para sí mientras miraba su reloj, -Vamos... no me dejes esperando, contesta... ¡Hola!!!... ¿Tío Besty? -, habló muy emocionada, - ¿Cómo van por allá? ¿Qué tal Francia? -

Fue algo automático... abrió sus ojos de par en par cuando escucho a la chica hablar, ¿Qué estaba pasando aquí?, no puede ser que... que... ¿Camie conocía al ídolo de Bakugo?... ¿Lo llamó... ¡tío!?...

- ¿Conoces a Best Jea...? -

-Shhhhh-, lo calló la castaña poniendo el dedo sobre sus labios, -Yo estoy bien tío, ya sabes, disfrutando tottes la vida universitaria-

Él estaba aún más confundido, solo intentaba buscar una explicación lógica a lo que estaba ocurriendo. Fue cuando analizó todo de una mejor manera... Ella era una de esas personas acaudaladas que han viajado por todo el mundo, por lo cual ha de haber visitado múltiples restaurantes de alta alcurnia, y probado los platillos más exquisitos, si eso lo entiende. Sin embargo, la forma tan cordial y la confianza con la que le habla era increíble...

- ¿Entonces no vendrás para mi cumpleaños?, eso no es nada genial tío-, dijo haciendo un puchero, - ¿Una semana después?, eso es mucho, pero tendré de tomarlo, ¿lo prometes? -

Estaba ansioso, impaciente, nervioso... ¿Por qué hablaba tanto?, era peor que su novia... ¡Dios que estrés!!!

-Espero que sea así tío-, dijo en tono amenazante, -tengo negocios pendientes contigo, y algo importante que hay que tratar... Si bueno, besos... Ah sí, Salúdame a Luka- terminó la llamada

Se quedó viendo el celular con una enorme sonrisa de satisfacción, otra vez se iba a salir con la suya...

- ¡Di algo mujer!!!!- le grito un Kirishima exasperado por su silencio, - ¿Cómo... o sea, ¿cómo es que conoces a Best Jeanist? -

Lo único que obtuvo de ella fue otra enorme sonrisa acompañada de un signo de amor y paz...

- ¿Son familia? -

-Digamos que es tipo el best friend de mi daddy, eran compañeros de habitación en la universidad. Casi que me crie con él antes de que se fuera a Francia-

-Si créeme que me di cuenta de su cercanía-

- ¿Qué te puedo decir fam?, solo tiene un hijo nacido allá, soy como la niña de sus ojos, te he-

-Oh Cams eso es increíble... cuando Bakubro se entere...-

Inmediatamente puso su dedo índice frente al rostro del pelirrojo moviéndolo en forma de negación, - No, no y no... no puedes decirle nada a Bakumie, promételo-

-Bueno... lo prometo, pero... ¿Por qué? - preguntó extrañado

-Vamos fam... conoces a ese rubio mejor que yo, sabes lo orgulloso que es, aunque sea su ídolo no va a aceptar un trabajo que, para él, prácticamente se lo están regalando, menos si viene de moi-

Kirishima se quedó pensando en eso, y tenía sentido lo que estaba diciendo, río para sí al ver como ella estaba conociendo cada día más a su explosivo amigo.

- ¿Qué piensas hacer? -

Se cruzó de brazos maquinando su maquiavélico plan, -Tú déjamelo a mí-, le respondió con una risita maldosa

-Por lo pronto... mantén tu afilada boquita cerrada, ¿ne? - Kirishima asintió, - ¡Ah!, y eso incluye a tu novia-

-Jajaja a esa menos que le digo Cams... tú tranquila-

Ella, aun con sus brazos cruzados miraba feliz a su amigo pelirrojo, la vida misma se encarga de poner todo en su lugar, y esperaba poder ayudar a su roomate con eso....

-Gracias Cams-

Lo miró extrañada al escuchar esas palabras... pero al verlo tan feliz entendió a qué se refería, -Bueno, aún no he hecho nada, solo esperemos que tu amigo coopere-

-Te ayudaré a que así sea-

Así ambos siguieron con su plática... fue una tarde provechosa, para ambos, ayudarían a su amigo a salir de ese hoyo en el que se encontraba, sabían que lo valía... Además, habían disfrutado de su comida y sus bebidas, la castaña se vio en la obligación de repetir de esa iluminada bebida... y para cerrar con broche de oro, y como había imaginado... el atardecer era perfecto.

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Al abrir la puerta del apartamento supo que algo andaba mal...

Su primer indicio de alarma fueron los zapatos tirados por toda la sala, y no estrictamente acomodados en la entrada como era costumbre. Además, visualizó otras cosas que yacían en el suelo, como las llaves de su roomate y unos jarrones quebrados, la alfombra era un desastre, y sus lindos e iluminados cuadros pasaron a mejor vida. Caminó hacia la cocina y vio los recipientes de las especias tirados, y su contenido esparcidos por todo el lugar, peligrosamente había vidrio sobre los estantes y la estufa, sus víctimas parecían ser el juego de vasos de vidrio que ella tanto se había esmerado por comprar... eso definitivamente fue su segunda señal.

Estaba muy asustada... y preocupada, así que fue directo a la habitación de su compañero para asegurarse que estuviera bien, y saber que rayos había pasado... Ella solo podía imaginar que habían sido víctimas de un robo, o un asalto... Solo podía imaginar a su Bakumie siendo amenazado o amordazado por alguien... Ella solo podía imaginar lo peor. La puerta estaba entre abierta, tocó... y no hubo respuesta

- ¿Bakumie? - le llamó... al no haber contestación tomó el valor necesario para entrar a la guarida de la bestia sin su permiso

Logró ver a Bakugo acostado boca arriba sobre la cama ... uno de sus antebrazos estaba apoyado sobre su frente, y su otra extremidad, que colgaba fuera de la cama, sostenía algún tipo de botella o recipiente. Tenía puesta su ropa de trabajo, y al acercarse más pudo notar un olor muy particular saliendo de él...

-Apestas a viejo de cantina fam-

Se alarmó cuando notó su respiración un poco agitada, se sentó rápidamente junto a él, con mucha delicadeza le quitó la botella que sostenía y le habló suavemente, -Bakumie...Bakumie... ¿Estás bien? -

El rubio parecía estar medio dormido, así que tomó el brazo que descansaba sobre su frente y lo retiró, tal vez con eso lograba que reaccionara un poco. Sin embargo, con lo que no contaba era verlo con uno de sus ojos morado, y parte de su pómulo lacerado, eso la asustó un poco más.

-Katsuki...- le susurró sin soltar su mano

Al escuchar su nombre, el rubio empezó a reaccionar un poco, balbuceaba algo que la castaña no entendía bien... Al abrir sus ojos, sus miradas chocaron inmediatamente... Ella no podía apartar su vista de él, y él se mantenía tranquilo, tratando de discernir lo que, con su limitada vista, podía notar ... angustia y tristeza en los ojos de su compañera.

-Cams... ¿eres... tú? - la llamó de la forma más suave que ella jamás creyó que oiría de él...

Ella le regaló una sonrisa tranquilizadora... -Aquí estoy Bakumie-

No sabía que pasaba, pero él no se veía nada bien, así que lo mejor era no cuestionarlo en ese momento...

Lo que sí no esperaba era lo que vendría a continuación... De la nada Bakugo acostó la cabeza en sus piernas, escondió el rostro sobre ellas y rodeó con sus brazos su delicada y delgada cintura, abrazándola por completo.

-No te vayas...- fue lo único que escuchó decir

¿Eh?... ¿Qué?... Ahora mismo... ¿Qué estaba pasando?, Bakumie... ¡Su Bakumie!!!... ¿La estaba abrazando?... Este acto la dejo un poco descolocada, lo que menos se esperaba es que él hiciera algo así... Sin embargo, entendía la situación, así que trato de mantenerse serena y devolver el gesto, así que puso sus suaves dedos sobre el cabello del rubio y empezó a acariciarlo... se preguntaba como un cabello tan rebelde podría llegar a ser tan sedoso.

-No me iré Bakumie... tranquilo-

Se aferró más a ella

Aún le preocupaba lo que pudo haber pasado, pero esta actitud le enternecía demasiado. Sintió como la respiración del joven se iba calmando poco a poco, se estaba quedando dormido de nuevo, pero a diferencia de cómo lo vio al principio, dormiría mejor... Esperaría un rato más para marcharse a su habitación, sabía que había dicho que se quedaría, pero también era consiente que el rubio estaba borracho, en el momento en que se llegue a despertar y la encuentre ahí se iba a armar una batalla sin fin.

-Tendré que ponerme a limpiar antes de irme a dormir- pensó recordando el desastre que dejó el rubio tras su paso

Con un suspiro llevó su cabeza hacia atrás y la apoyó en el respaldar de la cama... aun acariciando ese rubio cabello

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Saludos...

Espero les haya gustado este capítulo, siempre trato de esmerarme en cada palabra que escribo... no va a ser perfecto pero lo intento

Algo que hasta ahora me percaté es que en estos dos último capítulos los protagonistas han sido Bakugo, Camie y Kirishima... no lo hice al propio, pero me gusta el pelirrojo de mediador xD

Trataré de subir el proximo lo mas antes posible, pero ya saben... ser mamá, esposa, trabajadora, ama de casa y mujer es duro, pero siempre saco en rato para compaartiles esta historia :3

Gracias por el apoyo *-*