Las semana fueron pasando igual que los meses, Emma e Isaac se volvieron a instalar en una casa. Su relación había avanzado mucho, todo había vuelto a la normalidad, ellos pasaban toda la tarde juntos entrenando y por la mañana trabajaban. Emma ya controlaba sus poderes sin ni un inconveniente, era mucho más fuerte que antes, sabía que Max estaba bien porque lo sentía en su interior.

Esa mañana cuando se despertó estaba sola en la cama, era muy raro, casi todos los fin de semanas se la pasaban en la cama, acurrucados, pero Isaac no estaba. Se sienta en la cama y ve la hora, eran las 8:30am, se frota los ojos y ve que abren la puerta de la habitación y ve a alguien entrar pero du rostro lo tapaba un gran ramo de rosa. Emma no entendía que estaba pasaba.

-Feliz cumpleaños mi amor- él baja las rosas y deja ver una gran sontisa. Va hasta su lado, le da el ramo de rosa roja y le planta un dulce beso en los labios y empieza a cantar el feliz cumpleaños, después le saca las flores de la mano y la levanta en brazos para llevarla a la cocina en donde hay una torta y un montón de regalos, Emma lo mira a los ojos y las lagrimas nublaban su vista.

-Gracias- se acerca y lo besa, él la agarra del cuello para intensificar su unión, la acerca contra su cuerpo demostrándole lo mucho que la necesitaba.
En ese momento Emma siente un fuerte dolor en el pecho que hizo que pegara un grito y se separara de Isaac, éste la mira asustado sin entender que es lo que paso, entonces Emma deja de gritar y siente en fuerte golpe en la puerta del patio, salió disparando a abrir la puerta y cuando mira ve a Max tirado en el porch con una gran herida en su pecho de la cual sale una gran cantidad de sangre, Emma corre hasta su lado- Max- aprieta su herida- Isaac, ayúdame- le grita a este que miraba la escena desde la puerta sin entender que era lo que estaba pasando, entonces siente una presión en su mano y ve que Max le intentaba decir algo, ella se acerca-Vienen por ti- el terror apareció en los ojos de Emma, cosa que hizo que Isaac saliera de su trance y la ayudara a meter a Max dentro de la casa.

Lo depositan en el sofá y Emma sale disparada al baño para buscar el botiquín de primeros auxilios, cuando vuelve junto a Max, este está muy débil, lagrimas caían por las mejillas de Emma, toma coraje y rompe la remera de Max dejando su herida a la vista. Emma se tapa la boca con las manos al ver la cantidad de sangre que fluye, entonces Isaac interviene y la saca, empieza a frotar sus manos y una pequeña luz sale de ellas, después las apoya contra la herida y hace presión, Max grita de dolor y todos los focos de la casa estallaron en mil pedazos.

-Emma debes de controlarlo- Isaac le grita para que Emma reaccione.

Emma se pone a su lado y agarra la cabeza de Max con sus dos manos y lo mira a los ojos, entonces lo lleva a un recuerdo.

Emma esta junto a Max conduciendo por la carretera. Estaban yendo al trabajo, iban en el Mustang de Max y él estaba sonriendo mientras miraba como Emma se pintaba los labios y se acomodaba un poco el pelo, ella lo mira.

-¿Qué miras?- Emma lo mira sin entender su sonrisa

-Nada- Max se baja del auto y entra al bar, pero cuando esta por abrir la puerta siente que una fuerte corriente de aire lo golpean en la espalda y al darse vuelta ve a Emma riendo, entonces el va hasta su lado y la levanta en brazos como una bolsa de papá y le da una fuerte palmada en el trasero y la lleva así hasta adentro donde estaba lleno de gente y Emma gritaba que la bajara, entonces un hombre se acerco.

-Baja a la muchacha- el hombre se le para en frente en forma amenazadora, era mucho más grande que Max y tenía muchos tatuajes en los brazos.

-Tranquilo amigo, estamos jugando- Max baja a Emma de sus hombros.

-¿Está bien señorita?- el hombre mira a Emma y esta asiente con la cabeza, entonces el hombre se va y Emma mira a Max y se ríe.

Cuando volvieron del recuerdo Emma mira a Isaac y este la mira con cara de preocupación.

-La herida está curada, pero perdió mucha sangre Emma- Isaac se levanta y se va a lavar las manos

-Toma la mía- Emma se arremanga y le ofrece su brazo.

-Emma no sabemos su tipo de sangre- Isaac niega con la cabeza

-Tiene sangre Nefilim igual que yo por sus venos, va a funcionar- Emma estaba decidida.

Isaac se vuelve a desinfectar las manos y busca todas las cosas para hacer la transfusión.

Las horas pasaba y Max no despertaba, la transfusión había sido exitosa, pero Emma no entendía que le pasaba que no despertaba, cuando llego el medio día golpearon la puerta, Emma fue quien atendió y era el correo, Emma lo recibe y había una caja muy grande, firma la entrega y entra a la casa, mira a Isaac y este le sonríe.

-Feliz cumpleaños- el va hasta su lado y agarra la caja- no lo abras ahora.

Emma lo miro sin entender, él le agarra la caja y se la lleva, entonces Emma se vuelve a sentar en el sofá y sostiene la cabeza de Max en su regazo.

-Despierta por favor- le saca el pelo, el cual lo tenía bastante más largo, de la frente y le deposita un tierno beso- Te necesito.

En ese momento Emma ve que Isaac estaba parado en la puerta de la cocina mirándola enojado, entonces siente que Max se empieza a mover y al mirarle ve que está abriendo los ojos y la miran directamente a los suyos.

-Hola- Emma lo mira con una gran sonrisa- Feliz cumpleaños

Max se levanta del sofá quejándose por el dolor.

-¿Qué fue lo que paso?- Isaac hablo antes de que Emma lo pudiera hacer.

-Debemos irnos- Max va hasta la ventana y mira para afuera como buscando a alguien

-¿Qué paso Max?- Emma se para a su lado cuando él se tambalea y los sostiene por la cintura

-Me encontraron, intente pelear con él, pero no fui lo suficientemente fuerte, me hirió y me dejo para morir lentamente, pero pude encontrarte Emma y si yo lo hice el también, estas en un gran peligro, el piensa que yo estoy muerto y ahora va a venir por ti- Max se para y la agarra de los hombros- debemos huir.

Isaac sale para la habitación y sale con un bolso, no había tardado nada, todo indicaba que hacía mucho que ya lo tenía armado.

-Vámonos- Isaac se dirige a la puerta seguido por Max, pero Emma se queda parada donde estaba.

-No, no vamos a huir- Emma niega con la cabeza- Vamos a dejar que vengan y los vamos a enfrentar, no quiero huir más- ella mira a Max que sabe que el la va a apoyar- Max por favor, sabes que juntos si lo vamos a vencer- después mira a Isaac y este deja caer el bolso.

-Bueno, pero vamos a estar listos cuando lleguen- Isaac entra a la casa nuevamente, se va a la habitación y cierra la puerta con llave.

Emma mira a Max y este le sonríe, entonces va corriendo hasta su lado y lo abraza, él clava su nariz en su cabellera y aspira su aroma, entonces Emma se aleja y lo mira mientras agarra su mecho y se lo está por poner tras lo oreja, pero no lo hace, lo deja ahí y Max sonríe.

-Tengo algo para ti- Max busca en su bolsillo trasero y saca una pequeña bolsita- Feliz cumpleaños- le da la bolsita y Emma lo mira sorprendida.

-Yo no tengo nada- Emma hace un pequeño puchero.

-No importa, es una baratija- Max le toca el labio de forma cariñosa

Emma abre la bolsita y ve que es un pequeño dije, lo saca y se queda sorprendida cuando ve que es la misma estrella de la marca, ella lo mira y él le guiña un ojo, Emma se acerca, se saca su cadena y pone el dije, después le da la espalda a Max y le da la cadena para que se la prenda.

Las horas pasaron e Isaac seguía encerrado en la habitación, Emma y Max habían preparado la comida y lo llamaron, pero él no respondió. Emma se estaba empezando a preocupar pero Max la tranquilizo, cuando llego la noche se pusieron a ver algo de televisión y se quedaron dormidos los dos en el sofá.

Un ruido despertó a Emma y vio que la luz de la casa estaba cortada, se levanta y va a buscar su Mágnum 44 se dirije a ver que la puerta de la habitación siga cerrada y así era, entonces vuelve a sentir un ruido, pero esta vez era alguien que estaba intentando abrir la puerta de la casa, Emma se esconde detrás de la pared y deja que el intruso entre y ve como su sombra se va acercando, entonces salta frente a esté, le apunta con la Mágnum 44 y dispara, pero la bala no dio en su blanco, sino que se detuvo frente a esté y cayó al suelo, Emma se abalanza para golpearlo, pero una fuerza la empuja contra una pared y no la deja moverse, este se acerca y Emma pudo ver que era una mujer rubia y pálida.

-¿Qué tenemos aquí?- la intrusa toca la marca de Emma- así que ya obtuviste tu poder, pero no veo que seas tan fuerte- ella se ríe.

Emma ve como Max se está levantando del sofá sin hacer ruido y la está por atacar, una gran bola de fuego le golpea la espalda y en ese momento la fuerza que sostenía a Emma se desvaneció y ella pudo volver a moverse. Entonces ella se para junto a Max y ambos se agarran de la mano y forman una gran esfera de aire que le enviaron hacia la intrusa y la encerraron, para después empujarla hacia el patio.

Ya allí, empezaron a llamar al agua y este se levanto en una gran columna que dejaron caer sobre ella, no la dejaban de atacar, cuando al final esta pudo atacar y dio un fuerte golpe contra Emma haciendo que se separara de Max, y después desplegar sus alas.

Emma se levanta asustada, era un Ángel y sus alas lo demostraban, ella se levanto en el aire y cuando esta por atacar, Isaac sale de la casa, extiende sus alas y sale al encuentro de esta y la detiene, pero en vez de golpearla va y la abraza, Emma mira a Max y el estaba igual de confundido que ella. Ambos Ángeles bajaron y se volvieron a abrazar, después Isaac la mira a Emma y lleva a la intrusa.

-Emma, ella es Samanta- Isaac la mira y después mira a Emma- es una gran amiga.

En ese momento Max se para junto a Emma.

-Ella nos ataco Isaac- Emma no entendía como confiaba en ella.

-Los estaba probando- Samanta hablo antes que Isaac- y dieron una gran pelea, estuve a punto de perder, pero tienen mucho que aprender todavía.

-Emma ella nos va a ayudar- Isaac volvió a interferir

-Emma no podemos confiar en un Ángel- Max le agarro la mano y hizo que lo mirara a los ojos- Yo no puedo confiar en ellos.

Emma no entendía a que se refería, pero sabía que si Isaac confiaba en ella, era de confianza, él nunca la pondría en tan gran peligro.

-Max, yo no fui quien mato a tu madre- Samanta hablo y Emma la miro con asombro por lo que acababa de decir.

-No, claro que no, ese fue mi padre- Max la mira con furia.

-Y a él se le dio su castigo- Samanta se acerca hasta su lado y pone una mano sobre su hombro- el ahora vaga por este mundo como un humano, perdió sus alas.

-¿Eso es posible?- Isaac mira a Samanta con cara de asombro.

-Si, el se rebeló contra nosotros y mato a muchos humanos, pero como era uno de los altos jefes tenia demasía información sobre el cielo, por lo tanto no podía ser un demonio ni un Ángel caído, por lo tanto cortamos sus alas y perdió cada uno de sus recuerdo- Samanta vuelve a mirar a Max- lo siento mucho, lo que le paso a tu madre no estuvo bien- ella se aleja de Max y vuelve junto a Isaac- cuando me dijiste que eran dos Nefilim no lo podía creer, pero vi muy bien lo que puede hacer juntos y es impresionante.