☀️32☀️

32.- "el hilo que nos conecta"

Advertencia: Fluffydez, antojacion y contenido violento.

.
.
.
☀️💖☀️
.
.
.

Giyuu despertó con total tranquilidad en su cama. Fue una noche tranquila después de los reclamos de la diosa del viento Daki por tardarse en dar sus ofrendas pero fue muy firme en decir que el no pidió su bendición y Sabito junto con Kyojuro le amenazaron con quemar algo más que su cabello si vuelve hacer un berrinche contra suya.

Además, las diosas de la tierra y el viento no le pidieron comida, salvó unos dulces. Sino productos de belleza como shampoo, acondicionador, mascarilla capilar y de paso unas cremas fáciles que Kanae había visto en el mundo de dónde proviene. Fue algo doloroso para el Omega porque las cremas que pidió la diosa de la tierra son algo costosas pero están en su presupuesto así que los compro y los envío como tributo. También Daki pidió lo suyo tal como Kanae.

Para diferenciar ambos paquetes, a la diosa de la tierra su shampoo es de olor a camelia y a Daki, rosas damasco.

(Notita aclaratoria de la autora; la rosa Damasco es la más antigua de las rosas y tienen un olor muy profundo. De ahí se saca los mejores extractos de rosa para perfumería y cosméticos)

Kanao fue un poco mas sencilla, le pidió dulces y comida tal como Sabito. Giyuu le agrego pudding y gelatinas de colores bonitos. Sabe que a los niños les gustan esas cosas, por más diosa que sea, sigue siendo una niña.

Sabito recibió sus comidas, bebidas, entremeses y postres correspondientes. Todo lo metió en cajas para evitar que se revuelvan. Hizo su plegaria y todas las ofrendas fueron enviadas en un pestañeo. Hecho su obra, se dejó caer en la cama cansado, no creyó que lidear con dioses fuera tan agotador como tratar con adolescentes quisquillosos.

Apenas se dió cuenta que se quedó dormido.

Pero volviendo a la realidad, se estiró con mucha pereza y se tallo los ojos. Pensando que la mañana es muy agradable y su cuerpo está algo entumido por la falta de movilidad.

— ¡Buenos días mamá Giyuu!! - escucho la dulce voz de su cachorro cerca suyo y lo hizo sonreír. Su dulce Slime Shine que le encanta abrazar.
— buenos días Senjuro... - abrió los ojos cuando ve sentado sobre sus rodillas en la cama a un niño de 10 años, de cabello alborotado color amarillo con mechas rojas con unas pequeñas orejitas escondidas y unos luminosos ojos bicolores de amarillo y rojo. usa una sábana para cubrirse casi todo.


— ¿Quien eres? -
— ¡Soy yo mamá Giyuu!! ¡Senjuro!! - se señala feliz, de inmediato brinca hacia el Omega pelinegro y lo abraza.
—¡¿Senjuro!? - ¡¿Que le paso a su redondito Slime?!!!
— buenos días Amor - saluda Kyojuro como si nada ante la sorpresa del pelinegro.
— nada de amor, ¿que paso con Senjuro? - le corrige aún confundido.
— una habilidad que tienen los slime es la transformación. Algunos pueden imitar apariencia de lo que comen así se defienden de depredadores. - explica el alfa prime mientras toma asiento en el otro extremo de la cama. — le di uno de mis cabellos para que pudiera imitarme-

—estuvimos prácticando toda la noche para que pudiera imitar mi apariencia. Costó mucho trabajo pero lo logro - concluye Kyojuro con una sonrisa orgullosa. Senjuro tenía que modificar su cuerpo usando la magia del agua para darle la forma e imitar su apariencia como un espejo y mantener la forma. El pequeño aún sin entender demasiado dió su mejor esfuerzo.

— ¿Porque no me dijeron? -
— queríamos que fuera una sorpresa -
— ¿No te gusta mamá Giyuu? - los ojitos dudosos del niño lo vieron. Tardó en reaccionar aún si tenia la apariencia de un niño humano con orejitas de tigre, seguía siendo su dulce Senjuro.

— intenté parecerme a mamá pero no pude - se disculpa el pequeño Slime Shine con ojitos tristes. Realmente lo intento pero su pelo seguía siendo rubio y ojos amarillos, era como verse como su papá con el pelo más largo.

— no, no es eso Senjuro. Me tomo por sorpresa - le da un abrazo cariñoso y le da un beso en su frente. — aún cuando tengas esa apariencia o un enorme dragón, sigues siendo mi niño -

—¡Mamá!!! - el slime sonrie muy feliz y corresponde al abrazo. Siempre quiso abrazar a su madre así como lo hace con el pero sentía que sus tentáculos no alcanzarían o lo podrían mojar.
Kyojuro se íntegro al abrazo ante la preciosa vista de su familia.

Perfectamente Senjuro podría pasar como su hijo biológico, justo como quería el pequeño Slime. Giyuu por otro lado le pareció adorable la acción de dos, habían hecho muy buenas migas aún con las obvias diferencias entre ellos.

El cuadro familiar se rompió cuando el dulce canto de un pajarito llamo la atención. El alfa prime se dió cuenta que se trata de un gorrión Kazugai. Pequeño y enérgico que esperaba al pie de la ventana dejar su mensaje atado a su pata.

— debe ser de Murata - Giyuu se aleja de su familia para atender el mensaje. Debe ser algo muy urgente porque no hace poco que se vieron. Tomo con cuidado la nota y la leyó en silencio quedandose pálido unos momentos.

— ¿Pasa algo?- Pregunta Senjuro curioso.
— Murata dice que quiere un lote de 100 piezas cada uno.- comenta pálido. Al parecer la venta de los productos de limpieza fue tan popular que aunque se limitaron la venta de un lote por persona, se terminó todo en menos de 3 días.

— ¡Excelente!! Eso indica que el producto es todo un éxito - Kyojuro con una sonrisa orgullosa de su amante.

— si, lo entiendo pero sería preparar un gran lote en poco tiempo - comento, tenía que hacer grandes compras, embotellar y preparar jabones en sus empaques.
— ¿Eso es lo que te preocupa? Lo dices como si no te fuéramos a ayudar -
— !yo ayudaré a mamá Giyuu!!-

Eso tranquilizó al pelinegro, sonriendo dulcemente por el apoyo de su familia.

— esta bien. Enviaré un mensaje a Murata para decire que su paquete estará listo mañana. - iba a usar al mismo pajarito de Murata pero tenía el suyo propio. Kazanburo se quedó a dormir en la caballeriza, así que lo llamo. Giyuu sonrió con calma, posiblemente se pierda al ser su primer encargo aunque la distancia es corta. Pero confía que hará un buen trabajo aún cuando se tarde en hacerlo.

— ¡¿Que te paso Kazanburo?!! - espero ver a su viejito cuervo tembloroso con plumas canas y flaquito, pero ya no, era un majestuoso cuervo del tamaño de un gallo, plumas de ébano brillantes. Patas fuertes y más robusto que ayer. aún temblaba un poco en sus ojos tienen ese brillo de ave vieja y sabia.

— al parecer el suplemento que le diste ayer le ayudó mucho. ¡Se ve mucho más fuerte y sano! - Kyojuro le dió un mimo en su cabeza que recibe gustoso.

— ah... - nota mental para Giyuu, tener cuidado con los alimentos o suplementos que le dé a su familia. Salió de la impresión para hacer su nota un poco más extensa y entregársela a Kazanburo.

— llévala al mercader Murata. Si no sabes dónde esta, sigue al gorrión a tu lado - le explica dándole la nota en el pico.
— por favor, se amable con el. Es su primer viaje - le dice al más pequeño. al parecer le entendió porque hizo una pose orgullosa, propia de un hermano mayor o un estudiante superior ante los novatos.

Dicho eso, ambos se fueron volando.

— bien, hay mucho que hacer. Vamos al mercado a comprar lo que nos falta después del desayuno - solo escucha el vitoreo de ambos.

...

Giyuu con su mandil puesto y su pañoleta en la cabeza se dispuso a cocinar algo sabroso para su esposo e hijo (quien cambio a su forma Slime porque mantener su apariencia de niño es agotador) mientras ellos ayudan a empaquetar el shampoo, acondicionador y el combinado en sus correspondientes botellas de vidrio. Con la finalidad de enseñarle a controlar mejor su magia de agua mediante un juego sencillo y lo derrama, se puede recuperar sin impurezas por parte de Kyojuro.

— veamos... Puedo hacer croquetas de papa y unas de batata y un par de huevos cocidos - comenta con entusiasmo, a Senjuro le encanta el huevo semicocido por blandito. Descansar de la carne en una comida nunca está de más y tiene el picador para facilitar la tarea.

Después de pelar los tuberculos. Empezó a hervir las papas, las batatas y los huevos en diferentes ollas mientras prepara las especias de nuez moscada, algo de leche, sal, pimienta, queso de relleno en algunas. Picar la cebolla y preparar el empanizado.

Afortunadamente ya tiene el arroz cocido pero en la noche debe cocinar más, es lo más tardado en la preparación.

Mientras acomoda los ingredientes en la mesa, su instinto Omega se activo. Haciendo que soltará las cosas y observa a su alrededor. De inmediato mira a Senjuro, está bien. Ese mismo instinto es el que le guía cuando uno de sus alumnos la pasa mal o esta herido pero está vez es más alarmante. Saco los tuberculos del fuego y se alejo.

— Kyojuro... - su voz no oculto su nerviosismo y se alejo de su improvisada cocina en la caballeriza.
— ¿Que sucede ? -
— hay alguien en peligro... - dicho eso, salió del sitio y empezó a seguir su instinto. Buscando con la mirada algo fuera de lugar. La gente va y viene mirándolo con extrañez pero también algo aturdida por su bella cara ¿De donde había salido esa hermosura de dama?

Ignorando a todos, Giyuu siguió caminando buscando quien sea que estuviera mal. Era un ruido peculiar que aturde su oído, un chillidos de cachorro en peligro. Finalmente lo encontro, una niña pequeña de unos 5 años de largas trenzas siendo jalada por un tipo enorme con cara de matón y barba sin afeitar. La niña lloraba y luchaba para no moverse de su lugar pero era jalada con brusquedad por el tipo, tanto que podía ver moretones en su delgado brazo.

— deja de inmediato a esa niña - ordenó Giyuu acercándose a pasos grandes. El momento de distracción fue aprovechado por la pequeña y se escabullo para esconderse detrás del pelinegro con mandil blanco.

No era la primera vez que lidea con un acosador. En los trenes o autobús siempre hay un tipo con la cabeza mal amueblada que molesta a las chicas y omegas (normalmente estudiates) incluso el mismo lo sufrió pero basta con un spray de pimienta en los ojos y se van.

— ¡no te metas tu... !!! - lo vio por unos segundos antes de que mirada se pusiera perversa. — a menos que quieras tomar su lugar -
Levanto una mano para tocar a Giyuu pero no llego a siquiera a rozar su ropa porque un fogonazo de llamas azules lo aparto. Se quemó los dedos que lo hizo retroceder unos pasos por el dolor.


— lárgate antes de que te muestre que la muerte es tu mejor opción - la profunda voz del alfa prime cubrió la zona en un eco tenebroso. Kyojuro no tuvo que usar su voz de mando para demostrar que está enojado, el tipo casi se orina encima ante su mera amenaza y salió corriendo a todo vapor.

— ¿Ya se fue el hombre malo? - pregunta Senjuro brincando al hombro de su madre.
— ya Senjuro. Gracias Kyojuro - el alfa prime observa por dónde se fue corriendo, su seño aún está fruncido, el Omega supo que su esposo está bastante cabreado y posiblemente le de caza más tarde.
— ¿Estás bien? ¿Te duele mucho? - pregunta Giyuu inclinandose hacia la niña. La pequeña seguía llorando asustada e hipando en ratos.

Giyuu sintió su corazón encojerse. No podía dejarla así.

— deja te curo. Quedate quieta y cierra los ojos - la pequeña hizo lo indicado. Algo en ella le decía que está a salvó con la señora. Activando su habilidad, Giyuu le dió un pequeño beso en su cabeza. Mismo que la hizo sentir cosquillitas en su cuerpo y luego su brazo ya no dolía.

— y-ya no duele. Gracias - dice de mejor humor viendo su brazo sin heridas.
— ¿Cómo te llamas? - pregunta con calma.
— Liz es Liz -
— bien Liz ¿Que paso? ¿Dónde están tus padres? - pregunta. En eso la pequeña se puso triste otra vez.
— está bien, necesitas decirme para poder ayudarte. -
— b-bueno... - recordó que la señora frente a ella la salvó del hombre malo. — Liz se separó de papá de Liz cuando vino al pueblo a vender manzanas... Pero... Pero desapareció cuando Liz se distrajo... ¡No debí soltar la mano de papá! - empezó a llorar otra vez, asustada. Senjuro se acercó a la niña y le empezó a tocar la mejilla con un tentaculo.

— el es Senjuro ¿No es lindo? -
— s-si... Es blandito... - soltó una pequeña sonrisa al tocar al Slime, es fresquito y suave.
— ven, vamos a buscar a los caballeros para que nos ayuden a buscar a tu papá. Es muy seguro que el te esté buscando también. - le ofrece una sonrisa calma.
— ¿En serio? -
— así es, ellos están pendiente de todo -
— como el señor rubio - miro a Kyojuro con expectacion. Luce tan genial. El Omega pelinegro afirmo y se puso de pie.

— me ayudas a cuidar a Senjuro -
— ¡Si señora! - la niña toma con un brazo al Slime Shine. Giyuu fue muy cuidadoso en no decir grandes detalles, ni siquiera se molestó en corregir a la niña. A primera vista nota que ella no es de Karelina, tenía la expresión curiosa de un niño ante lo nuevo.

Tomo la mano de la pequeña y caminaron fuera del callejón para encaminarse a la central de los caballeros. El alfa prime dejo su estado de vigía y siguió a su pareja e hijo con la pequeña. La escucho parlotear hacia el slime shine y aunque podia responder, Senjuro aún es algo tímido con los extraños.
No tardaron en llegar, los soldados del rey estaban en sus asuntos cuando vieron acercarse al singular duo. Quizás son cosas suyas pero parecio que los caballeros, se empujaron mutuamente para ser quien hablará con el.

— ¡Buenos días madam! ¿En qué le podemos servir? - el que ganó la disputa fue uno de cabello castaño. Giyuu le explicó que la niña de nombre Liz se había extraviado y su padre es un agricultor de manzanas que vino al pueblo. Después de confirmar la historia con la pequeña, El soldado entendió y dejaría a la menor en custodia mientras encuentran a un hombre con dichas características, de su parte se podrían retirar.

O ese era el plan, porque la niña no quería que Giyuu se fuera. No sé sentía segura aún y soltaba en llanto. Viendo que la situación no cambiaría, se quedaron. Los caballeros pensaron que sería una oportunidad de cortejar a la bella "dama" pero se fue al traste, era más que evidente que el alfa prime junto a ella era su novio o marido. ¡Suertudo!!

Además, ella estaba mucho más al pendiente cuidando a la menor que jugaba con el slime de inusual color amarillo. Cuando la escucho tener hambre, Kyojuro saco de la caja de objetos uno de los bollitos rellenos de crema y se lo ofrecio con total confianza a Liz y Senjuro.

No pasó mucho tiempo cuando otro caballero más joven venía desde el otro extremo de la ciudad con un joven hombre con una carrera a cuestas, apenas la niña lo vio y corrió hacia el. El hombre soltó su vehículo y fue directamente hacia la niña.

— ¡Papá!! -
— ¡Liz!! Gracias a dios que estás bien - el hombre se limpio con su manga las lágrimas acumuladas. Realmente estaba angustiado.
— no vuelvas a alejarte así nunca más -
— si papá - luego señala con la mano a Giyuu - la señora de ahí me salvó papá, ella junto al señor rubio. Tienen un Slime muy bonito. También me dieron de comer un pan muy rico y dulce-

Con la niña en brazos, se acerco a Giyuu, Kyojuro y Senjuro e hizo una gran reverencia como si estuviera frente a la realeza (aunque sin saberlo casi le atina)
— ¡Muchas gracias por cuidar de mi hija!! - exclamó también dirigiéndose a los caballeros.
—¡Fue un placer ayudar! - Kyojuro responde con fuerza en cuanto a Giyuu hace un leve cabeceó. Dicho eso, emprendieron camino de regreso a la posada, no está seguro si dejo las batatas y papas en el fuego y se pueden quemar.

— e-esperen - detiene el señor a pocos metros de distancia. Venía a paso rápido con su carreta de manzanas y su hija trepada también.

— no es mucho pero quisiera agradecer con mis manzanas - comenta bajando de la carroza 3 cajas repletas de frutos rojos. — por favor tomenlo -
— ¿Tanto? ¿No es demasiado? - el hombre negó con una sonrisa agradecida. Está más feliz de haber encontrado a su hija sana.
— está bien pero a cambio véndeme la cuarta caja - comenta Giyuu en voz neutra. Kyojuro suelta una sonrisa comprensiva, su Omega no puede aceptar un obsequio de esa magnitud así nada más.

El hombre acepto el trato y mientras Kyojuro guarda las cajas en la caja de objetos, aprovechando que la niña quería ser quien recibiera el dinero, Giyuu pago con dos monedas de oro escondida entre las demás de (10 de cobre) y las puso en su bolsita. Se despidieron y continuaron cada quien por su camino.

Kyojuro iba a decir algo al respecto pero mejor se queda callado, sabe que su Giyuu le da vergüenza admitir su nobleza y gentil corazón, se limito a abrazar su hombro con dulzura.

...

Vuelto a su rutina normal. Giyuu se concentro en terminar de hacer el desayuno -almuerzo mientras continúan envasando. Las croquetas están en su punto, el arroz ya está servido y el te está en su punto de hervor agradable para el paladar.

— quizás... - recordó todas las manzanas que tenía, probo una cuando tuvo oportunidad y definitivamente son demasiado acidas para su consumo normal. Pero también abría otras posibilidades. Había muchas opciones para ellas en su conocimiento pero había algo que desde hace tiempo que no cocina y estaría listo cuando terminen de almorzar. Discretamente fue a la recepción de la señora del hostal.

— disculpe señora - le hablo con calma.
—¿Que ocurre joven? - admite que de todos los aventureros, el pelinegro es extraño, educado con un familiar que da miedo pero es agradable y nada conflictivo.
— ¿podría prestarme su horno si no lo está ocupando? Le pagaré si es necesario -
— no te preocupes, puedes usarlo - resto importancia con un movimiento de muñeca — aunque si puedes compartirme algo de lo que cocines me parecera muy bien -

Bueno, ella había olido los manjares que hace el joven aventurero, si podía tomar la oportunidad de probar, lo haría. Giyuu acepto con un movimiento de cabeza y fue a la cocina.

Era la primera vez en ese mundo que cocinaría un postre. Saco de su caja de objetos los materiales necesarios para su preparación. Lavo las manzanas y luego las pico en trozos finos. Primero saco una cacerola limpia de su caja de objetos y añadió agua con azúcar y espero a que hirviera sin remover. Posteriormente añade trozos de mantequilla con jugo de limón, un poco de canela con clavo de olor y jengibre (bendito sea tienda en línea) y mezcla a conciencia obteniendo un jarabe color dorado. Agrega las manzanas y revuelve varias veces hasta obtener una mezcla dorada. Cuidado de no sobre cocinar la manzana, el horno se encargaría del resto.

Podria comerse así como una mermelada casera pero Giyuu se siente ambicioso y continúa con su plan de hacer unas tartas de manzana.

Harina, mantequilla (también puede hacerse con manteca en menor cantidad) y un poco de agua son los ingredientes base para hacer la masa de tarta. El secreto es el amasado, movimientos triangulares y dejar la masa reposar en ratos. Luego, doblar y aplisar con un rodillo y repetir unas 8 veces hasta tener una masa ligera y frágil. Aprovechando la amabilidad de la casera tomo prestada unas bandejas cuadradas y las cubre de masa delgada, con un tenedor le hizo agujeros en la base.

Hizo suficiente para unas 6 tartas medianas. No estaba seguro si a su familia le gustaría la tarta de manzana porque están acostumbrados a los postres en línea pero lo intentaría.

Vierte generosa cantidad de relleno en cada molde y Con la masa sobrante haría las tapas. Un clásico diseño de cuadros y un poco de yema de huevo batido para darle un aspecto dorado. Unos agregan azúcar para darle más brillo pero optó ese paso por un estilo clásico.

Con el horno precalentado a una temperatura ideal, los mete y solo queda esperar. Mientras limpia la cocina y lava lo que pidió uno.

— mamá Giyuu ya terminamos de hacer paquetes. Incluso esas cosas cuadradas que huelen bien- llega Senjuro dando rebotes y subiendose al hombro de su mamá.—¿Que haces mamá? -
— una sorpresa -
— ¡! ¡Sorpresa! Me gustan las sorpresas -
— ya pronto estara lista. Se paciente - salió nuevamente a la caballeriza y Kyojuro ya estaba guardando en la caja de objetos los productos para vender, satisfecho de su labor.

—¡Papa Kyojuro!! ¡Papa Kyojuro!! Mama nos tiene una sorpresa - comento con entusiasmo desde el hombro de Giyuu.
— ¡Wow! Estoy ansioso de saber que es. -
— solo espera un poco por favor. - Toma a Senjuro y lo lleva a la mesa — ya es hora de comer - fue a la improvisada cocina y trajo los platillos rebosantes de croquetas de papa y batata (con la ración de Sabito separada) A los dos les brillaron los ojos ante el desayuno que los esperaba y empezaron a comer con entusiasmo. En ese momento, llegó Kazanburo de su encomienda, al parecer si se perdió un poco pero volvió sano y Salvo. Le sirvió su comida con sus correspondientes nutrientes.

—¡Son de batata!! ¡Giyuu!! ¡Que maravillosa sorpresa!! ¡Me encantan!!- miro a su pareja muy feliz, como si le hubiera cumplido un enorme capricho. —"¡No te hago mío en este momento porque Senjuro y Kazanburo estan aquí!!"- le dice por telepatía.

Giyuu apenas pudo contener su tos por las cosas tan atrevidas que dice su esposo. ¡¿Que no tiene recato?!! Gato tragón y lujurioso. No tardó en recuperarse y continuar tranquilo su desayuno.

...

Llegó el momento de la verdad, aún no saca las tartas de manzana del horno y El olor es fragante, dulce y caprichoso tanto que hizo salivar a más de uno que pasaba cerca del hostal. La dueña del local estaba encantada por el aroma junto su esposo y un niño de 10 años, se asomaron tímidamente por la puerta.

— huele muy bien - dijo salivando el pequeño. Y sus ojos se abrieron más con hambre cuando el moreno saco del horno las tartas. El precioso color dorado era como ver oro comestible y su olor, ¡Oh bendito sea!! Te llena de recuerdos dulces el corazón.

— este es suyo - le entrega una tarta, dejándola en otro extremo de la mesa. - aún está caliente -
—!yeyy!! - el chiquillo iba a tomar el pastel cuando recibió un manotazo por su madre.
— !aún no! Da las gracias primero -
— Auch... Bien. Gracias señor - dice apurado, propio de un niño. Dicho eso, la señora corta rebanadas para su familia y si misma, el niño no espera demasiado a qué se enfríe un poco más.

— ¡Caliente! !caliente!! Fuuu... ¡Pero está muy rico!!! ¡Es dulce y crujiente! - festeja el niño con ojitos brillantes.
— realmente es un postre bonito - dice la esposa. Un poco de relleno resbala fuera de la masa pero le da un toque más casero y apetitoso. Su color dorado y cálido conforta el corazón.
— es manzana, es realmente muy bueno - comenta el esposo. Al parecer tiene ojo critico para la comida, posiblemente sea el cocinero de la posada.
— podrías enseñarme a hacer esto - pregunta directamente al pelinegro. Giyuu no tenía razón para negarse pero tenía que ponerlo en sobre aviso.

— utilice mucha azúcar pero también se puede usar miel - eso desanimo al hombre. Ambos productos son lujos burgués. Fue que recordó que la tienda donde compro vegetales venden jugo de caña como endulzante más "económico".

— aunque podría usar jugo de caña, en lo que consigue presupuesto para la miel. - pensando que posiblemente lo agregue en su menú de su hostal.
—¿Verdad? Muchas gracias -
— pero será mañana, ahora tengo unas cosas que hacer - expone mientras lleva las tartas a las caballerizas dónde lo espera el dios del oeste y el Slime shine.

— aquí está la sorpresa -
— ¿Que es? - Kyojuro toma una de las tartas con su mano. Embolsado por el olor y el color tan bonito.
— tarta de manzana -
— ¿Lo has hecho tu? - pregunta curioso. No sabía que Giyuu cocinaba postres, la categoría de dulce es muy diferente a la comida. La diferencia principal es que la comida es mucho más adaptable con ingredientes y tonos de sabor. los postres son meticulosamente más caprichosos en cuanto a preparación y sustitución.

— si... - siente las miradas expectantes de sus dos seres favoritos y comen el postre en un pequeño bocado.

— ¡Mmhg!!! ¡Es dulce, crujiente y ligero!! - exclama Kyojuro encantado. Las manos de su amante son mágicas. — ¡me encanta! ¿Cómo puedes hacer que las manzanas ácidas se vuelvan algo tan delicioso? -
—¡Mama!! ¡Me gusta mucho!!! ¡Es dulce y sabroso! Me gusta - festeja Senjuro con muchos corazones.
— que bien - comenta aliviado que les haya gustado. Toma una pequeña rebanada de la tarta de Senjuro y disfruta el sabor casero.

[¡Giyuu!!! ¡Recuerda separar mi tarta!! ¡No es de hombres omitir un postre así!! ] Escucha la voz del dios del fuego en su cabeza. Claramente ansioso de comer lo horneado, una cosa es comer los postres comprados y otra muy diferente es ver cómo las manitas de Giyuu se esmeraron en hacerlo. Solo afirma con la cabeza, si lo dice en voz alta, Kyojuro empezaría otra pelea verbal.

— ¿Porque no lo habías cocinado antes? - pregunta Kyojuro curioso. En su mente preguntandose si su dulce Omega puede hacer tarta de camote.

(Nota chismosa: si, si puede pero sería añadir otro clavo al ataúd del traserito de Giyuu.)

— pedi prestado un horno aquí en el hostal.-
— ¡Ya veo!! Aprovechando que estamos aquí podrías hacerme...-
— ¡mamá Giyuu!! - Senjuro le entrega su bandeja limpia y vacía se todo rastro de pay.— ¡Gracias mamá!! ¡Me gustó mucho!! ¿Puedo comer mas? -
— mañana. Hoy haremos un pendientes con Murata e iremos al gremio de aventureros... - dice en un tono amargo. En su caja de objetos descansa el inmenso dragón que su esposo capturó.

— espero que puedan despiezar el dragón. - miro hacia Kyojuro. —¿A propósito porque un dragón? -
Tan impresionado estaba que olvidó por completo preguntar sobre el.
— su carne es exquisita, tiene buen color, textura y marmolado. es lo más cercano a un platillo divino para los humanos -

—¡¿Que?!! - eso tomo desprevenido a Giyuu. No esperaba que tuviera tan alta categoría.
— nada menos para ti - comenta totalmente orgulloso mientras seguía comiendo su deliciosa tarta de manzana.

No es sorpresa para nadie que un depredador alfa demuestra sus fuerzas según la calidad y cantidad de presas que pueda conseguir para su prospecto. Es más que obvio que Kyojuro se llevaría la corona por excelencia pero aún así no quita lo sorprendente de la situación.

— vaya... Es... Wow.... - bien está algo shockeado. Era mejor callarse y dejar de decir tonterías, además, Kyojuro tomo sus mejillas rosadas como agradecimiento por su esfuerzo (y el delicioso baño que tomaron juntos)

...

Con sus estómagos agradecidos de comida sabrosa, el peculiar trío fue hacia la cofradía de aventuros otra vez para hablar respecto al dragón que cierto gato tragon cazo para su cena. Senjuro quería ir en su nueva apariencia pero aún le faltaba un poco más en dominarla (perdía forma en algunas partes) así que le recomendaron prácticar en privado.

Al llegar, había más Aventureros de lo acostumbrado. Quizás guiados por las misiones que deben cumplir de última hora o son los que llegaron de viajes largos a reportarse. Cómo fue costumbre, Kyojuro se robó las miradas y de inmediato fueron despachados hacia la oficina del maestro del gremio. Mientras caminan escuchan leves cuchiceos ajenos a su presencia (gracias a dios) sobre una misión que nadie quiere tomar.

Giyuu dedujo que debía ser demasiado tediosa o muy peligrosa. Quizás le pregutaria al maestro Sankoji. Llegaron a la oficina en un pestañeo e ingresaron después de entrar.

— bienvenidos Giyuu, lord Kyojuro y... -
— hola abuelo Sankoji - saluda Senjuro asomándose desde la bolsa con un movimiento de su tentáculo.
—... Senjuro. ¿Que los trae por aquí? - pregunta intrigado, hasta donde recuerda, no Tenían pendientes de pago, la carne ya fue entregada. En eso, Giyuu saca de su caja de objetos una de las tartas de manzana que hizo. Había aprendido que para tener mayor beneficio entre las personas o bajar el susto que les iba a dar era mejor darles una pequeña cortesía.

— hice está tarta de manzana. Por favor aceptarla -
— oh... Muchas gracias - si no fuera por la máscara que usa, se vería sus pómulos rosados y su boca salivar. Está recién horneado y huele como el mismo cielo.
— también para hablar sobre una situación con... -
— ¡Maestro del gremio!!! - de repente la puerta es abierta violentamente por una de las recepcionistas. Ivanna. — ¡Es terrible una bandada de Wyverns está atacando la pradera!! -

—¡¿Dijiste una bandada de Wyverns?!! - repite con seriedad mientras se pone de pie. La joven dama afirma con la cabeza, cosa suficiente para que el maestro del gremio saliera de la habitación a toda prisa con la recepcionista detrás. Giyuu no sabe que son esos monstruos pero entiende que es una situación muy mala y va tras ellos.

Ivanna explicó la situación: las llanuras del oeste fueron reabiertas por la eliminación de los toros de cuernos sangrientos y unos 12 aventureros de menor rango fueron ahí a practicar sus entrenamientos cuando de repente los Wyverns atacaron. Más de la mitad salió gravemente herida y el resto se salvó por los pelos. Hay muchos envenenados y con heridas demasiado serias para los sanadores de menor experiencia.
Mientras avanzan hacia la entrada principal a pasos presurosos más se escucha los gritos y algunos alaridos de pánico.

— debieron ir por los toros y al no encontrarlos atacaron a los aventureros... -deduce Sankoji. — ¿Las pociones antiveneno? -
—¡Se agotaron! - el hombre de la máscara suelta un gruñido molesto.
— ¿Que hay de las pociones de alto grado? No curan el veneno pero nos dará tiempo - bajan las escaleras rápidamente con Giyuu detrás escuchando atento. La situación es muy grave, en pocos segundos la sala de espera se volvió una enfermería con varios aventureros heridos y sangrando, el aire huele agrio con hierro oxidado.

— ¡No tenemos! Y ya se agotaron las pociones de medio grado - la chica suelta un chillido de lamento. Sankoji la mira atraves de la máscara, fue un terrible descuido por parte de la administración y por lo tanto suya pero eso se revisará más adelante. Suelta un suspiro frustrado.

— manda a buscar por el pueblo, pide de otros aventureros de ser necesario - ordena.
— maestro Sankoji - interrumpe Giyuu al duo. En sus manos está una cajita con pociones que previamente preparo con Senjuro. Normalmente no las usa y las tenía en una situación de emergencia.
— son pociones de alto grado y medio grado - 3 pociones de alto grado y 7 de medio están ordenados en la caja.

— claro, debí imaginar que tendrías pociones para tu uso personal. Las aceptamos con gusto y te prometo pagarte - Sankoji tomo las de alto grado y le dió el resto a la joven para repartir a los más heridos.
— está bien - Giyuu cede la caja a la recepcionista y por su cuenta se dirige hacia los heridos de menor importancia.

Sankoji retira de su camino a los que estaban en medio menos a la sanadora que también tenía heridas pequeñas en su cara y brazos, sus ojos están empapados en lágrimas viendo como su compañero sangra bastante y con el veneno corriendo por su cuerpo dejando horribles marcas púrpuras.

Sin pensar dos veces, vierte la poción de alto grado en la herida del pecho y abdomen. Para sorpresa de todos está cierra de inmediato dejando atrás la piel prolijamente sana, sin rastro de veneno.

—¡Santo Dios! La herida y el veneno desaparecieron - la joven sanadora abre los ojos sorprendida pero notablemente feliz. Sankoji también está impresionado y busca con la mirada a Giyuu. El Omega encubierto está con otros heridos repartiendo dosis pequeñas de poción de bajo grado a los heridos de menor riesgo en vasitos.

—¡Kaigaku!! ¡No te mueras!! - el enmascarado sale de sus pensamientos al oír el llanto peculiar de un rubio. No había tiempo de admirar la situación, otro de los aventureros más graves es uno de los nietos de Jigoro. Se alejo del primer herido y de inmediato fue al segundo.

Rápidamente los heridos fueron sanados de forma tan rápida que pareció una ilusión que estaban al borde de la muerte hace poco. Sankoji los mando a descansar a la enfermería con ayuda de los más sanos. Subió unas escaleras arriba, la situación aún no termina.

— ¡Cómo saben! ¡Una orda de Wyverns apareció en las llanuras!! ¡Todos los aventureros de Rango c y superior irán a luchar contra los enemigos!! ¡Está es una situación de emergencia!!! - la fuerte voz de Sankoji hizo silencio en la sala. — ¡Se que tienen miedo pero es cuestión de tiempo que los Wyverns vengan al pueblo y eso no lo vamos a permitir!! ¡Entonces como aventureros únanse y salven a Karelina!! -

— ¡Siiii!! - un grito unisono rebotó en las paredes del gremio sorprendiendo a Giyuu. Fue que la captó, el es de rango B. Por tanto tendría que ir a pelear, bueno, no es que fuera a quedarse de brazos cruzados.

— ¡Excelente discurso Maestro del gremio!! - la fuerte voz de Kyojuro hizo callar toda algaberia. Justo arriba de Sankoji en la parte superior de las escaleras esta Kyojuro con los brazos cruzados en el pecho. Su mera presencia llamo la atención de todos en segundos.

"No es el aventurero que va todo el tiempo con el maestro"

" es un alfa prime, no pensé que los rumores eran ciertos"

"Yo escuché que es un dios"

"¿Te has vuelto loco?"

"Es tan guapo y genial"

Pudo escuchar los susurros alrededor suyo mientras admiran al rubio bicolor bajar las escaleras.

—han hecho un gran esfuerzo. Lo admiro pero seré yo acabaré con la orda - dice con tanta seguridad que deja Sorprendidos a todos.
— pero... - interrumpe Sankoji.
— me vendrá bien un poco de ejercicio. Además, tu mismo lo has dicho, lo importante es proteger el pueblo. Alguien debe proteger la ciudad en caso de que uno se me escape - la confianza que deposita en los aventureros del predio los inspira y sienten la necesidad de demostrarle al alfa prime que son dignos de su confianza.

En cuanto a Giyuu...

—¿Dónde se había metido Kyojuro?? - se pregunta algo confundido. Pensó que venía detrás suyo.

— si es el caso, estamos a tu cuidado Lord Kyojuro - hace una reverencia leve el maestro del gremio.
—¡Giyu!! ¡Senjuro!! Andando - baja de las escaleras y se dirige a la salida con paso firme, no tiene que decir que se muevan. Los aventureros lo dejan pasar como si nada, admirando la presencia y poder del rubio bicolor.

Senjuro sale de la bolsa de Giyuu y brinca hacia el hombro de Kyojuro, esto confunde a los aledaños pero no dijeron nada al respecto. Giyuu por su parte, fue tras el caminando hacia la salida para encontrarse en la entrada principal. En un fogonazo, Kyojuro se convierte en su forma tigre y deja que Giyuu lo monte para emprender camino hacia la misión de emergencia.

...

Llegaron en un parpadeo a las praderas del oeste donde antes estaba pacífico, unas enormes bestias voladoras parecidas a los Pterodactylus de color negro con púrpura y destellos verdes en sus escamas vuelan pretenciosos en el cielo. A palabras de Kyojuro. Sus colas son venenosas, rápidos y maliciosos, atrapan a sus víctimas y las hacen caer de grandes alturas si no quieren envenenarlos. Su piel es gruesa y casi inmune a la magia.

— escucha Giyuu. Está vez no participaras - la seriedad de Kyojuro es notable mientras levanta una barrera.
—¿Eh? -
— aunque tú ataque de bala de piedra es efectivo, carece de distancia. No dudo de tus capacidades de adaptación pero... -
— está bien - Giyuu baja de Kyojuro y le da unas cuantas palmadas. Entiende que su nivel no es apropiado para esa clase de enemigos y puede notar que está preocupado por su reacción.

— observare sus ataques y buscaré una estrategia para mí en esta clase de situación -
—¡Ese es mi Giyuu!! Ven Senjuro, papá te enseñará a cómo cazar presas voladoras - Senjuro se acomoda en la cabeza del enorme tigre.
—¡Si papá Kyojuro!! - se alejo unos cuantos metros de Giyuu, los objetivos están a una altura de 350 metros.
— escucha, para objetivos voladores puedes darle en la cabeza o en las alas. - como ejemplo, Kyojuro usa la magia de hielo para invocar una estaca y arrojarla contra uno de los Wyverns, directamente en la cabeza en una cruda decapitacion. haciéndolo caer en un ruido seco.

— ¡Woooww!! - Senjuro rebotó emocionado.
— mueren más rápido pero es más difícil de darles por el tamaño del objetivo. Así que practica dándole a sus alas y cuando aterricen puedes acabarlas de la forma que quieras - explica el alfa como si fuera una clase normal en la escuela.

— son doce objetivos, te dejo la mitad para ti -
—¡Si papá Kyojuro! Me esforzaré mucho-
— ¿Doce? - Giyuu se extraño por eso, en el camino, había contado 13. Quizás se equivocó por el movimiento constante de los Wyverns.

vio como Senjuro arrojo su ácido a toda velocidad apoyándose en apuntar con un tentaculo hacia las alas de uno de los enemigos, pero este logro eludirlo.
— ohh falle. -
— está bien cachorro. Vuelve a intentarlo -
— ¡Si!! - volvió a repetir su movimiento, está vez dando de lleno a una de las alas. El monstruo solto un alarido fuerte. al caer al suelo se removia de dolor y furia por ser derribado. En ese instante, Senjuro se acercó dando grandes botes y usando la cuchilla de agua le cortó la cabeza.

—¡Te felicito Senjuro! Fue un golpe muy bueno-
— ¡Yeeey! Papa me felicitó -
— ¡Ahora vamos por todos!! ¡Que viene la hora de la comida!! -
— ¡si!!! -

Desde su lugar, Giyuu vio como la trifulca entre los Wyverns y su familia es tan desigual. Los enemigos caen como moscas sin alas o cabeza cuando intentar atacar de frente a los dos. Pedazos de hielo y ácido vuelan por los aires dejando caer cadáveres en su lugar.

— lo tienen controlado entonces... ¿Que puedo hacer de comer? - se pregunta mientras pone sus manos en la cadera. Quizás algunos bistecs de toro con arroz, seguro terminan muy hambrientos después de esto.

— ¡Gyaaaaaaa!! - el Omega de cabello ébano escucho el estruendoso grito detrás suyo, salió de su escondite un Wyvern un poco más listo que los otros y lo atacó directamente. Tenía razón en decir que eran trece.

—¡Giyuu!! -

Aún con la barrera de por medio, el empujón lo dejaría algo adolorido pero eso no ocurrió. De hecho, el monstruo quedó suspendido en el aire, removiendose con violencia pero al mismo tiempo sin desplazarse.

— ¿Que está?... ¿Hilos? - nota un singular brillo por el cuerpo del Wyvern que lo rodea. Cómo una gran telaraña.

—¡Hohohoho! Hasta que puedo verte de cerca Chico lindo - abrió los ojos ante esa voz desconocida. Es atractiva y fuerte pero tenía más tintes de seducción que Kyojuro. Miro arriba de monstruo y ahí estaba el origen de la voz.

Un hombre de cabello cano sujetado con una banda con piedras preciosas y ojos rojo grana lo miran fijamente con una sonrisa traviesa.

— al fin nos conocemos, Giyuu- dicho eso, movió un hilo y decapitó al monstruo limpiamente.

.
.
.

🌟💖🌟
.
.
.

(Inserten gritos de perras locas aquí)

Apareció el personaje más pedido y deseado por todos y todas, el rey de los idiotas... ¡Digo, el único Tengen!!
¿Que será ahora que apareció en pantalla? ¡Descubranlo en el siguiente capítulo!!!

.
.
.

🌟Owake🌟
.
.
.

Cuando Giyuu salió de la habitación con el maestro del gremio. El dios del oeste hizo de la suyas como normalmente hace cuando está solo y sin la supervisión del Omega cuando deja solo a su pareja de vida.

Kyojuro se acercó al pequeño acuario donde están unos peces dorados nadando tranquilamente y sin poder evitarlo, mete su dedo en el agua para asustar a los peces y luego repite la acción al sentido contrario.

Dejo de atormentar a los peces para acceder a la caja de objetos de su esposo y busco un bocadillo. Tenía antojo y como no está su pareja para comérselo a el, un postrecito estaria bien.

[Jejejeje si sigues comiendo, pondrás gordo como troll ] escucha a Sabito burlarse. Kyojuro lo ignora. El hace ejercicio con las cazas y correr por todos lados. Además su dulce Omega cocina balanceado.

[Que bien que te preocupes por mi peso, así que yo haré lo mismo por ti] saca una de las tartas que Giyuu hizo. Lo conoce lo suficiente para saber que hizo una para El carnicero y el maestro del gremio, además de la suya y su hijo. Por tanto, hizo una extra para Sabito.

Jura por su madre, diosa del sol. que la tarta de manzana es lo más delicioso que ha comido en la vida en cuestión de postres.

Quizás sea porque Giyuu lo cocino y su omega tiene una mano maravillosa para la comida. Le puso tanto amor y empeño que sabe en cada mordida.

[ ¿Que haces? ¡Oye!! Esa es mi tarta]
[No, no lo es]

Kyojuro la corta con la habilidad de viento para tomar una generosa rebanada.

[¡Tu ya te comiste tu tarta!! Alejate de la mía]
[No, lo que hace Giyuu es mío y si el no me dijo que separó una para ti es que no es tuya]

[¡No te lo dijo porque eres un gato egoísta!! ¡Nooo mi tarta!! ]

[¡Mmmh!! ¡Sabe a su dulce amor!]
[¡Eres un maldito cabrón roba tartas!!]

[No es de hombres hacer un berrinche como el que haces]
[¡Y tampoco lo es robarse la tarta de otro!!]

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top