Hola, soy el que todos buscan y nadie encuentra.

Hace muchísimo tiempo,pero el recuerdo sigue vivo, eran las 3 de la madrugada, volví a mirar la foto que tenía bajo mi almohada, era tan dulce, tan hermosa pero nunca quiso ser mía, lamentablemente para ella fui el inicio y el fin de su vida.

Desapareció de este mundo y hacerla desaparecer me hizo sentir tan bien, desató cada nudo que me ataba a mi cordura. Ahora soy libre aunque no lamento lo que pasó, si las personas lo supieran me odiarían, pero amo matar tanto como la amaba a ella, considero que es un arte que tiene que hacerse de la forma y momento indicado, es complejo y mi mente imagina cada paso.Todos no tenemos ese don,solo los elegidos.
Han pasado 25 años desde aquella primera vez esto es agotador sobre todo se ha vuelto algo aburrido, pero hoy la conocí, pensé que era una visión, el karma infernal o que  el castigo de Dios me estaba alcanzando.

La he seguido y asechado continuamente, calculando cada uno de sus movimientos y relaciones, es tan frágil, tan tierna, tan ella...

¿No está muerta, como es posible?
No importa, será un placer finalizar esta tarea, la voz fría y oscura de mi interior se enciende como el fuego que arrasa todo a su paso, sea lo que sea que me llevó a ser el tipo que soy me dejó hueco, incapaz de sentir, recuerdo que fue su culpa y pagará ella de la misma manera.

No tengo familia, por el contrario  supongo que no exista nadie con material genético parecido al que corre por mi cuerpo, en consecuencia  a nadie le importo y menos le importa a nadie lo que hago, si estoy vivo o muerto ,no tengo nada que perder.

La última vez que perseguí, acosé y maté a alguien fue después de observarla durante horas mediante las cámaras que había logrado instalar en su departamento.

La frustración de no poder tocarla, hacerla mía y matarla que sería mucho mejor me llevó a deambular por las calles hasta que me crucé con un hombre, al parecer un vagabundo, era la victima perfecta, nadie notaría su ausencia, lo siento por él o no, no lo siento ,estaba en el momento y el lugar equivocado.

Lo elegí así muy fácil, soy un tipo con suerte simplemente corté a mi víctima en pequeños trozos y los envolví en nailon uno por uno, habían llegado los regalos más no era navidad.

Mis instintos me decían que la matara de una vez, pero el día que entre a su habitación y la observé durante horas dormir, algo me detuvo, no puede ser que sienta piedad por primera vez, eso lo solucionaré.

Me descoloca el tipo que ahora no se le despega, estuve investigando y  es de Kendall además es abogado, llegado el momento tendré que tomar cartas en ese asunto.

Nadie se interpondrá en mi camino, ella es mía, aunque nadie me quiere ni nadie lo hará, ni siquiera yo mismo.

Si algún día me detienen, espero sea después de matarla, diré que soy un monstruo psicópata ,un demonio que no merece vivir y un cobarde por no poder quitarme la vida pero sí arrebatar el último aliento a las demás personas ,elegiré la silla eléctrica, me parece interesante.

He recorrido la ciudad como un tiburón buscando un pez, aunque no hay rastro de ella, le seguí dejando notas que nadie recogía, se acumularon en el cesto de basura del portal de su edificio, estoy perdiendo el  control.

¿Dónde está? Me pregunto y suspiro, solo veo oscuridad, las luces de la ciudad ya no existen para mí.

Miro un charco de agua en la calle donde se refleja la luna, un brillo perfecto como la hoja de mi cuchillo.

¡La encontraré y cuando lo haga se arrepentirá!