(...)

Ya paso el día y hoy había quedado con Pedri.

Como venía él a mi gasa me puse un chándal negro largo junto con un top azul marino.

Minutos más tarde tocaron la puerta y fui a abrir, al abrir vi a mi ex-canario. El me miro fijamente y sonrió.

—Buenos dias Cami— dice él y te dirá que mis ojos estaban brillando más que el sol.

—Buenos días Pepi— digo y él sonríe como un niño pequeño. El pasa adentro de mi casa y se sienta en el sofá del salón.

Nuestro antiguo sofá.

—Cuanto tiempo desde que no veía este sofá— dice y yo sonrió.

—Pasábamos horas aquí— digo mientras sonreía al recordar nuestros antiguos recuerdos.

-Si, la verdad— dice y los dos quedamos en un silencio algo incómodo a mi parecer.

—¿Y porque quisiste verme?— pregunto mirándole.

—Quería hablar todo de una vez por todas— dice él y yo sonrió algo dolida.

—Bien, pues adelante— digo y él me mira para empezar a hablar.

—Primero quería pedirte perdón por no haberte dado la atención que querías, y segundo, yo no te hacía demasiado caso, porque— hace una pausa y yo le mire esperando una respuesta.

—¿Porque?— pregunto yo y él me mira triste.

—Porque te estaba engañando— dice el mirándome para ver mi reacción, yo miro hacia el suelo con ganas de llorar.

—Yo, lo siento mucho— dice Pedri al ver que yo no contestaba.

—¿Todo fue un juego para ti?— pregunto y él asiente.

—Lo siento, yo en esos momentos no sabía bien lo que hacía y además hice una apuesta— en cuanto Pedri dijo eso le mire, y porfin pregunte.

—¿Enserio Pedri? ¿No tienes sentimientos o que?— pregunto yo llorando.

—Perdón, era un gilipollas, me arrepiento mucho— dice él y cada vez me cabreo mas.

—¿Quien lo sabía?— pregunto.

—¿Quien sabía el que?— pregunta el canario confundido.

—¿Eres tonto o que? ¿Quien sabía lo de la apuesta?— digo y él mira al suelo.

—Gavi fue el primero en saber— dice él y yo iba a contestar pero llaman a la puerta.

—Ahora seguimos, idiota— digo levantándome y yendo a abrir la puerta. En cuanto abro veo a Joao en mi puerta.

—¿Que haces aquí?— pregunto yo confundida quitándome las lágrimas de la cara.

—¿Que pasa? ¿Porque lloras?— pregunta el entrando y cierra la puerta.

—Luego te cuento todo— digo y me dirijo al salón y el me sigue.

Pedri mira a Joao y Joao mira a Pedri, se podría decir que eran miradas de asco.

—¿Que hace el aqui?— pregunta Pedri y Joao le mira mal.

—Cállate— digo yo y él me mira sonriendo.

—¿Porque no me callas, como hacías antes— dice el canario soltando una sonrisa traviesa.

—No estoy para bromas estupido, solo quiero saber algo más y te vas a tu casa, ¿entendiste?— digo y él asiente.

—¿Que?— pregunta.

—¿Sentiste algo por mi cuando estábamos juntos?— pregunto y él mira al suelo.

—Nunca sentí nada— dice el apenado y Joao le mira mal.

—Eres buena chica, eres muy guapa y enamoras a primera vista, pero en mi caso, no me gustaste lo suficiente— dice él y yo comienzo a llorar.

—Vete ya— digo yo y él me mira triste.

—Camila, en un futuro tal vez me puedas gustar, pero creo que no es el caso ahora, además tú tienes algo con el— dice mirando a Joao de reojo.

—No estamos saliendo— dice Joao.

—Bueno, si fuese así, ¿que te importa?— pregunto yo enfadada.

—Nada nada— dice Pedri.

—Dije que te vayas— vuelvo a decir yo.

—Si, cierto— dice el levantándose del sofá y yendo a donde se encuentra la puerta.

—Perdón— dice antes de cerrar la puerta.

En cuanto Pedri cierra la puerta Joao se acerca y me da un abrazo.

—Creo que ya se de que va todo esto, no tienes porque explicármelo— dice Joao acariciándome el pelo.

—Gracias por todo, Joao— digo y mirándole y él me seca las lágrimas de los ojos.

—No es nada, bonita— dice Joao separándose de mi.

Corto, pero tengo que hacer muchos deberes :)

Les va gustando?

Los amo, voten.