La repentance.
Francia x México.
(Estoy sospechando de que... Ya hay mucho de estos dos. ¿No creen? :0)
*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*
—Fin del segundo Imperio Mexicano; 1866—
Se había acabado... Lo que pudo ser un buen gobierno se había terminado.
Y aunque Maximiliano lo había aceptado y le había dicho que fue un gusto gobernar para él aunque fuera por poco tiempo. México se volvía a sentir incomodo.
—México. —Llamaron, a lo cual el volteo la mirada. Viendo al hombre de baja estatura, el cual ahora era su gobernante. —¿Qué estas esperando? ¡Hay mucho que hacer!
Exclamo Juárez mientras tomaba al menor de la mano y comenzaban con los nuevos preparativos para el nuevo gobierno. El moreno volteo la mirada hacia lo que fue el castillo de Maximiliano. El castillo de Chapultepec.
[....]
—Algunos años después —
—¿Reelección? —Cuestino el país mientras miraba a Juárez, el cual bebía una taza de café.
—Así es, es para evitar mas guerras. Ya que así seria mas sencillo... —Bebió de la taza mientras movía la mano derecha en un circulo. —Gobernar.
—¿Y no habrá revueltas por su reelección? —Cuestióno nuevamente, ya que lo mismo le había pasado a Santa Anna durante su gobierno.
—No lo creo. —Es lo que simplemente dijo el hombre de baja estatura.
El menor suspiro, sabia que de una reelección no iba a salir algo bueno.
[...]
—¡¿Cómo que otro gobierno?! —Exclamo un hombre de pelo negro y bigote de mostacho, las placas de su traje militar hicieron un ligero tintineo. —Esta loco Juárez. Lo e decidido, lo enfrentaré en la elecciones de este año.
—¿Cree ganar señor Porfirio? —Pregunto con entusiasmo el menor. El general sonrió.
Y después de que Porfirio perdiera, iniciando hací lo que se le conoce como el plan de Ayutla.
Derrocando al famoso Benito Juárez de su gobierno, tomo el poder en el...
[....]
—Inicio del Porfiriato; 1876—
Y... Un nuevo gobernante, bueno. No podría ser tan malo, ¿verdad?
Mientras arreglaba la nueva oficina de su gobernante. Aun pensaba en el austriaco.
Dejo salir un suspiro muy notorio, el gobernante lo miro curioso desde atrás.
—¿Piensas en una chica? —Pregunto Porfirio mientras ordenaba algunos papeles.
El moreno se sonrojo, se había olvidado del humano que le acompañaba.
Claro... Él no pensaba en una chica, pero estaba claro que no diría eso. No, el machismo era demasiado presente en esa época... Hasta adelante.
—S-si... Podría decirse que si, señor. —Contestó, mientras le volteaba a ver.
—Sabes Juan, e visto que has tenido muchos problemas monetarios con varios países extranjeros. —Se levanto de su lugar y se dirigió al "joven". —Asi que, quisiera empezar este gobierno con el pie derecho por así decirlo.
—¿Va iniciar con la alianza con otro país? —Pregunto el país.
—Asi es Juan. Pero no es una "alianza" como tu la llamas. Quiero que hagas negocios, quiero lazos socio económicos con este país. —Explicaba, mientras volteaba al menor a la puerta de roble.
—En pocas palabras... ¿Quiere que sea su amigo? —Volvió a cuestionar, el futuro dictador asintió con una sonrisa.
—Si así quieres llamarlo, esta bien. —El "menor" vio la puerta, se empezó a sentir incomodo, aunque no entendía la razón. —Pasa por favor.
Las puertas se abrieron, el pelinegro trago en seco. El pelo rubio atado en una pequeña coleta y esa estúpida sonrisa coqueta lo pusieron bastante incomodo.
—Bonjour M. Porfirio. Je vous remercie pour l'invitation ... A votre beau pays~ —El francés hizo una pequeña reverencia.
El mexicano abrió los ojos, “Oh no... Él no” pensó. Lo que menos quisiera es estar a solas con el galo. Aun recordaba como el rubio le "hizo el amor" contra su voluntad...
—Bien, yo dejare que se hagan amigos. —El humano rodeo la silla, el rubio ya derecho asintió. Pero el "menor" se aferro a la manga del gobernante.
—¡No! No se valla señor. —Le rogó la nación, pero el gobernante siguió caminando. —¡Puede quedarse! ¡No hay ningún problema! ¡Pero no me deje solo!
—Oh Juan, tu solo puedes encargarte de esto. —Ambos estaban en la puerta. El mandatario soltó al país de su brazo. —Yo solo estorbaría, así que suerte. ¡Se que lo lograras!
Dicho esto el general cerro la puerta. Dejando al mexicano a su suerte.
—Mon Amour... —Su voz le dio escalofríos, y nervioso volteo. Estaba bastante cerca de él. El menor lo evito, alejandose.
—¡N-no se me acerque! —Dijo poniendo un escritorio de diferencia. —¡Y-y mucho menos me toque!
—Juan... —El francés dio un paso. Pero el latino le lanzo una pequeña estatua. —¡Mexique!
Exclamo, pero el menor sujeto la silla por si el europeo se acercaba.
El galo suspiro, dio tres pasos pero el menor le lanzo la silla con un grito de: “—¡NO se acerque!”
Francia suspiro pesadamente, dando tres pasos hasta topar con el escritorio, pero le lanzaron las sillas. Lo bueno es que lo noto y esquivo, rodeo con rapidez el escritorio y abrazo al latino.
—N-no... Suelteme... —Suplicaba el menor, pero el galo no lo soltó.
Y antes de que Francis le dijera algo al menor, este empezó a hacerse bolita hasta llegar al piso.
—N-no... No me toque... —Murmuraba, el galo se arrodillo a un lado del menor. Francia sabia muy bien la razón del porque, de la actitud del menor.
Con cuidado acerco su mano a la cabellera oscura, cuando tuvo su mano encima, acaricio suavemente.
—Je suis tellement désolé mon amour —Dijo el galo en un susurro.
El menor levanto un poco la mirada, sus ojos eran llorosos como aquella ves.
El francés siguió acariciando la oscura cabellera, le regalo una sonrisa amable.
—Se que... Se que te quite algo que tal ves, querías que fuera de alguien mas. —Su mano bajo por el rostro del muchacho, hasta sus mentón, donde hizo que levantara la mirada. Veía las lágrimas correr en su bello rostro. —Pero, no podía dejar que alguien mas te tocara. Quería ser el primero, porque no sabes cuanto te e amado, deseado y anhelado.
El menor sintió escalofríos al sentir las yemas de los dedos del francés sobre sus labios. Se alejo un poco, pero sus palabras... Le recordaron de algún modo a Austria.
—S-solo no me toque... —Volvió a decir. El galo suspiro, estaba claro que no quería su compañía. ¿Pero que podía hacer? el francés le anhelaba desde que supo que era independiente.
El mexicano bajo la mirada nuevamente. Limpio su rostro, normalmente, no dejaría su lo viera llorar. Pero ya lo había visto así que, ya no importaba.
El galo acaricio la mejilla ajena, mientras trataba de pensar en algo que lo ayudara a acercarse al mexicano nuevamente.
—Juan, ¿podrias perdonarme? —Pregunto, luego tomo las manos del moreno. —Prometo, que esta ves, haré las cosas bien.
México lo miro. ¿Perdonarlo? Podría hacerlo, recordó que Maximiliano le dijo que no viviera con rencores.
Pero, no quería una relación con el francés, que no fuera de amistad.
Ya que aun no olvidaba a Austria. Al que podría considerar su primer matrimonio, y sobretodo al que le amo de verdad.
—D-de acuerdo señor Francia... —Lo miro. El galo sonrió. —Pero, solo como amigos.
—Oh, Mon amour. —Menciono. Y una sonrisa coqueta adorno su rostro. —Yo se que con el tiempo podremos ser mas que amigos~
El mexicano se puso algo nervioso, pero sabia que la vida daba vueltas. Así que la idea de ser pareja del europeo no era tan descabellada.
Además, el moreno no sabia aun de que el futuro dictador gustaba de la moda y estilo francés. Así que... No seria la ultima ves que vería a Francia en su casa.
—Ohayo Perez.
¡Les dejo un dibujillo FrMex jsjsjs!
Sin fondo porque... Empezó Máster Chef y ya no me dio tiempo de hacerle uno xd
Aun así, espero les guste. Como el capitulo ;3
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