Corea del sur x México.

Yo se que después de tantos OS, esperaban de esta pareja kjsjsjs eue

Pd: Tenia que hacerlo XD
Perdón si no es de su agrado xd

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El mexicano no dijo nada, ¿qué? ¿Habia escuchado bien? Yong le había dicho que lo amaba.
Tenia el rostro sonrojado, pues no se espero aquello, se separo de el lentamente y lo miro, el coreano estaba totalmente rojo.

—Que... —Fue lo único que dijo México y corazón supo que tal ves no debió decir aquello.

—¡S-solo olvida lo que dije! —Exclamo, tal ves así, evitaría que el mexicano se alejara de él. Pues apenas había logrado su atención.

El mexicano, solo volteo la mirada y es que, tristemente, él no correspondía a los sentimientos del mayor.

—B-bueno, debo decir que eso no me lo esperaba... Pero... —El coreano ya sabia que el rechazo era inminente. —Puedes conquistarme.

El otro pelinegro levanto la mirada, ¿que? El moreno volteaba a otro lado con una sonrisa... O diablos, esa hermosa sonrisa.

—¿Enserio México? —Preguntó aun rojo por lo que ocurría. El latino asintió y Corea del sur sonrió. —¡D-de acuerdo!

El mexicano solo beso su mejilla por ello, Yong Soo no podía estar mas feliz por ello.

[...]

La junta mundial había resultado aburrida, como de costumbre. Yong después de mucho, lo había conseguida, citas, salidas, risas con el mexicano.

—¿Crees que esto funcione Daze? —Preguntó a Estados unidos, ya que era de las personas mas cercanas al moreno.

—¡Claro que si! —Exclamo el rubio, dando algunos golpes en su espalda. —¡Vamos! ¡Go! ¡Go!

El mexicano estaba sentado en su lugar, mirando su celular, cuando las luces de la sala bajaron su intensidad. Los demás países observaron curiosos lo que pasaban y una tonanda empezó a sonar, México arqueo las cejas al oírla, la reconocería en cualquier lugar.

—¿Luismi? ¿Eres tú? —Comento con algo de gracia. Los demás latinos pensaron que era el mexicano, pues ¿quien no reconocería aquella canción?

—Si tú me hubieras dicho siempre la verdad
Si hubieras respondido cuando te llamé —Cantaba el coreano, México sonrió de inmediato al verlo. —Si hubieras amado cuando te amé
Serías en mis sueños la mejor mujer
Si no supiste amar, ahora te puedes marchar

—Si tú superas lo que yo sufrí por ti
Teniendo que olvidarte sin saber por qué
Y ahora me llamas, me quieres ver
Me juras que has cambiado y pensas en volver
Si no supiste amar ahora te puedes marchar —El coreano tenia buena coreografía, como era de esperarse, Juan lo veía, lo vio bajar de la mesa. Y cantarle a su lado. —Aléjate de mí, no hay nada más qué hablar
Contigo yo perdí, ya tengo con quién ganar

—Ya sé que no hubo nadie
Que te diera lo que yo te di
Que nadie te ha cuidado como te cuidé
Por eso comprendo que estás aquí
Pero ha pasado el tiempo y yo también cambié
Si no supiste amar, ahora te puedes marchar —El mexicano lo seguía con la mirada no se espero aquel tributo al "sol". Yong le sonreía, le cantaba, admiraba su sonrisa tan hermosa. —Aléjate de mí, no hay nada más qué hablar
Contigo yo perdí, ya tengo con quién ganar

—Ya sé que no hubo nadie
Que te diera lo que yo te di
Que nadie te ha cuidado como te cuidé
Por eso comprendo que estás aquí
Pero ha pasado el tiempo y yo también cambié
Si no supiste amar, ahora te puedes marchar. —Este punto ambos cantaban aquella canción, lo mas seguro es que Alemania los regañaria pero, que mas da. —Si no supiste amar, ahora te puedes marchar~

Al finalizar ambos rieron, mientras el coreano abrazaba al menor. Y si algo le gustaba a México, era que interpretaran su musica, cultura, claro sin caer en estereotipos.
El coreano tomo su mano y se arrodillo frente a él.

—Mexico... 내 파트너가되고 싶니? —Pregunto, a lo que el mexicano lo miro amable, sonrosado.

—Me encantaría. —Es lo que dijo y Yong se levanto de golpe, para abrazar al menor. El cual lo cargo al estilo nupcial y lo beso.

—Te amo. —Dijo Corea en español, a lo que el moreno le contesto de la misma forma.

—Yo también Corea. —Y volvieron a unirse en un beso cálido...

Y después de eso, Corea corrió lo mas que pudo para evitar que España lo asesinara y México tras de ellos para evitar que asesinaran a su ahora pareja.

—Ohayo Perez.