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34.- "clase de cocina de Giyuu"
Advertencia: antojacion, alto fanservice, contenido sexual y Fluffydez.
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A la mañana siguiente, apenas está amaneciendo, es fresco y agradable. Giyuu se despierta con calma sintiendo el peso extra de su esposo arriba de su pecho. Kyojuro lo tiene bien abrazado, está completamente relajado. El Omega le rasca la cabeza con suave mimo, dando una sonrisa pequeña.
— grr... - suelta un gruñidito se satisfacción, mueve sus orejas como una especie de Tic, despertando un poco.
— Kyojuro, despierta es hora de hacer el desayuno - insiste sin dejar de mimar con sus dedos el cuero cabelludo.
— mmhg ¿Ya? - dijo con pereza. Levanta la cabeza y suelta un bostezo flojo.
— si, además hay que ir con Murata para dejarle el pedido y volver al gremio de aventureros para ver lo del dragón. - comenta sereno sin dejar de consentir a Kyojuro. — además, le prometí al dueño de la posada enseñarle a hacer tarta de manzana -
— mhhh está bien - se incorpora del cuerpo del Omega pero no se aleja como era esperado, se acomoda mejor con una sonrisa muy familiar para el pelinegro.
No pasó ni dos segundos cuando empezaron a besarse con cariño, despacio. En momentos Kyojuro besaba su mejilla y cuello haciéndole cosquillas, Giyuu se deja hacer con una sonrisa bonita para nuevamente besarse amorosos.
— suficiente Kyojuro - detiene con sus dedos y de paso le da un beso en su mejilla.
— grr... - protesta un poco.
— está Senjuro - afortunadamente su cachorro sigue dormido pero no tardaría en levantarse.
— si tenemos la oportunidad está noche, está bien - Kyojuro abrió los ojos con una sonrisa más animada. Si es sincero, también desea intimar un poco con su esposo.
— me parece bien - comenta el alfa prime con una sonrisa suave.
— voy a hacer el desayuno - dejo que su Omega se levanté de la cama, se estiró con pereza y se cambia de ropa con la atenta mirada de Kyojuro sobre el.
—¿Kyojuro? ¿Pasa algo? -
— no, nada. Solo aprecio lo hermoso que eres- eso lo hizo sonrojar y continuar cambiandose de ropa. Si cabe la posibilidad, podrían bañarse también ese día.
...
Al salir del hostal, la luz de la ventana es muy débil pero era mejor empezar temprano y dejar todo listo hasta la hora de la comida.
Bajo a las caballerizas mientras se pone el delantal, aún no despiertan los dueños del hostal. Mientras bajaba a su improvisada cocina pensaba en que hacer de desayuno, se le ocurrió hacer un bolw de carne rápido y para la comida un estofado de carne de toro.
Cómo era usual, saco sus instrumentos de cocina y las acomodo según el orden de uso en la mesa. Saco los ingredientes: la carne, cebollas, un poco de sal y pimienta, la salsa de soja, azúcar, mirin, jengibre, dashi granulado y sake.
Primero corto la carne en tiras finas hasta formar 2 ollas grandes de carne. Paso a la cebolla y la pico en forma de arcos, en una olla con agua le añadió las especias junto con la cebolla. Las dejo hervir levemente hasta que el vegetal está transparente. Luego, paso la carne por pieza en el recaldo de cebolla, se deja cocinar un poco y se retira la espuma que surja. La deja hervir mas tiempo hasta espesar un poco.
(Nota culinaria de Giyuu: la espuma que sale en la cocción puede amargar la carne)
Giyuu la provo un poco y le dió el visto bueno con un movimiento de cabeza. Reservo las ollas y las guardo en su caja de objetos para evitar que se enfríe. Aprovechando que su manada no baja aún a desayunar, empieza los preparativos para la comida de la tarde: un estofado de toro. Es un platillo lento pero si avanza con la base, se ahorraría un montón de tiempo.
Compro unos ingredientes adicionales que tenía ya como zanahorias, catsup, consome en seco, salsa demiglace y vino tinto dulce. El resto ya los tiene así que se puso a cocinar otra vez.
Primero corto la carne en trozos grandes, tamaño de un bocado hasta formar dos ollas completas otra vez (si, Giyuu volvió a comprar utensilios) pico la cebolla en arcos, paso a pelar las zanahorias y papas y cortarlas en trozos medianos también. Ahí empezaría la magia.
Derrite la mantequilla en una olla y añade la carne salpimentada, la mueve de vez en cuando hasta que esté bien cocida y dorada. Posteriormente agregar los vegetales y cocinarlos un poco, el agua y el vino tinto se añaden para empezar la cocción junto con el consomé. Tal como el anterior platillo, retiro la espuma y espero a que los vegetales se cocinaran más y rebaje un poco el caldo. Con los vegetales cocidos, añadió la salsa demiglace y el ketchup.
— solo hay que esperar- bajo el fuego para que la cocción fuera lenta y espece.
—¡Huele delicioso Giyuu!! - casi salta del susto cuando ve Tengen y Kyojuro (con Senjuro en su cabeza) detrás de el esperando ansiosos el desayuno.
— ya me abrió el apetito. Desde mi habitación podía oler está maravilla - babea el elfo mercenario con una sonrisa glotona.
—!yo quiero!! ¡Yo quiero!! -
— esto es para la comida. ya está el desayuno. Podrían poner la mesa por favor - pide mientras saca de su caja de objetos el arroz previamente cocinado y el guiso de carne. Los alfas le hicieron caso, limpiando un poco el area, Kyojuro saco los platos que corresponde a cada uno, si, incluso Kazanburo esperaba su parte emocionado.
Giyuu empezó a servir el guiso con arroz en los platos en generosas proporciones. También les dió un vaso con agua de lima para limpiar el paladar. El olor del guisado es fragante y abre más el apetito aún cuando luce algo sencillo.
Los alfan dan el primer bocado y sueltan una expresión de gusto por la textura suave y especiada.
— !sabe tan bueno como huele!! - exclama Kyojuro encantado sin dejar de comer —¡Delicioso!! ¡Delicioso!! -
— concuerdo. Sabe muy bien - Tengen le hace segunda sin tanto escándalo pero sus mejillas llenas de comida.
—¡Sabroso!! - imita Senjuro con menos energía que su padre pero igual de feliz.
—¡!- Kazanburo también aletea de contento de comer pero sigue a su ritmo lento.
Viendo que su manada está comiendo con singular alegría, el sirve su propia ración y come con menos prisa y disfrutando el sabor de la comida casera. Ahora que cae en cuenta, puede poner un huevo hervido para darle más textura. Sintiéndose con antojo, cumple su deseo accediendo a su caja de objetos y tomando uno de los huevos que dejó previamente preparado. Lo sirve y mezcla con la carne y arroz.
¡Rico! Le da un sabor más sedoso. Sigue comiendo su porción con calma o así era hasta que los alfas y cachorro pidieron su ración con huevo hervido. Bueno, no es de sorprender. Así que les cumple su pedido.
...
Ya cuando el sol de la mañana estaba más alto, empezó la actividad del día a día con usual entusiasmo y una que otra queja por levantarse temprano.
Mientras Kyojuro y Tengen le enseñan cosas nuevas a Kazanburo y Senjuro en el patio de atrás. Giyuu usando su mandil y pañoleta estaba en la cocina del hostal con el esposo de la casera mientras la familia observa el proceso para hacer pay de manzana.
— hacer un pay de manzana es práctico y combina para casi todo, especialmente en otoño e invierno por la calidez del sabor. - explica Giyuu al señor mientras le muestra las manzanas.
— las manzanas es mejor que sean ácidas o semi dulces para mantener firmeza y no sea empalagoso. Si usa manzanas dulces en vez de trozos de manzana, tendrá un puré. Aunque también funciona pero en otra presentación -
— ¡Ya veo! Que practico -
— primero es pelar las manzanas y cortar en finas tiras - le explica mientras el señor le imita sus movimientos.
— luego el jugo de caña se pone a hervir sin mover, cuando la vea más oscura y espesa añada las manzanas con unas gotas de limón y revuelva - el hombre lo realiza con paciencia — deje cocinar hasta que la manzana este casi blanda y añada la canela y clavo de olor -
Afortunadamente, el señor contaba con canela, un regalo de bodas. No es indispensable pero le da un toque calido y dulce.
— deje hervir un poco más y reserve. Ahora la masa - toma la harina y la manteca de animal - lo normal es usar mantequilla pero también sirve pero debe usar en menor cantidad o la masa será muy frágil -
—¡Entiendo! - unas cuantas cucharadas son añadidas a la harina y el hombre empieza a amasar como todo un experto.
— debe quedar suave y tersa (toca la masa) así esta bien. Toca extender y poner dentro del molde. - el hombre hace lo indicado para luego con un palito perfore el fondo, es para evitar que el calor dispare la masa. Cortar el exceso de los bordes y meter el relleno.
Con la masa sobrante, hacer una tapa sea con forma de cuadros o una completa, es decisión de cada quien. Con una yema de huevo batido cubrir encima para darle un tono dorado.
— solo es cuestión de meter al horno y esperar a que esté dorada la masa - termina de explicar Giyuu.
— ¡Es muy sencilla! Muchas gracias -
— sera un gran añadido a nuestro menú querido - la esposa sonrie contenta. Si bien su comida es agradable, faltaba algo que destacará entre los demás restaurantes.
Giyuu mira la masa y relleno sobrante, le dió una idea. aliso la masa y la corto en forma de cuadro, vertio un poco de masa en ella y la cerro sellando el borde, formando una barrita. Esto llamo la atención de la familia, sorprendidos de la idea que les dió.
— ¡Que buena idea!! Sería un postre para los viajeros que pasan de rápido - el dueño del hostal con una sonrisa emocionada. — realmente es un postre muy versátil -
— hasta podemos venderlos en la plaza ¡muchas gracias por tu ayuda!! -
— la próxima vez que vengas, tendrás el hospedaje gratis - comenta el señor dándole unas palmadas en su espalda. Eso no lo espero Giyuu pero lo agradece en silencio.
Hecha su lección, se despide con una suave reverencia y sale de la cocina. Aún hay cosas que hacer.
...
— Murata -
— ¡Aaahh!! Giyuu bienvenido. que bueno que llegas - el mercader de cara simple se alegro de ver a su amigo y se escurrió entre los estantes para llegar con el. Fue como un coro celestial para el porque las clientas esperan ansiosas sus productos.
Apenas llegó y el mercader le pidió los productos, mismos que le fueron dados de inmediato a los jóvenes que ayudan en la tienda y reabastecer el segmento más femenino de la tienda.
—¿Cómo va el negocio del jabón y shampoo? - pregunta por cortesía pasado el frenesí de bienvenida.
—sobre eso, estaba a punto de mandar a alguien a buscarlos - en una explicación breve y una mirada de disculpa, Mary hizo bien su trabajo de publicidad y la voz corrió como agua entre los dedos, ahora no ceseban de llegar mujeres de diferentes edades a comprar.
El beta miro hacia su esposa, la dama en cuestión estaba con unas clientas explicando cómo usar los productos con una sonrisa. Murata le explicó que lo primero en casi agotarse fue el jabón barato y el shampoo combinado por el costo y practicidad. Las damas con carteras más anchas se daban el gusto de comprar el producto de mayor costo, incluso el tratamiento capilar está por agotarse aún con su precio.
— creo que subestime el amor de las mujeres hacia los productos de belleza. Una de las clientas le gustó tanto el aroma de rosas que se compró 5 piezas en un día - comenta Murata con una expresión algo atolondrada pero animada. — además también yo salgo ganando -
—¿Mh? -
— hay veces en que vienen acompañadas de sus parejas y aprovechan para ver el resto de la tienda, ellas los convencen para que les compren un bolso o una cartera. -
Giyuu solo llegó a la conclusión que el amor sale caro. De reojo busca a su esposo y acompañante, al parecer se entretienen mirando la tienda sin hacer mucho comentarios, de vez en cuando son abordados por algunas mujeres de distintas razas. Les sacaban algo de platica, Tengen se lleva casi toda la atencion mientras que Kyojuro se escabulle fingiendo que no darse cuenta. El Omega solo frunce un poco el seño, condenados alfas extremadamente guapos.
— sobre los productos... - titubeó Murata un poco cohibido — quisiera hacer unos cambios -
—¿Pasa algo? -
— no, no para nada. Podemos hablar en la trastienda - sugiere al notar las miradas curiosas de los compradores en ellos. Giyuu entiende el mensaje y afirma con la mirada. Lo sigue hacia el mismo pequeño salón donde empezaron sus negociaciones, sin embargo no fueron solos. Kyojuro al notar que Giyuu se movia de su rango de visión, lo siguió y tras el fue Tengen, curioso de saber que tanto hace Giyuu con el beta de cara aburrida.
— emmm... - Murata se siente algo cohibido ante las dos imponentes presencias junto a Giyuu. ¿Llegaron junto con el? ¿Acaso contrato a estas personas para su protección?
— está bien Murata, vienen conmigo -
— ah, bueno. Sobre el pedido voy a requerir más cantidad. 600 jabones económicos, 200 de aroma de rosas, 500 de shampoo c/acondicionador, 200 sets de shampoo y acondicionador y por último 60 frascos más - comenta sacando unos cuantos papiros de estimaciones de venta.
El pelinegro de ojos azules abrió los ojos sorprendido por las enormes cantidades, realmente tuvieron un impulso demasiado popular en tan poco tiempo. Afortunadamente cuenta con su habilidad de compras en línea para conseguir los materiales y gracias a su manada podía envasar muy rápidamente. De hacerlo por su cuenta y a mano sería terriblemente agotador.
— por supuesto que te pagaré el pedido anterior y el lote de las 100 piezas. - apresura a decir el mercader. — cuando traigas este tercer pedido te lo pagaré en el momento -
— está bien Murata, mis asuntos aquí en Karelina no han terminado. El lote de lo puedo traer a más tardar, pasado mañana y también quería hablar de negocios contigo -
— ¿Que necesitas? - comenta con mucha confianza.
— ¿Puedes hacer mantos? - pregunta.
— si, ordenamos hacer los de piel aquí ¿Que tipo de piel quieres? -
—piel de Wyvern-
La expresión de Murata no tenía precio, casi se le salen los ojos de tan increíble hazaña.
— ¡¿piel de Wyvern?!! Osea que tú, ustedes fueron los que derrotaron a los monstruos que atacaron el prado - tímidamente afirmó el pelinegro.
— ¡Por supuesto!! -
— claro que sí mi nada impresionante amigo -
— ¡Increíble!! mis ancestros hablaron de la piel de Wyvern y como trabajarla, es la primera vez que está marroquinería la tiene, será ¡El mayor trabajo de mi vida!! - expresa Murata determinado. El Omega encubierto lo contempla algo ofuscado pero no dice nada.
— aunque me tomara un tiempo que tú pedido este listo.-
—¿Cuánto?
— aproximadamente medio año - con más calma — la piel de Wyvern se tarda en curtise, además aunque traigas el material, el número de artesanos que manejan este tipo de material es limitado y requiere mucho esfuerzo -
— comprendo -
— seran 500 monedas de oro por el encargo - el mercader comenta algo apenado por el precio pero no es algo que el proponga nada más porque si: sabe el valor del trabajo de su gente y lo difícil que es manejar la piel de ese monstruo, además de las notas de sus ancestros que le explican las diferentes técnicas para curar las pieles y sus precios recomendados.
— ¿Podría pagar en parte con la piel sobrante del Wyvern? - negocia Giyuu. Si bien tiene dinero para comprar sin problema, prefiere algo más equitativo para los dos, el tiene pieles de sobra y posiblemente no sabría que hacer con el sobrante que le dejé Murata.
—¿Hablas en serio Giyuu? - los ojos del comerciante brillaron de alegría — no es algo que puedas encontrar muy amenudo, así que sería un gran trato para mí -
—si aceptas eso te lo agradecería -
— entonces que así sea - expresa Murata dándose la mano en un mutuo acuerdo. Giyuu prometió en traer la piel al mismo tiempo junto con el encargo. Esto le pareció muy bien y terminaron las negociaciones.
Tal como prometió Murata, pago el primer lote un Total 93 monedas de oro y 60 de plata. Y el segundo encargo fue un total de 312 monedas de oro.
Hecha la transacción, se despidieron temporalmente y continuo la agenda de actividades del día.
Si es práctico, no tiene una razón rapida para volver al gremio de aventureros podría pasar su tarde haciendo los empaques o entrenando en como romper la maldición en Kazanburo.
— saben, podemos ir al bosque a preparar el encargo y... - ¡Que tonto! ¡Olvidó por completo que Tengen no sabe de su habilidad! ¿Será seguro mostrarla? ¿Podría confiar en el?
— la verdad estoy bastante curioso de saber de dónde sacas tantas cosas. Se que eres un mercader pero hasta en mi inexperto ojo se que no son productos comunes - Tengen se adelantó en decir. Cuando vio los jabones en la repisa pudo detectar que no está hecho de materiales corrientes, incluso con las habilidades artesanas de los productores de jabón podían hacer algo tan refinado.
— tranquilo Giyuu, podemos confiar en Tengen - aseguro Kyojuro — ya que si abré la boca perderá su derecho a comer -
El pelinegro entendió el doble sentido de esa frase, eso explica porque Kyojuro está tan confiando de el y la calma con la que está el elfo de Extravagante sonrisa. Si es el caso, entonces no habría problema en mostrarle.
— si es el caso, vamos al bosque -
...
Con la velocidad de Kyojuro en su forma tigre, obviamente no iba a su máxima velocidad para que el elfo mercenario le siguiera el paso y Giyuu no se mareé en el viaje, llegaron a un buen lugar en el bosque.
Los arboles dan buena sombra y Kyojuro peino la zona con sus sobredesarrollado instinto y no había seres curiosos llamados humanos. Giyuu bajo de inmediato de Kyojuro y este se transforma en su versión humana.
— así que Giyuu, eres aventurero y mercader para ganarte la vida - empieza a hablar Tengen con tal de entender un poco la situación — es algo inusual -
— hice un trato con Kyojuro, el me cuidaría a cambio de que le hiciera sus comidas. - una versión pública de su relación. — como nada más nos interesa la carne de las presas que caza, vendo los materiales -
— mhhh viendo así, tienes buena ganancia. - pensando en el tipo de presas que el dios del oeste.
— es mejor ponernos manos a la obra - apremia Kyojuro con entusiasmo. — Senjuro, es hora de prácticar-
— ¡Si papá Kyojuro! - sale de su bolsa con alegria junto con Kazanburo, ahora entendía porque pesaba más de la cuenta su bolso. Tan como Kyojuro, Senjuro cambio a su forma humana como parte de su práctica.
— Senjuro recién adquirio la magia del agua, así que Kyojuro lo está entrenando para mejorar su control - explica Giyuu mientras saca de su caja de objetos los envases y envolturas.
— ¡Aaah! Que Extravagante para un Slime - el mercenario sonrie impresionado.
— gracias a la amable señorita Kanao, me dió magia del agua y ahora puedo hacer más cosas como papá Kyojuro - comenta inocente Senjuro.
— ¿Señorita Kanao? Hablas de la diosa Kanao ¡Vaya!! No me extraña teniendo alta vara con Kyojuro - bromea con una sonrisa divertida. Aunque en realidad, fue Giyuu quien optuvo la oportunidad pero no hicieron comentario en corregirlo.
— volviendo al tema principal, vamos a ver cómo optienes esos jabones - presta atención a los movimientos de Giyuu, creyó que haría una especie de hechizo para manipular la materia pero en realidad solo desplego una especie de barrera de cristal.
— ¿Que se supone que es eso? -
— eso mi amigo, es la habilidad única de Giyuu: tienda en línea. - explica orgulloso Kyojuro.
— ¿Tienda en linea? ¿Que es? -
— es como un mercado pero mucho más grande, más grande que un país y con muchas cosas extranjeras de mi mundo a este- continúa el pelinegro mientras le enseña la página. — puedo comprar muchas cosas desde comida hasta objetos cotidianos como martillos o madera. -
— espera un segundo - Tengen frunce el entrecejo meditando la reciente información.
— osea que puedes comprar objetos de otro mundo, de otra dimensión -
— así es - en cuanto a Giyuu compraba los objetos que requería y pagaba en el momento el monto.
— y dijiste que es tu "habilidad única" además de que dijiste que "de tu mundo"... ¡¿Eres un héroe convocado?!! - deduce rápidamente con sus ojos rubí centellando de sorpresa.
— así es -
— sera mejor que empieces a decirme todo lo que ocurre contigo porque no parare hasta saberlo - insiste el elfo con una mirada emocionada.
Giyuu le contó mientras termina de hacer las compras sobre su corta historia en ese mundo. Que fue invocado junto a otros chicos pero ante la inutilidad de sus habilidades fue descartado, aprovecho eso para huir del país Reijserger e iniciar una vida en Leonharht.
— hiciste bien en huir de ese pais- gruñe el platinado cruzando sus brazos en el pecho.
— ¿Te paso algo ahí? -
— todas las especies que no sean humanas en el país de Reijserger son consideradas inferiores, creo que estudiaste al respecto Giyuu - Kyojuro mantiene una postura relajada cerca del pelinegro.
— si, no fue agradable -
— hace ya muchos años, fui esclavo de ese país. trabaje para ellos hasta que pude comprar mi libertad pero secuestraron a mi esposa y la obligaron a ser prostituta de la burguesía- frunce el seño, el recordar eso lo hace cabrear. El sentimiento de impotencia aún lo carcome, aunque ella ya había fallecido hace años (era una humana) el recuerdo es doloroso. Sus pensamientos turbios se olvidan cuando la suave mano de Giyuu toca su hombro en un gesto comprensivo.
— eso fue hace años... Afortunadamente lograste escapar. Últimamente están en guerra y sus héroes convocados no les espera más que muerte y sangre -
—¿Mh? - eso llamo la atención de Giyuu y por la expresión de Kyojuro no era muy agradable.
— es obvio que sabes que los monarcas de Reijserger no son lo que dicen que son, por algo tuviste la inteligencia de huir. Los héroes convocados no tienen otro destino más que pelear como armas - la voz del platinado es densa.
— incluso si no quieren. Uno de mis trabajos fue espiar el ejército de ese país y Vi a tres héroes convocados bajo la tutela de los hombres de confianza de los reyes, por lo que escuche de ellos, les pondrían brazaletes de esclavo -
— Los harán pelear hasta la muerte - deduce Giyuu. Sus manos aprietan con dureza sobre sus rodillas, es indignante, los forzan a llegar a ese mundo para luchar en una guerra que ni les corresponde.
Tiene fresca en su mente que quiso advertirle al joven alfa pero este paso de el como si no existiera.
— es una pena - dijo Giyuu en voz baja — solo queda desear lo mejor para ellos -
Aunque tiene el deseo de ir a salvarlos de ese destino, ellos mismos se lo buscaron. No quisieron escucharlo o prestar mejor atención a lo que les rodea. aparte, sería exponer a su familia, la identidad de Kyojuro y su subgenero. Es duro pero en esta ocasión pensaria en su propio bienestar.
— ya no vale la pena pensar en cosas desagradables y volvamos a lo nuestro - el elfo de coqueta mirada cambia el tema.
— si, hay que empaquetar todo esto - comenta Giyuu mientras abre las cajas mostrando el contenido para la venta.
— así que les cambias la apariencia y los vendes como tuyo, ¡Que astuto! Aunque me gustaría probarlo - tomando uno de los jabones de aroma a rosas - aunque no uno de aroma tan femenino -
— después de esto, tomaremos un baño. Me gustó mucho el de la última vez - Kyojuro secundo la idea.
—¡Siii!! Baño - festeja Senjuro, le gustó mucho estar en el agua perfumada.
— entonces a trabajar - con eso dicho, pacto el trato y todos se pusieron a hacer su parte.
...
Después de unas pocas horas empaquetando y platicando de cosas random. Giyuu noto la gran interacción entre Tengen y Kyojuro, duraban gran parte de los minutos hablando o haciendo chistes malos. En cuanto a el, no es un gran conversador pero mantenía el hilo de la plática, prefería hablar en ratos con Senjuro sobre como se ha sentido en esos días. Incluso Kazanburo ayudaba en apilar las jabones en un espacio menos estorboso.
Cuando terminaron el enorme encargo, vitoriaron de felicidad y hambre.
Pero primero sería el baño. Giyuu levanto los muros de piedra como la última ocasión y le explicó al par de alfas como darse un baño segun la costumbre de su mundo. A los dos les dió un pequeño set de baño: a Tengen uno de aroma bourbon y vainilla en cuanto a Kyojuro cítricos y sándalo. Según leyó en las etiquetas son aromas masculinos, en cuanto a el, se quedaría con su lavanda y miel.
Total, la lavanda es un aroma unisex.
El primero en bañarse fue Giyuu con Senjuro y Kazanburo, así cuando el saliera le daría la oportunidad de preparar la comida. En base a esa lógica, aceptaron.
Al ingresar, Giyuu tuvo la prudencia de no retirar su collar Omega, ahora que lo ve atraves del reflejo del agua, ya esta muy gastado, podía ver las virutas de desgaste. Debía aprovechar la siguiente oportunidad de estar a solas para comprarse uno nuevo y cambiarlo.
Volviendo al tema de su baño, lavo su cuerpo a conciencia retirando la suciedad, la espuma burbujea presumiendo lo que puede tocar sin repercusión contra un alfa celoso. La piel lechosa se nutre volviendola flexible y dulce de tocar, la forma de sus músculos es firme por su naturaleza oculta no puede formar gran musculatura o fuerza en ellas.
Su espalda que esconde traviesa esos hoyuelos bonitos acompañados de unos redondos glúteos que una vez más la espuma de aroma lavanda puede tocar. Retiro el jabon a conciencia y seco su cuerpo rápidamente. Le gusta tomarse su tiempo en bañarse pero hay compañía esperando y sus estómagos ya los puede oír rugir como bestias salvajes
(Nota chismosa de Tengen: si, el dios del fuego estaba de mirón con un serio problema de sangrado nasal y en sus pantalones)
34.- (2/2)
—¿No entraras al agua mamá Giyuu? - lo llamo Senjuro que estaba en su apariencia de niño. En cuanto a Kazanburo sigue flotando alegremente en el agua perfumada de sales de naranja dulce.
— está vez no Senjuro, toca hacer la comida -
— oh, está bien. Te ayudaré en la cocina. - sale del agua con cuidado y se seca a su modo con una toalla, imitando con torpeza los movimientos de su madre. Ya listo, se viste con la ropa que le consiguió, por instrucciones de Giyuu cambio el agua y la dejaron igual de cálida. En cuanto a Kazanburo se sacudió hasta estar seco y se subió al hombro de su dueño.
— ya pueden entrar - hace un agujero en la pared y sale por ella con Senjuro y Kazanburo.
— excelente, ya deseo probar esto - Tengen ingresa al espacio privado. Kyojuro le dió una mirada apreciando el escondido cuello de su pareja (por la ropa) ya que Giyuu se hizo una coleta alta. Si no fuera por su collar de inhibición dejara salir toda su fragancia natural.
— "Giyuu... " - su mente hizo un largo eco seductor, puedo reprimir un escalofrío. El alfa prime no puede esconder su deseo creciente por el. Aunque se vieron unos segundos, fue suficiente para demostrar todo lo sentían.
— empezaré a preparar la comida - se apura en alejarse antes de que delaten su situación.
Kyojuro ingresa también al espacio preparado para el baño y cierra el muro de piedra con apenas un parpadeo. El alfa prime ve a su compañero empezar a desvestirse retirando todos sus accesorios de combate como su espada corta, los kunais, bombas de humo, serbatana con agujas venenosas o paralizantes. Sus zapatos, camiseta y banda para el cabello fueron puestos en una caja.
En un pestañeo, ambos alfas terminaron desnudos y emprenden su ritual de limpieza tal como les fue instruido.
Tengen no tiene nada de envidiar al dios del oeste. Su belleza propia de su especie elfica junto con su cuerpo trabajado gracias a su subgenero. Su cuerpo construido para el combate junto con una especie de brillo hipnotico en su piel por la magia natural que despide. Cada músculo definido como su hubiera Sido cincelado a mano, con mucho cuidadom espada ancha y brazos gruesos, posee mayor masa que el alfa rubio así como altura pero su encanto es más seductor con una sonrisa picara. La espuma hace de las suyas cubriendo su belleza y esplendoroso cuerpo en una débil capa de censura.
— este jabón es una maravilla, deja mi cuerpo bastante limpio sin ese horroroso olor a grasa - comenta complacido el mercenario.
— ¡Cierto! - Kyojuro le da la razón con su propio producto, no se siente intimidado por la presencia de su compañero y se enfoca en tallar su anatomía que perfectamente puede dilatar las pupilas de incautos.
Ya listos, retiraron con agua la espuma y entraron a la tina cada uno por su lado. Afortunadamente Giyuu compro una bastante grande, sino, el elfo tendría los pies colgando de la bañera.
— aahaa esto es vida... - suspira el platinado con placer. En su vida de combatiente esos momentos de quietud son raros, siempre al pie de cañón y listo para las batallas o misiones que un aventurero no podría tomar.
— si~ le hubiera gustado que Giyuu estuviera ahí con el en vez de Tengen pero será en otra ocasión. Quien sabe, quizás sería otro buen sitio para intimar.
Un largo y cómodo silencio se instalo entre ellos, una brisa fresca que se escabulle por los altos muros junto con el aroma a bosque combinado con el cítrico es agradable para sus mentes y cuerpos.
— Kyojuro...-
— dime -
— Giyuu es tu amante formal- suelta sin anestesia. No es una pregunta, es una afirmación directa. Tengen ya peca de ser demasiado curioso en asuntos que a cualquiera no le interesa mucho pero, realmente vivir muchos años hace que pierda muchas cosas, entre ellas la vergüenza.
(Aclaración de la autora: osea es un chismoso.)
— si, lo es - responde sin ninguna duda o tono de broma.
— no pensé que lo aceptarías tan fácil - la mayoría de los alfas que tienen amoríos con algún beta varón siempre lo niegan.
— negarlo sería rechazar a Giyuu y eso jamás pasará - Kyojuro responde con total seguridad mirando hacia el mercenario —ahora que lo sabes, ¿Que piensas hacer? -
— nada. El ya está grandecito para tomar sus elecciones y consecuencias. aunque no me sorprende que hayas elegido a un mortal como pareja - Tengen mira el cielo con calma, sus ojos rojo cereza son soñadores y suaves.
— ¿Porque lo dices? -
— pienso que un dios debe hacer alguna locura una vez en su larga vida para sentirse pleno. -
— así que piensas que es un capricho -
— si pero... - el platinado sabe que puede estar cruzando una línea, podía sentir que podrá morir en algún momento
— con el simple hecho que te enfades por lo que dije, es suficiente para contradecirme - ambos se miran a la cara por unos segundos antes de reírse un poco. El tenso ambiente volvió a ser respirable.
— eres muy osado -
— «el que tenga miedo a morir que no Nazca» es mi dicho. - una sonrisa socarrona al mismo tiempo le salpica agua al rubio bicolor. Este responde al reto haciendo lo mismo y al poco rato ya están arrojándose agua entre si en un infantil juego. Incluso llegaban a los empujones y leves llaves de lucha.
Hasta que el crujido de la cerámica los hace detenerse en seco y mirar una de las esquinas de la bañera.
¡Se rompió!!
Ambos rápidamente van a arreglarla o definitivamente Giyuu los dejaría sin comer.
...
Esa misma noche.
Después de un largo día de entrenamiento y empaquetamiento para vender, el peculiar grupo volvió al hostal donde vieron llegar a uno que otro cliente al restaurante, posiblemente a causa del recién incorporado postre al menu. El Omega reconoce que es un postre sencillo para todas las edades, ahí está su atractivo.
Pasaron de largo y emprenderion a una buena cena. El estofado de toro que Giyuu había preparado antes. En el bosque hizo unos sandwiches de pájaro petreo y orco para que fuera más ligero junto con sus aderezos y algo de queso.
Tanto el estofado como los Sandwiches fueron todo un éxito para los exigentes estómagos de la manada y comieron bastante hasta saciarse, aunque todavia les quedó un pequeño hueco para el postre: unos profiteroles rellenos de crema y chocolate.
Tengen está más que complacido por el nivel de platillos que puede disfrutar. Si otros elfos se enteran, irán tras Giyuu como abejas a la miel, sería increíblemente popular entre su especie.
Obviamente no les va a decir.
Al finalizar el día, era momento de descansar. Giyuu acomoda a su dulce cachorro Senjuro en su cama mientras le pone su gorrito para dormir. El slime shine está dormido, tuvo un día ocupado entre entrenamientos para manejo de la magia del agua y jugar con Kazanburo. También Giyuu se agotó bastante, durante el dia intento romper la maldición de su cuervo Kasugai pero sin éxito, le es difícil concentrarse en varias focos al mismo tiempo. (Entre romper la maldición, mantener su magia fluyendo e intentar ingresar a su espíritu)
— creo que empezaré a meditar - se dijo a si mismo. Había escuchado que meditar ayuda en la concentración y despejar la mente.
— mañana será... - apaga la luz y se acomoda junto a Senjuro, dándole espacio para que Kyojuro se cuele a la cama cuando tenga oportunidad. Le dió un tierno beso en la redondita forma de Senjuro y se durmió.
...
En medio de sus sueños empezó a sentir suaves cosquillas en su vientre y cuello, como suaves mordiscos que intentan despertarlo, poco a poco fue reaccionando a esos firmes brazos que sujetan su cintura mientras los dedos intrusos tocan su piel.
Alfa impaciente.
— ah~ suspira de gusto cuando siente a su pareja tocarle con esos destellos de magia en las yemas de sus dedos.
— Giyuu... - murmura Kyojuro mientras succiona levemente la oreja del Omega, estimulando de otras formas.
— impaciente... - suspira con sus mejillas rosadas. Solo lo escucha reír en voz baja.
— puedes apartarme pero no lo haces ¿Cómo puedo interpretar eso? - el alfa prime sale de la cama y ayuda a su pareja a levantarse. con su cachorro durmiendo cerca de ellos, no es un sitio para el romance.
La pareja sale a escondidas por la ventana, pero en vez de transformarse en su felina apariencia, carga a Giyuu en sus brazos y se echa a correr por las silenciosas calles del pueblo. los muros que delimitan la civilización con el bosque no significan nada para el. En plena carrera, Kyojuro mira de reojo el precioso rostro de su amante bañado con la luz de luna. Resalta sus bellos ojos que le dan alto estímulo.
Giyuu tenía pensamientos similares, Kyojuro luce espectacular con el brillo de plata de la noche. Sus ojos resaltan mucho en un antinatural brillo de oro y rubí, su ya atractivo rostro lo hace suspirar y sentir su cuerpo hormiguear ansioso.
No supo cuánto se alejaron pero si lo suficiente para saber que era una zona que sabrá Dios (en este caso Kyojuro) cuando el humano piso o si es que lo hizo alguna vez. Era un bonito claro lleno de flores pequeñas de colores sencillos, apenas le dió tiempo de contemplar el paisaje florido cuando la boca del rubio bicolor ataca de nuevo su cuello y hombros.
Giyuu se dejó caer de rodillas al suelo mientras Kyojuro sigue tocandolo por la espalda, robandole suspiros y gemidos suaves. Sus manos cálidas acarician por arriba de la ropa, seduciendo.
— Kyojuro~ suelta un suspiro de placer por las caricias y besos en su cuerpo. Que aun siendo gentiles, le ponen la piel de gallina.
— dime - comenta en falsa inocencia, dedicándose a seguir acariciando a su pareja. Giyuu se voltea hacia el y captura su rostro en un beso apasionado. Una inmediata lucha de labios se produjo, una unión húmeda que los deja sin aliento en momentos antes de volverse a concentrar en los largos besos.
El alfa recuesta a su amor con calma, retirando de su camino con un centelleo de magia toda piedrita desaparecio del sitio. Las manos dejaron de quedarse quietas para enfocarse en toques más atrevidos.
— grr... - suelta en un pequeño gruñido de molestia. La ropa estorba en su exploracion por su hermoso cuerpo.
— espera un poco - el omega bajo suyo se levanta un poco para sacarse la pijama (¿Porque tuvo que elegir la completa y no la yukata??) Aprovechando, Kyojuro empezo a acariciarlo otra vez y usando su magia estimula su sensible piel y tiernos pezones que tiemblan ante el más mínimo toque.
La boca del rubio no se detenía, mordía y besaba su tórax con gula, que manos inquietas tocan con devoción el cuerpo de su amor de toda la vida. Giyuu gemía encantado, arañando la espalda de su esposo mientras enrreda sus piernas en la cadera contraria. Pudo sentirlo, bajo la ropa, ese bulto nada despreciable que su alfa esconde en la ropa.
— tranquilo bonito - lo siente temblar debajo de el.
— Kyojuro... - suspira de placer en medio del humedo beso. Sus mejillas rojas, jadeando su nombre y con ojitos brillantes. Esa es una vista apetecible de su pareja.
— la quieres mi amor, no puedes huir del deseo - le muerde el lóbulo de la oreja con una sonrisa lujuriosa.
Giyuu le empuja un poco para retirarse el resto de las prendas con movimientos torpes a qué encendían más al alfa. Una torpe seducción que demuestra que lo desea como el. Puede verlo en unos instantes cuando se quitó la ropa interior, bastante húmeda y con su aroma hipnotico. No pidió permiso, se colo entre sus piernas y uso sus dedos para estimular a su pareja de lleno directamente.
Está hambriento de el pero no es una bestia.
— estás tan húmedo por mi- pide sin dejar de mover sus dedos dentro de su amante.
— ¡Kyo!! ¡Mmhh!! -
— pídelo - le murmura al oído con una mirada lasiva. Giyuu al principio iba a negarse pero el rubio es tramposo, uso su magia para estimular más sus nervios y estremecerlo de placer. Haciéndolo gemir más fuerte, retorcerse bajo suyo con esos ardientes ojos mirándolo fijamente.
— ¡Follame!! ¡Hasme tuyo!! ¡Kyojuro por favor!! - exclama en pleno orgasmo, arañando el suelo con sus ojitos azules lagrimando de placer. Su cuerpo tiembla de gusto por el estímulo pero sentía ese pequeño vacío en su interior.
Retirando los dedos de su húmeda entrada, Kyojuro se desnudo en un casquillo de dedos, su gotante erección palpita ansiosa de entrar pero recuerda que debe ponerse el preservativo. Si no, Giyuu podría traer al mundo a su descendencia. aunque quiere (y vaya que si ) no es momento aún.
Accede a la caja de objetos y toma ese maravilloso objeto de satisfacción, se lo pone rápidamente y se acomoda entre las piernas de su amante.
—e-espera... - murmura Giyuu agitado.
— ¿Ocurre algo? -
— dejame... Déjame a mi - pide acomodando a su lado a su pareja. Kyojuro se deja hacer, tiene una idea de lo que planea y no hace mas que emocionarlo.
Ya recostado entre flores, el Omega se sube arriba de su esposo, acomodándose y moviendo su pelvis sobre la entrepierna ajena. Puede sentir sobre la piel la dureza de su amante y eso lo pone también ansioso. Se sienta sobre la cadera de su esposo pero aún sin penetrarse, debía acomodarse primero.
— que hermoso te vez Giyuu - el rubio bicolor sostiene con ambas manos la cadera de su pareja. Enterró sus dedos con firmeza, esa piel tan suave y su carne firme que antoja morder.
Con movimientos cuidadosos, el Omega pelinegro toma la virilidad de su esposo, tan gruesa y caliente que aún se sorprendió que siga vivo después de la primera vez. Con respiraciones profundas lo guío hasta introducirse por completo. Soltó un gemido de placer cuando lo siente completamente dentro de el, mueve su cadera extasiado de sentirse lleno.
— ¿Cuánto tiempo me harás esperar Giyuu? - el alfa prime gruñe ansioso. Su dulce Omega está deliciosamente apretado, cálido y humedo.
Fue momento que el pelinegro se empieza a mover, contoneando la cadera lado a lado. brincando sobre la cadera de su esposo con su virilidad dentro suyo. Gime de placer mientras se apoya con ambas manos sobre el pecho de Kyojuro.
— tienes que mirarme - ordena embistiendo desde su postura. Suelta grunidos de placer por la estrechez de su amante.
— mírame mientras de penetro, me encanta tu cara mientras de follo - Giyuu aumenta el ritmo mientras siente como ese duro pedazo de carne lo llena hasta el fondo. El alfa disfruta de lo lindo, ver a su pareja tan ansioso por el, moverse y gemir es todo un espectáculo para su ardiente ser. Lo exita más y lo acerca a la culminación.
— ¡mas! ¡Quiero más Kyo!! - exige moviendose más rápido, saltando y frotándose contra su alfa extasiado, ansioso de llegar a su orgasmo.
— si precioso, todo lo que quieras - el alborotado omega se sorprendió de ser empujado hacia abajo fácilmente. Kyojuro aprovecho la confusión para tomar sus piernas y ponerlas en sus hombros.
Era su turno de hacerlo sentir bien.
Giyuu gime fuerte cuando las arremetidas aumentaron, su mallugado interior escurría de fluidos lubricantes. Sintió la explosiva sensación del orgasmo bañando la entrepierna y su mente en una nube de placer.
— tan estrecho... Tan rico... - dió unas embestidas más cuando llegó a su propia culminación, formando un grueso nudo. Aprovechando la flexibilidad de su amante, lo beso amoroso, esperando que su nudo baje.
— Kyojuro... Ahhh -
— delicioso. Aún quiero más Giyuu -
— si hay... aaah... —
— aún tenemos condones mi amor - cuando sintió el punto de union bajar, saco con cuidado su erección para cambiar el condón. El Omega se dejó caer en el suelo, suspirando de placer. Con ayuda de Kyojuro, lo puso en cuatro y fácilmente volvió a entrar.
— ¡Aaha Kyo!! - su interior es llenado otra vez haciéndolo delirar. El Omega levanta un poco más su trasero para moverse y aferro sus manos contra la tierra y flores dañadas.
— ¡Maravilloso! ¡Eres magnífico Giyuu!! - no hizo esperar más a su amante y empezó a moverse rápidamente. Embestidas rudas daban de lleno con su punto mas sensible, haciéndolo gemir fuerte, soltando el nombre de su esposo como si la vida se le fuera en ello.
— ¡Más! ¡Más!! Kyo... ¡Aaah!! -
— que Lindo eres Giyuu~ tan caliente por mi ~ jadea con una mirada lujuriosa, empujando con fuerza su pelvis haciendo rebotar al Omega bajo suyo. El murmuró del bosque se combina con el chapoteo de pieles y gemidos ansiosos de la pareja. La mente de Giyuu se pierde en un tormentoso mar de placer y felicidad por sentirse tan deseado por el alfa prime.
— por favor Kyoo~ súplica en un lastimoso gemido. Solo optuvo un par de gruñidos como respuesta mientras la penetración fue más ruda y rápida, raspando sus manos y rodillas. Manos ajenas lo mantenían bien pegado contra su pelvis y no paraba de inyectar magia a sus nervios que lo hace chillar de placer.
No supo cuando llegó a su orgásmico punto alto pero si cuando su alfa volvió a anudar dentro de el.
— mi amor... - lo escucha ronronear contra su oído. Aún con el nudo bien marcado dentro de el, puede sentir en sus feromonas que aún está deseoso de más.
Giyuu agradeció que existen las pociones porque si no, lo dejaría inválido.
...
Kyojuro y Giyuu volvieron cuando el cielo empezó a teñirse de rosado y suave púrpura y el aire tiene el aroma del rocío matinal.
El alfa prime le dió la poción sanadora y un baño rápido con para eliminar todo rastro de evidencia sexual (para pena del rubio) el pobre omega estaba agotado pero satisfecho, le temblaban las piernas como gelatina y su mente aún está bajo la dulce bruma sexual. Sin mucha dificultad lo cargo hasta regresar al hostal y acostarse en su cama antes de su dulce Senjuro despierte.
— Giyuu, ¿Te duele algo? -
— no... - murmura cansado pero apoyándose en el fuerte pecho de su pareja.
— kyo... Te quiero mucho Kyo - suelta adormidado, su rostro somnoliento le da ternura al dios del oeste y besa su frente con cariño.
— también te quiero mucho - lo escucha dormir y Kyojuro solo cierra los ojos un momento para descansar bastante feliz.
Es de humanos tener sueños pero el se siente como tal.
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☀️💖☀️
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Primero que nada. Gracias por leer mi historia y me alegro mucho que les guste. Segundo, siento mucho si no respondo sus mensajes en ocasiones, Watty no me deja. Y tercero, también siento que no actualice tan seguido. Cómo dije antes, este género de fanfic no estoy habituada y me tardo en darle sentido a la historia.
Ahora a lo principal
Pinche Capítulo lleno de drama!! Acción, comedia!! Sabrosura y todo lo demás ooooowwww ojalá les haya gustado y les dejaré una interrogante importante.
Quieren un Giyuu harem?? Serían 4 el máximo, como ven ya hay uno y uno potencial. (No me gustan enormes, como que se descuida mucho uno que otro)
No afectará en la trama principal más que los típicos enredos amorosos. Obviamente la catedral es Kyojuro.
En fin, tienen hasta la siguiente actualización para decidir si o no quieren que haya Harem o sea un Rengiyuu puro. Si hay votos nulos o sin respuesta, continúa con una única shipp.
Abracitos owo
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☀️Owake☀️
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Ya entrado el medio Día, Kyojuro fue el primero en salir de la habitación con Senjuro. Su cachorro tiene hambre y su querido esposo Omega sigue noqueado.
Afortunadamente su Giyuu siempre prepara comida adicional para comer cuando el está dormido o deja bocadillos mientras esperan el platillo principal.
— !buenos días bello durmiente! ¿Cómo durmió mi dios felino favorito? - saluda Tengen en la caballeriza con una sonrisa jocosa.
— ¡Dormi excelente! Gracias por preguntar. Por lo que veo pasaste buena noche también - saluda Kyojuro mientras le da a Senjuro un plato con rebanadas de tarta de manzana y su leche favorita. También algunos sandwiches que sobrevivieron al genocidio culinario.
— oh mi amigo, claro que sí dormiste bien~ ¡Picaron!! -
—¡Oh!! ¡Nos seguiste! -
— para nada, tu sonrisa es de alguien que tuvo una buena cogida anoche - le da un medio abrazo a la altura de sus hombros con una sonrisa traviesa.
— es privado Tengen - comenta avergonzado. Nada que ver con el insaciable tigre divino que dejó noqueado a Giyuu.
— claro que sí pícaro dios del amor~
—jejej -
—¿Que es coger? - ambos alfas se tensan y miran hacia la dulce vocecita de Senjuro que tenía sus mejillas llenas de migas de pan.
— ehhh... -
— ¡suena divertido! ¿También puedo coger? -
Ambos se ponen blancos como fantasmas, debian corregir eso rápidamente antes de que Giyuu baje y ¡Los dejé sin comer!!!
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