26.- "Giyuu va de compras!!!"

Advertencia; Fluffydez.

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Después de que Giyuu guardara su paga y recupere su capacidad de habla. El maestro del gremio se enfocó en otro asunto a tratar.

– el último tema a tratar es sobre las misiones clase S. Hay dos en particular que nos interesa. La primera es matar un lagarto de metal y la segunda es destruir una manada de toros de cuernos sangrientos - explicó el hombre de la máscara. Kyojuro pregunto las ubicaciones para cumplir las misiones para cumplir.

El lagarto de metal habita en la montaña de pascual, la más grande de la región, ubicada al norte de la ciudad de Karelina a dos días de pie. Es importante eliminarlo porque la mina que habita es rica en hierro y cobre, importante como fuente de trabajo y económica. Había estado parada la producción desde hace más de dos años. El problema radica que los túneles de las minas son algo confusas y peligrosas para quienes no conozcan la zona, enviar equipos de investigación no es viable. El costo de la misión es de 240 oros.

Los toros de cuernos sangrientos

Giyuu se quedó pensando en los toros de cuernos sangrientos. Se han apoderado de las praderas del oeste. Dónde la mayoría de los nuevos Aventureros van a cazar o prácticar. Al no ser una ruta comercial, no se ha dando importancia real, siendo la misión de menos tiempo, unos 6 meses en pausa. La recompensa es de 350 monedas de oro. La razón por la cuál es de clasificación S es por la bestialidad que representan. Uno solo es clase B pero Son tan robustos y altos como un rinoceronte, son agresivos apenas vean un objetivo. No paran de perseguirte hasta clavarte los cuernos y peor aún, atacan en manada.

– esas son las especificaciones. ¿Están de acuerdo con ello? - comento Sankoji con un movimiento de muñeca.
– ¡por supuesto! Partiremos de inmediato - aseguro Kyojuro pero el pelinegro se quedó pensando un poco.

Si no mal recuerda, los toros son los machos de las vacas y por tanto carne vacuna.

Ohh...

– Kyojuro -
– ¿Que sucede? -
– si podemos hacernos de esa carne de toro de cuerno sangriento podría hacer... "Eso"... - el alfa rubio bicolor tardó en captar su mensaje, no puede evitar distraerse un poco por la sonrisa pequeña y complice que da ¡Maldición!! ¡No lo deja concentrarse!!. Hasta que hizo click.

– ¡¿Podrás?!! - exalta con una sonrisa enorme que puede dar algo de miedo. Tan fuerte fue su grito que hizo retumbar el cristal.
– si, con esa cosa que te gusta y preparlo de esa forma especial - el Omega hace un pequeño arrullo con sus ojos que aumento el pico adrenergico del alfa rubio.
– ¡yo también quiero!! - Senjuro brinco de la cabeza del maestro del gremio para subir en Giyuu. No sabe de qué habla en especial pero debe ser bueno y sabroso.

[!no se de lo que habla pero yo también quiero!!] La voz del dios del fuego no evito meter su presencia en la cabeza de Giyuu. Tiene que ser bueno para que Byakko se ponga así de animado. Fue deliberadamente ignorado porque Kyojuro no le permitió que le responda.

–¡Vamos de inmediato!! -
– esperen - lo detiene de golpe Sankoji al duo que estaba dispuesto a irse corriendo. – lo siento pero pueden ocuparse del lagarto de metal primero -
– mhh - Kyojuro no le gusta que interrumpa sus planes y más cuando tiene expectativas tan altas ¡Los filetes de carne a la salsa de ajo de su amante son celestiales!!. Giyuu se interpuso cuando detecto su mal humor.

– está bien Kyojuro. Los toros están establecidos en la zona y no van a desaparecer en un momento. Además aún tenemos la carne del almacén - su voz serena funcionó como un bálsamo.

– ¡Cierto! Además, la carne que consigamos de la misión será nuestra. - comenta sin oportunidad de réplica.
– por supuesto, es fruto de su misión - el pelinegro detecto cierto grado de decepción en la voz del maestro del gremio. Debía ser una carne muy valiosa y posiblemente aprovechen para tener ganancias.

Quizás hablé con Kyojuro al respecto cuando esté más tranquilo.

En cuanto al hombre de la máscara. Debía mantener al dios del oeste contento aunque eso signifique perder una buena oportunidad de adquirir carne de primera. Penso en negociar al respecto pero ya había tentado su suerte en pedirles la eliminación del lagarto de metal primero y aún tiene esa posición altiva. Si no fuera por la serenidad de Giyuu que lo calma, ya estaría hecho carbón.

A esas alturas, le dará un ataque al corazón.

–!vamos por el lagarto de metal!! - Sankoji se relajo un poco más cuando los vio salir por la puerta o así era.
– maestro Sankoji - Giyuu volvió con algo en las manos. – gracias por su ayuda - curioso toma la pequeña caja de madera que le ofrece. Tiene una suave calidez y desprende un poco de buen olor. Al menos lo que puede detectar a primera mano.

– no hay nada que agradecer - comenta algo confundido. No esperaba un presente. Dicho eso, el pelinegro sale de la oficina para alcanzar al alfa prime con el slime shine en el almacén.

Una vez solo y guiado por la curiosidad, abre la cajita. Es un almuerzo compuesto de Sandwiches rellenos de carne de pájaro petreo teriyaki y algo de ensalada Bang Bang. Ciertamente no había almorzado y tiene buena pinta. Se levanta un poco la máscara, toma uno de los sandwiches que con solo tocarlo, desprendió más su olor. Su estómago rugió violento ante ese estímulo.

– ¡Mhhh!!! - le dio una mordida cuidadosa que lo hizo salivar de gusto. ¡Delicioso! Es la única palabra que sale de su cabeza, es la mejor comida que ha probado en su larga vida.

Jugoso, dulce y salado, esponjoso y ligero.

Es como tocar el cielo.

– ahora entiendo porque el dios del oeste está con Giyuu - si hubiera tenido un compañero que tenga la misma habilidad en la cocina como el, por supuesto que no dejaría ir y también bendecía al rey por tener el atino de negociar con el dios del oeste.

...

Su vista al almacén fue muy corta, iban directo a su objetivo.

Jigoro los recibió con entusiasmo aunque su cansancio se nota en sus ojos. Realmente había trabajado toda la noche. Después de que Giyuu guardo la carne en la caja de objetos y que Kyojuro volviera a su forma tigre para continuar con la agenda del día.

Al igual que Sankoji, el viejo carnicero también recibió una cajita de comida de madera. Cómo agradecimiento por su esfuerzo y dedicación a su deber. Hecho su acción, continuo su camino.

– !hohoho! Tiene buena pinta - comenta al abrir la caja, son sandwiches de pájaro petreo teriyaki y ensalada Bang Bang. No reconoce el platillo pero por el olor y color, sabe que tiene que ser bueno. Podria presumir como Lars que el también pudo comer carne de primera calidad.

–¡maravilloso!! - exclama mientras come uno de los sandwiches. Siente como el cansancio se esfuma de su cuerpo. Nada mejor que una buena comida para el ánimo.
– ¡definitivamente si fuera mujer le diría a mis nietos que lo hagan parte de la familia!! - expresa con singular alegría. Imagino brevemente a sus nietos y el mismo bien comidos por la mano del pelinegro, su nuera cocina bien pero esto es otro nivel.

– aunque feo no es - reflexiona un poco. – si se deja el pelo más largo, parecerá una mujer muy bonita -
Deja sus ideas cuando su estómago le protesto de hambre.

...

Una vez fuera del gremio y con el almacén cargado de carne para el deleite de la inusual familiar. Era momento de seguir el siguiente punto de la agenda antes de cumplir la primera misión. Visitar la tienda de Murata.

– si no mal recuerdo, Murata dijo que su tienda está a pocos metros de la plaza principal- comento Giyuu mientras mira a su alrededor con el Slime shine en su bolso, Senjuro aún es tímido con los extraños.

– ¿Que quieres comprar? - pregunta curioso el tigre divino.
– una bolsa nueva. Está muy gastada- señala con sus manos. Seguramente Senjuro está incomodo ahí metido.
– Murata dijo que su especialidad es la marroquinería. Deberá tener una - continuo Giyuu con lógica en sus palabras. Ya con un poco de mejor memoria, empiezan a caminar había el centro del pueblo. Pasando por personas de diferentes tipos y razas, algunos niños correteando por ahí jugando entre ellos o volviendo con sus padres por cualquier excusa.

(Notita aclaratoria; marroquinería: arte basado en la manipulación y trabajo con el cuero con el objetivo de fabricar productos funcionales o decorativos)

Al llegar, la tienda de Murata es bastante grande posiblemente es su casa también, al costado tiene un edificio mediano cercano, posiblemente un almacén y taller. Su fachada es bonita y sencilla pero atrayente. Con algo de confianza, ingreso con Kyojuro detrás suyo.

–¡Aaah!! Giyuu bienvenido - saluda Murata con una gran sonrisa, acercándose a él con sus brazos abiertos.
– hola Murata. - intento no ser seco pero no se le da bien los saludos entusiastas.
– ¡Que bueno verte! A ti y Lord Byakko, digo, Kyojuro - se corrige con torpeza.
– gracias. Sabes vengo a comprar un bolso. - puede ver claramente que el material de sus productos es de buena calidad. Apenas nota las costuras en ellas.
–¡Claro que sí! Por aquí - lo guía hacia uno de los estantes. Hay de diferentes tipos y tamaños. Busca una como la que tiene actualmente: tipo mensajero, de solapas y aberturas anchas, correas anchas para colgarla cómodamente en su hombro.

– ¿Te puedo ayudar? - se ofrece Murata. Ve al pobre Giyuu abrumado de tanto material. Ante este salvavidas, Acepto.
– este es de cuero de jabalí rojo. - señala el bolso color rojizo suave. Es algo tosco al inicio pero con el tiempo se hace más suave y manejable.
– la de este lado, es de cuero de toro de cuernos sangrientos. - mira que coincidencia. el color es mas oscuro y grueso que el anterior. –
– mi favorito es de ciervo gigante. - el cuero es de un tierno color café. – a medida que se usa y envejece, cambia de color por ámbar o beige -
– el artículo de moda es el cuero de serpiente negra y serpiente de arena. Su material es extraordinariamente suave y versátil después de unas horas largas de trabajo. Tambien resistente y ningún bolso es igual a otro por los patrones en el diseño de sus escamas. ¡Mira ese brillo y color!!- muestra con orgullo el mercader.
– debe ser bastante caro. -
– si. La técnica de curtido es diferente y más meticulosa que el cuero de mamíferos - Giyuu le dió la razón, no es experto pero sabe que las pieles son diferentes por el simple tacto.

– maravillosos - dijo en resumen. Murata sonrie orgulloso de su mercancía.
– gracias. Los precios por las bolsas es: de jabalí rojo es 2 oros, de toro de cuernos sangrientos de 5 oros, el del ciervo de 4 de oro con 5 de plata. De serpiente de arena 8 de oro y la serpiente negra de 12 oros. - tal como lo había intuido Giyuu. Las pieles de serpiente son mucho más costosas y aunque podia darse el lujo de comprarla, no lo haría, sería demasiado llamativo.

Miro a Kyojuro, quien está tomando una breve siesta en el suelo.

Ya tiene suficiente atención.

– Murata, ¿puedo dejar salir a Senjuro? - Pregunta por cortesía. Si bien el gato divino tragón entro sin consideración, no quería ser más irrespetuoso con el mercader.
–¿Senjuro? Hablas del Slime de raro color - comenta sin malicia y confundido. luego sobresale de la bolsa que lleva Giyuu, asomándose tímidamente.

– ¡ya entiendo! es para que puedas llevarte a tu familiar - da un pequeño aplauso – entonces te recomiendo el bolso de cuero de jabalí rojo y el de toro de cuernos sangrientos.-
– me parece adecuado que Senjuro elija. Es quien más la usa - le muestra las bolsas al cachorro mientras esté se queda quieto en su lugar. Mirando cada una. Finalmente se decide por la de toro de cuernos sangrientos, metiéndose rápidamente en ella en un salto.

– me gusta este - dije en voz muy bajita. Tímido.
– Senjuro, espera a que la pague -
– está bien Giyuu. Al parecer la elección ya está hecha - resta importancia Murata. Además también le parece muy lindo el slime amarillo con brillitos rojos, bien bonito metido en su bolso nuevo.

– gracias. Oh, ¿también tendrás una vaina para mí cuchillo? - aprovechando que está ahí.
– claro. Tengo con cinturón. te será más fácil de llevar.- expone mostrando sus productos. Giyuu piensa que Murata si sabe vender.
– aunque el costo se eleva por la hebilla, es un trabajo artesano. Por una artesanía así sale 6 de oro - le muestra uno de los conjuntos. Efectivamente el cuero es suave al tacto y ligero. Observa el trabajo de la hebilla, es intrincado y finamente trabajado.

Entendía el precio, detrás de Murata hay muchos artesanos y expertos en la materia que reciben su paga. Además, parecía ser un buen hombre que paga lo justo a sus empleados. Por algo la tienda a florecido.

– está bien lo llevo. -
– !muchas gracias! - expresa con alegria el moreno de cara sencilla. – por favor, eres libre de mirar la tienda -

Giyuu lo hizo. Dió un pequeño recorrido por el lugar. Seleccionando algunas cosas extra que podían ayudarle como una nueva cartera (la otra ya estaba muy dañada) de piel de serpiente de arena (es muy bonita la verdad) los zapatos se llevaron su atención, sus actuales mocasines parecen de un vagabundo. Dañados por el continuo andar y caminos irregulares.

Eligió sin pensar un par de botas largas y unas cortas por mero gusto. Ahora que tenía un poco más de dinero podría darse el pequeño capricho. Tambien la opción de comprar en línea es viable pero los tennis (zapatillas deportivas) serían más llamativas y estarían aportando al comercio local... Tambien porque le gustaron.

Con sus objetos seleccionados se acercó de nuevo a Murata para pagar todo. El joven vendedor lo esperaba paciente. Dió un vistazo rápido a los productos.

– la bolsa, el cinturón con vaina adjunta, la cartera y las botas tienen un costo total de 25 monedas de oro. Pero puedes llevarlos gratis -
–¿Eh? ¿Que dices Murata?? -
– Giyuu me has salvado la vida y no basto con eso, Lars me dijo que la comida que estuve comiendo era de ingredientes de altísima calidad - babea un poco al recordar. – es lo menos que puedo hacer -
– pero Murata. Estos productos son demasiado preciosos como para darse así - el ojiazul cohibido mira nuevamente sus "compras" además de que es la primera vez desde que llego a ese mundo (y en su mundo) que le dan un regalo tan desinteresado. Sin contar a su hermana o las pequeñas flores que le da Senjuro como agradecimiento por su comida.

Ciertos dioses se sintieron aludidos con eso.

– no puedo aceptar el dinero de quién me salvó la vida. Pero la próxima compra te cobraré - sonrie divertido. Aligerando el ambiente entre ambos. Giyuu se relajo.
– si es así, está bien - sonrió agradecido. tomando los objetos y los guarda en su caja de objetos. No es discreto en su acción, el lo ha visto antes durante su viaje.
– hablado del tema. Tambien me dijo que en la comida iba carne de serpiente negra. Por lo tanto, cazaste una - deduce Murata con una mirada entusiasta.
– la cazo Kyojuro - corrige pero no lo niega.
– ¡Maravilloso! ¿Tendrás la piel de la serpiente negra? - pregunta directamente. El entusiasmo es comparado al de un niño pequeño.
–lo siento Murata. La vendí al Gremio de aventureros -
– oh vaya... - suspira derrotado. – verás Giyuu. Normalmente los mercaderes compramos al gremio de aventureros los materiales de Monstruos pero hay una enorme escasez de piel de serpiente negra. Comprarlo directamente a un aventurero ahorra muchos pasos y aseguramos la pieza aunque te hace blanco de ambos gremios.-

Osea es hacer trampa. ¿Quien te conociera Murata? Pero en el mundo de los negocios es válido. Después de todo, el primero en elegir puede quedarse con la mejor pieza.

– pero si es ocasional no hacen mucho caso. - resta importancia. No es una práctica que el haga a menudo. No conoce muchos aventureros y Lars es algo bestial en sus misiones de caza.
–entiendo -
– últimamente se hizo demasiado popular. Tanto que mis colegas y yo mismo vamos con frecuencia al gremio. uno de ellos, consiguió la piel de una serpiente roja !me morí de envidia!! - Giyuu da un respingo por la indirecta. Aún sin que el propio Murata lo sepa – rara vez trabajo con piel de serpiente negra y la roja es mucho más escasa. Tiene un brillo espectacular y hermoso - finaliza con una mirada embelesada.

Vaya, sin querer abrió más el mercado de piel de serpiente. Giyuu se disculpa en silencio.

– mi colega pudo venderla al marqués Bramuer por una buena suma. ¡Estoy tan celoso! - hizo un pequeño mohin dramático. Giyuu se vuelve a disculpar de nuevo en su mente.

– Giyuu me atrevo a pedirte si logras conseguir otra serpiente negra, puedas venderme directamente la piel - hizo una pose de súplica.
– cuando consiga otro, te lo traere Murata - responde con calma.
– ¡Muchas gracias Giyuu!! - casi le salta encima para abrazarlo pero se mantiene en su lugar.
– Murata, ¿conoces una tienda de ropa?- cambio de tema por algo que también le interesa encontrar.
– claro. Hay una tienda a unos metros de aquí. Al otro lado de la fuente. Tambien hay sobre pedido si te interesa algo propio. - explica Murata.
– gracias y gracias por todo -
– ¡al contrario! - sonrie avergonzado.

Dicho eso, Giyuu junto con Kyojuro y Senjuro en su nueva bolsa salen de la tienda después de sus fructíferas "compras".

– ¿que te parece la nueva bolsa Senjuro?- mira sobresalir al Slime Shine.
– es más cómoda que la anterior. Gracias - comenta con entusiasmo, sacudiéndose un poco.
– me alegro - Giyuu le dio una suave palmada en su redonda forma.
– Kyojuro, solo iremos a la tienda de ropa, procuraré no tardar - tenía una noción de lo que quería así que sería más rápido.
– está bien - el omega levanta una ceja extrañado. El tono pensativo del tigre lo alertó. – ¿Está todo bien? Es nuestro perseguidor -
– no, todo bien -
– has estado muy quieto tanto que no has dicho nada de la hora de la comida - mira el cielo, ubicando la posición del sol. apenas paso el medio día pero normalmente empiezan a pedir sus sagrados alimentos.

– ¿Que te molesta tanto? - insiste dándole un suave mimo en su cabeza.
– que no te he dado un regalo y un complemento extraño lo hizo - comenta haciendo un mohin. ¿Era eso? No tiene gran importancia, fue un gesto agradecido. No lo entendía, soltó un suspiro, a veces Kyojuro es un poco complicado.

Además, no se dió cuenta del regalo que le hizo al inicio.

– Me diste la oportunidad de viajar por el mundo y protección. Eso es para mí un regalo- sigue mimando detrás de la oreja.
– ¿En serio? - Kyojuro lo vio a la cara, sus inteligentes ojos bicolores lo observan fijamente. Afirma con la cabeza de forma suave.
– rara vez salía de la ciudad y mucho menos a otros países. Pudiste sencillamente hacerme quedar en algún sitio y listo pero me diste la oportunidad de viajar. Al menos para mí, es un regalo -

El alfa prime mira con los ojos bien abiertos a su pareja. En su lógica. Viajar es algo que es por default para cualquier persona, el lo ve como un obsequio. Sonrie conmovido, su dulce Giyuu, tan gentil y agradecido. Le es tan fácil aumentar su amor por el por esos gestos.

Ninguno de los dos dijo más, solo se concentraron en encontrar la tienda de ropa que recomendó Murata.

...

2 horas después...

Se encontraban de camino hacia las minas de la montaña Pascual. Lo que sería un viaje de 2 días o más, a Kyojuro le costó apenas una hora y media en arribar a la zona gracias a su gran velocidad.

La zona es naturalmente boscosa y bonita, se veía a la distancia las minas y caminos hechos con vias de vagones en sus entradas pero notablemente solitarias. esperado por la amenaza del lagarto de metal. Mientras avanza, Kyojuro ignora varias entradas hasta dar con la número 7 de los 10 accesos. Podía sentir la presencia del lagarto de metal dentro de la mina pero antes de ir a darle caza, es hora de comer.

Giyuu pensaba en preparar un buen Karaage de carne de serpiente, pájaro petreo Y dodo gigante para la comida. Una comida de lujo antes de una misión para levantar el espíritu.

En ese momento, el Omega pelinegro ya estrenaba sus botas nuevas y conjunto de camiseta sin mangas azul naval,  pantalones negros y guantes sin dedos.  Al ser de cuello largo, podía esconder su collar de protección.

Se puede mover con más facilidad y se siente más fresco de ese modo.

Volviendo a la comida, primero cortó la carne en trozos del tamaño de un bocado. Luego la macero con salsa de soya, sake y marinada. Después de dejarla en reposo unos minutos, revosa las piezas en en harina y panko para ejecutar su estrategia. Primero los cocino en aceite no tan caliente para calentar la carne, saco las piezas y luego las volvió a meter ahora con el líquido hirviendo para dorar y tostar la corteza de la pieza.

Al sacarlas, las dejo enfriar un poco. Entretanto, preparo un poco de salsa picante -dulce para acompañar y otra de tartara especiada.

Cómo todo chef profesional, tomo una pieza y la probó con un poco de salsa.

– mhmhhh delicioso. Tan jugoso y crujiente - ligero y fácil de masticar. Su sabor está definido para comerlo solo como acompañado con una de las salsas.

Da un respingo cuando las manos de Kyojuro sostienen su cintura.

– ¡Aaahh!! ¡El karaage huele delicioso!! Ya quiero comer - comenta con una sonrisa glotona.
– ¡Yo también mamá Giyuu! - senjuro se sube a la mesa, del lado opuesto de las sartenes. Su madre había sido muy claro en no acercarse cuando la parrilla esté encendida.

– ya voy a servir... ¿Que paso con tu ropa? - pregunta sorprendido. Su conjunto se parece mucho al de Giyuu en colores rojos, café y dorado. Esta vez usaba botas en vez de las sandalias, su capa cambio por un faldón y luce un poco más ostentoso.

– la cambie para estar a juego - expresa sin ninguna duda.
– levantara sospechosas -
– no creo, hay grupos de aventureros con ropa igual entre ellos -
– si tú lo dices - no dice más, tiene razón. A veces la gente es ciega por más que tenga la verdad en la cara.

Recuerda un gesto propio de parejas y sintiéndose coqueto. Toma una de las piezas y se lo pone en los labios, esto toma desprevenido al alfa prime pero come el tributo con una sonrisa pretenciosa. Le encanta que su pareja sea tan cariñoso. Mastica con cuidado, disfrutando el sabor tan ligero y crujiente.

– ¡También quiero mamá Giyuu!-
– toma Senjuro - la pone directamente en su cuerpo dándole una caricia maternal haciendo que suelte corazones de felicidad.
–¡Esta muy rico! ¡Me encanta el Karaage! ¡Rico! ¡Rico!-
— ahora sí, vayan a su lugar  -

Con su inquieta familia esperando su comida empieza a servir sus enormes porciones divididas en 3, dos con salsa y una solas.

Kyojuro seguía exclamando en voz alta sobre lo deliciosa que es la comida que SU amante le prepara y Senjuro no para de soltar corazones de felicidad. Giyuu come más tranquilo, mirando de vez en cuando el cielo con una sonrisa suave.

La vida es buena.

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☀️❤️☀️
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Un capítulo tierno y lindo.
Algo cómico y dramático.
SIP. Es muy adecuado antes de una escena de acción.

Espero que les haya gustado owo
Abracitos.

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☀️Owake☀️
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Sabito sabe que muchos lo consideran impulsivo y descuidado por su naturaleza en el dominio de un elemento tan enérgico y vibrante como el fuego pero más lejos de la verdad.

El no es descuidado.

Lo demuestra con su excelente administración de tributos que su siervo favorito le manda sin falta cada semana. Le envía 5 platillos con sus correspondientes bebidas, postres y abrebocas.

Si fuera descuidado como Daki, se lo hubiera comido todo en un día porque la comida de Giyuu... quiso  decir, el omega encubierto es deliciosa con cada una de sus letras.

Giyuu... Ejem, el omega tenía una excelente mano y le hubiera pedido una comida diaria si no fuera por Byakko. El dios del oeste es demasiado celoso con su propiedad como todo gato y no quiere iniciar una guerra con el, alertando al dios de la creación.

No es porque le tuviera miedo. No para nada.

Así que disfruta una de sus preparaciones una a dos veces al día, a veces la bebida y otras el postre  por si solos o después de la comida divina que hacen sus sirvientes por el. Aunque si es sincero, se ha vuelto más quisquilloso con la comida que le preparan.  Simplemente no hay punto de comparación.

Otra cosa que se le ha hecho un hábito, es verlo cocinar.

Verlo moverse de aquí a allá preparando los ingredientes a platillos celestiales con una pequeñita sonrisa le parece adorable, incluso le parece que la comida sabe mucho mejor cuando la disfruta viéndolo a el.
Así cuando supo que el humano de cara promedio le dio un obsequio y que Giyuu sin querer pensó que el no le ha dado nada a cambio fue como un golpe seco.

– mh, ya tiene mi bendición. Es suficiente regalo - come su pedazo de Karaage de la última ocasión, aunque jamás dirá en voz alta que estuvo buscando algo en su palacio hasta que se dio cuenta de sus acciones y lo dejó de hacer.

De reojo mira hacia el estanque que refleja la cara tranquila del pelinegro.

A veces se pregunta que es ese extraño cosquilleo que siente en su pecho.

Tan metido estaba en su burbuja que no se dio cuenta de algunas presencias.

— ara~ ara~ ¿que estas escondiendo Sabito? -