-¡Ama! ¿Ha visto mi blusa azul? -lanzo más ropa por todo el cuarto.

-¿Ya buscaste en la cajonera? -pregunta.

-¡Sí! -respondo.

La cajonera está vacía, saque todo. Scott esta esperándome abajo, en cualquier momento va a llover y el pobre allá. Mamá piensa que Stile vendrá por mi, no sabe de Scott.

-¿Buscaste en la ropa sucia?

-¿Cómo va a estar sucia? No me la he puesta desde hace dos semanas.

-buscala bien, Ani. 

-¡Ya la busque! -digo fastidiada.

-¡No me grites! -grita. 

Es un mal argumento. Decirme que no grite mientras ella me grita, muy mal mami.

-si voy y encontró la pinche, ¿Qué te hago?

-me la da de una forma pacifista y sin violencia -sugiero, temerosa de que la encuentre y me de un chingandaso.

La busco rápido, tiene que aparecer. Mi mamá tiene una clase de magia negra porque encuentra todo a la pirmera, si la encuentra... no quiero saber lo que será de mí.

Moví todo, literalmente, todo.

-Ani -pronuncia mi nombre como si estuviera conteniendo unas ganas inhumanas de matarme-, ¿Qué es eso que está arriba de tu cama?

Veo sobre ésta. ¡¿Qué?! Ahí no había nada, ni siquiera deje ropa en mi cama, ¿Cómo...? Brujería.

Sonrío inocente, mamá menea la cabeza, claramente enojada por hacer subir hasta acá.

-antes de irte me recojes todo tu cochinero, sino no vas -sentencia.

-pero...

-¡Chist! Sin peros, limpias y después te vas, me importa un puto cacahuete si se te hace tarde. Nadie te mando a que hiciera ese tiradero de ropa -su severa mirada me asusta. Seré sincera, le tengo miedo a mi mamá.

Maldigo entre dientes. A limpiar todo se ha dicho, deje todo tirado, nada más falta que encuentre la puerta a Narnia.

¡Aslan, llévame contigo!

-¿A qué hora va a llegar Stiles?

-no debe tardar, ni Liam -respondo.

-Scott está afuera, ¿No dijiste que Stiles vendría por ti? -entra más en el cuarto.

-Stiles fue por Liam, ma. Scott vino por mi para irnos juntos a la casa de Stiles y esperarlo ahí, no quiere que me vaya sola -respondo lo más tranquila.

Hace seis meses que estoy con Scott. Los mejores seis meses de mi vida, Scott es tan... no tengo palabras para describirlo. Ya estamos en último años, sólo podremos vernos un año más antes de que cada uno se vaya a la universidad, él quiere ser un veterinario y sé que será el mejor; yo por mi parte, quiero estudiar enfermería. Con mi sangre curativa podre salvar a muchos, ir de cuarto en cuarto, aliviando sus dolores y, aquellos que murieron, regresaelo a la vida "milagrosamente". Sanar a esas personas con cáncer o tuberculosis ser sobrenatural tendrá sus beneficios para mi y para los demás.

Papá me contó la historia de mis antepasados. Ninguna intentó hacer algo bueno con su poder, lo usaron para su conveniencia solamente. La abuela Ani lo utilizo para matar a todos aquellos que un día le hicieron daño, entre ellos iban incluidos los miembros de su familia.

No cometere los mismos errores que ellas.

-estas pendeja si crees que te voy a dejar irte a estas horas de la noche en la motocicleta de Scott.

Olvidé por completo que mamá seguía aquí. Mi celular suena con la canción que asigne para Stiles.

-¿Qué pasa? -contesto.

-los estamos esperando, ¿Dónde están?

-vamos en camino. Tenemos fallas técnicas -veo a mamá por sobre mi hombro.

-dense prisa -cuelga.

Hay luna llena, Liam la última vez anduvo desnudo por el pueblo, no fue nada agradable mirarlo así. Una cosa es en calzoncillos y otra muy diferente es verlo como Adan en el paraíso.

-mamá, no me obligues a hacerlo -suplico.

No me gusta hacer esto, mas no me deja otra opción.

-hola -saludo a Scott.

-hola, ¿Hubo problemas? -planta un corto beso en mis labios.

-nop, para nada -me sujeto de su cintura.

Arranca. Mamá no me dejo de otra que usar mis poderes hipnóticos, papá gracias a Díos está en el trabajo y no tuve que usarlos con él también.

Stiles estaba impaciente, tratando de mantener a un inquieto Liam en la parte trasera del Jeep.

-ya era hora -sube a la parte del conductor.

-Perdón, mi mamá no me quería dejar venir- me excusó.

-solo por que es tu mamá, si hubiera sido por otra cosa, los mato a ambos.

Haremos lo siguiente: llevaremos a Liam al bosque, lo dejaremos atado a un árbol hasta que estemos seguros de que no se convertirá y, después, iremos a la escuela a una cosa que hacen los de último año. Aquí en Beacon Hills hacen cosas muy raras.

-bien, Liam, esto es para que no pase lo de la última vez. Quieto. -cierro el candado.

-por favor, Ani. Esto no es necesario, se como controlarme, ya no me voy a convertir -suplica.

-eso dijiste las últimas dos veces. Tuve  que tocar muchas puertas -recuerdo aquél día.

-no fueron tantas, ¡Por favor! -ruega.

Hago girar la argolla de la llave entre mi dedo mientras me alejo para unirme a mis dos chicos favoritos. Último día de verano y yo aquí en el bosque con dos sobrenaturales y un Stiles, vaya noche.

Se ha puesto algo paranoico con eso del último año, busca universidades que estén juntas, planea mantenernos juntos siempre. Lo que no sabe es que yo me iré lejos a estudiar.

-... Ani no tendrá problema en entrar a Stanford, igual que Lydia. Malia... ella pensará en algo -dice Stiles.

-¿Quién dice que yo quiero estudiar en Stanford? -entro en la platica.

Subo al capo, Scott pasa un brazo por mis hombros y me pega más a su lado. Besó su mejilla.

-¡Es el plan! -hace señas raras.

-Stiles, Scott estudiará para veterinario, tú serás... lo que sea que vayas a estudiar y yo estudiaré medicina en la univerdas de Cuba.

-un momento... ¿Te irás a Cuba? ¿La isla de Cuba? -pregunta Scott, confundido.

Maldición hable de más. Yo mi gran bocota.

-¿Cuándo pensabas decirme? - agrega.

-guapo, aún no es seguro sólo es un tal vez -tomo su mano-. Sola no iré, mi tía vendrá conmigo y obvio que mi mamá también se va a colar.

-dijiste que estudiarias aquí en Los Ángeles -replica.

-¡Sí! Lo sé, eso dije. Ya te dije que no es seguro todavía, Scott, allá en Cuba hay una buena universidad y me admiten enseguida -explicó-. Además falta un año, pueden pasar muchas cosas de aquí allí.

-no importa -besa mi frente. Dando fin a la discusión.

Esa era su forma de acabar con nuestras pequeñas posibles peleas. Me da la razón, concuerda conmigo o simplemente me dice que no tiene importancia.

-¿Que no importa? -Stiles nos ve incredulo- un miembro se irá, el plan es todos juntos, nadie se queda, ni el Jeep se va a quedar. Ani se va a Cuba ¿Y dices que no importa?

-amigo, relaja tu imperativa mente. Apenas lo estamos debatiendo en la casa, mamá no quiere dejarme ir y papá dice que le encanta la idea, hasta mi tía se ofreció acompañarme.

Faltan unas dos horas para irnos a la escuela, Stiles sigue con sus cosas y Scott sólo lo ve y asiente cuando es debido. Liam sigue atado y trata de quitarse las cadenas.

La tormenta se ve cada vez más cerca, los truenos y relámpagos se ven más cerca. Voy por mi suéter de emergencias que esta en el maletero del Jeep, Stiles me deja meter lo que sea en este auto.

Regreso con los chicos. Veo lo que Stiles esta marcando en el mapa, sigo las líneas y finjo entender.

-como este es el último año con ustedes, ¿Qué tal si aprovechamos el tiempo y vamos a comer un día a casa de Ani? -dice Liam desde el árbol.

-¡Hecho! -Stiles manda al diablo el mapa-. Salomé cocina delicioso

-le diré que preparé el pozole que tanto les justa -apoyo un brazo en el hombro de Stiles- y ese delicioso flan que mi novio adora.

-amo ese flan -sonríe.

-lo se -arrugo la nariz.

Scott se inclina hacia mi, él no se baja del capo por nada. Nos besamos, el acaricia mi mejilla mientras yo junto mis manos detrás de su cuello y de un tirón lo hago bajar.

-¿Pueden dejar de mostrarse afecto cuando yo este cerca? Es incómodo verlos. Son mis mejores amigos y es como ver a mis dos hermanos besarse, ¡Incesto!

-cierra la boca -digo. Aún besando a Scott.

Lo escucho quejarse. Hago mis dos cosas favoritas en una sola; molesto a Stiles y beso a Scott. Nunca antes fui tan feliz.

El sonido de los truenos nos indica que es hora de irnos ya. Hay que soltar a Liam e ir por Malia, ver si Kira y Lydia irán y llamar a papá para que recuerde pasar por mi después de que termine su turno.

-¿Seguro que puedes controlarte? -Stiles saca la llave de su bolsillo.

-¡Si! Más que seguro. Ahora quítame esto, por favor -pide.

-eso dijiste la última vez.

-No fue bonito verte desnudo, Dunbar -acerco la bolsa.

-¿Por qué estabas desnudo? -pregunta Scott, confundido por dicho acto.

-hacia calor -se excusa-, no es para tanto.

-una docena de llamadas a la oficina del Sheriff avisando de un niño perro desnudo corriendo por todo Beacon Hills. -señala Stiles. Con ese toque sarcástico que sólo él sabe usar.

-esa noche visité a muchas personas.

Fui casa por casa hipnotizado personas y haciéndolas creer que lo que vieron era a un coyote rabioso y no a Liam desnudo convertido en hombre lobo.

En el Jeep apenas y cabemos. Liam me comparte un audífono, Stiles y Scott hablan de cosas a las que no presto atención. A causa de la posible tormenta me quedé sin señal, ni como llamar a papá, se irá a casa y se dormirá, su pobre hija se tendrá que quedar a dormir en el sofá de la casa del Sheriff por la flojera de caminar unas calles más a su casa. Que vida tan injusta.

Malia y su padre estaban atorados en el tráfico a causa de un árbol en el camino. Llegaríamos tarde, terriblemente tarde.

Antes de ir a la escuela tenemos que llevar a Liam al hospital con su papá.

-¿Si recuerdas que tengo un arma? -dice el padre de Malia después de ver a su hija besar apasionadamente a mi amigo. 

-claro que si, señor -responde Stiles, tratando de soñar tranquilo.

-con gas pimienta basta, señor -entro en la conversación.

Ahora vamos apretados aquí atrás. Deberían poner un cartel que diga: "máximo de personas: 2".

Literalmente tenía mis piernas sobre las de Liam y Malia. El Jeep se abrió dos veces y Stiles soluciona todo con cinta adhesiva. Genio.

Muchos heridos llegaban al hospital. Hubo un accidente en la carretera, por lo que oí se volcó un tráiler.

-Kira no llegará -anuncio.

-¿Por?

-hoy llega de Nueva York, y hasta donde sé el único camino del aeropuerto hasta acá es la carretera  esa donde ocurrió el accidente.

Stiles pasa las manos por su cabello frustrado. Esta obsesionado con eso de que estemos todos en la cosa de la escuela. Scott se va, diciendo que vayamos a la escuela y que ahí nos veremos.

-¡Espera! -trato de alcanzarlo-. Esta lloviendo, ¿A dónde vas?

-iré por Kira, te veo en la escuela.

Se despide con un corto beso y sale por la puerta doble. Lo repetiré: terriblemente tarde. 

Volvemos al Jeep. Esta vez Stiles y Malia van adelante, yo tengo todo el espacio de atrás para mi solita.

Recargo mi cabeza en la ventanilla. Scott esta loco, ¿Cómo piensa llegar hasta allá? Mo hay forma de contactar a Kira para decirle que Scott va por ella o preguntarle si está ya en la escuela.