La autopista estaba justo en su hora pico, había varias personas que tocaban el claxon para lograr avanzar hacia su destino.

Mientras que otras simplemente esperaban con paciencia, en un vehículo se encontraba una bella eriza mayor con una radiante sonrisa en su rostro.

¿Cómo no estarlo?

La eriza se había enamorado de un hombre muy apuesto y amable hace poco más de dos años.

Ahora iria a vivir con él, puesto a que se convertirían en marido y mujer hace. Era lo que deseaba desde hace mucho. Encontrar a un hombre que la ame y la respete.

Estaba muy feliz por dejar su ciudad natal e ir a vivir con el amor de su vida. Ya quería llegar hacia él.

Lástima que no se podía decir lo mismo sobre su hijo.

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─¿Podrías quitar esa cara de una vez por todas Sonic?

─¿Qué quieres que haga? ¿Quieres que finja ser feliz por dejar a mis amigos y a mí pareja solo por tí? ─miraba por la ventana.

─Sonic ya lo habíamos hablado ─volteo a ver a su hijo ─Sergey es un hombre realmente amoroso y muy amable, no había conocido alguien así desde hace mucho tiempo.

─Lo mismo decías de papá y ya viste en donde acabó.

─Sonic, Sergey es muy distinto a ese tipo, en verdad lo amo y quiero ser feliz a su lado.

─Y tu felicidad se requiere a base de mi tristeza, si eso ya me ha quedado claro muchas veces.

─Claro que no, podrás visitar a tus amigos en vacaciones y seguiras en contacto con tu pareja.

─No sé porque hablo contigo sobre esto, ni siquiera me conoces, después de todo solo soy una decepción para tí ¿no?

─Mi amor, por favor, ya te dije que lo sentía mucho, ¿cuándo vas a perdonarme?

─¿Tanta pena fue para tí tener a un hijo Omega?

─¿Qué tal si volvemos al silencio de hace rato? Tenemos que meditar las cosas que se vienen en camino. Los dos.

─Como quieras.

Ninguno de ellos tenía una bonita relación. Y todo era culpa de su padre biológico.

Pues Zokar the Hedgehog solía ser un hombre adicto a las apuestas y al licor. Era un excelente jugador, siempre ganaba miles de dólares en una sola noche.

Le enseño todo lo que sabía sobre esos juegos de apostar a su pequeño hijo; Sonic the Hedgehog Ray.

Con tan solo seis años de edad ese pequeño niño lograba ganar miles de dólares. Algo que su padre saco provecho y duplicó sus ganancias.

Aleena no quería que su hijo estuviera involucrado en ese estilo de vida. Discutía con Zokar todos los días acerca de ese asunto.

Las peleas eran demasiado frecuentes desde esa vez, el pequeño Sonic se asustaba cuando escuchaba a sus padres gritar. Incluso lloraba cuando llegaban a los golpes.

Y todo eso era por decidir quién se quedaría con la custodia total del pequeño.

Sin embargo el hombre terminó en la cárcel cuando trato de hacer algo terrible a su hijo.

[.....]

─Sean bienvenidos ─los recibió el mayordomo.

─Oh gracias Jimmy, vamos Sonic, quiero que veas tu nueva habitación.

─Agh ─trato de tomar sus maletas pero el mayordomo se lo impidió.

─No joven, por favor dejemelo a mí.

─Gracias pero prefiero llevarlo yo mismo ─saco su equipaje y miro a su madre ─no quiero ser un vividor ni un bueno para nada ─empezo a caminar.

─Disculpa Jimmy ─camino a lado de su hijo ─¿Es mucho pedir que te comportes? ─hablo susurrando.

─¿Es mucho pedir que me dejes en paz? ─hablo con el mismo tono.

─Aleena querida ─abrazo a su prometida ─sean bienvenidos a su nuevo hogar, es un gusto poder conocerte al final Sonic ─miro al joven.

─Quisiera decir lo mismo Sergey.

─Emm, espero que el viaje haya sido cómodo para ustedes.

─Bueno, pase algo de tiempo de caridad con mi madre, así que fue muy incómodo ─estaba demasiado molesto y lo hacia notar muy bien.

─Amm mi amor, iré a enseñarle a Sonic su habitación, ¿me esperas en la alberca?

─Desde luego preciosa ─la beso y salio de la sala.

─Sonic por favor, ¿podrías al menos ser amable con mi prometido? ─caminando ─El no tiene la culpa de nuestra mala relación.

─Tkch, bien. Solo si prometes que no me forzaras a relacionarme con su hijo o alguien de esta mansión.

─Bien, pero en cuanto conozcas a Shadow sabrás que todo lo que dije de él es verdad ─subieron las escaleras ─¿No te alegra saber que tendrás alguien de tu edad con quien convivir?

─No es de mi edad madre, según recuerdo dijiste que el tipo tenía 22 años, yo apenas cumplí 17.

─Vamos cariño, ambos son jóvenes, se que se llevarán bien, dale una oportunidad. ─abren la puerta ─este es tu cuarto Sonic.

─He pedido algo de ayuda a un diseñador de interiores, pero la mayoría lo escogí yo. Si no te gusta podemos hacer los cambios que quieras.

─Me gusta, es de mi estilo.... Gracias.... mamá ─sonriendo.

─De nada cariño, bueno desempaca y después nos alcanzas en la alberca, si gustas claro ─salió de la habitación.

El cobalto dejó las maletas a un lado de la cama, paseo por toda la habitación, vaya que tenía demasiado espacio.

Decidió salir a su balcón un momento, solo para meditar algunas cosas.

Fue allí cuando vio a un erizo azabache al otro lado de la mansión, estaba de espaldas, tal vez estaba en su propia habitación.

Cuando estaba apuntó de ver su rostro por primera vez, su celular timbró. Era una videollamada.

Se trataba de Blaze, su mejor amiga.

─Hola Blazy, hasta que al fin te dignas en llamarme.

─Hola Sunny, disculpa pero estuve ocupada con algunos asuntos. En fín, dime cómo va todo por allá.

─Nada interesante, discuti en el camino con mi madre, no me agrada su prometido. Pero mi habitación es asombrosa, creo que es lo único bueno del día.

─Dios, que envidia te tengo. Ahora serás parte de una familia millonaria, jaja supongo que ahora te comportaras con clase y elegancia.

─Ni loco. Estos riquillos no piensan en nadie más que en sí mismos, no voy hacer así. Ahg, me hubiera gustado quedarme en mi casa ─empezo a caminar hacia la cocina.

─Sabes que no puedes utilizar el dinero de tu cuenta hasta seas mayor de edad, además dudo mucho que te madre te deje usar ese dinero.

─Pues me vale lo que piense ella, ese dinero es mío, y si, tal vez lo gane de una manera rápida y deshonesta para ella, pero el dinero es mío.

─Bueno tampoco te enojes, podrás utilizar ese dinero dentro de muy poco. Hey ¿hacia donde caminas?

─Tengo algo de hambre, pero te puedo apostar a que no habrá nada comestible en el refrigerador.

─Las apuestas son lo tuyo Sonic, se que vas a ganar en esa predicción jajaja.

─Y bingo, no hay nada aquí, ni siquiera una miserable bebida ─cerro la puerta del refrigerador.

─Hola ─aparecio de la nada.

─¡Mierda! ─dejo caer el celular.

─¿Tu debes ser el hijo de la nueva mujer de mi padre verdad? ─abrio el refrigerador ─¿Te puedo ofrecer una cerveza? Oh, disculpa, los niños no pueden beber nada de alcohol ─la cerro.

─¿Shadow Doom cierto? ─se alejaba del azabache.

─El mismo niño, ¿y tu eres?

─¿Cómo? ¿Acaso tu padre no te comentó nada sobre mí?

─"¿Sigues allí? ¿Sonic?" ─el celular había aterrizado con la pantalla hacia el suelo.

─¿Sonic eh? ─lo miro de pies a cabeza ─Vaya, veo que mi nuevo hermano es un Omega.

─No soy tu hermano idiota.

─Y por lo visto con un horrible carácter, eso no suele ser propio de Omegas.

─¿Qué pasa? ─lo miro molesto ─¿Acaso es la primera vez en ver a un Omega como yo?

─La verdad sí ─lo tomó del meton ─admito que eres un erizo muy lindo, eres tierno y pareces un niño a pesar de tu edad.

─Alejate.

─¿O si no qué?

En un movimiento rápido el cobalto lo empujó y tomó rápidamente un sartén como objeto de defensa.

─Si te acercas un paso más juro que te golpeo, no me importa si tu padre me dice algo.

─Hey ya, tampoco es para tanto ─rodeandolo ─solo te estaba haciendo un cumplido hermanito

─Acercate y juro que te dejo inconsciente ─recogio su celular rápido.

─Ya deja eso ─le quitó el sartén y lo acarralo conga la refrigeradora ─vaya, desde lejos no se pueden apreciar esos ojos esmeraldas Sonic.

─¡Aléjate de mi! ─lo empujo.

El azabache solo se rió por la actitud del menor, antes de poder decirle algo los padres de ambos jóvenes entraron a la cocina.

─Veo que ya se conocieron. Sonic espero que Shadow te haya recibido como se debe.

─Bueno, su hijo sabe cómo llamar la atención de alguien señor Doom ─salio de la cocina rumbo a su habitación.

─"¿Sonic estas allí?" ─la videollamada jamás se finalizó.

─Oh Blaze, disculpa, supongo que ya escuchaste todo lo que pasó ─volvio a enfocar la cámara

─Asi es, que buena manera de conocerse entre hermanastros. Tu madre dijo que era un pan de Dios.

─Supongo que ese tipo tienen dos personalidades y acabo de ver cómo es verdad.

─¿Y cómo es? ¿Es guapo?

─No me fijé en eso Blaze. Pero te puedo asegurar a que es un acosador o un pervertido.

─Si, también sospecho eso por lo que escuche hace rato. Mejor ten cuidado amigo.

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Un mes había pasado desde que el cobalto y su madre se habían mudado.

En ese lapso de tiempo habían pasado pequeños pero importantes asuntos. Como por ejemplo los padres de ambos jóvenes finalmente se habían vuelto marido y mujer.

Así que oficialmente todos eran familia, sin embargo la actitud del cobalto no cambió. Le alegraba que su madre fuera feliz pero ¿qué hay de él?

El azabache notaba la incomodidad de su ahora hermano, pero no hacia nada más que molestarlo.

Ambos erizos no querían saber nada del otro y lo mejor para eso era ignorarlo.

[.....]

─Sonic basta. No quiero hablar más del tema. Irás a la preparatoria y punto.

─Madre ambos sabemos que no necesito de estudios para obtener dinero, y mucho menos un trabajo ─de brazos cruzados.

─Hijo por favor, no quiero que vuelvas a mencionar ese tema. No quiero que lleves una vida así, eres mucho mejor que eso ─beso la frente del azul ─inicias con tus clases en un par de semanas, ya todo está hecho.

─Ahg, bien iré a la preparatoria.

─Gracias hijo, ahora alistate para salir a cenar, esta será nuestra primera salida familiar así que por favor comportate ¿si?

─Hump, de acuerdo ─sonrió.

─Genial, baja cuando estés listo ─salio de la habitación.

Veinte minutos después

─¿Todos listos?

─Solo falta Sonic cariño, de seguro no debe tardar en bajar.

Justo en ese instante el cobalto bajaba las escaleras, estaba vestido con una camiseta ajustada a su cintura. Traía un short demasiado corto y también llevaba un pequeño cinturón, el cual hacia resaltar más a su figura.

La madre del cobalto lo veía con una mirada de desaprobación en cuanto a su vestuario. Mientras que su nuevo padre solo sonreía al ver a su nuevo hijo bajar con una sonrisa en rostro.

Por otro lado, el azabache veía detalladamente al cobalto, lo miraba de pies a cabeza, admirando y grabando cada parte de él en su mente.

─Te ves bien Sonic ─hablo el erizo mayor ─ya que todos estamos listos, vayamos al restaurante ─salieron los dos adultos primero.

─¿Quieres una foto o qué? ─miro al azabache con odio mientras se dirigía al auto.

En el camino, el menor se sentía un poco solo, debido a que sus padres solo conversaban entre ellos. Se sentía ignorado.

El azabache tenía su propio vehículo, así que no lo vio en ese ambiente pero si por la ventana del vehículo, ya que el erizo le sonreía en varias ocasiones.

Claro que era solo para molestarlo como ya era una pequeña costumbre entre ellos.

Al llegar

─Sonic se que este cambio debe ser duro para tí, pero creeme que amo a tu madre y también te quiero mucho a tí. Así que de ahora en adelante puedes usar mi apellido con toda seguridad y orgullo.

─Gracias Señor, pero ¿no cree que sería algo confuso?

─¿Confuso por qué?

─Bienvenido Señor Doom ─los recibió el dueño del lugar.

─Hola soy el nuevo miembro de la familia, Sonic Doom o puede decirme Señor Doom ─sujeto el brazo de su padre.

─Oh, felicidades Señor, si he escuchado algunos rumores sobre su nuevo matrimonio.

─No, no Ramiro, no soy de esos hombres ─rió nervioso ─el es mi hijo Sonic, ella es la Señora Doom ─tomo a su esposa por la cintura.

─Oh mucho gusto Señora, y pido perdón por la confusión.

─No es tu culpa Ramiro.

El cobalto lanzaba pequeñas risas por la pequeña escena en la que había metido a su padrastro.

Para un erizo con ojos de rubí también fue de mucha gracia la escena del cobalto y de su padre, pero no lo hacía notar. El reía en su interior.

La cena no fue un ambiente muy agradable, era todo lo contrario. Incómodo, con tensión en el aire y desde luego no faltaban las peleas típicas de los nuevos hermanos.

─Esta ciudad me parece magnífica más por sus hermosas playas y el clima de esta época.

─A ti todo te gusta de aquí, siempre y cuando no tenga nada que ver con nuestro antiguo hogar ¿o no madre?

─Ehh Shadow ¿cómo va todo en la Universidad?

El erizo mayor trataba de mantener la calma en la cena, no quería ver otra pelea entre su esposa e hijo.

─Todo bien, me gusta lo que hago. Soy muy afortunado en estudiar algo muy especial e importante para mí ─sonreía.

─Yo lo imagino, después de todo la carrera de derecho solo se tiene que ver con las ganancias y a veces usar el cerebro.

─¡Sonic ya basta!

─No señora, su hijo tiene razón, aveces se usa el cerebro. Mi carrera tiene más que ver con la fuerza mental y no la inteligencia, algo que dudo mucho que tengas.

─Chicos ya basta, ─intervino su padre ─esto ya no puede seguir así. No pueden seguir llevándose como enemigos, quiero que se lleven bien, como hermanos, por favor.

─Disculpa padre, no era mi intención actuar de esa manera ─volteo a ver al menor ─te pido perdón hermano. No debía hablarte así.

─¿Sonic, no tienes algo que decir?

─Sí, quiero irme a casa. Discúlpenme.

─¡Sonic siéntate de inmediato!

─Amor déjalo, supongo que este cambio debe seguir siendo difícil para él. Shadow, acompañalo por favor.

─Gracias pero prefiero ir en taxi.

─Dsscuida, estas en buenas manos, Shadow es un conductor prudente ─el padre sonreía orgulloso.

No era cierto.

[.....]

En la autopista se escuchaba varios claxons de los demás vehículos, el azabache simplemente los ignoraba y seguía manejando a toda velocidad por la carretera.

─¡¿Quieres bajar la velocidad?! ¡Vas a matarnos! ─gritaba el azul.

─¿Qué te sucede ahora niño?

─¡Quiero llegar vivo a mi casa idiota! ¡Pero no creo que se logre porque un imbécil no sabe manejar un estúpido automóvil!

─¿Piensas que lo harías mejor que yo? ¿No verdad? Te apuesto a que no sabes manejar un vehículo como este.

─¡¡Solo baja la puta velocidad y conduce como lo haría cualquier otro!!

─Por desgracia para tí estas en mi vehículo, en mi casa y en mi ciudad. Así que, aquí hago lo que quiera.

─¡¡Y tu estas en mi puta vida, mi zona de confort y mi espacio personal!! ¡Baja la velocidad de una maldita vez!

─Tu madre enserio debe amarte para poder soportar ese carácter.

─Tkch, ¿tú que sabes sobre el amor de una madre?

El vehículo freno de golpe.

─¡¿Qué te pasa?!

─Baja del vehículo ─molesto.

─¿Por qué? ¿Dije algo malo?

─Quiero que te bajes del auto, si no lo haces te bajo a la fuerza.

─No serías capaz.

Si fue capaz.

─¡Oye bajame!

El cobalto esta siendo cargado en el hombro del azabache, este lo llevó hacia la mitad de la carretera y finalmente lo bajo.

El mayor se dirigió a su vehículo como si nada hubiera pasado. El cobalto lo siguió hasta la ventana de aquel elegante auto.

─Shadow, ¿qué se supone que haga ahora?

─Bueno, puedes pedir el taxi que tanto querías ─encendio el vehículo.

─¡¿Qué taxi va a pasar por aquí en medio de la nada?!

─Ese no es mi problema niño ─arrancó.

─¡¡SHADOW!! ─golpeo la ventana ─¡Carajo, y para colmo no traje mi celular! ¡¡Te odio Shadow Doom!!

Pobre cobalto, no le quedaba más alternativa que caminar y esperar a que alguien se apiade de él y lo lleve hasta su hogar.

Desgraciadamente para él, en esa carretera no pasaban muchos vehículos así que estuvo caminando al menos por 15 minutos.

Justo pasaba un automóvil, ahora sólo dependía si aquel dueño del auto lo quería llevar.

─Por favor pare ─le hizo una señal y para su suerte paro a pocos metros de él ─Gracias ─corrio hacia este.

─¿Qué estas haciendo aquí a mitad de la nada? ─preguntaba un zorrito amarillo.

─Bueno, un idiota me dejó aqui a mi suerte ─hablaban por la ventana ─¿podrías llevarme a mi casa por favor?

─Claro, sube ─abrio la puerta ─me llamó Tails Prower, ¿y tu eres?

─Sonic.... Doom. Un gusto conocerte Tails ─sonrió ─gracias por llevarme, enserio.

─No es nada, no podia dejarte ahí.

─¿Y hacia dónde ibas? ─mirando la carretera.

─Una vieja amiga me invitó a una fiesta de su novio, y como es fin de semana quería ir a divertirme un rato. ¿Quieres venir?

─Gracias Tails, pero creo que pasó, además no conozco a nadie de aquí me mude hace poco.

─Una genial oportunidad para hacer amigos, además ya tienes al primero Sonic ─sonrió.

[.....]

─Hey si necesitas algo estaré adentro ─señalo la mansión.

─De acuerdo Tails.

El azul caminaba y veía detalladamente el ambiente de la fiesta. Era un lugar muy ardiente.

¿La razón?

En la alberca había parejas bebiendo y besándose con desesperación, todos bebían alcohol y había varios muchachos drogandose.

Además algunos entraban a los cuartos de la mansión para dejarse llevar por el ambiente y la música.

Entre todo ese ambiente logró notar a alguien muy conocido.

─Asi que eres el típico chico con doble vida ─le habló al azabache.

─¿Y tu qué demonios haces aquí? ─volteo a ver al azul.

─¿Tu padre sabe sobre esto? ─se cruzo de brazos ─Me pregunto cómo se podría cuando le diga que su hijo es un drogadicto y por lo visto, se revolva con la primera que pase ─sonrió.

─No te metas en mis asuntos niño ─tomo su brazo con fuerza ─si abres la boca te hundes conmigo, porque te recuerdo que también estas en la fiesta.

─Jodete ─lo empujó y fue a la pista de baile.

─Hola ─saludo una chica murciélago ─¿eres nuevo en la Universidad? No te había visto antes en estas fiestas.

─Ahh no soy de la Universidad, solo me invitó un conocido aquí. Disculpa, ¿tu eres?

─Rouge the Bath Vitery. Soy amiga del chico con el que hablabas hace un instante ─lo señalo.

─Ahh, soy Sonic Doom. El hermanastro de Shadow ─lo volteo a ver ─es un mujeriego supongo.

─Hey estas en una fiesta, lo que hacemos aquí es embriagarnos y besarnos con el primero que veamos.

─¿Tu haces eso?

─Para nada azul ─se rió ─tengo pareja, así que si me beso con alguien será con él ─le dió un sorbo a su bebida.

─Me agradas Rouge. Espero llevarme bien contigo.

─Lo mismo digo Sonic, si me disculpas tengo que ir a vigilar a mi novio, pero podríamos vernos mañana en la playa. ¿Qué opinas?

─Me parece bien ─saco su celular ─podrias darme tu número y nos mantenemos en contacto.

─Con gusto, anota.

[.....]

El cobalto siguió observando el lugar, parecía que todos los jóvenes de esta fiesta fueran de familia millonaria.

Cuando ya estaba aburrido se dispuso a buscar a su amigo el zorrito para irse del lugar. Pero alguien se le acercó.

─Hey, ¿te ofrezco una bebida?

─Amm, no tomo, gracias.

─Descuida lindo, solo es refresco ─le acerco el vaso ─vamos, insisto.

El cobalto aceptó la bebida.

─Sabe bien, gracias.

─No hay de que, soy Scourge por cierto.

─Sonic...

Habían derrumbado al erizo verdoso al suelo. Quien lo había golpeado no era nada más, ni nada menos que Shadow.

─¡¡Esta es la última vez que te invito a mis fiestas estúpido!! ─lo levanto mientras lo sostenía de su camisa ─¡Largate de aquí si no quieres problemas! ─lo soltó.

─¡¿Qué te pasa Shadow?! ─molesto ─¡¿Yo no puedo meterme en tus asuntos pero tú si en los míos?!

─Lo hice por tu bien niño.

─Si claro ─tomo su bebida pero esta fue tirada al suelo por el azabache ─¡¿Y ahora qué te pasa idiota?!

─El imbécil de Scourge suele drogar las bebidas para violar aquellos que le parezcan una presa fácil.

─¿Qué dijiste? ─se limpio la boca.

─Vamos niño, te llevaré a casa ─tomo su mano.

─¡Olvidalo! ─lo empujó ─No iré a ninguna parte contigo en este estado, prefiero irme con Tails. ¡Tails!... Tails...

La droga le empezó hacer efecto.