NARRA LUCIA.

Y otra vez lo había perdonado, de nuevo estaba en sus garras como si nada hubiese pasado, como si esas palabras que tanto me dolieron los convirtiese en piropos, después de mirarme con su cara de cachorrito desvalido no me pude negar, no sé lo que tiene, su sonrisa, sus labios, sus ojos, su pelo, sus mejillas sonrosadas, pero algo raro pasa dentro de mí cada vez que está cerca de él, cada vez que sus boca pronuncia un ¿me perdonas? No me puedo negar, es como si sus palabras tuviesen burundanga y me dejase sin voluntad propia, por muy enfadada que pudiese estar con él con solo una mirada era capaz de perdonarlo, y lo justifico aunque no lleve razón ¿será verdad lo que un día me dijo Emily? ¿sentiré algo más por él?.

Ahora, su torso desnudo estaba a mi disposición, solo lo cubrían unos minúsculos calzoncillos, me encontraba acostada junto a él, su boca y la mía estaban a punto de chocar, incluso podía notar su respiración, pocos centímetros y una fina sabana, separaban nuestros cuerpos, uno junto al otro, Jesús se encontraba espatarrado a mi lado durmiendo plácidamente, como lo hacemos tantas veces, mis dos primos uno a cada lado, al principio buscaba cualquier excusa para hacerlo, pero ahora con solo mirarlo sabe que quiero dormir a su lado, inhalando su colonia, soñando despierta. Esta noche, había prometido cuidarme y velar mis sueños en compensación de sus palabras, esas que tanto me dolieron, pero supongo que lo que más me fastidió es que hiriera su orgullo, en el fondo, llevaba razón, él estaba en lo cierto, lo que más me dolía en no ser su principal preocupación...

FLASHBACK

Como cada día, Daniel y yo estábamos juntos en la biblioteca haciendo las tareas, bueno mejor dicho, yo hacía los deberes mientras que Daniel leía algún comic, para después dejarle lo que tenía hecho... siempre era igual, yo me esforzaba y él, se aprovechaba de lo que hacía, todos los años decía lo mismo, "princesa este año me voy a esforzar" y al final siempre acabábamos igual, Jesús era más responsable que él, de hecho siempre terminaba las tareas antes que nosotros y después se iba a jugar con sus compañeros, y yo también lo haría, sino tuviera que hacer la tarea por los dos... pero me era imposible decirle que no, quiero tenerlo siempre a mi lado y si no lo hago lo harán repetir curso y eso significaría estar menos horas junto a él...

- Daniel, ¿me puedes traer el libro que he dejado encima de esa mesa? – pregunté señalándole la mesa, y el solo se dedicó a poner su dedo encima de sus labios como señal de silencio... al final, lo iba a tener que traer yo, pero me encontraba un poco desganada, me había empezado a doler demasiado la barriga y una mala sensación empezaba a recorrer mi cuerpo- ya voy yo – de mala gana me levanté, pero noté como algo extraño me pasaba, sentí un liquido recorrer mis piernas-

- Estás sangrando princesa – su cara cambió al ver la sangre en la parte posterior de mi pantalón blanco, sin ni siquiera poder contestarle me cogió en sus brazos y abrió la puerta de la biblioteca llamando la atención de todo el internado-

FIN DEL FLASHBACK.

Éramos sólo dos críos, al recordarlo una sonrisa iluminó mi cara, sobre todo por lo que vino después, "mi princesa se desangra, mi princesa se desangra..." gritó por todo el pasillo del internado hasta llegar a la enfermería, en donde se coló entre dos niños, que estaban esperando para que Mery los atendiese, su cara era de preocupación, juraría que incluso lloró creyendo que me iba a pasar algo, estuvo en todo momento a mi lado mientras me exploraban, pese a que la enfermera le rogó en varias ocasiones que abandonara la sala, hizo caso omiso, tenía cogida mi mano fuertemente y depositaba en ella algún beso....

FLASHBACK

- Princesa, no quiero que te pase nada, no soportaría vivir sin ti – comentó mientras Mery me terminaba de explorar- eres lo que más quiero, y no sé qué sería de mi vida si me dejaras...

- Daniel puedes llamar a tu tía, le tenemos que comunicar algo – la enfermera habló cortando las bonitas palabras de Daniel, aunque no era la primera vez que me las dice-

- ¿Qué le pasa? ¿se va a curar? Mery no quiero que le pase nada, cúrela, le doy todos mis ahorros si es necesario, pero quiero que mi prima esté bien.... – al decir esto Mery rió y me miró-

- Está bien Daniel, lo que tiene es normal, se ha convertido en una mujercita y ahora ve a llamar a tu tía o tu madre, que juntas le tenemos que explicar algo a Lucía, le dio un leve toquecito en su nariz, le secó sus lagrimas y abrió la puerta para que fuera lo antes posible- sabes– la enfermera llamó mi atención cuando ya mi primo estaba fuera- si no fueseis primos, seríais unos novios perfectos...

FIN DEL FLASHBACK

Ese era Daniel, mi príncipe azul, la salvación de mi vida, la tía me ha contado muchas anécdotas de cuando éramos pequeños, y en todas terminaba salvándome o protegiéndome como lo que me considera. Con su mano, recorría mi espalda de arriba hasta abajo lentamente, dándome un pequeño masaje, yo, me limitaba a cerrar mis ojos haciéndome la dormida, pero en el fondo él sabía que estaba despierta, se iba haciendo de día es lo único que sabía, la poca luz que dejaba pasar las persianas, lo hacían aún más bello, normal que tenga detrás a todas las niñas del internado tras él, el sonido del carro de la limpiadora pasar por el pasillo y los leves ronquidos de Jesús eran nuestra única distracción, solo éramos él y yo, su cuerpo y mi piel, su respiración y la mía...

- Princesa – susurró en mi oído- sé que estás despierta, te he visto reír antes, vamos arriba dormilona que es tarde – dándome unos toques más fuertes en mi espalda intentaba llamar mi atención- vamos mi bebé, tenemos que ir a la cafetería a desayunar, los compañeros llegan antes de las 12:00 – todo era perfecto hasta que me recordó eso, la felicidad de esta noche se acababa antes de las 12, como si de la Cenicienta se tratase, Meghan, la bruja de este cuento, también tendría que volver a esa hora- vamos, remolona, no me dejas otro remedio que levantarte como cuando éramos pequeños – al comentarme eso sonreí, cuando pequeños me despertaba a cosquillas, y así hizo, Daniel se puso justo encima de mí, rodeó mis caderas con sus piernas y cuando menos los esperaba... su cosita, estaba justo encima de mi estomago, sus manos en mis caderas actuando de manera rápida haciéndome cosquillas-

- Ya me despierto para, para por favor – pero sin esperarlo mi primo cayó justo encima de mi boca, ahora más que nunca nuestros labios estaban a escasos centímetros, sino me hubiese apartado nos hubiéramos besado, Daniel se apartó evitando aprisionarme de nuevo y rápidamente se tapo, intenté apartar mi vista de ahí, pero no pude... seguramente no se acordaría que estaba en ropa interior- Buenos días – comenté sonriendo, y desde luego, entre las vistas y el casi beso, si que habían sido buenos días-

- Hola princesa, es casi la hora que mamá nos dijo para ir a desayunar – empezó a ponerse sus zapatillas- siento lo de ayer princesa, sé que me has perdonado, pero no he podido dejar de pensar en mis palabras, lo siento, yo de verdad que no siento eso... me voy a duchar, despierta a la marmota – señaló para Jesús y vi como se metía en el cuarto de baño-

Me di la vuelta y empecé a darle toquecitos a mi primo, este gruñó pero abrió sus ojos...

- Vamos Lucía que hay que volver a la realidad – Jesús se quitó las legañas y buscó a su hermano al otro lado de la cama- te tengo una buena noticia, la bruja –se refirió a Meghan- no llega mínimo hasta dentro de dos días, se ha quedado tirada en un aeropuerto – puso una sonrisa maliciosa y me abrazó- 

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BUENO BUENOO BUENOOO OTRO CAPITULITO MAS NO??? pues ya vamos por el 4, y estoy teniendo un apoyo grandisimo gracias gracias gracias... y graciasssssss osea es que no se ni que decir... 

¿que os ha parecido el capitulo'??? vemos un lado de Dani que a mi me encanta... osea ese momento doy todo mis ahorros pero salvela, me mató... DANIEL VEN A MIII....

PUES MUCHISIMAS GRACIAS DE NUEVO Y VOLVERE A SUBIR PRONTITO PROMETIDO... totalmente prometido... SOIS LAS MEJORES