12.- "el interés tiene pies"

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Giyuu no se considera alguien con suerte, de hecho, se considera alguien normal.

Pero últimamente ese balance ha estado jugando mucho con el.

Para empezar, despertar siendo abrazado por el enorme y tragón felino fue una sorpresa, una agradable. Es más fácil tratar a Kyojuro en esa apariencia, lo siente más cómodo pero también, le causa mucha emocion ver su rostro humano y sus expresiones propias de un niño asombrado.

Durante el desayuno, el alfa también accedio a ayudarle con los preparativos. Está vez, haría una torta española con el resto de las papas que sobraron. Pero en vez de usar jamón, seria carne de jabalí rojo.
Le contó a Kyojuro mientras preparaba los ingredientes que aprendió esa receta en una revista de cocina Internacional. Se le hizo sencilla y bastante amable para recibir comensales.
Pero mientras cocina era molestado en ocasiones con la cola de Kyojuro en alguna parte de su cuello o en su oreja haciéndolo reír en momentos.

La única defensa que tuvo Kyojuro en justificar sus acciones fue decir que le gusta el sonido de su risa.

Cuando terminaron de desayunar y fueron en camino al pueblo de Rautel. no se esperaban ver una fila, de nuevo y con guardias que los acorralaron con las mismas preguntas y gritos de personas asustadas (Giyuu cree que uno se orino encima), de nuevo.

Nuevamente le costó un poco convencer a los soldados que Kyojuro es "inofensivo" y calmar la irritación del alfa prime al ser tratado como un animal cualquiera. Después de unas explicaciones y unos cuántos mimos al enorme tigre, los dejaron tranquilos pero esperando su turno para entrar en la ciudadela.

- "aún está la opción de brincar los muros" - dice en voz juguetona mientras recibe mimos en su cara. Usando telepatía se comunican, ante los ojos curiosos, solo parece un aventurero calmando a su gran tigre.
- "ya te dije que no. "-
- "está bien. ¿Que vamos a hacer cuando estemos dentro? "- pregunta con una expresión de gusto felina.
- "pensaba en dejarte en alguna posada. No quisiera que te aburrirás conmigo"-
- "ni hablar. No voy a dejarte solo. "-

Giyuu da una pequeña sonrisa. El alfa siempre está al pendiente de el. Pero tampoco quiere abusar de su amabilidad.

- "no te preocupes. Se que necesitas un pequeño descanzo. Me has traído casi todo el día en tu lomo." -
- mhhh - suelta un gruñido -"está bien." - no está cansado pero tomaría su palabra.

Kyojuro meditó mejor la situación, si acompaña a Giyuu quizás le estorbe un poco porque los humanos son demasiado miedosos y hacen escándalo por todo. Además es posible que Giyuu quiera hacer algo por su cuenta además de cocinar. No le negaria la oportunidad.

...

Después de encontrar a una persona lo suficientemente amable y valiente que pudo manter una conversación. Giyuu supo por fin de un alojamiento dónde admitieran "familiares" y su ubicación. El singular par se dirigió hasta la "posada Elmira".

Las calles están algo abarrotadas, resultado propio de una ciudad concurrida. Las calles están bien cuidadas y hay mucho color rústico pero agradable. En su camino, Giyuu vio a un grupo de personas con un grueso collar de hierro. Los pobres se asustaron al comienzo pero al notar su pasiva postura se relajaron y llegaron a sus propias conclusiones.

Esclavos.

El Omega encubierto ya estaba enterado de la situación con los esclavos en ese país aunque no parecía muy cuidados como dicen. Quizás venían de otro reino. Tambien le llamo la atención de ver animales atropomorficos cómo leones o conejos caminando a la par. No sé había topado con alguno en su viaje.

Ahora que confirmo que tenían libertad y derechos como cualquiera persona, Kyojuro podría usar su apariencia humana para andar por la calle pero no en ese momento, lo vieron entrar con un tigre, sería extraño que lo vieran salir con un humano.

Llegaron a la posada, pago 8 monedas de plata para alojarse y tener acceso a las caballerizas para dejar a Kyojuro ahí. Kyojuro no protesto por el sitio, sabe que es temporal.

- siento que sea pequeño. - Giyuu preparo una bandeja con panecillos dulces que aún tenía en su caja de objetos. - te dejare un aperitivo mientras esperas -
- está bien. - el alfa felino vio que puso los bocadillos en el suelo y el se echó en la paja con un movimiento solemne. Con una de sus zarpas tomo un "cono" relleno de chocolate, degustando muy contento.
- volveré pronto - le da un mimo en su cabeza y se aleja.

En cuanto a Kyojuro, siguió comiendo muy tranquilo. Comiendo pieza por pieza degustando su sabor. Se convencía de que Giyuu estaría bien solo.

10 minutos después...

Kyojuro en su apariencia humana recorre la ciudad en desarrollo caminando con gracia en las calles. Podía mantener su distancia gracias a su vista agudizada y su oído, además de sus otros sentidos. Así disminuye el riesgo que Giyuu se de cuenta de su presencia. No duda de el, para nada solo vela por su seguridad.
Hablando de, estaba preguntando a personas (un vendedor es posible) sobre algo. Si la memoria no traiciona a Kyojuro, el Omega le había dicho que buscaría una biblioteca o librería que le proporcione un mapa. Así que uno de esos dos objetivos debían ser.

- dis-disculpe señor - escucha cerca suyo. Volteo hacia la tímida voz, le llamo la atención que a pocos metros estaban un grupos de chicas de diferentes estaturas y especies.
- Buenas tardes, ¿Que puedo hacer por ti? - pregunta cortés. - ¡Ah! Lo siento, debo estar estorbando el camino - se da cuenta de su desliz al estar de pie en la esquina de una tienda.
-¡N-no! ¡Para nada!! So-solo... - la pobre chica morena se puso nerviosa y sonrojada. No era la única, otras chicas beta y alfas están igual. Kyojuro solo ladeo la cabeza sin comprender mientras ellas hacen el esfuerzo de no desmayarse.

¡Osea es un alfa tan guapo! ¡De alta categoría! (Cosa vista nada más en la realeza) ¡estaba parado ahí cerca de la florería como si nada!

La sensible oreja de Kyojuro detecta que Giyuu se había movido de su posición. Había elegido ir a la librería y estaba en camino. El alfa rubio bicolor se incorpora de la pared, era momento de cambiar de ubicación.

- lo siento, tengo que irme señorita. - se despide rápidamente sin esperar respuesta. Las jóvenes y no tan jóvenes sueltan uno que otro lamento y chillido, otras tratan de seguirlo.

Feliz en la ignorancia, Kyojuro trepa a unos techos para visualizar mejor la ruta del Omega. Había llegado a la librería de aspecto rústico y colorido. Hasta donde el recuerda, los libros humanos son costosos por los materiales que están hechos, esperaba que el mapa no fuera el caso.

Tardó un par de minutos y salió, no se veía muy alentado. Posiblemente no tuvo éxito en su búsqueda pero empezó a caminar hacia otra parte, posiblemente la mencionada biblioteca. Sin moverse del tejado le fue siguiendo la pista mientras estuviera en su rango de visión. Una vez más alejado, avanzo a grandes saltos, sin perder de vista las calles de la pintoresca ciudad. hasta que ve que uno de los carteles iba a caer encima de Giyuu. Frunció el seño y De un salto alcanzó a sujetar cómo si nada la pesada señalizacion de hierro y madera. Vio en silencio como el Omega pasa tranquilamente por debajo, continuando con su camino, doblando en una esquina a la izquierda. Viendo a su pareja a salvó, saca el cartel de la pared y la arroja a otro extremo de la ciudad, sin darle importancia donde llegará a caer.

Continuo así unos minutos, salvando a Giyuu de peligros inminentes como una carreta sin freno que lo parar sin usar el mínimo esfuerzo. Una señora que iba a arrojar agua sucia por la ventana, logra desviar el contenido hacia la misma grosera mujer. Tambien de caer de un pozo en construcción (que algún idiota quito la señalización) levitando algunas piedras para que Cruze sin peligro.6

Fue así hasta que vio el objetivo.

Bajo del techo y se trepó a un roble grande, identificando el edificio más grande, aislado y tranquilo como la "biblioteca". Se había adelantado al Omega así que solo debía esperar quieto en una rama alta hasta verlo salir.

Giyuu llegó con una mirada determinada e ingreso.

...

atardecer...

Fueron muchas horas metido ahí en la biblioteca pública y aunque Kyojuro está a algo aburrido de estar ahí, no se movió. Se entretuvo mirando nubes o durmiendo en ratos hasta que lo escuchó salir.

- aaah al menos no fue todo una perdida de tiempo - lo escucha lamentarse. Entonces no tuvo éxito en su búsqueda, entonces volvería ya a la posada. El alfa espero a que caminara lejos de la biblioteca para adelantarse, cuando estuvo apartado, salió de su escondite y se escabullo por el tejado nuevamente.

Fue en un parpadeo llegar a la posada y mientras bajaba del techo, volvió a su apariencia de tigre metiéndose en las caballerizas. Ya solo tenía que aparentar.

45 minutos después...

Kyojuro se le hacía extraño que el pelinegro aún no llegara. Según sus cálculos, debía llegar hace más de 15 minutos. Sabe que está a bien, su nexo no le indica nada alarmante, sus emociones son aceptables cómo la frustración y algo de enojo por no encontrar el dichoso mapa. ¿Se habrá desviado? ¿O perdido? Eso lo puso sobre alerta pero antes de ponerse de pie y salir, escucho la puerta de acceso abrirse.

- Kyojuro... - la voz de Giyuu suena desanimada. ¿Que había pasado?
- que bueno verte de vuelta ¿Que ocurrió? ¿No encontraste el mapa? - pregunta genuinamente preocupado, no le gusta ver a Giyuu desalentado.
- si, lo encontré pero me estafaron -
-¿Cómo? - ve al omega sacar varias cosas para hacer la cena mientras explica lo ocurrido.

Efectivamente fue a la biblioteca y a la librería pero no tuvo éxito en su travesía, fue que se topo con otros aventureros y pregunto por un mapa. Los 4 hombres le dijeron que si les invitaba una ronda de cerveza le dirían lo quiere saber. Hecho eso, Giyuu estuvo hablando con ellos en el bar mientras ellos bebian. Fue cuando le dijeron que tenían un mapa antiguo, muy valioso y que podían venderlo por 1 moneda de oro. Giyuu acepto hasta después de unos minutos, otros Aventureros se echaron a reír (por no decir todo el bar) que le vieron la cara de tonto.

Los mapas los podía comprar en el gremio de aventureros por una moneda de plata.

- oh, que desafortunado. - Kyojuro hizo nota mental que si los llegará a encontrar, les daría una lección. - pero al final, tienes lo que buscabas ¿No? -
- bueno... Tienes razón. Lo valore y es auténtico. - eso ánimo un poco a Giyuu.
- si te sirve de consuelo, sería como comprarlo más caro. Eso si, Para la próxima ocasión, se más cuidadoso.- comenta Kyojuro acercándose a su no-pareja. El Omega da un pequeño cabeceó afirmativo, tiene razón. En las aventuras es normal que pasen cosas malas, afortunadamente fue algo relativamente inofensivo.

- ¿Hiciste algo más? -
- bueno, fui a la biblioteca. No encontre un mapa pero aprendí muchas cosas de los reinos y la magia - Kyojuro se alegro que este de mejor humor, lo siente atravez del vínculo.
- ¿como que? - toma asiento cerca suyo mientras ve como prepara la cena.
- que había... Oh, cierto. ¿Te parece Tonkatsu de orco? - pregunta volteando a ver al dios del oeste.
- ¡Si! - se relame los bigotes, ansioso de comer la sabrosa comida de Giyuu. El pan es delicioso pero nada se compara con la comida recién hecha por sus manos.

Mientras Giyuu cocina la carne y la salsa marinada, le cuenta a Kyojuro lo que aprendió en su búsqueda. Los distintos tipos de magia además de la elemental (fuego, agua, tierra y viento) los elementos compuestos que debías nacer con esa afinidad y dominar los otros 4 elementos (magia de trueno, hielo, plantas) cosa que casi nadie tiene. la magia sanadora debías estudiar con la iglesia principalmente para aprenderla. Son pocas Personas que tienen magia sanadora y sean realmente efectivas.

La magia sagrada, la magia de la oscuridad y la magia santa definitivamente debían nacer con ella (elfos y demonios) o ser bendecido por un dios para optenerla. No solo eso, entrenar y poder usarla. Se les considera casi leyenda que solo algunos pocos sacerdotes, héroes y (obviamente) los dioses las tienen.

- estudiaste bien -
- si. Tambien investigue mi condicion de "Omega Sagrado" al parecer es una especie de "prostituta del templo" - escupe molesto. Frunció el seño cuando leyó eso, que los reyes, soldados de élite y sacerdotes podían ir a los templos a fornicar con ellos y fortalecerse porque esa era la voluntad del dios al que adoran.

- ¡claro que no! Por esa clase de acciones muchos perdían su privilegio ante un dios y las bendiciones que otorga son mucho menores, bastaba con decir una plegaria por ellos. Un Omega Sagrado es tal como se dice, sagrado. Un humano no debe tocarlo. -
- la historia siempre la escriben los más fuertes - suelta con saña. El alfa prime se acercó un poco y le dió una lamida en su mano libre.

- no permitire que te hagan daño. Si tengo que destruir todo el país o más, lo haré - la seriedad con que lo dijo junto con su convicción le causó sentimientos encontrados. Contento de sentirse protegido, un poco halagado y algo aterrado.

No quiere ni enterarse de lo que es capaz del dios del oeste enojado.

- Kyojuro... Gracias - no sabía que contestar pero no niega que se siente más tranquilo. Se concentra en preparar los medallones de carne de orco para los tonkatsu con una expresión más libre.
- cuando termine de cocinar, hablaremos de que hacer ahora que tenemos un mapa -
- está bien -
- ¿Quieres salsa de ajo? -
-¡Si!! -

De alguna forma, los dos se sentían más conectados, más cercanos.

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Podra haber estado ahí pero le gusta escuchar a Giyuu.

Así es de romántico 😻

☀️Owake☀️

Al día siguiente el duo ya está saliendo del pueblo. Un poco tarde porque el desayuno fue sustancioso. Aunque la carne es deliciosa, El alfa quería algo suave y esponjoso para comer.

Una especialidad de Giyuu son los hotcakes. Así que se entretuvo cocinando, Kyojuro como el gato tragón que es, disfruto todo con mucha miel y mantequilla. Para sorpresa de Giyuu, los dueños de la posada y su hijo se sintieron atraídos por el olor y apariencia de los discos esponjosos que el dios del oeste disfruta.

Giyuu les ofreció algunos como agradecimiento por su alojamiento. La familia grito de felicidad por la suavidad y dulzura de los discos esponjosos. La señora de la posada le pidió que le enseñará a cocinarlos.

El Omega sabe que muchos de los materiales no podrían costearlos pero podría enseñarles otra receta similar con harina de trigo, levadura de frutas, miel y huevos.

Tardó una hora en enseñarle a la señora por el tiempo de espera de la masa fermentada. Después todo fue relativamente rápido.

Hecho su acción del día, se fueron de la posada.

En el camino, Giyuu escucho de unas aventureras decir sobre un alfa extremadamente atractivo que no habían encontrado, de cabello rubio y una mirada amable. Pero no lo han vuelto a ver ni por el pueblo ni por el gremio.

Por inercia, volteo a ver a su compañero quien solo estaba mirando a los alrededores con aire inocente.

- "debe ser cosas mías" - piensa distraído.
- "¿Que ocurre?" -
- "nada importante" -

Kyojuro solo finge inocencia, Es mejor que no tome su apariencia humana en los pueblos, al menos no en un tiempo.